Introducción
Con frecuencia se han reportado actitudes y comportamientos negativos o de evasión hacia las personas mayores. El término ageism, en un sentido amplio es considerado como estereotipo, prejuicio o discriminación. Dichas actitudes pueden deberse a las experiencias observadas en otros profesionales y por el tipo de preparación recibida durante su formación universitaria 1-2. La actitud es un sentimiento positivo o negativo de un objeto social, el cual puede ser una persona o un hecho. Generalmente se ve influenciada por diversas causas que están relacionadas con las experiencias, creencias y relaciones pasadas, acumulados a lo largo de la vida de cada individuo. De acuerdo con la psicología social, la actitud es un predictor de la conducta y por lo general son las actitudes negativas las que afectan más a las personas adultas mayores 3.
Las actitudes negativas pueden reflejarse en malos tratos, gestos, rechazo, baja comunicación, restricción terapéutica, discriminación, entre otras cosas lo que trae como consecuencia desconfianza, rechazo al tratamiento, depresión, aislamiento, inseguridad, baja autoestima, cambios en horario, prescripción, dosis, incluso creer más en opiniones de terceros y con ello disminuir la calidad de vida 3-4. Podría ser que la preparación adecuada para el cuidado y comprensión de adultos mayores represente un área de oportunidad para la construcción de actitudes positivas hacia el envejecimiento 5. La mayoría de los estudiantes universitarios del área de ciencias de la salud estarán en contacto o trabajarán en su etapa laboral con adultos mayores, por lo cual es de vital importancia prepararlos adecuadamente para mejorar sus habilidades, conocimientos, aptitudes y actitudes con el propósito de brindar atención y cuidados de calidad 4. El aprendizaje sobre el cuidado y atención al adulto mayor se desarrolla principalmente con el contacto, la convivencia e interacción de las personas a las que se cuida. Para ello es necesario tener preparación, sensibilización y desarrollar el pensamiento crítico 6.
El predominio de imágenes negativas, generalizadas y proyectadas sobre la vejez reportado en universitarios 7-9 podría estar afectando las perspectivas de bienestar de los adultos mayores actuales y futuros en un contexto creciente de envejecimiento poblacional y aumento de las expectativas de vida. Además de incrementar la demanda de servicios de salud en los tres niveles de atención, el envejecimiento poblacional mundial requiere personal sensibilizado y preparado para brindar un trato digno, respetuoso, cálido, amigable que este encaminado a mejorar la calidad de vida del adulto mayor 10. En México, sólo se ha encontrado un acercamiento al estudio de las actitudes y percepciones en mujeres mexiquenses 11. Aún debe aclararse si existen diferencias al respecto del envejecimiento masculino y el envejecimiento femenino; además, resulta de interés conocer si la percepción de las estudiantes del sexo femenino es similar a la percepción de los hombres. Ante la falta de reportes acerca de las actitudes hacia el adulto mayor de este colectivo y considerando las posibles diferencias por sexo al respecto de la percepción del envejecimiento. Se propuso analizar por sexo las actitudes y percepciones hacia el envejecimiento femenino y masculino en estudiantes de un programa de licenciatura en enfermería en Zacatecas, México.
Metodología
Enfoque cuantitativo, descriptivo, con análisis de comparación según el sexo de los participantes. La población de estudio estuvo representada por 310 estudiantes universitarios del programa de licenciatura en enfermería adscritos a una materia optativa de capacitación para la atención profesional de adultos mayores durante el semestre enero-junio 2020. Se convocó a toda la población sin aplicar técnicas de muestreo. Se incluyó a quienes aceptaron participar de manera voluntaria en el estudio mediante la autorización con el consentimiento informado. Se eliminaron los datos de participantes con datos incompletos. Se consideraron datos personales como sexo, edad, estado civil, convivencia habitual y características de la convivencia con adultos mayores (conocimientos o experiencia previa).
