Introducción
Los cítricos son frutas de gran interés comercial por sus diversos usos: nutricional (vitamina C), estético, ambiental y ecológico lo cual ha permitido el desarrollo socio-económico de la población (Mohammed, Malchoul y Bousissa, 2018; Nandita, Kundu, Rani, Khatoon y Kumar, 2020). La producción mundial de cítricos (limones y limas) alcanzó 21.3 millones de toneladas (Mt) cuyos principales productores son: La India con 3.7 Mt, México 2.8 Mt, China 2.6 Mt, Argentina 1.8 Mt, Brasil 1.5 Mt (FAO, 2020).
La lima ácida (Citrus aurantifolia Swingle), conocida tradicionalmente en Perú cómo limón sutil tiene una gran importancia en las agroexportaciones, medicina tradicional y en la gastronomía peruana. Este cultivo, es un cítrico que pertenece a la familia Rutácea y es originario de Asia desarrollándose en regiones subtropicales y tropicales (Nandita et al., 2020) y se introdujo en América en el siglo XVI (Maroto-Borrego, 2014).
En Perú, el limón sutil es el cítrico de mayor interés comercial con una producción 335 mil toneladas (mt) en el año 2021, siendo Piura la principal región productora con 183 mt seguida de Tumbes con 59.3 mt, Lambayeque 44.7 mt, Ucayali 17.2 mt y Loreto con 11.3 mt (SIEA, 2022). Los principales mercados de destino de esta fruta son: Chile con un 79%, seguido de Panamá, Inglaterra, Países Bajos y Estados Unidos (SENASA, 2021). Sin embargo, el cultivo se desarrolla bajo una agricultura convencional en la región Piura, dependiente de los diferentes fertilizantes sintéticos existentes en el mercado, los cuales han experimentado en el último año un incremento exponencial de sus precios a nivel nacional e internacional (Gestión, 2021). Además, los fertilizantes convencionales han ocasionado la contaminación de los recursos naturales como: “aire, agua y suelo” (Abobatta, 2020; Aguilar-Anccota, Arévalo, Morales y Galecio, 2021; Dries, Hendgen, Schnell, Löhnertz y Vortkamp, 2021). En este sentido, el uso de abonos orgánicos elaborados a partir de insumos o desechos o residuos orgánicos son una alternativa sostenible al uso de fertilizantes químicos en la agricultura a pequeña, mediana y gran escala. Los insumos o abonos orgánicos sólidos (compost, humus, bocashi) y líquidos (biofertilizantes, té de humus) mejoran las propiedades físicas, químicas y biológicas del suelo donde las interacciones planta-suelo-microorganismo se ven muy favorecidas, aumentan la actividad microbiana y la predisposición constante de macro y micronutrientes dando como resultado el incremento de la producción (Abdel-Hafiz, Abdel, Amin y Ibrahim, 2016; Ruiz, 2018). Medeiros y da Silva (2006) y Galecio et al. (2023) indican que aplicaciones foliares de biofertilizante orgánico líquido, conocido comúnmente en nuestra región como biol, aportan macro y micronutrientes, ácidos húmicos y fúlvicos, generando efectos importantes en el desarrollo y crecimiento de las plantas. Por otro lado, aplicaciones foliares de biofertilizantes líquidos entre el 5% y 10% tienen un efecto nutricional en la planta; mientras que concentraciones entre 10 y 20% tienen un efecto “fungicida, bactericida e insecticida” (Vairo-Dos Santos, 1992).
Asimismo, aplicaciones constantes de estos productos tienen un efecto repelente sobre insectos plagas (Medeiros y da Silva, 2006). Por otro lado, Abobatta (2020) indica el efecto e importancia del uso del biofertilizante, incrementa la producción de los cítricos mediante la fijación de nitrógeno, solubilización de fósforo, potasio, mayor disponibilidad de elementos esenciales, producción de fitohormonas, la activación de los mecanismos de resistencia de la planta hacia las plagas, fertilidad y salud del suelo, y protección del medio ambiente. En huertos de cítricos, la práctica de una fertilización orgánica pone a disponibilidad nutrientes en forma ecológica mejorando la producción del cultivo, la resistencia de la planta a estrés biótico o abiótico, incrementando el margen de ganancia de los agricultores, mejoran las propiedades del suelo, incrementa y estimula la población microbiana en la rizósfera, cuida y conserva los recursos naturales (Abobatta y El-Azazy, 2020)
La presencia de microorganismos como: algas, bacterias y hongos, tienen una gran afinidad con la rizósfera de las plantas. Los microorganismos entre ellos: bacterias (Bacillus y Streptomyces) y hongos (Trichoderma) han sido encontrados de forma natural en la rizósfera en viñedos, los cuales tienen un efecto inhibitorio frente a patógenos en uva de mesa (Morales-Pizarro et al., 2022a).
