Introducción
El incremento de adultos mayores (AM) en México ha sido acelerado y prematuro, siendo de 6.2% en 2010 a 7.2% en 20151. Se pronostica que la población para el año 2050 será de 150,837, 517, con una esperanza de vida de 79.4 años 2,3. El AM presenta síndromes geriátricos causados por el envejecimiento y el deterioro funcional, generando incapacidad, inmovilidad, inestabilidad, deterioro intelectual y un alto riesgo de caídas que resultan en fracturas, procesos patológicos, abatimiento funcional e incluso la muerte 4, 5. La Organización Mundial de la Salud6,7define la “caída” como la consecuencia de cualquier acontecimiento que precipita al individuo al suelo en contra de su voluntad, la caída suele ser repentina, involuntaria e insospechada y puede ser confirmada por el paciente o un testigo4. Las caídas son un grave problema de salud pública, representan la segunda causa mundial de muerte por lesiones accidentales o no intencionales, ya que anualmente mueren en el mundo 646,000 personas por caídas y más de 80% de esas muertes se registran en países de bajos y medianos ingresos, los mayores de 65 años tienden a sufrir más caídas mortales cuya gravedad requiere atención institucionalizada de salud7.
En México, en el 2015, el 38.46% de los AM refirieron haber tenido una o más caídas en el último año, de las cuales las mujeres presentaron el 40% y los hombres el 32.73%. La mayoría de éstas caídas se presentaron en la calle y espacios públicos en el 59.41% de los casos y el resto se presentó en el hogar, siendo la sala con el mayor índice (12.87%), y de éstos AM el 11.8% presentaron algún tipo de fractura. La ENSANUT en el 2012, reportó que el 54% de las mujeres sufrían más caídas, y de ellas el 34.1% la sufrió en los últimos doce meses 8,9. En el 2013 Tlaxcala ocupó el segundo lugar de defunciones por caídas con una tasa de 18.6 defunciones por cada cien mil habitantes. La mortalidad más elevada fue en hombres con 30.1 muertes por cada cien mil10. En el 2015 las caídas se presentaron en el 86.5% de los adultos, con una tasa de mortalidad de 5.7 para los hombres y 0.8 para las mujeres11. Del 2011 al 2015 se ha observado un incrementado gradual en la tasa de mortalidad por caídas de 2.5 a 3.912.
Por su alta morbilidad y mortalidad las caídas generan altos costos a los servicios de salud ya que utilizan recursos de otros programas 13,14, producen cambios psicológicos y sociales en el AM afectando las relaciones familiares15, a mediano o largo plazo generan restricciones de actividades, y el síndrome del miedo a caer 7, 16-18. Estudios relacionados a las caídas en España19,20, Ecuador21, Cuba22,23, Costa Rica16, y México24,25, han determinado el impacto que causan en el AM, en los sistemas de salud y en la sociedad. La prevención y atención de las caídas son de suma importancia para el profesional de la salud, haciendo hincapié en la educación, la capacitación, la creación de entornos y ambientes domésticos más seguros y reducir los riesgos de caídas y costos hospitalarios, priorizando la investigación en éste campo de la geriatría 7, 13.
En el hogar ocurren la mayoría de lesiones y defunciones por accidentes intrínsecos (condición inherente del AM) o extrínsecos (condiciones en el hogar del AM) 20, y por condiciones multifactoriales que muchas veces desconoce el AM 21,22. Por lo tanto, es importante identificar los factores de riesgo, principalmente en aquellos que viven en pobreza, y en hogares que no cumplen con las mínimas condiciones de seguridad que garanticen la autonomía del AM 5,18, situaciones que se agravan en condiciones de riesgo social como la soledad, viudez, separación, abandono familiar, salud, violencia y económicas. Ante el evidente riesgo de sufrir una caída y fracturas secundarias, es necesario conocer los obstáculos extrínsecos o del entorno en la vivienda que habitan, donde el mayor riesgo de caídas se encuentra en la cocina y baño14.
Existen instrumentos que miden la presencia y ausencia de factores predisponentes en el hogar que ayudan a identificar las causas de una caída, y que pueden ser prevenibles analizando las circunstancias en que se produjo la caída, valorando los factores intrínsecos y eliminando los extrínsecos 21. Los objetivos de la presente investigación son identificar la funcionalidad del AM de acuerdo a la escala HAQ-8, evaluar el riesgo de caídas en el hogar, determinar la situación de las caídas y el estado de salud, evaluar el nivel de conocimientos del AM sobre los factores de riesgo intrínsecos y extrínsecos asociadas a las caídas, y determinar la prevalencia de caídas del AM en localidades del Estado de Tlaxcala considerando sus características sociodemográficas.
