Introducción
El sobrepeso y la obesidad (definido con el incremento del índice de masa corporal [IMC, kg/m2]) son un problema de salud pública, no solo en países desarrollados, sino en todo el mundo1. A partir de 1990 se ha incrementado y en las últimas décadas el aumento ha sido importante. En México el 70% de la población adulta padece sobrepeso, el 32% son obesos (en los EE. UU. 36.5%) y en población infantil uno de cada tres tiene sobrepeso2. La obesidad se ha asociado a morbilidad, mortalidad prematura, deterioro de la calidad de vida relacionada con la salud y altos costos para su atención y cuidados1,3.
La obesidad dificulta caminar (capacidad de realizar ejercicio), por lo que es un componente importante en la limitación de la capacidad funcional, debido al estilo de vida sedentaria, baja tolerancia al esfuerzo, diversos efectos adversos corporales por el exceso de peso, las comorbilidades y aspectos socioculturales1-6.
La prueba de caminata de 6 minutos (PC6M) es una prueba donde se realiza ejercicio submáximo, es fácil de efectuar, segura y de bajo costo7. Mediante la PC6M se evalúa en forma objetiva la capacidad para caminar8-10. Actualmente su uso es extenso dada su utilidad e importancia en establecer la clase funcional11,12, predicción13,14 de morbilidad-mortalidad, y para medir la respuesta a diversas intervenciones médico-quirúrgicas en sujetos con enfermedades cardiovasculares o pulmonares3,6-10,12,15,16.
En trabajos realizados con la PC6M se ha informado de la limitación para caminar en poblaciones con obesidad mórbida (IMC > 40 kg/m2)12,17-20. Maniscalco et al. lo reportaron en sujetos con IMC 42.1 (rango: 39-49 kg/m2) que disminuyó a 31.9 (25-38 kg/m2) a un año de realizado bandaje gástrico. Larsson et al.17 reportaron en sujetos con IMC > 40 kg/m2 una diferencia de 25 metros entre una primera y segunda PC6M y buena reproducibilidad (4.7%) evaluada por coeficiente de variación. Luchesa et al. en mujeres19 con IMC > 45 ± 8 kg/m2 y hombres20 48.1 ± 8.4, kg/m2, informaron que la disminución de la capacidad de caminar (hacer ejercicio) estaba relacionada con las alteraciones de la función pulmonar debido a la infiltración grasa de la caja torácica y abdomen que llevó a compresión pulmonar por el efecto mecánico restrictivo del diafragma y del movimiento de las costillas, lo que redujo la distensibilidad pulmonar.
En estos trabajos se incluyeron sujetos con obesidad mórbida, sin embargo se desconoce cómo sería el comportamiento de esta limitación para caminar (evaluada con la PC6M) en sujetos con un IMC normal hasta incrementos del IMC que categorizan la obesidad mórbida; en el mejor de nuestro conocimiento solo encontramos un trabajo de Ramírez-Cardona21 et al. donde estudiaron 22 sujetos (12 mujeres y 10 hombres) distribuidos en cuatro grupos de obesidad para evaluar y dar seguimiento a un programa de actividad física. Su limitación fue el número reducido de participantes. Se desconoce el comportamiento de las variables relacionadas con la PC6M en los sujetos con diferentes grados de IMC, por lo que estudiamos y describimos cuatro grupos de sujetos: desde IMC en valores normales hasta IMC > 40 kg/m2 (obesidad mórbida) a la altura de la Ciudad de México. Este comportamiento podría ser considerado como su «historia natural».
Métodos
El estudio se realizó en el Departamento de Hipertensión Pulmonar y Corazón Derecho de la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) Hospital de Cardiología, del Centro Médico Nacional Siglo XXI del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de la Ciudad de México a una altitud moderada de 2,240 metros sobre el nivel del mar y presión barométrica de 587 mmHg21.
- Diseño: transversal analítico. Se estudiaron sujetos que acudieron al laboratorio en forma consecutiva.
