Introducción
La diabetes mellitus 2 (DM) es una de las principales causas de hospitalización en adultos 1. Con el aumento de la esperanza de vida, los adultos mayores (AM) con DM son un grupo poblacional que está creciendo en los países en desarrollo, tal es el caso de los que pertenecen a la región de América Latina (AL)2. Entre las mayores complicaciones de la DM, se encuentran las úlceras de pie, complicación que puede llevar a los AM a ser más propensos a discapacidad en la movilidad como consecuencia de una amputación no traumática en miembros inferiores 3. La DM es la causa del 70% de las amputaciones de miembros inferiores, posicionándola como una de las principales causas de discapacidad de la región de AL 1, lo que implica depender de otras personas para las actividades de la vida diaria y con ello perder independencia.
La valoración periódica de los pies para la detección de signos de neuropatía, trastornos de la circulación y alteraciones de la piel en personas con DM es un principio básico de atención integral para la prevención de pie diabético (PD) 4; además de un buen manejo de los síntomas o manifestaciones tempranas que presupone educación, higiene y cuidados de los pies y de la enfermedad (alimentación, ejercicio, apego al tratamiento, control glucémico) 5,6.
Por lo que una revisión sistemática sobre intervenciones de salud puede aportar información valiosa sobre actividades aplicadas o incluidas y sus resultados en AM con DM con el fin de orientar un programa de intervención en esa población. Ello en virtud de que revisiones sistemáticas encontradas abordan grupos poblacionales a partir de 18 años y no específicos de AM 7,8.
Por lo tanto, se detecta un vacío de conocimiento, respecto a las mejores intervenciones de salud en AM para prevenir PD. Esto cobra relevancia para el personal de enfermería de primer nivel de atención, considerando que los AM son un grupo vulnerable, con declive funcional y limitaciones en el acceso a servicios de salud. En consecuencia, los AM tienen mayor riesgo de complicaciones por DM, entre ellas el PD, que puede afectar al AM en su calidad de vida, movilidad, economía y atención familiar y social. Por lo anterior, el propósito de esta revisión fue explorar las características de las intervenciones de salud más efectivas para la prevención del pie diabético en AM con DM.
Metodología
Revisión sistemática, estructurando una pregunta clínica con el formato PICO: Población (P), Intervenciones (I), Control (C [refiriéndose al grupo]), Resultado (O). Quedando estructurada como: P: AM con DM, I: Intervenciones de salud más efectivas [estudios controlados aleatorizados]; C: Grupo de intervención y de comparación; O: Prevención del PD. Se desarrolló con base en los criterios de Elementos de informe preferidos para los protocolos de revisión sistemática y metaanálisis (PRISMA-P, por sus siglas en inglés) 9.
La calidad de los estudios se evaluó con el criterio de riesgo de sesgo con la herramienta 8.5b riesgo de sesgo descrita por el manual de Cochrane versión en español (10. Los criterios de calidad que se valoran son sesgo: de selección, de realización, de detección, de desgaste y de notificación. Estos a su vez se califican en calidad alta, mediana o baja.
Tipos de artículos revisados: Debido a que solamente se localizó un estudio controlado aleatorizado (ECA), la revisión se extendió a programas de evaluación y/o cuasiexperimentos. Las intervenciones se clasificaron en simples y complejas. Las intervenciones simples fueron aquellas centradas sólo en la educación comparadas con el cuidado usual (el que la persona acostumbra). Las intervenciones complejas incluyeron un enfoque de cuidado integral (otras alternativas de cuidado, además del que la persona acostumbra) o las que combinan educación y cuidado integral, comparadas con el cuidado usual.
Criterios de selección: Se incluyeron artículos de texto completo, en inglés o español, de intervención sobre cuidado de los pies o prevención de PD en AM con DM o al menos con media de edad de 60 ó más años. No se restringió el año de publicación. Se excluyeron los artículos cuyas intervenciones se dirigían a curación de PD o úlceras activas, amputaciones, o experimentación con fármacos; revisiones sistemáticas, metaanálisis y capítulos de libro.