Se aplicó la escala de actitudes hacia el adulto mayor de Kogan desarrollada en base al paradigma teórico “perspectiva cuasi minoritaria de los adultos mayores” 12, sustentada en la premisa de que los adultos mayores comparten similitudes y diferencias con otros grupos minoritarios que a menudo enfrentan prejuicios y discriminación basada en características estereotípicas. Consta de 34 enunciados, 17 de forma positiva y 17 de forma negativa. Tiene opción de respuesta tipo Likert que va desde muy en desacuerdo hasta muy de acuerdo en seis opciones de respuesta. El puntaje mínimo es 34 y el máximo 204, en donde a mayor puntuación, más positiva es la percepción hacia el adulto mayor. Para la evaluación, los ítems negativos deben recodificarse para cuantificarse de manera inversa y se consideran tres categorías a partir de la puntuación por participante: actitud negativa si la sumatoria es <103; neutral = 104; y actitud positiva >104. El cuestionario ha demostrado una consistencia interna de 0.66 a 0.83. Se ha realizado la validación idiomática al castellano y empleado en población española, demostrando confiabilidad satisfactoria con Alpha de Cronbach de 0.82 3. En esta muestra se obtuvieron valores aceptables de confiabilidad (ɑ=.70 a .75) y validez con el coeficiente Kaiser Meyer-Olkin=.705.
También se utilizó el cuestionario diferencial semántico de Osgood, mide la percepción hacia el envejecimiento 13 considera que el concepto adulto mayor adopta un significado connotativo de estímulos visuales y verbales a partir de adjetivos bipolares que van de la opinión positiva a la negativa y otras preguntas que van de negativo a positivo. Consta de 16 adjetivos con puntuación mínima de uno considerada como menos favorable con 0% y máxima de 7 considerada favorable al 100%. El instrumento ha sido utilizado en población mexicana demostrando una confiabilidad de 0.83 4. En esta muestra la confiabilidad y validez fue buena para ambos tipos de envejecimiento (envejecimiento femenino ɑ=.82, KMO=.827; masculino ɑ=.84, KMO=.853). Se solicitó a los participantes que respondieran el cuestionario dos veces, primero para evaluar la percepción hacia el envejecimiento masculino y después, hacia el envejecimiento femenino.
El proyecto se registró en la Coordinación de Investigación de la Facultad de Organización Deportiva (REPRIN-FOD-61), y se obtuvo permiso de las autoridades de la Universidad. Posteriormente se invitó a los estudiantes a participar mediante el envío de una encuesta digital por medio del correo institucional y personal, la cual incluía al inicio el consentimiento informado, si el estudiante deseaba participar otorgaba su consentimiento de forma voluntaria y continuaba con el llenado del formulario que incluía cédula de datos, escala de Kogan y Cuestionario diferencial semántico de Osgood.
Los datos se procesaron con el paquete estadístico Statistical Product and Service Solutions (SPSS) versión 21.0 con estadística descriptiva a través de promedio, desviación estándar y pruebas de estadística inferencial con análisis de distribución de datos y prueba U de Mann Whitnney. El valor alfa considerado fue .05.
Resultados
Participaron 262 estudiantes, promedio de 21.4 años (DE=2.87), un 70.6% del sexo femenino. El 87.4% refirió ser soltero y un 89.3% señaló vivir con su familia, mientras que un 5.3% vivía solo. El 54% nunca había estado en un curso de capacitación formal sobre la atención a población adulta mayor y el 72.9% convivía de manera habitual con algún adulto mayor (padre o madre).
Se consideró que el 93.9% de la muestra tenía actitud positiva hacia el adulto mayor (puntaje >105), el 6.1% restante se clasificó con actitud negativa, no se observaron diferencias según sexo, (Tabla 1).
Participantes | Actitudes | Media | DE | Mínimo | Máximo |
Todos (n=262) | Positivas | 62.5 | 8.9 | 37.0 | 98.0 |
Negativas | 67.1 | 9.3 | 24.0 | 90.0 | |
Sumatoria | 123.7 | 13.9 | 45.0 | 161.0 | |
Mujeres (n=185) | Positivas | 62.4 | 7.9 | 42.0 | 86.0 |
Negativas | 679 | 8.5 | 36.0 | 90.0 | |
Sumatoria | 124.5 | 10.9 | 89.0 | 159.0 | |
Hombres (n=77) | Positivas | 62.7 | 10.8 | 37.0 | 98.0 |
Negativas | 65.5 | 10.9 | 24.0 | 90.0 | |
Sumatoria | 121.8 | 19.3 | 45.0 | 161.0 |
Fuente: Elaboración propia
Rango de sumatoria= 34-204.
