ANTECEDENTES
La atención del parto domiciliario debe ser amable, diligente y presidida por un profesional calificado, siempre y cuando el embarazo sea de bajo riesgo. Ya son diversos los países que han legislado la atención domiciliaria, en búsqueda de fomentar la autonomía de la mujer durante el parto,1,2,3 evitar los procesos medicalizados, burocráticos y con poca adaptación cultural. Además, otro de los propósitos es la búsqueda de la satisfacción de la usuaria al ser atendida en su domicilio, con mayor control de esta experiencia.4-7 A pesar de esto existen riesgos maternos y neonatales asociados con el parto domiciliario que deben propiciar la formulación de nuevas estrategias de salud.7,8
En países con medianos y bajos ingresos económicos han existido esfuerzos para favorecer que la finalización del embarazo tenga lugar en las instituciones. Sin embargo, luego de un parto en el hospital, las mujeres optan por que el siguiente sea en su domicilio;9,10,11 esto puede deberse a la poca adaptación cultural de las instituciones, como un acto de protesta o una valoración de la compañía de las parteras y sus parejas.12 En el Perú, a pesar de que la proporción de partos domiciliarios ha ido disminuyendo,13 el comportamiento es distinto al interior del país; es más frecuente en las regiones rurales, lo que es característico de los entornos donde existen marcadas brechas económicas y desigualdades sociales.14,15
Este estudio busca determinar dónde prevalece la práctica del parto domiciliario para así focalizar el apoyo por parte de las autoridades. Asimismo, se busca reconocer los determinantes que favorecen esta práctica para permitir generar las estrategias sanitarias que fortalezcan la adaptación del parto institucional a las propias experiencias de una comunidad, lo que aún no está normado en el país.16 Por lo anterior, el objetivo de este estudio fue: determinar la proporción y los factores asociados con el parto domiciliario en el Perú.
MATERIALES Y MÉTODOS
Estudio observacional, transversal, analítico y cuantitativo efectuado en conglomerados de viviendas distribuidas en las capitales de los departamentos, ciudades urbanas y entornos rurales de Perú. Se utilizó una base de datos secundaria de la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar (ENDES) del Perú del año 2019. Se optó por este diseño debido a que el desenlace (parto domiciliario) y la exposición (factores) se evaluaron simultáneamente durante la recolección de datos.17
La ENDES es una encuesta anual que lleva a cabo el Instituto Nacional de Estadística e Informática del Perú. El instrumento es una iniciativa pública que busca estimar indicadores de los programas presupuestales nacionales, donde se provee información demográfica y del estado de salud de las madres y niños, principalmente.18 Para esta encuesta se seleccionan conglomerados (unidades primarias) mediante un muestreo sistemático aleatorio que determina las viviendas (unidades secundarias) mediante un muestreo equilibrado. Durante 2019 la encuesta contó con 3254 conglomerados, que contenían 36,760 viviendas, distribuidas entre capitales de departamento, ciudades urbanas y entornos rurales. Estos procesos garantizan que sea la encuesta más representativa del Perú.18
En esa encuesta participaron mujeres de 12 a 49 años y niños menores de 12 años, quienes debían haber pernoctado en la vivienda desde la última noche de haber sido entrevistados, donde se obtuvieron 40,809 participantes, de los que se excluyeron a quienes no se hubieran embarazado en el trascurso de los últimos 5 años o sus datos estuvieran incompletos en relación con las preguntas vinculadas con las variables de estudio.
Se consideró variable dependiente del estudio el lugar donde aconteció el parto del último hijo vivo de la entrevistada. La pregunta, asignada como 426A en la base de datos, fue “¿Dónde dio a luz a (su último hijo)?”. Se recategorizaron las respuestas y se codificó como 1 cuando la participante indicó que su parto fue en el hogar (casa propia o casa de partera), así mismo, se codificó como 0 cuando se indicaba que el parto fue institucional (centro de salud, hospital, organismo no gubernamental o establecimiento privado).