Material y Métodos
Se realizó un estudio transversal y descriptivo en 13 comunidades urbanas y semiurbanas del Estado de Tlaxcala. (Acuamanala, Xiloxoxitla, Tlaltelulco, Teolocholco, La Aurora, Tlaxcala centro, Zacatelco, Xicotzinco, Apetatitlan, Tepeyanco, Chiautempan, Panotla, y Totolac), de enero a marzo del año 2017.
Se seleccionó una muestra probabilística no finita y por conglomerados de 364 AM con una edad mínima de 65 años, que tuvieron o no alguna caída en los últimos seis meses. Se excluyeron aquellos con deficiencia mental o limitación para responder. Se eliminaron a aquellos que hubieran sufrido algún tipo de caída intrahospitalaria y que no contaran con los cuestionarios completos. Se aplicó una encuesta con el apoyo de 100 estudiantes de enfermería y 3 maestras de la licenciatura de enfermería que realizan sus prácticas clínicas en el primer nivel de atención a la salud, previamente fueron capacitados y calibrados para aplicar el cuestionario sobre riesgo de caídas y funcionalidad del AM en el hogar. La información se recolectó en el domicilio de los adultos mayores por medio de una entrevista que tuvo una duración de 30 a 45 minutos. Se utilizaron 4 instrumentos de evaluación previamente validados y adaptados al lenguaje propio de la región. 1) El primer instrumento fue el cuestionario de la OMS26para el estudio de caídas en el AM, que contiene las características sociodemográficas, características de la caída y la salud del adulto mayor. 2) El segundo instrumento fue el cuestionario de funcionalidad HAQ-8 adaptado al español27, que consta de 10 preguntas sobre actividades básicas de la vida diaria; cada pregunta se valoró con escala Likert del 0 al 3 (0 Sin ninguna dificultad, 1 Con alguna dificultad, 2 Con mucha dificultad, 3 No puedo hacerlo), donde también se pidió la puntación total en una escala (0-2 Independiente, 3-10 Dependencia Leve, 11-20 Dependencia Moderada, 21-30 dependencia severa). 3) El tercer instrumento denominado Pauta de Evaluación del Riesgo de Caídas en el Hogar y Entorno Comunitario, diseñado para un programa de AM autovalentes28, que consta de 21 preguntas sobre los obstáculos que encuentran para realizar tareas al desplazarse en el suelo de la casa, en el baño, la iluminación, la sujeción de las escaleras, muebles firmes, cocina y uso de zapatos, cada ítem se valora a través de una escala Likert del 0 al 3 (0 Siempre, 1 Frecuente, 2 Ocasional, 3 Nunca), al final del cuestionario se pide una puntuación global en una escala (0-21 Poco riesgo, 22-42 Mediano Riesgo,43-63 Alto Riesgo). 4) El cuarto instrumento es sobre los conocimientos de prevención de riesgo de caídas en el hogar en los AM29, consta de 15 preguntas agrupados por áreas del hogar (suelo, iluminación, cocina, dormitorio, pasillos, escaleras, cuarto de baño, calzado y vestido) donde cada pregunta se mide por medio de una escala tipo Likert (1 Totalmente en desacuerdo, 2 Frecuentemente en desacuerdo, 3 Frecuentemente de acuerdo, 4 Totalmente de acuerdo, al final el total se determina por escala de conocimientos (0-15 Conocimientos Totalmente insuficientes, 16-30 Conocimientos insuficientes, 31-45 Conocimientos suficientes, 46-60 Conocimientos Totalmente suficientes). El análisis de datos se realizó mediante el paquete estadístico de SPSS versión 21. Se obtuvieron frecuencias y porcentajes de cada variable. Se realizó una prueba exacta de Fisher para comparar entre las categorías, ya que algunas de las celdas, tuvo valores esperados menores a 5 observaciones. Se estableció un nivel de significancia p < 0.05.
El proyecto fue revisado y aprobado por el comité de investigación de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Autónoma de Tlaxcala. Los procedimientos cumplen con las normas éticas de acuerdo al Reglamento de la Ley General de Salud en materia de Investigación para la salud30. La participación de los encuestados fue completamente voluntaria, explicándoles el motivo del estudio previo a la recopilación de la información, respetando el principio de protección por medio del consentimiento informado.