Ge, Zhu y Jiang (2018) mencionan que la fertilización convencional influye en forma directa e indirecta sobre las propiedades físicas, químicas y biológicas, y por consiguiente en la producción del cultivo. Asimismo, Abobatta y El-Azazy (2020) indican que la existencia de una relación directa entre el contenido de materia orgánica y la productividad de los cítricos. El uso de fertilizantes orgánicos reduce el uso de agroquímicos y mantiene los recursos naturales en el cultivo de naranjo (Citrus sinensis L.) en Valencia-España, incrementado el número de frutos/árbol, el rendimiento, peso de los frutos, zumo de fruta, vitamina C (El-Badawy, 2017). Los biofertilizantes tienen un papel importante en la productividad de los cítricos, pueden reducir los costos de producción, mejorar la rentabilidad del cultivo, permite obtener frutos inocuos, recuperar la salud del suelo y el cuidado del medio ambiente (Arber et al., 2016). Por esta razón, el objetivo planteado fue “evaluar el efecto de diferentes dosis de biofertilizantes y su correlación en los parámetros productivos y calidad de limón sutil”.
Materiales y Métodos
El estudio se realizó durante el 2016-2017 en la localidad de Tambogrande en el “Valle de San Lorenzo”- Piura - Perú; 4° 55’ 33” S, 80° 20’ 40” O, a una altitud 69 m de altitud; con temperatura máxima de 30.4 °C y una temperatura media de 23.9 grados centígrados.
Análisis fisicoquímico del suelo
Se realizó el análisis de fisicoquímico del suelo en el “Laboratorio de Suelos de la Universidad Nacional de Piura”, el cual presento una textura: arena (45%), limo (36%), arcilla (19%); pH (1:2.5) 7.51; carbonato de calcio CaCO3 2.53%; materia orgánica 2.18%; conductividad eléctrica 0.18 dS m-1; nitrógeno 0.06%; fósforo 12 mg kg-1; potasio 210 mg kg-1 y C.I.C (capacidad de intercambio catiónico) 10.88 meq 100 g-1, determinando de esta manera las características del suelo en el campo de estudio.
Preparación de biofertilizante
Se usó la metodología de Galecio, Arteaga, Rojas y Peña (2021) con modificaciones en este estudio empleando un cilindro de 200 L capacidad en donde se introdujo un saco de estiércol fresco de vaca de 25 kg, hojas cortadas a 2×2 cm conformado por plantas de la zona: tártago o higuerilla (Ricinus communis) 3 kg, floripondio (Brugmansia arborea) 3 kg, altamisa (Ambrosia peruviana) 5 kg, neem (Azadirachta indica) 4 kg; asimismo, se incorporó: cáscara de huevo 0.5 kg, ajo (Allium sativum) 4 kg, cebolla (Allium cepa) 4 kg y ají (Capsicum annuum) 4 kg previamente trituradas, harina de pescado 0.5 kg, chicha de jora 2 L y panela (chancaca) 2 kg. Posteriormente, se llenó con agua de pozo hasta 10 cm del borde del cilindro y se cerró herméticamente durante 30 días.
Análisis del biofertilizante
Se realizó el análisis químico del biol en el “Laboratorio de Análisis de Suelos, Plantas, Aguas y Fertilizantes de la Universidad Agraria la Molina, Lima - Perú” obteniéndose: pH de 5.90; conductividad eléctrica CE (dS m-1) 18.50; materia orgánica (g L-1) 8.89; N total (mg L-1) 665.4; P total (mg L-1) 14.5; K total (mg L-1) 750; Ca total (mg L-1) 1628; Mg total (mg L-1) 315; Na total (mg L-1) 2120; ácidos húmicos % (p/v) 0.004; ácidos fúlvicos % (p/v) 0.058; huminas % (p/v) 0.22; relación C/N 7.74. El análisis microbiológico del biol se realizó en el “Laboratorio de Sanidad Vegetal de la Universidad Nacional de Piura (UNP)” dando como resultado: Bacterias (Bacillus-Gram positivas) 4.10×106 ufc mL-1 (ufc-unidades formadoras de colonia); Hongos 2.20×104 ufc mL-1 y levaduras 6.50×105 ufc mL-1.