Las variables independientes consideradas para el estudio fueron: la región natural de donde procede, el área de residencia, cantidad de atenciones prenatales, trimestre en que se inició la atención prenatal, índice de riqueza (evaluado mediante el método de Línea de pobreza, que divide en quintiles el ingreso monetario familiar y considera “pobres” a quienes reciben un salario que no permite adquirir una canasta básica familiar y como “muy pobres” a quienes no alcanzan los requerimientos nutricionales mínimos; la base de datos muestra la categorización sin requerir cálculos adicionales),19 máximo nivel educativo alcanzado, edad, orden de nacimiento, tamaño del recién nacido, seguro de salud y violencia (emocional, física y sexual). La codificación utilizada en cada variable del estudio se encuentra en el Cuadro 1.
Descripción y categorización | Plan de codificación para el análisis | |
---|---|---|
Variable dependiente | ||
Parto domiciliario | Lugar donde la entrevistada tuvo el parto de su último hijo vivo. (11 = Domicilio de la entrevistada, 12 = Hogar de la obstetra, 21-27 = Hospital, 31-33 = Institución privada, 41-42 = Organización no gubernamental) | Las opciones se recodificaron de la siguiente manera: 11 y 12 como 1 = Parto domiciliario >12 como 0 = Parto institucional |
Variables independientes | ||
Región natural | Región donde reside la participante (1 = Lima, 2 = Resto de la costa, 3 = Sierra, 4 = Selva) | Las opciones se recodificaron de la siguiente manera: 1 y 2 como 1 = Costa 3 como 2 = Sierra 4 como 3 = Selva |
Área de residencia | Tipo de lugar de residencia (1 = Urbano, 2 = Rural) | Las opciones se recodificaron de la siguiente manera: 1 como 0 = Urbano 2 como 1 = Rural |
Atenciones prenatales (APN) | Total de visitas prenatales que tuvo la entrevistada durante el embarazo de su último hijo vivo (0 = Sin visitas prenatales, 1-97 = Mismo valor numérico, 98 = no sabe) | Las opciones se recodificaron de la siguiente manera: 0-5 como 1 = <6 >6 como 0 = 6 o más 98 no fue considerado para el análisis |
Momento en que inició su APN | Meses de embarazo que tenía la entrevistada cuando tuvo su primera visita prenatal (1-9 = Mismo valor numérico, 98 = no sabe) | Las opciones se recodificaron de la siguiente manera: 1-3 como 0 = Primer trimestre >3 como 1 = >Primer trimestre 98 no fue considerado para el análisis |
Índice de riqueza | Nivel de riqueza en el hogar (1 = Muy pobre, 2 = Pobre, 3 = Medio, 4 = Rico, 5 = Muy rico) | Se usó la misma codificación |
Máximo nivel educativo alcanzado | Nivel más alto de estudio aprobado (0 = Ninguno, 1 = Primaria, 2 = Secundaria, 3 = Superior) | Se usó la misma codificación |
Edad | Edad actual (0 = Menos de 1 año, 1-96 = Mismo valor numérico, 97 = >97, 98 = 98 = no sabe) | Las opciones se recodificaron de la siguiente manera: <12 no fue considerado para el análisis 12-17 como 1 = 12-17 años 18-24 como 2 = 18-24 años 25-34 como 3 = 25-34 años 35-49 como 4 = 35-49 años >49 no fue considerado para el análisis |
Orden de nacimiento | Número de orden al nacer de cada niño (continuo) | Las opciones se recodificaron de la siguiente manera: 1 = 1 2 = 2 >2 = 3 o más |
Tamaño del recién nacido | Tamaño del niño al nacer (1 = muy grande; 2 = mayor que el promedio; 3 = promedio; 4 = más pequeño que el promedio; 5 = muy pequeño; 8 = no sabe) | Las opciones se recodificaron de la siguiente manera: 1 y 2 como 1 = Grande 3 como 2 = Mediano 4 y 5 como 3 = Pequeño 8 no fue considerado para el análisis |
Afiliada a un seguro de salud durante el embarazo | Cobertura de Seguro de Salud o Seguro Materno-Infantil durante el embarazo (0 = no; 1 = sí) | Se usó la misma codificación |
Violencia emocional | Alguna vez hubo violencia emocional (0 = no; 1 = sí) | Se usó la misma codificación |
Violencia física | Alguna vez hubo violencia física (0 = no; 1 = sí) | Se usó la misma codificación |
Violencia sexual | Alguna vez presentó violencia sexual (0 = no; 1 = sí) | Se usó la misma codificación |
El análisis se procesó en el programa STATA, versión 14. Al inicio se descargaron las bases de datos, divididas en capítulos y se unieron las requeridas para el estudio mediante el comando “merge”. Se consideró variable de unión al identificador de persona (asignada como “CASEID” en la base de datos).20 Toda la estimación consideró las características del muestreo complejo que presenta la encuesta.