La búsqueda de las intervenciones se realizó de agosto 2019 a enero del 2020 en las bases de datos de Pub Med, Scopus, Web of Sciences Core Collection (KCL-Korean Journal Database, Russian Science Citation Index, Scielo Citation Index).
Los términos de búsqueda utilizados en inglés fueron: elder, aging, ageing, older, later life, type 2 diabetes, glucose intolerance, diabetic foot, diabetic feet, foot diseases, foot problem, foot disease, foot ulcer, diabetic foot ulcer, diabetic foot infection, prevent, foot care, foot monitoring, clinical trial, clinical trial phase I, II, III y IV, controlled clinical trial, multicenter stud, randomized controlled trial, early termination of clinical trials, double-blind method, randomized, randomised, trial, trials, single, double, doubled, triple, tripled, treble, trebled, blind, mask, “4 arm”, “four arm”, evaluation studies, program evaluation, validation studies, pre, post, pretest, posttest, program, evaluat, effectiveness, intervention, non controlled studies, non controlled clinical trial, non randomized controlled trial, non-randomized controlled studies, quasi experiments, quasiexperiments, non-randomized, non-randomised.
Los operadores boleanos AND y OR fueron utilizados para realizar todas las combinaciones posibles, incrementar la especificidad y reducir la sensibilidad de búsqueda. El administrador bibliográfico End NoteTM se usó para fusionar los títulos recuperados, eliminar los duplicados, y cribar los títulos y resúmenes. La selección se realizó en tres etapas: en la primera se revisó el título y resumen; durante la segunda la lectura y análisis del texto completo; en la tercera, la evaluación de la calidad de los estudios seleccionados. Una vez establecidas las estrategias de búsqueda por base de datos, se recuperaron 408 artículos, además de siete que se tenían previamente, lo que dio un total de 415. El investigador principal extrajo los estudios de acuerdo con los criterios de elegibilidad para su revisión profunda, utilizando los ficheros para lectura crítica (FLC 2.0) de ensayos clínicos. Al evaluar los artículos por título y resumen, se eliminaron los que no cumplieron los criterios de inclusión. Posteriormente se revisaron a texto completo veintinueve artículos para obtener la muestra final de nueve artículos. Se seleccionaron nueve artículos de los cuales se obtuvieron: características del estudio (estudio controlado aleatorizado [ECA], programa de evaluación o cuasiexperimento), características de la población (edad y tiempo de la DM), periodo de la intervención (tiempo, número de sesiones), tipo de intervención (entrega al grupo de intervención y entrega al grupo control), (Figura 1). Los resultados fueron divididos en resultados primarios y secundarios. Como resultado primario se consideró: desarrollo o no de habilidades y/o cuidado de los pies (lavado, hidratación, monitorización). Resultado secundario comprendió el porcentaje de no ulceración del pie al final de la intervención y al seguimiento.
Resultados
De los nueve artículos seleccionados: 66.7% de los estudios fueron cuasiexperimentos sin grupo control 13-18, 22.2% ECA 11,12, y 11.1% programas de evaluación 19. Un 88.9% reportaron intervenciones complejas 12-18) y 11.1% intervención simple 19. La edad de los participantes osciló entre 63.9 y 76.0 años. La mayoría fue de sexo femenino. El tiempo de duración de DM reportado en 55.6% de los estudios fue de 4.8 a 13 años 12,13,15,16,18. Respecto a resultados primarios, en 77.8% mostraron mejora de la hemoglobina glucosilada (HbA1c) 11-13,15-18. En 77.8% de los estudios se observaron mejora en el cuidado de los pies (monitorización de la sensibilidad, higiene e hidratación) dato principal de la prevención de PD 11,12,14-18. Respecto a resultados secundarios, sólo 11.1% 12) presentó datos de no ulceración de los pies. El resto no proporcionó datos en este rubro 11,13-19, (Tabla 1).