Resultados
De los 364 AM encuestados, el 55.5% son mujeres. El rango de edad que predominó es de 65 a 69 (41.5%). La mayoría de los sujetos solo tienen estudios de primaria con un 57.1%, en comparación con el 20.1% que no estudió. El 67.2% de AM con poco riesgo de caídas habitan en vivienda urbana con servicios públicos. La ocupación que predomina es la de ama de casa con el 44.2%, seguido del de campesino con un 25.3%. La mayoría de los sujetos está afiliado al seguro popular con un 47.5% y solo el 1.1% no está afiliado a ningún servicio de salud. El 55.2% de los AM vive con su pareja, y de estos el 67.3% son hombres; el 11.3% vive solo. De estos sujetos el 36.0% no tiene un cuidador permanente y de los cuales el 39.6% son AM del sexo femenino. Se compararon las características sociodemográficas con el riesgo de sufrir caídas sin observarse diferencias estadísticamente significativas, excepto en la edad, dónde la proporción de sujetos con alto riesgo de sufrir caídas es mayor conforme incrementa la edad (p = 0.005) tabla 1.
Con la escala HAQ-8, la capacidad funcional del AM es mejor en el rango de edad de 65 a 69 años con un 28.8%, y un porcentaje de dependencia del 42.3% para el total de la muestra, seguido de la edad de 65 a 69 años con un 9.9% y una dependencia del 31.6% para realizar actividades cotidianas como vestirse, acostarse, levantarse, caminar al aire libre, bañarse y secarse, agacharse, abrir y cerrar las llaves del agua, subir y bajar del auto o camión, recibir un recado e ir de compras. Considerando las enfermedad crónico- degenerativa (ECD), la de mayor incidencia fue la diabetes mellitus (DM) en el 17.9% de la población, de estos el 90.1% son funcionalmente dependientes. Le sigue la hipertensión arterial con diabetes mellitus (HTA/DM) en el 14.6% de los AM de los cuales el 94.8% son dependientes. El tercer lugar lo ocupa la hipertensión arterial (HTA) presente en el 14.3% de los sujetos, de los cuales el 92.9% son dependientes. El 48.4% del total de la población no presentaron ninguna ECD al momento de la entrevista. Existen diferencias significativas entre el grado de funcionalidad y la edad (p = 0.003), las enfermedades crónicas (p < 0.0001), y la autopercepción del estado de salud (p < 0.0001). El incremento en la edad, padecer alguna enfermedad crónica, y tener una mala percepción de su estado de salud, disminuyó el porcentaje de sujetos que son independientes tabla 2.
Del total de sujetos independientes (n=210, 57.7%), el 36.0% no tienen enfermedades agregado, el 8.5% presentan problemas visuales leves, seguido de problemas de audición leves con 4.4%, y el 3.8 % con problemas de los pies
Riesgo de caídas en Adultos Mayores | |||||||
Características sociodemográficas | Poco riesgo | Mediano riesgo | Alto riesgo | Valor p | |||
n=302 | % | n=55 | % | n=7 | % | ||
Género | |||||||
Masculino | 136 | 45.03 | 22 | 40 | 4 | 57.14 | 0.614 |
Femenino | 166 | 54.97 | 33 | 60 | 3 | 42.86 | |
Edad | |||||||
65 a 69 | 133 | 44.04 | 18 | 32.73 | 0 | 0 | 0.005 |
70 a 74 | 69 | 22.85 | 13 | 23.64 | 3 | 42.86 | |
75 a 79 | 52 | 17.22 | 9 | 16.36 | 1 | 14.29 | |
80 a 84 | 31 | 10.26 | 12 | 21.82 | 0 | 0 | |
85 y más | 17 | 5.63 | 3 | 5.45 | 3 | 42.86 | |
Escolaridad | |||||||
Primaria | 176 | 58.28 | 29 | 52.73 | 3 | 42.86 | 0.437 |
Secundaria | 41 | 13.58 | 8 | 14.55 | 1 | 14.29 | |
Preparatoria | 22 | 7.28 | 1 | 1.82 | 0 | 0 | |
Licenciatura | 8 | 2.65 | 2 | 3.64 | 0 | 0 | |
Sin estudios | 55 | 18.21 | 15 | 27.27 | 3 | 42.86 | |
Tipo de vivienda | |||||||