En el análisis descriptivo se determinaron: frecuencias absolutas y proporciones ponderadas según el muestreo complejo, acompañadas del intervalo de confianza al 95%. También se compararon las características de las participantes según el lugar donde ocurrió el parto (análisis bivariado). La diferencia de las proporciones se evaluó con la prueba de χ2 de Pearson, se consideró asociación al valor de p menor de 0.05.
Enseguida, se hizo un análisis multivariado con la prueba de regresión de Poisson, donde se ajustaron los resultados entre todas las variables que alcanzaron la significación estadística. Se estimaron las razones de prevalencia crudas (RPc) y ajustadas (RPa) con su respectivo intervalo de confianza al 95% y se consideró al valor de p menor a 0.05 como significativo.
Debido a que el estudio es un análisis de base secundaria de acceso público 21 no ameritó la aprobación de un comité de ética.
RESULTADOS
De los 18401 registros analizados, se estimó que el 5.39% (IC95%: 4.83-6.03%) de mujeres en el Perú tuvieron parto domiciliario; sin embargo, la proporción alcanzó 19.59% (IC95%: 17.26-22.17%) en el área rural y 17.85% (IC95%: 15.21-20.84%) en la selva peruana (Figura 1). De las características sociodemográficas, el ser muy pobre (21.91%), no tener educación (28.21%) o solo educación primaria (20.64%) fueron las categorías con prevalencia más elevada de parto domiciliario. Al evaluar ciertas características obstétricas se encontró que las mujeres con tres partos o más (21.40%) y quienes tuvieron un recién nacido pequeño (7.20%) reportaron mayor proporción de parto domiciliario. Por lo que se refiere a la atención prenatal se encontró que el parto domiciliario fue más frecuente cuando las embarazadas tenían menos de 6 atenciones prenatales (13.69%) y cuando iniciaron después del primer trimestre del embarazo (5.43%). Cuadro 2
Parto domiciliario | |||
---|---|---|---|
Frecuencia absoluta (n/N) | Proporción ponderada* (IC95%) | p † | |
Región natural | |||
Costa | 204/8498 | 3,40 (2,67-4,32) | Ref. |
Sierra | 297/6233 | 6,92 (5,71-8,36) | <0,001 |
Selva | 378/3670 | 17,85 (15,21-20,84) | <0,001 |
Área de residencia | |||
Urbana | 133/13241 | 1,37 (1,08-1,72) | Ref. |
Rural | 746/5160 | 19,59 (17,26-22,15) | <0,001 |
Atenciones prenatales | |||
Menos de 6 | 247/1895 | 13,69 (11,52-14,55) | <0,001 |
6 o más | 632/16506 | 4,43 (3,94-4,98) | Ref. |
Momento en que inició la atención prenatal | |||
Primer trimestre | 178/5305 | 3,74 (2,79-4,69) | Ref. |
Después del primer trimestre | 618/13096 | 5,43 (5,06-5,80) | <0,001 |
Índice de riqueza | |||
Muy pobre | 730/5095 | 21,91 (20,93-22,89) | <0,001 |