Proceso y tratamientos del estudio en campo
Se seleccionaron plantas uniformes en producción de limón sutil injertadas sobre patrón limón rugoso (Citrus aurantifolia /Citrus Jambhiri Lushington) de cinco años de edad, sembradas a 9 m × 8 m. En las plantas seleccionadas se evaluaron los tratamientos: T0 (testigo: manejo convencional), T1 (biofertilizante 10%), T2 (biofertilizante 20%) y T3 (biofertilizante 30%). Durante la cosecha se escogieron 20 frutos al azar por planta, y se evaluaron los siguientes parámetros: 1) productivos: diámetro del fruto (DF) en cm, grosor de cáscara (GC) en cm, peso del fruto (PF) en g y rendimiento por ha (RHa) en Mg ha-1 y 2) calidad: acidez (AD), porcentaje de sólidos solubles (PSS), pH, zumo o jugo de limón (ZL) en m L-1. Las aplicaciones foliares de los tratamientos se realizaron cada 15 días, entre cosecha y cosecha (4 meses), realizando un total de 8 aplicaciones y 3 cosechas consecutivas a los 120, 130 y 140 días después de la primera aplicación de los tratamientos. Cabe mencionar que Piura posee un clima tropical y seco por lo que se puede apreciar diferentes estados fenológicos en un mismo tiempo, como: brotación, floración y fructificación. Se realizó un diseño en bloques completos al azar (DBCA) con cuatro tratamientos distribuidos en tres bloques y ocho plantas por unidad experimental con un total de 96 unidades experimentales.
Análisis estadístico
Los datos obtenidos se analizaron con los softwares estadísticos “IBM SPSS Statistics (versión 25)” (IBM SPSS Statistics, 2017) y “R-studio (versión 4.2.1)” para Windows 10 (R Core Team, 2020), determinando si estos cumplían “los criterios de pruebas de normalidad (Shapiro-Wilk), homogenidad de varianzas (levene) y correlación (Pearson)”.
Posteriormente, las medias de los tratamientos fueron analizados mediante un Análisis Multivariado de Componentes Principales (ACP) representado en el gráfico Biplot (Reyes-Pérez, Enríquez, Ramírez, Rodríguez y Rivero, 2019), para determinar la relación de las variables y los tratamientos en los diferentes parámetros evaluados. Además, se realizó un “análisis de varianza” (ANOVA), y la prueba de comparación múltiple de medias de Tukey (p-value < 0.05).
Análisis económico
En el análisis económico de la investigación, se calculó la rentabilidad (Samuelson y Nordhaus, 2009) mediante la fórmula: Cp = P×I, dónde Cp son “los costos de producción”, P es “el precio de la actividad o insumo”, y I es “la actividad o insumo”; IT=Pp×R, dónde IT son “los ingresos totales”, Pp es “el precio del producto”, y R es “el rendimiento del cultivo”; Be= IT-Cp, donde Be es “el beneficio o utilidad”. Además, se calculó “la rentabilidad con la relación Beneficio/Costo, mediante la expresión Be/C=IT/Cp” (Díaz-Franco, Alvarado, Alejandro y Ortiz, 2017).