Urbano con servicios públicos | 203 | 67.22 | 38 | 69.09 | 4 | 57.14 | 0.123 |
Urbano sin servicios públicos | 2 | 0.66 | 2 | 3.64 | 1 | 14.29 | |
Rural con servicios públicos | 93 | 30.79 | 15 | 27.27 | 2 | 28.57 | |
Rural sin servicios públicos | 4 | 1.32 | 0 | 0 | 0 | 0 | |
Ocupación | |||||||
Campesino | 71 | 23.51 | 19 | 34.55 | 2 | 28.57 | 0.111 |
Obrero | 16 | 5.3 | 1 | 1.82 | 0 | 0 | |
Empleado | 17 | 5.63 | 2 | 3.64 | 0 | 0 | |
Comerciante activo | 37 | 12.25 | 1 | 1.82 | 1 | 14.29 | |
Ama de casa | 131 | 43.38 | 27 | 49.09 | 3 | 42.86 | |
Jubilado | 26 | 8.61 | 2 | 3.64 | 1 | 14.29 | |
Otro | 4 | 1.32 | 3 | 5.45 | 0 | 0 | |
Seguridad Social | |||||||
IMSS | 89 | 29.47 | 15 | 27.27 | 3 | 42.86 | 0.719 |
ISSSTE | 31 | 10.26 | 6 | 10.91 | 0 | 0 | |
Seguro popular | 144 | 47.68 | 26 | 47.27 | 3 | 42.86 | |
SEDENA | 2 | 0.66 | 0 | 0 | 0 | 0 | |
PEMEX | 0 | 0 | 1 | 1.82 | 0 | 0 | |
Otro | 33 | 10.93 | 6 | 10.91 | 1 | 14.29 | |
Ninguno | 3 | 0.99 | 1 | 1.82 | 0 | 0 | |
Con quien vive | |||||||
Pareja | 174 | 57.62 | 25 | 45.45 | 2 | 28.57 | 0.174 |
Solo | 30 | 9.93 | 10 | 18.18 | 1 | 14.29 | |
Hijos/Hermanos | 85 | 28.15 | 19 | 34.55 | 3 | 42.86 | |
Otros familiares | 9 | 2.98 | 1 | 1.82 | 1 | 14.29 | |
Otro | 4 | 1.32 | 0 | 0 | 0 | 0 | |
Cuidador permanente | |||||||
Pareja | 81 | 26.82 | 11 | 20 | 1 | 14.29 | 0.408 |
Hija/o | 102 | 33.77 | 24 | 43.64 | 3 | 42.86 | |
Vecino | 1 | 0.33 | 0 | 0 | 0 | 0 | |
Otro familiar | 7 | 2.32 | 2 | 3.64 | 1 | 14.29 | |
Ninguno | 111 | 36.75 | 18 | 32.73 | 2 | 28.57 | |
Número de sujetos (n) y porcentaje (%). p = < 0.5 |
Fuente: Elaboración propia
Factores asociados con la funcionalidad del Adulto Mayor | |||||||||
Independiente | Dependencia leve | Dependencia Moderado | Dependencia Severa | Valor p | |||||
n=210 | % | n=115 | % | n=32 | % | n=7 | % | ||
Género | |||||||||
Masculino | 99 | 47.14 | 47 | 40.87 | 13 | 40.63 | 3 | 42.86 | 0.693 |
Femenino | 111 | 52.86 | 68 | 59.13 | 19 | 59.38 | 4 | 57.14 | |
Edad | |||||||||
65 a 69 | 105 | 50 | 36 | 31.3 | 8 | 25 | 2 | 28.57 | 0.003 |
70 a 74 | 45 | 21.43 | 32 | 27.83 | 7 | 21.88 | 1 | 14.29 | |
75 a 79 | 35 | 16.67 | 21 | 18.26 | 5 | 15.63 | 1 | 14.29 | |
80 a 84 | 15 | 7.14 | 19 | 16.52 | 8 | 25 | 1 | 14.29 | |
85 y mas | 10 | 4.76 | 7 | 6.09 | 4 | 12.5 | 2 | 28.57 | |
Enfermedades crónicas | |||||||||
Hipertensión arterial | 45 | 21.43 | 45 | 39.13 | 15 | 46.88 | 1 | 14.29 | <0.0001 |
Diabetes mellitus | 37 | 17.62 | 21 | 18.26 | 7 | 21.88 | 1 | 14.29 | |
Cardiopatía | 0 | 0 | 1 | 0.87 | 2 | 6.25 | 1 | 14.29 | |
Otro | 6 | 2.86 | 3 | 2.61 | 1 | 3.13 | 2 | 28.57 | |
Ninguno | 122 | 58.1 | 45 | 39.13 | 7 | 21.88 | 2 | 28.57 | |
Autopercepción del estado de salud | |||||||||
Excelente | 9 | 4.29 | 5 | 4.35 | 1 | 3.13 | 0 | 0 | <0.0001 |
Bueno | 95 | 45.24 | 34 | 29.57 | 5 | 15.63 | 0 | 0 | |
Regular | 101 | 48.1 | 67 | 58.26 | 21 | 65.63 | 4 | 57.14 | |
Malo | 5 | 2.38 | 9 | 7.83 | 5 | 15.63 | 3 | 42.86 | |
Número de sujetos (n) y porcentaje (%). p = < 0.5 |
Fuente: Elaboración propia
leves. En relación a los pacientes dependientes el 31.6% tiene leve dependencia, 6.9% presenta problemas visuales, 3.8% con problemas de los pies, 3.0% con problemas de audición, y 1.4% tienen problemas leves de incontinencia urinaria. Los medicamentos que más consumen por semana los AM independientes o dependientes, son analgésicos antinflamatorios no esteroideos (AINES) (14.0%), hipoglucemiantes (13.8%), y la combinación de hipoglucemiantes y antihipertensivos (11.2%).