Pobre | 109/5025 | 2,06 (1,82-2,30) | <0,001 |
Medio | 31/3664 | 0,79 (0,53-1,05) | Ref. |
Rico | 5/2709 | 0,21 (0,07-0,35) | 0,002 |
Muy rico | 4/1908 | 0,19 (0,01-0,36) | 0,009 |
Máximo nivel educativo alcanzado | |||
Ninguno | 72/291 | 28,21 (23,55-32,87) | <0,001 |
Primaria | 454/3435 | 20,64 (19,45-21,83) | <0,001 |
Secundaria | 322/8577 | 4,09 (3,71-4,47) | Ref. |
Superior | 31/6098 | 0,39 (0,23-0,56) | <0,001 |
Edad (años) | |||
12 - 17 | 25/270 | 10,12 (6,72-13,52) | Ref. |
18 - 24 | 226/4193 | 7,37 (6,68-8,06) | 0,057 |
25 - 34 | 368/8563 | 5,81 (5,38-6.24) | 0,002 |
35 - 49 | 260/5375 | 6,22 (5,64-6,80) | 0,013 |
Orden de nacimiento | |||
1 | 765/16006 | 5,13 (5,10-5,16) | Ref. |
2 | 249/2270 | 11,27 (10,99-11,55) | <0,001 |
3 o más | 26/125 | 21,40 (19,33-23,47) | <0,001 |
Tamaño del recién nacido | |||
Pequeño | 259/3957 | 7,20 (6,42-7,98) | <0,001 |
Mediano | 411/9546 | 4,97 (4,55-5,39) | Ref. |
Grande | 209/4898 | 4,76 (4,19-5,33) | 0,566 |
Seguro de salud | |||
Si | 781/13208 | 6,96 (6,56-7,36) | <0,001 |
No | 98/5193 | 2,05 (1,68-2,42) | Ref. |
Violencia emocional | |||
Si | 169/3980 | 4,73 (4,04-5,42) | 0,002 |
No | 742/14421 | 5,94 (5,55-6,33) | Ref. |
Violencia física | |||
Si | 226/4870 | 5,31 (4,66-5,96) | 0,069 |
No | 685/13531 | 5,81 (5,40-6,22) | Ref. |
Violencia sexual | |||
Si | 59/843 | 7,42 (5,64-9,20) | 0,118 |
No | 852/17499 | 5,59 (0,49-6,31) | Ref. |
RP: Razón de prevalencia, IC95%: Intervalo de confianza al 95%; Ref.: Categoría de referencia.
* Las ponderaciones fueron realizadas considerando las características del muestreo complejo.
† Evaluado mediante una regresión de Poisson con ponderación del muestreo.
Después de hizo un análisis crudo y ajustado para evaluar cuáles características se asociaban con un parto domiciliario, (Cuadro 3). Factores de riesgo: residir en la sierra (RPa: 1.24; IC95%;1.02-1.48; p < 0.001), selva (RPa: 1.38; IC95%:1.16-1.64; p < 0.001) o en el área rural (RPa: 3.34; IC95%: 2.61-4.29; p < .,001), contar con menos de seis atenciones prenatales (RPa: 1.66; IC95%:1.39-1.96; p < 0.001), tener un índice de riqueza muy pobre (RPa: 9.62; IC95%: 5.13-18.1; p < 0.001) o pobre (RPa: 2.39; IC95%: 1.26-4.52; p = 0.008), no tener educación (RPa: 2.66; IC95%: 2.02-3.50; p < 0.001) o haber alcanzado la educación primaria (RPa: 2.18; IC95%: 1.85-2.58; p < 0.001) y haber tenido dos (RPa: 1.64; IC95%: 1.46-1.85; p < 0.001) o más nacidos vivos (RPa: 2.18; IC95%: 1.67-2.87; p < 0.001). Haber alcanzado una educación superior se mostró como un factor protector del parto domiciliario (Rpa :0.49; IC95%: 0.31-0.78; p = 0.003).