Autores |
Metodología |
Resultados |
Tiempos de evaluación |
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Diseño |
Edad |
Tiempo DM |
Muestra |
Instrumentos y mediciones |
Primarios |
Secundarios |
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GI |
GC |
|||||||||
Ahn, et al. (2012) 13 |
Cuasi- experimento pretest-postest no aleatorizado |
65 años |
12 a 13 años |
20 |
19 |
Glicemia en ayuno, HbA1c, Sensibilidad, TSS total para síntomas neuropatía, Balance, calidad de vida (SF-36v2) |
HbA1c:=3.11, p=0.004 (≠x GI 0.43±.57, GC -0.30±.87) Sensibilidad: t=0.63, p=0.535 (≠x GI -0.05±.22, GC -0.10±.31) TSS: t=2.09, p=0.042 (≠x GI 0.21±1.44, GC -1.64±3.61) |
Sin datos |
T1: Pre-intervención T2: 12 semanas post- intervención |
|
Boyle, et al. (2013) 19 (Estados Unidos) |
Programa de evaluación polietápico (4 fases) dirigido a personal de salud. Evaluaciones realizadas en pacientes con DM. |
>75 años (86% muestra) |
Sin datos |
19 |
No |
HbA1c, DEP a AM, referencia de AM a especialistas |
HbA1c: (p=.948); DEP: de 43% (n=35) a 60% (n=40), p>0.05; Referencia de AM a especialistas por anomalías en pies: 50% a 80%, p>0.05 |
Sin datos |
T1: Basal T2: 3 meses post intervención T3: 5 meses post intervención |
|
Caruso, et al. (2007) 14 |
Cuasi- experimento sin grupo control gc |
76 ± 8.6 años |
Sin dato |
283 |
No |
Hba1c, examen de la piel de los pies, sensibilidad con monofilamento |
Hba1c: media de 7.9% vs 7.3%, p=0.004 Examen de los pies: 26% (44) vs 57% (65), p˂0.001 |
Sin datos |
T1: pre- intervención (12 meses) T2: 9 meses post- intervención T3: 18 meses post-intervención T4: 27 meses post- intervención. |
|
Chen, et al. (2011) 15 |
Cuasi-experimento pretest- postest con selección aleatoria de un solo grupo |
68.89 ±9.53 años |
8.17 ±6.3 años |
323 |
HbA1c, IMC, CC, MNSI 0-10, ITB, Habilidad para autocuidado de los pies |
HbA1c: t=1.31, p=0.191 CC: t= 4.22, p<0.01 MNSI: t=3.13, p<0.01 ITB der.: t=-3.14, p >0.001 ITB izq.: t=-1.75, p=>0.001 Cuidado de los pies: 32.32 puntos (DE=6.76) vs 36.22 puntos (DE=6.95), t= -9.64, p˂0.001 |
Sin datos |
T1: Pre- intervención T2: 10 a 12 meses Post- intervención |
||
Cohen, et al. (2011) 11 |
ECA |
GI: 69.8 ± 1.07 años GC: 67.2 ± 9.4 años |
Sin dato |
50 |
49 |
HbA1c, Colesterol total y triglicéridos, SF-36, VR-36, cuestionario de actividades de autocuidado de la DM ([Toobert] cuidado de los pies); adherencia al tratamiento |
HbA1c: GI X=-0.41, p<0.001, vs GC X=-0.20, p>0.001) Cuidado de los pies: GI 1.46 días (IC= 0.75 a 2.18, p˂0.05) vs GC 0.47 días (IC=-0.16 a 1.09, p>0.05) F=48.10, p<0.001 |
Sin datos |
T1: Pre-intervención T2: 6 meses post- intervención |
|
Fu, et al. (2014) 16 |