Resultados y Discusión
Análisis de correlación cuantitativa
En los resultados obtenidos en el análisis de correlación con “Pearson” se hallaron correlaciones positivas y negativas con diferencias altamente significativas (P ≤ 0.001) entre los ocho parámetros evaluados en el estudio realizado en el cultivo de limón en Tambogrande-Piura (Figura 1). El diámetro del fruto (DF) tuvo una correlación altamente negativa o inversa con PF (r = -0.92, P ≤ 0.001), ZL (r = -0.89, P ≤ 0.001) y AD (r = -0.83, P ≤ 0.001) lo que indica que el DF es indirectamente proporcional a PF, ZL y AD. Por otro lado, el peso del fruto (PF) presentó una correlación moderada positiva con: ZL (r =0.81, P ≤ 0.01), AD (r = 0.82, P ≤ 0.01) y RHa (r = -0.82, P ≤ 0.01), los parámetros ZL, AD y RHa se ven determinados por el PF. Además, el zumo de limón (ZL) presentó una correlación altamente positiva con AD (r = 0.86, P ≤ 0.001) indicando que el ZL es factor importante en la determinación de la AD. Asimismo, el Grosor de cascara (GC) `presento una correlación altamente positiva con PSS (r = 0.88, P ≤ 0.001), mostrando que el GC es determinado por PSS. El pH mostró una correlación moderada con DF (r = 0.67, P ≤ 0.05), GC (r = 0.67, P ≤ 0.05), indicando que un incremento DF influye significativamente en un mayor GC. Resultados similares fueron obtenidos por Galecio et al. (2023) en el cultivo de quinua, quienes encontraron una alta correlación entre el rendimiento por hectárea y el peso de la panoja. Asimismo, presentaron una correlación positiva entre el diámetro del tallo y el peso de la panoja. Además, Abobatta (2020) indica en el cultivo de cítricos, la existencia de una correlación positiva entre los parámetros productivos y de calidad, y el uso de biofertilizantes (abono orgánico).
Análisis de componentes principales (PCA)
Las interacciones entre los tratamientos, y las variables evaluadas son positivas (Figura 2), en los tratamientos T1 (biol 10%), T2 (biol 20%) y T3 biol (30%).
Mediante el análisis de componentes principales ACP, se lograron formar dos nuevas variables o componentes; componente I (71.40%) y componente II (11.80%), representando el 83.20% de la variabilidad del estudio. Por otro lado, de acuerdo a su grado de relación, se definieron tres cluster plot (grupos) de las variables y tratamientos. El primer cluster (grupo), se encuentran las variables zumo de limón (ZL), acidez (AD) y peso de fruto (PF). El segundo grupo (cluster) lo integra el diámetro del fruto (DF), grosor de cascara (GC), pH y porcentaje de solidos solubles (PSS). El tercer cluster (grupo) está conformado por el rendimiento por hectárea (RHa). El zumo de limón (ZL) y acidez (AD) presentaron una estrecha relación comparadas con las otras variables.
Análisis de varianza de los parámetros en estudio
Las variables del cluster I (Grupo I) fueron sometidas a un análisis de varianza y “comparación múltiple de medias de Tukey” (P < 0.05) en los parámetros ZL y AD los T1, T2 y T3 no presentaron diferencias significativas y fueron superiores al testigo con valores 13.84±0.88; 14.72±0.90; 14.98±0.26 mL-1 para ZL y 8.46±0.34; 8.90±0.56; 9.18±0.52 para la AD, respectivamente; siendo superiores al testigo con valor 11.13±1.06 mL-1 para ZL y 7.39±0.35 para la AD. En el peso fresco del fruto (PF) los tratamientos T2 (Biol 20%) con 34.98±0.80 y T3 (Biol 30%) con 33.30±0.30 no presentan diferencias significativas y superan significativamente al testigo (Cuadro 1).
Grupo I | Grupo II | ||||||
Tratamientos | ZL | AD | PF | DF | GC | PSS | pH |
m L-1 | g | - - - - - cm - - - - - | |||||
T0 (testigo‡) | 11.13±1.06 b | 7.39±0.35 b | 28.10±0.46 c | 4.30±0.10 a | 0.26±0.01 a | 8.57±0.45 a | 3.30±0.17 a |
T1 (Biol 10%) | 13.84±0.88 a | 8.46±0.34 ab | 32.56±1.00 b | 3.63±0.12 b | 0.24±0.01 ab | 8.03±0.15 a | 3.07±0.05 a |
T2 (Biol 20%) | 14.72±0.90 a | 8.90±0.56 a | 34.98±0.80 a | 3.56±0.05 b | 0.22±0.00 b | 7.80±0.26 a | 3.07±0.04 a |
T3 (Biol 30%) | 14.98±0.26 a | 9.18±0.52 a | 33.30±0.30 ab | 3.66±0.05 b | 0.21±0.02 b | 7.76±0.64 a | 3.09±0.00 a |
†Zumo de limón (ZL), acidez (AD), peso del fruto (PF), diámetro del fruto (DF), grosor de cáscara (GC), porcentaje de solidos solubles (PSS) y pH. ‡ Manejo convencional.