La percepción de los AM sobre su estado de salud se toma en referencia a su capacidad funcional, las enfermedades que padecen y el consumo de medicamentos. En general el 42.3% presenta alguna dependencia, de los cuales el 31.6% es leve, 8.8% moderada y 1.9% es severa. El 53% de los AM tienen una percepción regular de su estado de salud, principalmente en aquellos sujetos que son independientes con el 27.7%; 36.8% refieren que su estado de salud es bueno, en donde el 26.1% presentan independencia; El 6.0% considera que su estado de salud es malo, en donde el 2.5% tiene leve dependencia. Solo el 4.1% considera su salud excelente, donde el 1.4% es independiente. Al evaluar el riesgo de caídas por los obstáculos presentes al realizar tareas como desplazarse en el suelo de la casa, en el baño, la iluminación, la sujeción de las escaleras, muebles firmes, cocina y uso de zapatos, destaca que el 83.0% tienen poco riesgo de sufrir caídas, el 15.1% mediano riesgo y casi un 2% alto riesgo. Existe una relación entre el buen estado de salud y el poco riesgo de sufrir caídas. El porcentaje de sujetos con mediano y alto riesgo de sufrir caídas, es mayor conforme incrementa la dependencia (p < 0.0001), y perciben su estado de salud como regular o malo (p = 0.003) tabla3.
La escala de evaluación de riesgo de caídas en el hogar se divide en 7 áreas, las de mayor riesgo son con obstáculos para el desplazamiento como las alfombras mal colocadas (42.6%), ausencia de tapete anti-derrapante en el baño ya que solo el 38.5% de los AM refiere usarlos, escaleras (53.3%), falta de luz por interruptores mal colocados (12.4%), así como escaleras en mal estado y sin barandales. El 56.9% de los AM refieren usar sillas fuertes y firmes para alcanzar objetos altos. En la cocina el 61.0% coloca los utensilios en muebles a la altura de su cintura tabla 4.
El 83.2% tiene conocimientos suficientes sobre prevención y riesgos de caídas en el hogar al caminar, por falta de iluminación o interruptores, mobiliario de la cocina, uso de elementos en el dormitorio, pasillos y escaleras, en el cuarto de baño, uso de calzado y ropa adecuada. El porcentaje de sujetos que tienen un nivel de conocimientos totalmente suficiente sobre los factores asociados con el riesgo de caídas, es mayor en la categoría de poco riesgo de caídas en AM, comparado con el resto de las categorías, diferencias que fueron estadísticamente significativas (p < 0.0001).
Del total de la población estudiada, 174 (47.8%) AM han sufrido alguna caída en los últimos 6 meses dentro o fuera del hogar, el 34.3% han presentado de 1 a 2 caídas, 10.2% entre 3 y 4 veces, y 3.3% más de cuatro veces. De acuerdo al lugar donde ocurrió la caída el 75.0% refiere que fue dentro del hogar y el 25% ocurrió afuera, predominó el patio con el 23.0%, seguido de la recámara con el 15.7%, el baño 12.0%, la cocina 9.0%, las escaleras 7.6%, el pasillo 4.0% y por último la sala con el 3.7%. Las principales áreas donde refieren haber sufrido al menos una caída fue en la calle con 12.1%, el patio con el 11.3%, el baño con 8.5% y la recámara con 5.8%. El 23.4% presentaron una segunda caída, el lugar que predominó fue la recámara y la calle (5.5%), el patio (4.9%) y la cocina (2.7%). El 13.7% presentó una tercera caída, principalmente en la calle (4.4%) el patio (3.0%) y la recámara (2.2%). El 6.3% sufrieron una cuarta caída en el patio (1.9%), las escaleras (1.1%) y la calle (1.1%). Finalmente, el 3% presentó una quinta caída, principalmente en la cocina (0.8%), seguido de la recámara, el patio y la calle (0.5%). De los 174 AM que tuvieron al menos una caída, 33% tiene miedo de volver a caer, 12.9% no tiene miedo de sufrir una caída y 1.9% lo desconoce. El 78.7% tienen un nivel de conocimiento totalmente suficiente sobre el riesgo de tener caídas; la autopercepción de su estado de salud en relación con el número de caídas, indica que tienen más caídas los que perciben un estado de salud regular con el 58.6%, seguido de los que lo consideran bueno con el 31.0%, el 6.9% perciben su estado de salud como malo y 3.4% excelente tabla 5.