Cuasiexperimental de un solo grupo con mediciones repetidas 70.0 ± 7.46 años |
8.8 ± 7.8 años |
29 |
No |
DKQ-24, cuestionario de actividades de autocuidado de la DM ([Toobert] cuidado de los pies) IMC, CC, glucosa en sangre (ayuno 8 horas) |
DKQ-24: F=37.78, p<0.005 Cuidado de los pies: F=48.10, p<0.005 IMC: F=0.07, p>0.005 CC: F=1.28, p>0.005 Glucosa: F=4.74, p<0.00 Sin datos |
Sin datos |
T1: Pre- intervención T2: 1.5 meses Post- intervención T3: 2.5 meses post- intervención |
||
Pieber, et al. (1995) 17 |
Ensayo controlado |
GI: 63.9 ± 8.2 años GC: 65.4 ± 6.1 años |
Sin dato |
45 |
49 |
HbA1c, IMC, evaluación podológica, conocimiento y autocuidado de DM. |
HbA1c: GI: 8.11 ± 1.55 vs GC: 9.03 ± 1.79; diferencia de medias -0.92 (IC=0.23 a 1.61, p<0.01). IMC: GI: 29.2 ±4.50 vs GC: 30.3 ± 4.90); diferencia de medias -1.08 (IC=0.28 a 1.86, p<0.01). Pies: Callos GI 78% (35) a 49% (22), p<0.001 Fisuras interdigitales GI 55% (26) a 49% (22), p<0.001 |
Sin datos |
T1: Pre- intervención T2: 6 meses Post- intervención |
|
Sharoni, et al. (2017) 18 |
Cuasi-experimental pretest y postest |
68.52 ± 4.23 años |
12 ± 12.95 años |
31 |
No |
Factibilidad y Aceptabilidad. DFSBS, FCCS; calidad de vida ante neuropatía y úlceras de pie. Valoración podológica |
Factibilidad (100% reclutamiento y retención). Aceptabilidad moderadamente alta, X=33.8, DE=4.08, DFSBS Z=-4.86, p<.001, FCCS Z=-4.76, p<0.001, Mejora en la higiene de pies p<0.05, Disminuyó anhidrosis p<0.05 |
Sin datos |
T1: Pre- intervención T2: 3 meses Post- intervención |
|
Lavery, et al. (2007) 12 |
ECA simple ciego |
GI1: 65.4 años GI2: 64.2 años GC: 65.0 años |
GI1: 13.7 ± 10.3 años GI2: 12.7 ± 9.7 años GC: 13.8 años (DE=11.5) |
G1: 59 G2: 56 |
58 |
Riesgo ulceración (IWGDF): Neuropatía (sensibilidad monofilamento SW 10 mg y vibración); ITB (Palpación y Doppler); historia ulceración de pies, deformidad ósea. |
GI2: Disminución riesgo ulceración: OR=4.48, 95%, IC 1.53–13.14) |
GC: 61% no ulceración GI1: 70% no ulceración GI2: 92% no ulceración |
T1: Pre- intervención T2: 15 meses Post- intervención |
Fuente: Elaboración propia.
nGI= 915, ngc=175, AM: Adulto mayor, GI: Grupo intervención, GC: Grupo Control, DM: diabetes mellitus, HbA1c: Hemoglobina glucosilada, IMC: Índice de Masa Corporal, CC: Circunferencia de cintura, ITB: Índice Tobillo Brazo, DEP= Desempeño de evaluaciones podológicas, MNSI= Evaluación neurológica periférica, TSS= Total para síntomas de neuropatía, SF-36, VR-36= Calidad de vida para veteranos, DKQ-24= Cuestionario de conocimiento de DM, DFSBS= Comportamientos de cuidado del pie, FCCS= Foot Care Confidence Scale, IWGDF= International World Group oof Diabetic Foot.