†Lemon juice (LJ), acidity (AD), fruit weight (FW), fruit diameter (FD), peel thickness (PT), percentage of soluble solids (PSS) and pH. ‡ Conventional management.
Las variables del cluster II (Grupo II) el T0 (testigo) presentan los mayores valores en el diámetro del fruto (DF) 4.30±0.10 cm; grosor de cascara (GC) 0.26±0.01 cm siendo significativamente superior a los diferentes tratamientos. Por otro lado, los valores obtenidos en el pH entre 3.07 a 3.3 y el porcentaje de solidos solubles (PSS) entre 7.80 a 8.57 no presentaron diferencias significativas (Cuadro 1).
En el cluster III (Grupo III), el rendimiento por ha (RHa) los tratamientos T1, T2 y T3 son estadísticamente similares; además, el T2 (Biol 20%) con 15.75±1.52 Mg ha-1 fue significativamente superior al testigo con 12.63±0.73 Mg ha-1 (Cuadro 2).
Los parámetros pH, PSS no presentaron diferencias significativas entre los tratamientos; sin embargo, los T1, T2 y T3 en el ZL, AD, GC no presentaron diferencias significativas y fueron superiores al testigo. No obstante, el T2 presento los mayores valores en PF y RHa.
Resultados similares fueron obtenidos por Pinedo et al., (2018) quienes indicaron que las aplicaciones de foliares de biofertilizante de bovino al 20% cada 15 días en el cultivo de camu mejoran: la longitud del fruto (24.96 mm), diámetro de fruto (27.28 mm), peso del fruto (11.35 g) y el rendimiento por planta (14.15 kg Planta-1) respecto al testigo; no obstante, en el número de brotes florales y frutos cuajados no presentan diferencias entre los tratamientos. Asimismo, Shukr y Al Shaheen (2021) obtuvieron en plántulas de limón (Citrus lemon L.) tratadas con el biofertilizante comercial-Bio health con aplicaciones vía suelo y foliar a dosis de 6 g L-1 y a 3 g L-1 respectivamente, resultados significativos y superiores al control en los parámetros: diámetro de la púa, contenido de clorofila y área foliar; además, la aplicación foliar del biofertilizante con 2 g L-1 y 3 g L-1 mejoró la altura de plántula y diámetro del porta-injerto. Así también, aplicaciones foliares de biofertilizante (abono orgánico liquido) en pitahaya (Hylocereus undatus) a 60 L ha-1 fraccionada en dos aplicaciones mejoró el número de frutos (11.40), peso de frutos (628 g), longitud de frutos (12.21 cm) y rendimiento (7.92 Mg ha-1); sin embargo, no presentaron diferencias en el diámetro del fruto (10.67 cm), días a floración (19.20 días) respecto al control (Verdesoto et al., 2018). En quinua la incorporación de 15 Mg ha-1 de compost (abono orgánico sólido) incrementan la altura de planta en 23%, masa seca de la planta en 25.6%, número de hojas en 27% respecto al control (El-Sheref, 2020). No obstante, Ennab (2016) menciona en el cultivo de limonero “Eureka” sembrado en suelos arenosos pobres en materia orgánica, una mejora del crecimiento, rendimiento y calidad del fruto con aplicaciones combinadas de abonos orgánicos con 55 kg de estiércol de corral + biofertilizante y convencionales con aplicaciones de 50% de NPK. Estos autores indican que los abonos orgánicos compensan el 50% de la fertilización convencional. Igualmente, Kumar, Kumar, Kumar y Muruganandam (2020), indicaron en el cultivo de lima ácida Citrus aurantifolia la aplicación combinada de abonos orgánicos y fertilizantes convencionales (inorgánicos) un incremento significativo en la longitud del fruto con 5.27 cm; diámetro del fruto con 4.93 cm, volumen del zumo 54.62 mL, grosor de cascara 1.94 mm respecto al testigo. Estos resultados difieren a los obtenidos por Peña y Cruz (2020) en el cultivo de maracuyá tratados con bioestimulantes a base de algas marinas a 3 y 5 L ha-1 los cuales no influyen en el peso del fruto, la acidez, en porcentaje de sólidos solubles y pH del fruto. Reyes-Pérez et al. (2019) observaron en dos cultivares de tomate “Pomodoro y Floradade” tratados con el bioestimulante a base de quitosano a 1, 2 y 3 g L-1 un incremento en las variables: “longitud del tallo, diámetro del tallo, peso fresco y seco de raíces, peso fresco y seco de tallo”, así también, el contenido de N, P y K, estos resultados fueron significativamente superiores con la menor dosis 1 g L-1. Por otro lado, se han reportado aislados nativos de microorganismos: hongos como Trichoderma y bacterias como Bacillus aumentando hasta un 40% LB (longitud del brote) en plantones de uva 30 días después de su inoculación (Morales-Pizarro et al., 2022b).
