Introducción
La seguridad del paciente es un tema central en las instituciones de atención médica para coordinar, difundir y diseñar estrategias que ayuden a tener un ambiente más seguro y disminuir los eventos adversos1. Las caídas son uno de esos eventos, son prevenibles pero, de ocurrir, pueden ocasionar lesiones graves e incluso la muerte2.
Su incidencia ha sido motivo de diversas investigaciones, por ejemplo: un estudio multicéntrico en 5 países reportó 1,163 eventos adversos de los cuales el 34% se relacionó con el cuidado, en él se observaron también caídas3. Una evaluación realizada en 22 hospitales en México, reportó 781 incidentes en 706 reportes, dentro de los cuales el 9.2% correspondió a las caídas4. Otra investigación en México, que tomó como base el Sistema de Vigilancia de Eventos Centinela y Riesgos5 implementado para evaluar la seguridad del paciente y desarrollado en el Instituto Mexicano del Seguro Social, evalúo la presentación de eventos centinela y su notificación en un hospital de segundo nivel y otro de especialidades; las caídas representaron el 60% de los eventos reportados.
Otros estudios internacionales y nacionales muestran la ocurrencia de caídas, así como las características, circunstancias y factores tanto extrínsecos como intrínsecos que influyen en la presencia de caídas en el ambiente hospitalario, como la edad, una mayor prevalencia en adultos mayores aunque también ocurren en adultos jóvenes, en el cuarto del paciente y en el baño, en aquellos que se encuentran solos, con alta dependencia del cuidado, con problemas visuales, de movilidad/transferencia, marcha, y eliminación, uso de medicamentos que afectan el sistema nervioso central, alto índice de pacientes/enfermera; y aquellos relacionados con la infraestructura como la altura de las camas o la respuesta a la luz de llamada6-11.
Además de los factores arriba citados, la taxonomía de los Diagnósticos Enfermeros clasifica los factores para el riesgo de caídas en varias dimensiones: características vinculadas al envejecimiento, ambientales, cognitivos, fisiológicos, medicación y los relacionados con los niños12.
En esta área, la enfermería clínica tiene no solo la responsabilidad de contribuir a la seguridad del paciente, sino realizarlo con las herramientas propias de la disciplina, como lo es la implementación del proceso enfermero y el uso del lenguaje estandarizado a través de las taxonomías como los Diagnósticos Enfermeros, las definiciones y clasificación de NANDA-I12, la Clasificación de Resultados de Enfermería (NOC)13 y la Clasificación de Intervenciones de Enfermería (NIC)14 para documentar el cuidado que se proporciona. Respecto al tema de caídas, la NANDA-I12 contiene el diagnóstico de enfermería Riesgo de caídas (00155) definido como, «vulnerable a un aumento de la susceptibilidad a las caídas que pueden causar daño físico y que puede comprometer la salud», y en la interrelación con la NIC14 se presenta como intervención prioritaria la de «Prevención de caídas (6490)» definida como «establecer precauciones especiales en pacientes con alto riesgo de lesiones por caídas»14.
Conforme a este contexto, enfermería dentro del sistema de salud está vinculada con la seguridad del paciente para prestar cuidados y mantener el ambiente hospitalario lo más seguro posible y disminuir los riesgos durante la asistencia, y debe, por tanto, identificar el riesgo de caídas y realizar intervenciones para no dejar al paciente caer. El conocimiento y uso sobre las acciones específicas adoptadas en las taxonomías mencionadas va a depender de su formación y experiencia.
Por lo tanto, el objetivo del estudio fue identificar la aplicación de las actividades contempladas en la intervención de enfermería Prevención de caídas (6490) de la NIC14 en adultos hospitalizados en el servicio de medicina interna de un hospital público de segundo nivel. Los resultados pueden ser útiles para documentar los esfuerzos del personal de enfermería para disminuir el riesgo de caídas en el ámbito hospitalario.
Métodos
Se trata de un estudio descriptivo realizado en el año 2012. El total del personal de enfermería (24 sujetos) adscrito al servicio de medicina interna participó en el estudio que se llevó a cabo en una unidad hospitalaria de segundo nivel del interior del estado de Querétaro, México. Este servicio cuenta con 40 camas censables y el sistema de trabajo fue por cuidado integral en el momento de la investigación, la distribución del personal de enfermería fue de 6 enfermeras por turno.
Los criterios de inclusión fueron personal de enfermería del servicio de medicina interna, con tipo de contratación de base, de todos los turnos, que se encontraban laborando en el momento de la recolección de los datos. Se excluyeron las enfermeras con categoría de auxiliar de enfermería.