La duración de las intervenciones osciló de 1 a 15 meses, el número de sesiones fue de 2 a 60, el tiempo de seguimiento fue de 2.5 a 39 meses (promedio de 3.3 años). La educación predominó en todos los estudios 11-19, adicionalmente, un 11.1% colocó carteles educativos en los consultorios donde atendían a los participantes 14. Un 55.6% entregaron kit para el cuidado de los pies 11-14,18, un 11.1% combinó la educación con Tai Chi 13. Otro (11.1%) entregó la intervención mediante sesiones telefónicas 15. Hubo quien incorporó la medición de temperatura de pies con termómetro infrarrojo (11.1%) 12. Otro estudio consideró la participación de los familiares durante la intervención (11.1%) 16. Hubo quien (11.1%) entregó la intervención a través de un equipo multidisciplinario y la incorporación de la segunda hora de sesión dedicada a farmacoterapia 11. En 88.9% de los estudios los facilitadores fueron enfermeros 11-15,16-18, seguidos de educadores en DM en 44.4% 11,14,15,19, (tabla 2).
Autores |
Características intervención |
Actividades |
Calidad evidencia |
|||||
Tiempo (min) |
Frecuencia (sem) |
Duración (meses) |
Facilitador |
Contexto intervención |
GI |
GC |
||
Ahn, et al. (2012) |
60 |
2 |
3 |
Enfermeros |
Sesiones en clínica. Continuación ejercicios en casa. |
60 minutos Tai-Chi por etapas. Evaluación glicemia capilar. Motivación para continuar ejercicios en casa. Playeras, música. |
60 minutos Tai-Chi |
Media |
Boyle, et al. (2013) (Estados Unidos) |
Etapa 2: 120 Etapa3: 0 Etapa 4: 0 |
Etapa 2: 1 Etapa 3: 0 Etapa 4: 0 |
Etapa 2: 0.25 Etapa 3: 5 Etapa 4: 3 y 5 |
Master training experto en DM |
Etapa 2: Centro de salud. Etapa 3: Webinar Etapa 4: 3 y 5 meses, valoración a AM residentes instituciones. |
Etapa 2: Sesión presencial a médicos, enfermeros, farmacéuticos y cocineros de residencias AM. Etapa 3: Evaluación y entrega de reportes Etapa 4: Valoración AM residencias donde labora personal capacitado. |
No hay |
Mediana |
Caruso, et al. (2007) |
Etapa 1: Etapa 2: Etapa 3: |
Etapa 1:4 |
Etapa 1: 9 Etapa 2: 9 Etapa 3: 9 |
Enfermera, asistente médico. Educador en DM |
Etapa 1 y 2: Durante consultas en los centros de salud. Etapa 3: Llamadas telefónicas a quienes no tenían valoraciones podológicas. Continuó actividades E1 y E2. |
Etapa 1: Boletines en sala de espera sobre automanejo de la DM. Carteles en consultorios recordando quitarse los zapatos para valoración podológica Etapa 2: Pacientes recibieron folders informativos sobre automanejo de DM. Protocolo de valoración podológica en consultas. |
No hay |
Buena |
Chen, et al. (2011) |
Llamadas telefónicas 15 a 30 |
12 |
12 enfermeros (3 educadores en DM y 9 especialistas en salud pública) previamente capacitados. |
Educación en centros comunitarios de salud. Llamadas telefónicas personalizadas (un año después). |
Sesiones incluían control de la dieta, medicación, cuidado de los pies, actividad física, movimiento |
No hay |
Mediana |
|
Cohen, et al (2011) |
E1: 120 E2: 90 |
4 |
5 |
Educadores en DM, nutriólogos, enfermeros, farmacéuticos. |
Salón de sesiones (4 a 6 personas). Se incorporó a miembros de la familia. |
E1: 1 hora componentes educacionales. 1 hora apego al tratamiento E2: Necesidades del grupo |
No se realizó actividad |
|
Fu, et al. (2014) |
60 |
1 |