En la actualidad se ha incrementado e implementado el uso de biofertilizantes por los diversos beneficios en el manejo de los cultivos como: el aumento del sistema radicular y el área foliar por la síntesis de reguladores de crecimiento (auxinas, citoquininas y giberelinas), disponibilidad y solubilización de nutrientes por incremento de la actividad microbiana y por acción de los ácidos húmicos, incremento de CIC (capacidad de intercambio catiónico), resistencia a condiciones de estrés biótico y abiótico, activación de los genes de resistencia y supresión de patógenos (Orozco-Corral, Valverde, Martínez, Chávez y Benavides, 2016; Abobatta y El-Azazy, 2020).
Análisis económico
El análisis económico del estudio demuestra que la mayor rentabilidad se presenta en T2 (Biol 20%) con un beneficio-costo de 3.84, seguido T1 (Biol 10%) con 3.53 (Cuadro 3). Así se aprecia que la rentabilidad en todos los tratamientos es superior al 26% respecto al testigo T0.
Tratamiento | Rendimiento | Costo de producción | Ingresos totales | Utilidad | Beneficio/Costo |
Mg ha-1 | - - - - - - - - - - - $† - - - - - - - - - - - | ||||
T0 (testigo) | 12 630 | 5 158 | 19 071 | 13 912 | 2.70 |
T1 (Biol 10%) | 14 660 | 4 882 | 22 136 | 17 254 | 3.53 |
T2 (Biol 20%) | 15 750 | 4 911 | 23 782 | 18 870 | 3.84 |
T3 (Biol 30%) | 14 970 | 5 129 | 22 604 | 14 475 | 3.41 |
† ($) dólares.
† ($) dollars.
Este estudio se evidencia la eficiencia de los biofertilizantes aplicados foliarmente, especialmente el tratamiento T2 (Biol 20%) mejoró el rendimiento, calidad y la relación beneficio/costo con 3.84 en el cultivo de limón sutil (C. aurantifolia), siendo estos resultados superiores al T0 (testigo: manejo convencional). Estos resultados son similares a los obtenidos por Galecio et al. (2023) en el cultivo de quinua tratados con drench a 5% MEN (microorganismos eficientes nativos) incrementan 50% la relación beneficio/costo respecto al testigo. Por otro lado, Nandita et al., (2020) demostraron que las aplicaciones foliares de micronutrientes en cítricos y otros frutales, incrementan el rendimiento y calidad de sus frutos, mejorando la floración, cuajado y crecimiento del fruto; además se indica el biofertilizante biol influye positivamente en los parámetros evaluados y en la relación beneficio/costo presentó un incremento significativo respecto al testigo.
Conclusiones
El uso de biol al 20% presenta los mayores valores en el peso del fruto, rendimiento por hectárea y una mayor relación beneficio/costo comparados con biol 10%, 30% y el testigo; siendo, una alternativa respecto al aumento de precios de los fertilizantes convencionales, cuidado del medio ambiente y manejo de una agricultura sostenible. Asimismo, el DF presento una correlación altamente negativa con PF, ZL, AD siendo indirectamente proporcional. El PF está moderadamente correlacionado a ZL, AD y RHa. Además, el ZL tiene una correlación altamente positiva con AD. Además, el GC se correlaciono positivamente con PSS.
Contribución de los Autores
Conceptualización e idea principal, investigación, trabajo de campo: R.C.G. y M.A.S.P. Escritura, preparación de borrador original, revisión: R.P.C., J.J.A. y L.A.B. Curación de datos, análisis de datos: M.V.Q.C., C.G.W. y R.A.A. Escritura, análisis formal y edición: M.G.J. y A.M.P.