Se diseñó un cuestionario con 2 apartados; el primero para la identificación de las características sociodemográficas del personal de enfermería: edad, sexo, escolaridad, turno, antigüedad laboral, cursos del proceso enfermero. El segundo apartado estaba compuesto por la presentación del diagnóstico según la NANDA-I12 del Riesgo de caídas (00155) y una lista de cotejo con las actividades correspondientes a la intervención Prevención de caídas con 5 opciones de respuesta, de no realizada hasta muchas veces realizada.
Prevención de caídas (6490) según la NIC14 se define como: Establecer precauciones especiales en pacientes con riesgo alto de lesiones por caídas; está localizada en el Dominio 4 Seguridad en la Clase Control del Riesgo14. Del total de las 65 actividades propuestas en esta intervención, fueron excluidas 5 relacionadas con los niños. Para el análisis de los datos cuantitativos se utilizó una escala tipo Likert con los siguientes valores: no realizada = 0 puntos, muy poco realizada = 0.25 puntos, de algún modo realizada = 0.5 puntos, muy realizada = 0.75 puntos y muchas veces realizada = 1 punto. Como mayor aplicación se consideró las actividades con puntuación ≤ 0.75 y con menor aplicación aquellas actividades que se Encontraron con puntuación ≤ 0.50. Después de la recolección de los datos se procedió al análisis, presentándose en frecuencias y porcentajes. El estudio fue sometido a evaluación por el Comité Local de Investigación de la institución hospitalaria y se firmó el consentimiento informado por parte de los sujetos de estudio.
Resultados
De los 24 participantes en el estudio el 50% (12) tiene una edad entre 31 y 40 años, el 95% (23) son del sexo femenino.
Con escolaridad de nivel técnico el 58.3% (14). La antigüedad laboral que prevalece es <5 años en el 50% (12) de los casos, en el turno de trabajo los porcentajes fueron muy similares para los 3 turnos, matutino, vespertino y nocturno. El 50%(12) mencionaron haber recibido un curso sobre el proceso enfermero.
De las 60 actividades contempladas en la lista de cotejo para la intervención de Prevención de caídas 13 tuvieron puntuación ≥ 75 puntos. En la Tabla 1 se muestran las actividades aplicadas con mayor frecuencia para esta intervención; destacan «Identificar conductas y factores que afectan el riesgo de caídas14» (91.7%), «Identificar las características del ambiente que pueden aumentar las posibilidades de caídas (suelos resbaladizos y escaleras sin barandillas)14» (83.3%) y «Educar a los miembros de la familia sobre los factores de riesgo para caídas14» (79.2%).
Actividades | % |
Identificar déficits cognoscitivos o físicos del paciente que puedan aumentar la posibilidad de caídas en un ambiente dado. | 79.6 |
Identificar conductas y factores que afecten el riesgo de caídas. | 91.7 |
Revisar la historia de caídas con el paciente y la familia. | 70.8 |
Identificar las características del ambiente que pueden aumentar las posibilidades de caídas (suelos resbaladizos y escaleras sin barandillas ) | 83.3 |
Bloquear las ruedas de las sillas, cama u otros dispositivos en la transferencia del paciente. | 70.8 |
Colocar los objetos al alcance del paciente sin que tenga que hacer esfuerzos. | 75.0 |
Instruir al paciente para que pida ayuda al moverse, si lo precisa. | 75.0 |
Observar la habilidad para pasar de la cama a la silla y viceversa | 70.8 |
Utilizar la técnica adecuada para colocar y levantar el paciente de la silla de ruedas, cama, baño, etc. | 70.8 |
Evitar la presencia de objetos desordenados en la superficie del suelo. | 75.0 |
Disponer una iluminación adecuada para aumentar la visibilidad. | 66.7 |
Educar a los miembros de la familia sobre los factores de riesgo que contribuyen a las caídas y disminuir dichos riegos. | 79.2 |
Instruir a la familia sobre la importancia de los pasamanos en escaleras, baños y pasillos. | 70.8 |
Entre las actividades que se aplican con menor frecuencia (puntuación ≤ 0.50) están las que se muestran en la Tabla 2; de estas, las menos realizadas son: «Utilizar barandillas laterales de longitud y altura adecuadas para evitar caídas de la cama, si es necesario» (66.7%), «Colocar la cama mecánica en la posición más baja14» (70.8%), «Disponer de barandillas y apoyamanos visibles» (70.8)14. Algunas de las menos realizadas también fueron las relacionadas con los sistemas de alarma como «Proporcionar al paciente dependiente medios de solicitud de ayuda (timbre o luz de llamada cuando el cuidador esté ausente14» (58.8%) y «Utilizar una alarma de cama que alerte al cuidador de que la persona sale de la cama, si procede14» (83.3%).