- Sujetos: se admitieron sujetos consecutivos de ambos sexos de 18 a 60 años de edad, nacidos y residentes de la Ciudad de México, sin haber realizado una PC6M previamente, sin haber estado o estar en un programa de acondicionamiento físico. Sin evidencia de alteración corporal aguda en al menos tres meses previos y sin limitaciones físicas para realizar la prueba.
- Definición de alteración corporal aguda: sin evidencia de enfermedad cardiaca, respiratoria, miopatía, enfermedad renal, lesiones articulares o musculares, en al menos tres meses previos al estudio.
- Grupos: los sujetos se agruparon de acuerdo con el IMC como sigue: normal, IMC de 18.5-24.9 kg/m2); sobrepeso, IMC de 25-29.9 kg/m2; obesidad, IMC de 30-39.9 kg/m2; obesidad mórbida, IMC > 40 kg/m2)21, y a su condición de sexo, masculino o femenino. El IMC se calculó de acuerdo con lo establecido por la Organización Mundial de Salud (OMS): IMC = Peso (kg) ÷ Talla2 (metros)1,22.
- Oximetría de pulso: las mediciones de la saturación parcial de oxígeno (SpO2) y de la frecuencia cardiaca se adquirieron del oxímetro de pulso Onyx II Modelo 9550, Nonin Medical INC., Plymouth, Minnesota, previamente validado23.
- Baumanómetro para la determinación de la presión arterial sistémica: tipo aneroide marca Omron y brazalete estándar (14 x 48 cm) con estetoscopio. Ciudad de México.
- Escala de Borg: se categorizó la escala de Borg8-10,15,16 como sigue: 0, sin disnea, sin limitación al caminar; 0.5 a 2, disnea leve, no cansancio, caminata fácil; 3 a 4, disnea moderada, un poco cansado al caminar; 5 a 6, disnea severa, cansado, la caminata es con dificultad, y 7 a 10, disnea importante, muy cansado para caminar, requirió pausas en la caminata.
- Determinación de peso y altura22: se realizó en báscula Bame mod. DGN. 2412 del laboratorio de fisiología respiratoria del departamento de hipertensión pulmonar. El peso y la altura se obtuvieron en posición de pie. Para la medición del peso, a todos los sujetos se les pidió retirarse la ropa y zapatos. Se les proporcionó una bata hospitalaria al momento de pesarse. La báscula se calibró previo al estudio.
- Pista de PC6M: se utilizó una pista de 20 metros de largo localizada en el pasillo anexo al departamento24. El área de prueba cuenta con cada metro señalizado en el piso, está libre de obstrucciones, es plana, ventilada, iluminada y cubierta. El inicio y término de la pista está señalado con conos rojos/anaranjados de tráfico.
Intervención
Una vez seleccionado el sujeto, se midió, pesó, calculó su IMC, se obtuvo el consentimiento informado y se le explicó la técnica de la PC6M. Se le mantuvo en posición sedente 15 minutos antes de la prueba y se registraron sus valores basales. Se procedió a explicar en qué consiste la escala de Borg y se registró el valor basal. Se le leyó textualmente lo siguiente: «El objetivo de esta prueba es caminar tanto como le sea posible durante 6 minutos. Usted va a caminar de ida y de regreso en este pasillo tantas veces como le sea posible en seis minutos. Yo le avisaré el paso de cada minuto y después, al minuto 6, le pediré que se detenga donde se encuentre. Seis minutos es un tiempo largo para caminar, así que usted estará esforzándose. Le está permitido caminar más lento, detenerse y descansar si es necesario, pero por favor vuelva a caminar tan pronto como le sea posible. Usted va a caminar de un cono al otro sin detenerse, debe dar la vuelta rápidamente para continuar con su caminata. Yo le voy a mostrar cómo lo debe hacer, por favor observe cómo doy la vuelta sin detenerme y sin dudar». Se le enseñó cómo hacerlo dando una vuelta al área desde la línea de inicio. Acto seguido se continuó leyendo la explicación: «Recuerde que el objetivo es caminar tanto como le sea posible durante 6 minutos, pero no corra o trote. Cuando el tiempo haya transcurrido le pediré que se detenga. Quiero que se detenga justo donde se encuentre y yo iré por usted. ¿Tiene alguna duda?»8-10,15,16,24. Al final se capturaron las variables finales de la prueba y se interrogaron posibles efectos secundarios, se permitió que estuviera sentado en reposo. Las pruebas fueron conducidas por los mismos observadores (NOP, CML y JJAG).