Discusión
El perfil sociodemográfico de los adultos mayores indica una mayor prevalencia de mujeres dedicadas al hogar y hombres dedicados a las labores del campo, ambos con un grado de dependencia moderado, principalmente en las mujeres. La mayoría de los hombres conviven con su pareja y las mujeres con su pareja e hijos. Un poco más de la mitad solo tienen estudios de primaria, lo que demuestra una falta de preparación académica, sin llegar al analfabetismo. A pesar que el 87.9% tienen servicios de salud, más de la mitad presentan algún tipo de enfermedad, y por lo tanto tienen un cuidador permanente, principalmente un familiar del sexo femenino. Considerando la dependencia de las mujeres, en un estudio en Cuba, Salas23 encontró mayor dependencia en adultos mayores, principalmente en mujeres, probablemente debido a su estado hormonal y la osteoporosis, condiciones que se presentan en cualquier mujer después de los 65 años de edad, éstos factores no fueron determinados en el presente estudio, sin embargo, forman parte de las características de una familia del medio rural, similar a lo observado en otros estudios22,23,31. Cabe mencionar que es en casa dónde el AM pase el mayor tiempo del día.
Riesgo de caídas en Adultos Mayores | |||||||
Poco riesgo | Mediano riesgo | Alto riesgo | Valor p | ||||
n=302 | % | n=55 | % | n=7 | % | ||
Funcionalidad | |||||||
Independiente | 195 | 64.57 | 13 | 23.64 | 2 | 28.57 | <0.0001 |
Dependiente leve | 90 | 29.8 | 23 | 41.82 | 2 | 28.57 | |
Dependiente moderada | 16 | 5.3 | 15 | 27.27 | 1 | 14.29 | |
Dependencia severa | 1 | 0.33 | 4 | 7.27 | 2 | 28.57 | |
Autopercepción del estado de Salud | |||||||
¿Cómo considera su estado de Salud? | |||||||
Excelente | 15 | 4.97 | 0 | 0 | 0 | 0 | 0.003 |
Bueno | 120 | 39.74 | 11 | 20 | 3 | 42.86 | |
Regular | 152 | 50.33 | 39 | 70.91 | 2 | 28.57 | |
Malo | 15 | 4.97 | 5 | 9.09 | 2 | 28.57 | |
Número de sujetos (n) y porcentaje (%). p = < 0.5 |
Fuente: Elaboración propia
Riesgo de caídas en Adultos Mayores | |||||||
Poco riesgo | Mediano riesgo | Alto riesgo | Valor p | ||||
Nivel de conocimiento | n=302 | % | n=55 | % | n=7 | % | |
Totalmente insuficiente | 4 | 1.32 | 0 | 0 | 0 | 0 | <0.0001 |
Insuficiente | 4 | 1.32 | 1 | 1.82 | 1 | 14.29 | |
Suficiente | 29 | 9.6 | 20 | 36.36 | 2 | 28.57 | |
Totalmente suficiente | 265 | 87.75 | 34 | 61.82 | 4 | 57.14 | |
Número de sujetos (n) y porcentaje (%). p = < 0.5 |
Fuente: elaboración propia
El promedio de caídas en éste estudio en los últimos seis meses fue de 47.8%, muy superior a la media nacional que es de 38.46%11,13, o a lo reportado en otros países como Costa Rica16 que es de 35.6% en mayores de 60 años, en Ecuador21 es del 32.1% y se considera alto, y en Cuba23 41.7% dónde el riesgo es mediano. La frecuencia de caídas en el presente estudio en un periodo de seis meses fue de 34.3% con 1 a 2 caídas, 10.2% 3 a 4 caídas, y 3.3% se cayó más de cuatro veces, estos datos son mayores a lo reportado en Perú32 donde el 25% sufrieron de 1 a 2 caída, 6.35% de 3 a 4 caídas, y el 2.1% sufrieron de 5 caídas o más. Con la escala HAQ-8 se observó mayor independencia a menor edad, incrementándose la dependencia conforme avanza su edad para realizar actividades cotidianas como vestirse, acostarse, levantarse, caminar al aire libre, bañarse y secarse, agacharse, abrir y cerrar las llaves del agua, subir y bajar del auto o camión, recibir un recado e ir de compras. La buena condición de los espacios dentro el hogar de éstos adultos disminuye el riesgo a sufrir caídas, ya que solo el 17% tienen mediano y alto riesgo de caer.