En la tabla 2 se exponen las puntuaciones referidas para cada una de las categorías del cuestionario diferencial semántico de percepciones de Oswood. En relación con el envejecimiento femenino, en promedio las mujeres puntuaron con valores más altos que reflejaron percepciones más negativas que los hombres al respecto de las categorías productiva-improductiva, saludable-enfermiza, tolerante-intolerante, eficiente-ineficiente, tratable-intratable, ciudadano activo-no activo, integrado-marginado, confiado-desconfiado y valorado-desvalorado.
Percepción | Envejecimiento masculino | Envejecimiento femenino | ||||||||
Hombres (n=77) | Mujeres (n=185) | Hombres (n=77) | Mujeres (n=185) | |||||||
Media | DE | Media | DE | p | Media | DE | Media | DE | p | |
Independiente-dependiente | 4.2 | 1.5 | 3.8 | 1.5 | 4.1 | 1.6 | 4.4 | 1.3 | ||
Productivo-improductivo | 3.6 | 1.3 | 3.3 | 1.3 | 3.6 | 1.5 | 3.5 | 1.3 | ||
Saludable-enfermizo | 4.3 | 1.3 | 3.8 | 1.4 | 4.3 | 1.3 | 3.9 | 1.2 | ||
Tolerante-intolerante | 4.1 | 1.4 | 3.9 | 1.3 | * | 3.4 | 1.3 | 3.4 | 1.3 | * |
Eficiente-ineficiente | 3.6 | 1.2 | 3.3 | 1.1 | 3.5 | 1.3 | 3.3 | 1.1 | ||
Resistente-Frágil | 3.9 | 1.4 | 3.7 | 1.5 | * | 4.40 | 1.6 | 4.5 | 1.4 | * |
Tratable-intratable | 4.6 | 1.5 | 4.3 | 1.3 | 4.9 | 1.3 | 4.6 | 1.2 | ||
Ciudadano activo-pasivo | 3.8 | 1.4 | 3.7 | 1.3 | * | 4.3 | 1.2 | 4.2 | 1.42 | * |
Protegido-Desamparado | 3.8 | 1.5 | 3.3 | 1.2 | * | 3.6 | 1.6 | 3.2 | 1.3 | * |
Sexualmente activo-no activo | 5.0 | 1.5 | 4.9 | 1.6 | 5.79 | 1.47 | 5.5 | 1.5 | ||
Hábil-Torpe | 3.5 | 1.3 | 3.3 | 1.2 | 3.25 | 1.22 | 3.4 | 1.2 | ||
Integrado-Marginado | 3.7 | 1.3 | 3.4 | 1.4 | 3.51 | 1.32 | 3.3 | 1.3 | ||
Confiado-Desconfiado | 4.2 | 1.6 | 3.7 | 1.4 | 4.12 | 1.5 | 3.6 | 1.4 | ||
No conflictivo-Conflictivo* | 3.8 | 1.4 | 4.0 | 1.3 | * | 3.3 | 1.4 | 3.5 | 1.3 | * |
Sociable-Retraído | 3.5 | 1.4 | 3.5 | 1.5 | 3.3 | 1.3 | 3.3 | 1.5 | ||
Valorado-Desvalorado | 3.5 | 1.5 | 3.4 | 1.4 | 3.5 | 1.7 | 3.3 | 1.6 |
Fuente: Elaboración propia
Se revisaron las puntuaciones por tipo de envejecimiento (femenino o masculino) y se identificó que siete percepciones presentaron diferencia de significancia estadística (p<.05) al comparar los resultados según sexo, (Tabla 3).