Análisis estadístico
Las variables nominales y ordinales se informaron con frecuencias y porcentajes, las numéricas con promedios y desviaciones estándar. La distribución de normalidad de las variables se estableció con la prueba de Kolmogorov-Smirnov. La diferencia entre las variables relacionadas con la PC6M entre los sexos, y el inicio y final de cada variable de la prueba, con la prueba t para grupos independientes. Se estimó mediante ANOVA de una vía con ajuste de Bonferroni la diferencia entre los grupos de IMC por sexo y por cada variable. Se realizó correlación de Pearson entre las variables de la PC6M. Una p < 0.05 se aceptó con significación estadística.
- Tamaño muestral: para determinar el tamaño muestral se utilizó el trabajo de Larsson et al.17, con la fórmula para la comparación de dos medias, lo que dio un total de 50 sujetos por grupo. Para categorizar por IMC y sexo se incrementó la muestra a 60 sujetos por grupo para un total de 480 sujetos.
Resultados
Se estudiaron 480 sujetos equilibrados por sexo: masculino 240 (50%) vs. femenino 240 (50%) y de acuerdo con el IMC (kg/m2), 120 sujetos por grupo de IMC y 60 de cada sexo en cada grupo. Las edades por sexo fueron similares en los diversos grupos, con valores mínimos y máximos de 11 y 60 años en el grupo total. El peso, talla y superficie corporal fue mayor en el sexo masculino en los diversos grupos, mismos que se muestran en la tabla 1.
Sexo | Normal (n = 60) | Sobrepeso (n = 60) | Obesidad (n = 60) | Mórbida (n = 60) | |
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Edad, años | Hombre (n = 240) | 41 ± 12 | 44 ± 10 | 45 ± 11 | 41 ± 10 |
Mujer (n = 240) | 44 ± 12 | 46 ± 11 | 47 ± 10 | 44 ± 8 | |
Peso, kg | Hombre (n = 240) | 64.35 ± 8.39† | 78.33 ± 7.75† | 93.30 ± 12.26† | 121 ± 18.65† |
Mujer (n = 240) | 55.33 ± 7.49*‡ | 70.41 ± 6.74*‡ | 80.40 ± 7.44*‡ | 107 ± 12.13*‡ | |
Talla, m | Hombre (n = 240) | 1.67 ± 0.08 | 1.68 ± 0.08 | 1.69 ± 0.09 | 1.69 ± 0.11 |
Mujer (n = 240) | 1.57 ± 0.08* | 1.59 ± 0.07* | 1.56 ± 0.07* | 1.58 ± 0.08* | |
SC, m2 | Hombre (n = 240) | 1.73 ± 0.08† | 1.91 ± 0.07† | 2.10 ± 0.09† | 2.38 ± 0.11† |
Mujer (n = 240) | 1.55 ± 0.07*‡ | 1.76 ± 0.07*‡ | 1.87 ± 0.07*‡ | 2.16 ± 0.08*‡ | |
IMC§, kg/m2 | Hombre (n = 240) | 22.98 ± 1.88† | 27.80 ± 1.07† | 32.54 ± 2.06† | 42.27 ± 2.37† |
Mujer (n = 240) | 22.48 ± 2.20‡ | 27.97 ± 1.17‡ | 32.90 ± 2.12‡ | 42.95 ± 3.14‡ |
*Prueba t para grupos independientes (hombres vs. mujeres), p < 0.05.
†Anova de una vía con ajuste de Bonferroni (sexo masculino de acuerdo con grupos de IMC), p < 0.05.
‡Anova de una vía con ajuste de Bonferroni (sexo femenino de acuerdo con grupos de IMC), p < 0.05.
§Normal, 18.5-24.9 kg/m2; sobrepeso, 25-29.9 kg/m2; obesidad, IMC: 30-39.9 kg/m2; obesidad mórbida, IMC: > 40 kg/m2. IMC: índice de masa corporal; kg/m2; SC: superficie corporal, m2.