Los principales factores de riesgo para sufrir una caída dentro del hogar son las alfombras mal colocadas, carencia de tapete anti-derrapante en el baño, falta de luz y barandales en las escaleras, escaleras y sillas en mal estado, y no colocar los utensilios de cocina al alcance, estos factores denotan una falta de cuidado por parte del AM y de quienes lo cuidan. Éstos factores de riesgo a caídas se repiten en otros estudios5,22,29incluyendo el no usar zapatos adecuados. El lugar donde sufren más caídas es dentro de hogar, el patio,
Pregunta | Siempre | Frecuente | Ocasional | Nunca | N/A | Total |
OBSTÁCULOS PARA EL DESPLAZAMIENTO | ||||||
Mantiene limpios y sin obstáculos los suelos y las escaleras | 70.1 | 22.8 | 4.9 | 2.2 | 0 | 100 |
Están bien fijos al suelo los bordes de las alfombras | 57.4 | 19.8 | 5.5 | 2.2 | 15.1 | 100 |
Tiene bien identificados los desniveles del suelo dentro de su hogar | 75.3 | 17.0 | 4.9 | 2.7 | 0 | 100 |
Tiene bien fijos o enrollados los cables del suelo de los pasillos de su hogar | 71.4 | 19.0 | 5.8 | 3.8 | 0 | 100 |
BAÑO | ||||||
Usa tapete antiderrapante en el piso de la tina o ducha. | 38.5 | 20.6 | 5.5 | 35.4 | 0 | 100 |
Usa cortina en la tina o ducha | 54.1 | 12.9 | 6.0 | 26.9 | 0 | 100 |
Tiene el interruptor del baño cerca de la puerta | 70.1 | 12.6 | 3.6 | 13.7 | 0 | 100 |
ILUMINACIÓN | ||||||
Los interruptores para encender la luz están cerca de las puertas de entrada de la casa y de las puertas de habitaciones y de la cocina | 73.9 | 15.9 | 6.0 | 4.1 | 0 | 100 |
La iluminación de la casa es la suficiente para ver y moverse en forma segura. | 76.6 | 16.8 | 4.1 | 2.5 | 0 | 100 |
ESCALERAS | ||||||
Tiene interruptor para encender la luz al principio y al final de las escaleras. | 53.3 | 14.6 | 3.8 | 12.4 | 15.9 | 100 |
Tiene barandales o pasamanos a ambos lados a todo lo largo de la escalera | 50.3 | 11.5 | 4.4 | 17.9 | 15.9 | 100 |
Están las escaleras en buen estado. | 53.3 | 19.0 | 6.0 | 5.8 | 15.9 | 100 |
Es fácil subir su escalera | 50.3 | 18.1 | 8.5 | 7.1 | 15.9 | 100 |
SILLAS | ||||||
Usa usted una silla firme y fuerte para alcanzar muebles altos. | 56.9 | 16.2 | 9.3 | 17.6 | 0 | 100 |
Están todas sus sillas en buen estado. | 63.5 | 24.7 | 8.5 | 3.3 | 0 | 100 |
COCINA | ||||||
Coloca los utensilios más usados en los muebles a la altura de su cintura. | 61.0 | 22.5 | 10.4 | 6.1 | 0 | 100 |
Se preocupa del encendido y apagado de la cocina. | 66.2 | 22.8 | 6.9 | 4.1 | 0 | 100 |
ZAPATOS | ||||||
Sus zapatos tienen una suela firme y que no se resbala. | 72.8 | 16.2 | 8.5 | 2.5 | 0 | 100 |
Utiliza zapatos cómodos y cerrados que no se salgan de los pies. | 78.0 | 13.7 | 5.8 | 2.5 | 0 | 100 |
N/A, no contestaron. |
Fuente: Elaboración propia
la recámara y el baño. Las causas principales de las caídas fueron accidentales y aquellas provocadas por terceros, datos son similares a los reportados por Rodríguez29 en una comunidad española. Es importante indagar si existe la probabilidad de violencia familiar contra el AM. Los principales tipos de lesiones inmediatas a la caída fueron las heridas superficiales, fractura de cadera y brazo, y más de la mitad refirió tener miedo de volver a caer, datos similares a los reportados por Varas25 y Silva31.