Parto domiciliario | ||||
---|---|---|---|---|
RPc (IC95%) | p † | RPa (IC95%) | p † | |
Región natural | ||||
Costa | Ref. | Ref. | ||
Sierra | 2,11 (1,53-2,91) | <0,001 | 1,24 (1,02-1,48) | <0,001 |
Selva | 6,17 (4,51-8,45) | <0,001 | 1,38 (1,16-1,64) | <0,001 |
Área de residencia | ||||
Urbano | Ref. | Ref. | ||
Rural | 17,6 (13,3-23,3) | <0,001 | 3,34 (2,61-4,29) | <0,001 |
Atenciones prenatales | ||||
< 6 | 3,42 (2,80-4,17) | <0,001 | 1,66 (1,39-1,96) | <0,001 |
6 o más | Ref. | Ref. | ||
Momento en que inició la atención prenatal | ||||
Primer trimestre | Ref. | Ref. | ||
Después del primer trimestre | 1,47 (1,19-1,82) | <0,001 | 0,99 (0,84-1,16) | 0,881 |
Índice de riqueza | ||||
Muy pobre | 24,3 (17,0-34,6) | <0,001 | 9,62 (5,13-18,1) | <0,001 |
Pobre | 2,56 (1,73-3,81) | <0,001 | 2,39 (1,26-4,52) | 0,008 |
Medio | Ref. | Ref. | ||
Rico | 0,22 (0,08-0,56) | 0,002 | 0,32 (0,07-1,48) | 0,147 |
Muy rico | 0,25 (0,09-0,70) | 0,009 | 0,86 (0,23-3,27) | 0,824 |
Máximo nivel educativo alcanzado | ||||
Ninguno | 6,60 (5,35-8,16) | <0,001 | 2,66 (2,02-3,50) | <0,001 |
Primaria | 4,75 (4,21-5,36) | <0,001 | 2,18 (1,85-2,58) | <0,001 |
Secundaria | Ref. | Ref. | ||
Superior | 0,13 (0,09-0,19) | <0,001 | 0,49 (0,31-0,78) | 0,003 |
Edad (años) | ||||
12 - 17 | Ref. | Ref. | ||
18 - 24 | 0,69 (0,47-1,01) | 0,057 | 1,18 (0,67-2,10) | 0,568 |
25 - 34 | 0,56 (0,38-0,82) | 0,002 | 1,16 (0,66-2,05) | 0,613 |
35 - 49 | 0,62 (0,42-0,90) | 0,013 | 1,05 (0,59-1,86) | 0,877 |
Nacidos vivos | ||||
1 | Ref. | Ref. | ||
2 | 2,29 (2,02-2,60) | <0,001 | 1,64 (1,46-1,85) | <0,001 |
3 o más | 4,39 (3,17-6,08) | <0,001 | 2,18 (1,67-2,87) | <0,001 |
Tamaño del recién nacido | ||||
Pequeño | 1,59 (1,40-1,81) | <0,001 | 1,03 (0,88-1,20) | 0,710 |
Mediano | Ref. | Ref. | ||
Grande | 1,04 (0,91-1,19) | 0,566 | 0,95 (0,80-1,12) | 0,541 |
Seguro de salud | ||||
Si | 3,13 (2,55-3,86) | <0,001 | 0,85 (0,67-1,10) | 0,215 |
No | Ref. | Ref. | ||
Violencia emocional | ||||
Si | 0,78 (0,67-0,92) | 0,002 | 0,93 (0,75-1,15) | 0,516 |
No | Ref. | Ref. | ||
Violencia física | ||||
Si | 0,88 (0,76-1,00) | 0,069 | 0,93 (0,76-1,12) | 0,440 |
No | Ref. | Ref. | ||
Violencia sexual | ||||
Si | 1,22 (0,95-1,57) | 0,118 | 1,15 (0,84-1,58) | 0,389 |
No | Ref. | Ref. |
† Evaluado mediante regresión de Poisson con ponderación del muestreo
RPc y RPa: razón de prevalencia cruda y ajustada IC95%: Intervalo de confianza al 95%; Ref.: Categoría de referencia
DISCUSIÓN
Este estudio buscó determinar los factores asociados con la práctica del parto domiciliario en Perú, puesto que, a pesar de que la proporción ha ido disminuyendo, esta reducción no ha sido homogénea en todas las regiones del país. Se encontró que las regiones que son parte de la selva y sierra peruana tienen mayor probabilidad de tener partos domiciliarios, lo que coincide con un estudio similar que tuvo el mismo ámbito geográfico.22 Estas regiones se caracterizan por tener barreras sociodemográficas, lo que implica inaccesibilidad de los servicios de salud.23,24,25 Según diversos autores, otros motivos para que las mujeres de la amazonia peruana prefieran un parto domiciliario es el patrón cultural y la falta de cohesividad con los establecimientos de salud,26 por lo que se sugiere continuar promoviendo la adecuación del parto intercultural.