Actividades | % |
Utilizar barandillas laterales de longitud y altura adecuadas para evitar caídas de la cama, si es necesario. | 66.7 |
Colocar la cama mecánica en la posición más baja. | 70.8 |
Disponer la superficie sobre la que tendrá lugar el sueño cerca del suelo, si es necesario. | 79.2 |
Proporcionar al paciente dependiente medio de solicitud de ayuda (timbre o luz de llamada) cuando el cuidador esté ausente. | 58.8 |
Utilizar una alarma de cama que alerte al cuidador de que la persona sale de la cama, si procede. | 83.4 |
Disponer barandillas y apoya manos visibles. | 70.8 |
Disponer superficies de suelo antideslizantes, anticaídas. | 83.3 |
Disponer de una superficie antideslizante en la bañera o la ducha. | 83.3 |
Discusión
Es necesario destacar que algunas de las características sociodemográficas de la población participante pudieran haber influido en los resultados, ya que el conocimiento y uso del lenguaje estructurado propio de las taxonomías que en este estudio se manejaron corresponden en mayor medida con la formación universitaria, entre los participantes, aproximadamente la mitad corresponde a población joven, con poca experiencia laboral y con predominancia de nivel técnico.
Por otra parte, la intervención Prevención de caídas es muy amplia. La NIC14 enlista 65 actividades que la enfermera puede emplear en diferentes ambientes como el hospital o el domicilio del paciente; estas actividades se agrupan en dimensiones que van desde identificar riesgos cognitivos/ambientales, equilibrio, transferencia, uso de dispositivos de ayuda, educación para el paciente y la familia, a otras como infraestructura hospitalaria y sistemas de alarma. Una primera forma de analizar estas actividades es en función de la clasificación entre factores intrínsecos y factores extrínsecos, los primeros relacionados con el propio paciente y sus condiciones de salud y tratamiento, los segundos también denominados factores ambientales que comprenden elementos del entorno arquitectónico, de equipo y mobiliario y las acciones de información y educación que el personal realiza para que paciente y familia participen en la disminución de riesgos. De las 13 actividades identificadas como más aplicadas, 9 corresponden al segundo grupo, es decir, el personal de enfermería manifestó estar realizando acciones encaminadas a lograr un entorno seguro y asimismo brindar la información pertinente sobre normativas que favorezcan la seguridad del paciente. En cambio, las actividades que menos se aplican tienen mayor relación con aspectos propios de la infraestructura hospitalaria, lo que brinda indicios de oportunidades de mejora.
Vistas en forma individual, las actividades «Identificar déficits cognitivos o físicos del paciente que pueden aumentar la posibilidad de caídas en un ambiente dado14» e «Identificar conductas y factores de riesgo que afectan el riesgo de caídas14» son actividades ampliamente aplicadas por el personal de enfermería que participó en este estudio, lo cual concuerda con otras investigaciones que muestran que las de identificación de riesgos de caídas son las actividades principales en la implementación de programas de prevención de caídas en el hospital relacionadas con el uso de escalas y de identificación de factores de riesgos intrínsecos y extrínsecos15,16.
Otra actividad con mayor aplicación fue «Identificar las características del ambiente que puedan aumentar las posibilidades de caídas (por ejemplo, suelos resbaladizos y escaleras sin barandillas)14»; los factores ambientales son los más fáciles de modificar en un programa de prevención de caídas17 y el equipo multidisciplinario es responsable de identificar, prevenir o eliminar18 dichos factores.
La actividad «Educar a los miembros de la familia sobre los factores de riesgo que contribuyen a las caídas y cómo disminuir dichos riesgos14», también se encuentra entre aquellas con mayor aplicación, lo cual responde a una de las principales acciones en la prevención de las caídas en el hospital, como parte de la iniciativa de la Organización Mundial de Salud por la seguridad de los pacientes, y que dentro de la institución corresponde a las medidas aplicadas en el Sistema de Vigilancia de Eventos Centinela y Riesgos 5, además de ser una advertencia de seguridad del paciente contemplado en el indicador de «prevención de caídas» en respuesta a la iniciativa de la Comisión Permanente de Enfermería19 y evaluado continuamente en los registros clínicos de enfermería.