Tipo de envejecimiento/percepción | U de Mann-Whitney | Z | P |
Femenino | |||
Tratable-intratable | 6002.000 | -2.075 | .038 |
Sexualmente activo-no activo | 6030.500 | -2.042 | .041 |
Confiado-Desconfiado | 5753.000 | -2.505 | .012 |
Masculino | |||
Saludable-enfermizo | 5795.000 | -2.448 | .014 |
Eficiente-ineficiente | 6057.500 | -1.972 | .049 |
Protegido-Desamparado* | 5393.000 | -3.182 | .001 |
Confiado-Desconfiado | 5813.500 | -2.395 | .017 |
Fuente: Elaboración propia
*En estas categorías el orden original de la escala ha sido invertido para la uniformidad en la presentación de los resultados.
En análisis comparativos acerca del antecedente de conocimientos sobre gerontología o capacitaciones formales previas y se encontraron diferencias en tres percepciones. La percepción saludable-enfermizo presentó diferencias tanto para el envejecimiento femenino como para el masculino con valores menores entre quienes reportaron capacitación previa versus quienes no (120.4 vs 140.8 y 120.6 vs 140.6, p=.03). Las otras dos percepciones que representaron diferencias fueron tolerante-intolerante e integrado-marginado en referencia al envejecimiento femenino con valores menores en quienes reportaron capacitación previa (117.2 vs 143.5 y 119.5 vs 141.5, p=.02).
Al revisar las diferencias entre quienes reportaron convivencia habitual con algún adulto mayor y quienes no, la percepción de envejecimiento femenino al respecto de resistente-frágil se destacó con puntuación menor reportada por quienes convivían con adultos mayores (125.1 vs 148.6, p=.02). Además, en relación con el envejecimiento masculino destacaron diferencias en la percepción de sexualmente activo-inactivo con puntuación más alta entre quienes tenían convivencia con adultos mayores (138.0 vs 113.9, p=.02).
Discusión
Este estudio tuvo como propósito analizar por sexo las actitudes y percepciones hacia el envejecimiento femenino y masculino en estudiantes de un programa de licenciatura en enfermería. Mas de dos tercios los participantes eran mujeres, similar a lo encontrado en estudios realizados con estudiantes de enfermería, que refirieron que la pertenencia de género en la carrera de enfermería es femenina 14-15. Los resultados de la presente investigación muestran que la mayoría de los sujetos del estudio mostraron una actitud positiva hacia el envejecimiento, comportamiento similar a publicaciones realizadas en otros países 8,9,16, sin embargo, este hallazgo difiere de Medina-Fernández 15) quien encontró que poco más de una cuarta parte de su población mostró una disposición aceptable hacia el envejecimiento, donde se justifica que a mayor grado de carrera la actitud se vuelve más positiva. En esta investigación, los resultados sobre tener una actitud positiva hacia el envejecimiento pueden deberse a la convivencia habitual con algún adulto mayor ya sean padres o abuelos 16. En los análisis comparativos se presenta evidencia de diferencias que sugieren la utilidad de la capacitación previa sobre gerontología para tener una visión más positiva sobre las percepciones saludable-enfermizo, tolerante-intolerante e integrado-marginado; además, la convivencia habitual con adultos mayores pareciera también ejercer una influencia positiva sobre la percepción de saludable-enfermizo.
El tema de la sexualidad difiere de la narrativa anterior. En esta muestra los participantes que reportaron convivencia habitual con adultos mayores presentaron una percepción más negativa a este respecto que quienes carecen de ese tipo de convivencia. Esto concuerda con algunas investigaciones que refieren actitudes negativas de las generaciones jóvenes hacia la sexualidad en la vejez 17-19. De acuerdo con Cremona et al. 19 la visión prejuiciosa sobre la sexualidad en la vejez puede ser resultado del control social y político de la expresión sexual que impide vivir la sexualidad con satisfacción, tranquilidad y libertad. Se considera que la educación puede favorecer la apertura hacia considerar la actividad sexual como un aspecto más de la expresión de la plenitud que puede disfrutarse de distintas formas durante el envejecimiento.