1.5 |
Enfermero comunitario |
Sesiones en salón de 4 a 5 participantes. Se incorporó a miembros de la familia. |
Sesiones sobre conocimiento básico DM, dieta, actividad física, automonitoreo de glucosa y cuidado de los pies, adherencia al tratamiento farmacológico. |
No hubo |
|
Pieber, et al (1995) |
90-120 minutos |
1 |
1 |
Personal de salud |
Grupos de 4 a 8 pacientes en salón. |
Información sobre DM, práctica de automonitoreo de glucosa, dieta, ejercicio, cuidado de los pies. |
Cuidado tradicional |
|
Sharoni, et al. (2017) |
Enfermeros |
Presentaciones en power point, carteles. Sesión en salón de clases con 10 a 11 participantes. |
Sesiones: autocuidado de los pies, factores riesgo pie diabético, prevención complicaciones, automonitoreo pies, higiene diaria pies, protección de los pies. Entregaron kit de cuidado de pies, listas de cotejo de enfermería. |
No hubo |
Buena |
|||
Lavery, et al. (2007) |
Sin dato |
G1: 1 vez cada 8 semanas G2: dos veces al día |
15 |
Enfermeros médicos |
Sesiones grupales y seguimiento en el hogar. G3: Consultaba a enfermeros sobre dudas y detección de anomalías durante la intervención. |
G2: Terapia estándar y capacitación valoración estructurada de los pies. Recibieron bitácora de auto inspección y espejo G3: Terapia estándar y capacitado para usar termómetro infrarrojo digital. Recibieron bitácora de autoinspección y termómetro de luz infrarroja |
G1: Valoración podológica, sesiones educativas prácticas autocuidado y complicaciones pie. Participantes recibieron podómetro. |
Buena |
Fuente: Elaboración propia.
AM: Adulto mayor, GI: Grupo intervención, GC: Grupo Control, G: Grupo, E: Etapa, G1: Grupo 1, G2: Grupo 2, G3: Grupo 3.
Calidad de la evidencia: Respecto a la calidad de la evidencia, un 44.4% de los estudios mostraron tener alta calidad de evidencia 12,14,17-18, en éstos, la evaluación del riesgo quedó clasificado entre bajo riesgo de sesgo y riesgo de sesgo poco claro. Los restantes (55.6%) se clasificaron de mediana calidad 11,13,15-16,19, porque en alguno de los criterios evaluados presentó alto riesgo de sesgo, (Figura 2).
Discusión
En atención al objetivo de esta revisión sistemática que fue explorar las características de las intervenciones de salud más efectivas para la prevención de PD en AM con DM se encontró lo siguiente: la mayoría de las intervenciones se enfocaron a la educación sobre el cuidado de los pies y solamente uno incluyó mejora en el riesgo de PD (fisuras en pies, callosidades y síntomas de neuropatía). Esto refleja que la educación y el conocimiento del cuidado de los pies (higiene, hidratación, monitoreo, descanso) es crítico en la prevención de PD, sobre todo en personas con presencia de neuropatía o pérdida de sensibilidad en los pies 20.
Casi la totalidad de las intervenciones utilizaron sesiones educativas sobre cuidado de los pies y/o entrega de kits para el cuidado. Más de la mitad mostraron que los participantes incrementaron el cuidado de los pies. En ese sentido la higiene e hidratación de los pies disminuyen lesiones por resequedad de la piel y la monitorización diaria de los pies alerta sobre cambios y lesiones (color y temperatura de la piel, grietas, entre otros) 21,22. Sin embargo, los estudios no reportan disminución de lesiones.