Este estudio pone de manifiesto que las mujeres que viven en áreas rurales tienen mayor probabilidad de tener partos domiciliarios, lo que coincide con una revisión sistemática reciente.27 Una posible explicación radica en que las embarazadas del entorno rural temen que en los establecimientos de salud no se respete su privacidad ni tradiciones. Algunas mujeres indicaron tener miedo de ser víctimas de maltratos por parte de los profesionales de salud,28,29,30 lo que destaca la marcada brecha entre la población rural y la atención en los establecimientos de salud.
Tener menos de seis atenciones prenatales dificulta la vigilancia de la embarazada e impide el tamizaje de diversas complicaciones 31,32,33 y la concientización de la importancia de un parto institucional.34 Es preciso indicar que la sola cantidad de atenciones prenatales no determina el tipo de parto, debido a que la decisión es multifactorial;35,36 sin embargo, una atención prenatal rutinaria no reenfocada, que es aquella donde no se da importancia al plan de parto, educación a la familia y al trabajo multisectorial con líderes comunales 37 favorece la migración al parto en el domicilio. La evidencia pone de manifiesto que la ausencia de atenciones prenatales o su inicio luego de las 16 semanas incrementa considerablemente la probabilidad de que suceda un parto domiciliario, lo que puede explicarse por la limitada información y procedimientos que pueden desarrollarse en el tiempo que queda, reduciendo la calidad esperada en las atenciones prenatales.38
Con base en el índice de riqueza, ser muy pobre o pobre aumenta la probabilidad parto domiciliario, lo que coincide con estudios llevados a cabo en Tanzania 39 y Etiopia.40 Esto puede deberse a las dificultades propias del limitado ingreso económico, que genera una brecha para costear el transporte, medicamentos y la atención médica.41 Ante ello, es el gobierno quien debe garantizar que se generen los medios necesarios para una atención prenatal, de parto y puerperio de mujeres que carecen de los recursos necesarios.42
Se encontró que no tener educación o tener educación primaria aumenta la probabilidad de parto domiciliario, mientras que tener un nivel educativo superior reduce esta probabilidad. Este dato es similar a los encontrados en estudios peruanos 22 y en países del África, donde se refuerza la necesidad de implementar programas educativos durante el embarazo que hagan hincapié en la importancia de una atención institucional y servicios amigables enfocados en quienes tienen escasos recursos económicos.39,43 Las mujeres con educación superior suelen tener acceso a información de los riesgos o complicaciones para la madre y su hijo y valoran la importancia de la atenciones prenatales, así como mayor poder adquisitivo que les permite costear servicios descritos en el párrafo previo.44,45,46
Este estudio determinó que conforme exista mayor cantidad de hijos vivos, la probabilidad de tener un parto domiciliario se incrementa. Esta premisa se ha determinado, también, en estudios previos, lo que se explica por la mala experiencia que tienen las embarazadas en las instituciones, lo que las motiva a modificar el lugar donde esperan finalice el embarazo.47 Al respecto, se han propuesto iniciativas que incorporen a las parteras tradicionales dentro de la institución, donde pueden establecer conversatorios educativos, puesto que se ha identificado que el ambiente clínico habitual no permite establecer una adecuada comunicación.48,49,50 Estas propuestas pueden aplicarse para la mejora de la atención, mayor apego a una atención institucional donde existen las herramientas para atender las complicaciones de forma oportuna.
Es preciso que los resultados del estudio se circunscriban a ciertas limitaciones. En primer lugar, existe la posibilidad de que las entrevistadas no recuerden ciertas características de un evento que pudo haber sucedido durante los últimos cinco años; asimismo, el análisis transversal de las variables no permite establecer una causalidad directa, sino solo un vínculo que requiere ser explorado en futuros estudios.
CONCLUSIONES
La proporción de partos domiciliarios en el Perú durante el 2019 fue de 5.39%. Se identificaron determinantes que favorecen la aparición de partos domiciliarios: residir en la sierra o selva del Perú, en un área rural, tener menos de seis atenciones prenatales, ser pobre o muy pobre, tener estudios o solo haber alcanzado la instrucción primaria y tener 2 o 3 hijos. Un determinante que redujo la probabilidad de parto domiciliario fue el nivel de instrucción superior (universitaria o técnica).