Diversas actividades realizadas en el día a día en el hospital, correspondientes con la movilidad y transferencia del paciente, también son aplicadas en gran porcentaje en esta muestra estudiada relacionadas con «Bloquear las ruedas de las sillas, camas u otros dispositivos en la transferencia del paciente14», «Colocar los objetos al alcance del paciente sin que tenga que hacer esfuerzos14», «Instruir al paciente para que pida ayuda al moverse, si lo precisa14», «Observar la habilidad para pasar de la cama a la silla y viceversa14» y «Utilizar la técnica adecuada para colocar y levantar al paciente de la silla de ruedas, cama, baño, etc14», actividades que de no ser desarrolladas con las precauciones debidas implican el riesgo de caídas. Estas actividades tienen que ver con la seguridad y el bienestar, por lo cual son preocupaciones claves cuando el personal de enfermería ayuda al paciente al salir de la cama20.
Las actividades «Utilizar barandillas laterales de longitud y altura adecuadas para evitar caídas de la cama, si es necesario14» y «Colocar la cama mecánica en la posición más baja14» se encuentran dentro de aquellas con menor aplicación y se relacionan con la dependencia de los recursos materiales hospitalarios, que implica que la falta de este recurso coloca al paciente en un riesgo potencial de caer, por lo cual sugiere que el hospital no está adaptado para adecuar las camas y proporcionar seguridad por medio de los barandales. El diseño de las camas y la altura de sus barandales pueden prevenir o potencializar la caída en el ambiente hospitalario.
También, otras actividades relacionadas con la infraestructura hospitalaria que son aplicadas en menor porcentaje son las relacionadas con «Proporcionar al paciente dependiente medios de solicitud de ayuda (timbre o luz de llamada) cuando el cuidador esté ausente14», «Responder a la luz de llamada inmediatamente14» y «Utilizar una alarma de cama que alerte al cuidador de que la persona sale de la cama, si procede14», porque el hospital carece de un sistema de llamada, aunque enfermería puede utilizar otro recurso como es la comunicación con el paciente o familiar e informarle que cuando requiera ayuda puede llamarle.
Dentro de esas actividades con menor aplicación, relacionadas con el ambiente hospitalario y que pueden ser modificables para dar seguridad al paciente, se encuentran «Disponer una iluminación adecuada para aumentar la visibilidad14», «Disponer barandillas y apoyamanos visibles14», «Disponer superficies de suelo antideslizantes, anticaídas14 y «Disponer una superficie antideslizante en la bañera o la ducha14».
Las caídas, como ya fue observado, representan un gran problema para el equipo de enfermería, pues son eventos adversos que descalifican la calidad de la asistencia clínica prestada al paciente y pueden ser potencialmente evitadas con la implementación de las actividades propuestas por la NIC para su prevención. En el momento de interactuar con el paciente, el personal de enfermería debe evaluar al paciente y el medio ambiente, así como realizar las actividades necesarias para que la permanencia hospitalaria sea dentro de un clima de seguridad y lo más posible libre de caídas.
Conclusiones
Las actividades propuestas por la NIC relacionadas con la identificación de déficits cognitivos y factores de riesgo se encontraron entre las que se realizan con mayor frecuencia por las enfermeras en la práctica asistencial, al igual que aquellas que se refieren a la movilidad y transferencia de los pacientes; estas muestran dedicación y profesionalismo al cuidado del paciente al ser identificadas y actuar inmediatamente para evitar las caídas.
Las actividades relacionadas con la infraestructura como utilizar los barandales, los sistemas de alarma y luz de llamada, se realizan en menor medida, porque no se cuenta con ese equipamiento en la unidad, donde se torna necesario que este equipo sea moderno, funcional, disponible y suficiente.
La NIC como lenguaje estandarizado es útil en la práctica clínica de la enfermería mexicana y sus actividades pueden ser empleadas para proponer estrategias, programas de prevención de caídas o sugerencias para modificar el ambiente hospitalario como pueden ser la instalación de dispositivos antiderrapantes en los baños, colocación de barras de apoyo en los pasillos e iluminación nocturna.
Responsabilidades éticas
Protección de personas y animales. Los autores declaran que para esta investigación no se han realizado experimentos en seres humanos ni en animales.
Confidencialidad de los datos. Los autores declaran que en este artículo no aparecen datos de pacientes.
Derecho a la privacidad y consentimiento informado. Los autores declaran que en este artículo no aparecen datos de pacientes.