La educación sobre el cuidado de los pies en pacientes con DM se reportó que fue efectiva tanto en la entrega de material informativo 12-14,18 escrito como de sesiones presenciales 11-13,15-19 o combinadas 12,13,18. Ambas modalidades implicaron retroalimentación en forma presencial o vía telefónica, respectivamente. Al parecer tanto el material informativo como la orientación y demostración presencial acompañadas de retroalimentación ayudan a que los participantes realicen con mayor frecuencia el cuidado de los pies 23. Tal vez el material escrito constituye una guía que el participante puede revisar o consultar en el momento y cuantas veces lo requiera. Las sesiones educativas ofrecen la oportunidad al participante de observar procedimientos, plantear sus dudas, esto puede deberse a que los materiales educativos son un instrumento para guiar el aprendizaje a través de la educación 23. La educación, es una herramienta primordial en el cuidado, promoción y restablecimiento de la salud 24.
Adicionalmente, poco más de la mitad de los estudios 11-14,18 entregaron kits para el cuidado de los pies como estrategia que facilitó el proceso de mejora del cuidado de los pies. Esto sin duda es relevante para los pacientes de escasos recursos o de mayor edad que tienen dificultad para conseguir los aditamentos para el cuidado de sus pies, además de que previene excusas para no hacerlo. Sin embargo, los estudios que entregaron kits, salvo uno de ellos 12 señalaron que sirvió como motivador para la monitorización de los pies, el resto no señaló ventajas de dicha entrega.
Respecto a los resultados primarios, casi todos los estudios observaron mejora en los resultados de HbA1c 11-13,15-18, resultados críticos en la irrigación y sensibilidad de los pies lo que a su vez minimiza el riesgo de PD. La hiperglucemia afecta la función del endotelio, esto reduce la calidad de óxido nítrico que se produce, lo que incrementa la vasoconstricción endotelial que se manifiestan en vasculopatía endotelial. Estas lesiones en miembros inferiores afectan el flujo sanguíneo al grado de hipoxia y deterioran la fibra nerviosa (neuropatía diabética) manifestada por alteración de la sensibilidad a las vibraciones, temperatura y dolor 25.
El número de sesiones, el periodo de la intervención y el tiempo de seguimiento fue variado entre los estudios. La intervención y seguimiento más largos correspondieron a los ECA. La mayoría de los estudios fueron estudios cuasiexperimentales, por no contar con aleatorización o grupo control, por lo que fueron evaluados como estudios con mediano riesgo de sesgo.
Sólo en un estudio (16 se consideró la participación de los familiares en las sesiones de intervención, la incorporación de los familiares en las intervenciones sobre cuidado y educación para la salud permite el progreso positivo de los familiares con enfermedades crónicas frente a la enfermedad, además de constituir redes de apoyo 24.
No fue posible tomar una decisión respecto a la mejor intervención para prevenir PD, debido a la mediana calidad de los estudios seleccionados. Sin embargo, se identificaron elementos para el desarrollo de un programa de intervención de prevención de PD: periodo de intervención durante al menos dos meses de educación sobre cuidado de los pies con la inclusión de un cuidador familiar; entrega de materiales o kits para facilitar el cuidado de los pies y la valoración de las condiciones de salud como control de la HbA1c, presencia de neuropatía sensitiva, de enfermedad arterial periférica y estado de los pies.
Conclusiones
Al explorar las características de las intervenciones de salud más efectivas para la prevención del PD en AM con DM, se puede concluir que las intervenciones revisadas como más efectivas fueron las que incluyeron educación y conocimiento sobre el cuidado de los pies, seguimiento telefónico, material impreso y materiales (kits) para el cuidado de los pies. La HbA1c fue el indicador fisiológico más usado para determinar el control glucémico. El nivel de riesgo de PD sólo fue medido en uno de los estudios. Así como la incorporación del cuidador o familiares en la intervención. La calidad de la evidencia según el riesgo de sesgo fue mediano por lo no fue posible determinar cuál fue la mejor intervención para prevenir pie diabético.