Aunque en proporción baja, hay estudiantes que presentarnn actitudes y estereotipos negativos hacia la población adulta mayor, las actitudes negativas hacia adultos mayores en estudiantes han sido atribuidas a falta de conocimiento y sensibilidad para el cuidado de adultos mayores 4,20-21. Por otra parte, se argumenta que en estudiantes y profesionales de la salud las actitudes hacia el envejecimiento cambian a ser más positivas conforme aumenta la convivencia con personas de edad mayor 15, En particular el estudio de McCarthy 22 menciona que los estudiantes de medicina cambiaron la percepción de positiva a negativa cuando hacían rotaciones prácticas en el departamento de geriatría. Dada la población de estudio, que ejercerá una profesión en constante contacto con individuos en todas las etapas de la vida, este hallazgo es algo que debe considerarse para realizar acciones en donde se modifique dicha actitud ya que ésta puede reflejarse en la atención y el trato inadecuado (3-4. En tiempos de pandemia encontrar actitudes negativas, en futuros profesionales de salud, resulta preocupante, ya que los adultos mayores son considerados una población altamente vulnerable al contagio de Covid-19 y muchos de ellos requieren atención hospitalaria brindada de manera directa por personal de enfermería 23.
Cultivar actitudes positivas en estudiantes del área de la salud es un área de oportunidad para los programas educativos universitarios. Pudiera considerarse el realizar intervenciones que cimenten actitudes positivas hacia el cuidado de los adultos mayores 5, bajo diferentes teorías como la constructivista o juegos de roles 14,24 donde creen experiencias optimistas que incrementen la empatía y actitudes positivas en jóvenes con una baja actitud. A pesar de que, en los estudios citados, los sujetos presentaban actitudes positivas desde las mediciones basales, la participación en intervenciones logró incrementar la actitud positiva después de la intervención e inclusive, dos meses después de la intervención. Por tanto, intervenciones similares pudieran tener un impacto en aquellos estudiantes que reflejaron actitudes negativas, para preparar profesionales de enfermería sensibilizados, aptos para tratar y cuidar a los adultos mayores 10.
Respecto a las percepciones hacia el envejecimiento femenino y masculino, los análisis de comparación mostraron que fueron las mujeres estudiantes quienes percibieron más aspectos negativos que los estudiantes varones, resultado que no se esperaba encontrar debido a que las mujeres son caracterizadas por ser más comprensivas, maternales, tolerantes y de brindar mayor servicio de cuidado 4. Este aspecto debe ser analizado en futuros estudios, porque sigue siendo un dato en el que no hay concordancias en los estudios, Yang, reportó que la comparación por sexo en cuanto a la percepción del envejecimiento no mostró diferencias significativas 25, por otra parte, Ruiz mostró que las mujeres reportaban menos actitudes negativas que los hombres 26. Los resultados de este trabajo se limitan a las características de la muestra de estudio, debido al diseño descriptivo trasversal no es posible identificar la influencia de factores como el avance en la formación académica y la experiencia laboral sobre las actitudes hacia el envejecimiento.
Las actitudes negativas, se relacionan a diversos factores como los culturales, religiosos, entre otros; así mismo el envejecimiento se asocia con padecer más patologías, limitaciones físicas, pérdida de los sentidos, entre otras características negativas 4. Con base a esta argumentación, en este estudio, las mujeres percibieron más negativo el envejecimiento masculino que el femenino, a este respecto se sugieren más estudios para identificar no solo las percepciones y actitudes hacia el envejecimiento, si no, los motivos de dichas percepciones, para tener una base fundamentada de la raíz del problema. Las intervenciones que buscan el cambio de percepciones, actitudes y estereotipos pueden tener mayor eficacia si son diseñadas considerando las motivaciones que dan lugar a los estereotipos.
Conclusiones
Los participantes en su mayoría fueron mujeres, en cuanto a las actitudes hacia el envejecimiento la mayoría de los participantes mostraron actitudes positivas. Este dato es relevante debido a que el objetivo principal de la profesión de enfermería es el cuidado en todas las etapas de la vida, el tener una actitud positiva hacia el envejecimiento, siendo esta una de las etapas considerada con más estereotipos negativos, indica que la atención a este grupo etario sea de calidad. En cuanto a la sexualidad, se observó mayor negatividad en aquellos estudiantes que tienen convivencia con algún adulto mayor. No se observó diferencia estadísticamente significativa entre estudiantes hombres versus mujeres respecto a la actitud hacia el envejecimiento. En cuanto al envejecimiento femenino y masculino, los estudiantes varones mostraron más actitudes positivas que las estudiantes mujeres.