La DM, la HTA y otras enfermedades crónico degenerativas se presentan en el 50% de los AM, de éstos sujetos dos terceras partes toman medicamentos, lo cual indica que no se han mejorado éstas condiciones en los últimos años. El estado de salud y los medicamentos utilizados para su tratamiento como los AINES, hipoglucemiantes y antihipertensivos, pueden afectar los órganos de los sentidos como la vista y el oído, y la sensibilidad en los pies, lo que podría desencadenar el riesgo de una caída, como lo han reportado Alvarado 21, Varas25, y Estrella24.
El 78.7% de los AM sabe distinguir cuales son los factores de riesgo de sufrir una caída, sin embargo, sufren más caídas lo que conocen los factores de riesgo y no toman las debidas precauciones. Los datos obtenidos muestran que se caen más las mujeres entre los 65 a los 69 años de edad, igual a lo reportado en otros estudios21,24,25, principalmente las que tienen sobrepeso y los que estudiaron sólo la primaria, sin embargo, difiere a los datos Alvarado21 que no encontró diferencias significativas entre la frecuencia de caídas y el sobrepeso. El riesgo de caídas es mayor en el entorno urbano destacando que los servicios públicos no son un factor importante para disminuir las caídas. Presentaron más caídas los que viven con su pareja, dato contrario al reportado por Suelves19 quien menciona que los que viven solos se caen más. Esto podría deberse a que un adulto mayor no puede ayudar en ciertas circunstancias a otro con igual o mayor número de problemas físicos y de salud. Sin embargo, sufren más caídas los que tienen un cuidador permanente o un familiar viviendo con ellos, esto podría deberse a que el AM trata de no ser una molestia y realiza actividades que lo ponen en riesgo de caídas. Las amas de casa tienden a sufrir mayor número de caídas por las actividades que desarrollan en el hogar como tener el piso mojado y cocinar. De acuerdo al grado de funcionalidad los que son independientes sufren más caídas, sin existir mucha diferencia con los que presentan dependencia leve o moderada, éste problema podría estar relacionado a que el sujeto a pesar de estar en riesgo de caída se siente independiente y no busca la ayuda de un cuidador o un familiar. En lo referente a la autopercepción que tiene el AM sobre su salud caen más los que perciben su estado de salud regular, a diferencia del estudio de Lavedan32 que reporta mayor número de caídas en aquellos sujetos con peor calidad de vida.
Conclusiones
El perfil sociodemográfico se caracterizó por tener una mayor prevalencia de mujeres que se dedican al hogar en un entorno urbano, y en los hombres predominan los campesinos. La mayoría vive con su pareja y están afiliados a un servicio de salud; presentan una alta incidencia de enfermedades crónico-degenerativas como la DM, HTA, alteraciones de la vista, pies, y de la audición, por lo que requieren el uso de medicamentos como los AINES, hipoglucemiantes y antihipertensivos.
El 35.4% cuentan con un cuidador permanente, principalmente del género femenino. En general los adultos mayores son independientes para realizar actividades básicas de la vida diaria, pero existen situaciones o condiciones en las que dependen de alguien para realizarlas. Es en el hogar dónde el AM sufre más caídas principalmente en el patio, la recámara y el baño, y se asocia a factores que las predisponen como es el caso de alfombras que no están fijas al piso, falta de tapete anti-derrapante en el baño, no contar con interruptor de luz al principio y final de la escalera o que ésta no se encuentre en buen estado, no contar con sillas firmes y fuertes para alcanzar muebles u utensilios altos. El AM está consciente e identifica éstos factores y riesgos, lo que hace necesario que se adapten las condiciones del hogar y su entorno conforme el adulto se vuelve más dependiente. La mayoría de los accidentes traen como consecuencias lesiones físicas, que van desde las heridas superficiales hasta la fractura, en especial de cadera y brazo, lo cual puede evolucionar a una limitada capacidad funcional y afectar su propia seguridad por el miedo de volver a sufrir una caída.
Los AM que presentan mayor número de caídas son las mujeres mayores de 65 años, con sobrepeso, los que viven con su pareja, los que tienen cuidador permanente, las amas de casa, los que consumen medicamentos, los que padecen alguna enfermedad crónico-degenerativa y los que presentan dependencia funcional. Irónicamente los que poseen los conocimientos sobre prevención de riesgo de caídas, los que perciben un estado regular de su salud, los que viven en zonas urbanas con servicios públicos y los que cursaron hasta la primaria, también sufren de accidentes en el hogar.