La ocupación de los sujetos estudiados fue agrupada en: trabajadores del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) 76 (15.83%), trabajadores externos al IMSS 242 (50.42%), amas de casa 105 (21.87%), estudiantes 30 (6.25%), comerciantes 15 (3.13%) y profesionistas 12 (2.5%).
Los antecedentes personales patológicos (Tabla 2) de este grupo estudiado muestran que la hipertensión arterial sistémica (HAS) es un antecedente frecuente en hombres vs. mujeres en obesidad (13 [5.42%] vs. 16 [6.67%]) y obesidad mórbida (19 [7.92%] vs. 15 [6.25%]); el antecedente de ronquido se observó con frecuencia en sobrepeso (15 [6.25%] vs. 20 [8.33%]), obesidad (25 [10.42%] vs. 14 [5.83%]) y obesidad mórbida (23 [9.58%] vs. 31 [12.92%]). La asociación entre el antecedente de HAS y el de ser roncador se presentó en 42 (8.75%) de 480 sujetos de ambos sexos estudiados; el hábito tabáquico se observó más veces en el grupo de sobrepeso (hombre 12 [5.00] vs. mujer 16 [6.67]). El índice paquetes/año de acuerdo con el sexo (hombre vs. mujer) y el IMC fue: normal (0.93 ± 0.36 vs. 0.49 ± 0.09) vs. sobrepeso (2 ± 0.69 vs. 2.93 ± 1.04) vs. obesidad (3.46 ± 1.15 vs. 2 ± 0.50) vs. obesidad mórbida (3.82 ± 1.34 vs. 1.08 ± 0.24), respectivamente. Solo 25 (5.20%) del grupo total refirió el antecedente de diabetes mellitus tipo 2.
Sexo (Total) | Total | Normal (n = 60) | Sobrepeso (n = 60) | Obesidad (n = 60) | Mórbida (n = 60) | |
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HAS, n (%) | Hombre (n = 240) | 40 (16.66) | 0 (0) | 8 (3.33) | 13 (5.42) | 19 (7.92) |
Mujer (n = 240) | 38 (15.83) | 0 (0) | 7 (2.92) | 16 (6.67) | 15 (6.25) | |
Ronquido, n (%) | Hombre (n = 240) | 73 (30.41) | 10 (4.16) | 15 (6.25) | 25 (10.42) | 23 (9.58) |
Mujer (n = 240) | 72 (30) | 7 (2.92) | 20 (8.33) | 14 (5.83) | 31 (12.92) | |
Tabaquismo, n (%) | Hombre (n = 240) | 33 (13.75) | 8 (3.33) | 12 (5.00) | 7 (2.92) | 6 (2.50) |
Mujer (n = 240) | 28 (11.66) | 3 (1.25) | 16 (6.67) | 5 (2.08) | 4 (1.67) | |
DM, n (%) | Hombre (n = 240) | 12 (5.00) | 0 (0) | 1 (0.41) | 6 (2.50) | 5 (2.08) |
Mujer (n = 240) | 13 (5.42) | 0 (0) | 2 (0.83) | 5 (2.08) | 6 (2.50) |
*Normal, 18.5-24.9 kg/m2; sobrepeso, 25-29.9 kg/m2; obesidad, IMC: 30-39.9 kg/m2; obesidad mórbida, IMC: > 40 kg/m2. HAS: hipertensión arterial sistémica; DM: diabetes mellitus tipo 2.
El comportamiento del grupo total de las variables de la PC6M se muestra en la tabla 3, así como las de sexo masculino (Tabla 4) y femenino (Tabla 5). En el grupo total y en cada uno de los sexos, las frecuencias cardiaca y respiratoria se modifican de condición basal a final en cada grupo, sin embargo las frecuencias de ambos en el grupo de obesos y obesidad mórbida al final de la PC6M son mayores (que en los otros dos grupos), a pesar de que parten de un valor basal similar entre cada uno de los cuatro grupos. La correlación IMC vs. FC fue r: 0.301 (p < 0.0001), y de la IMC vs. FR, r: –0.035 (p < 0.443). No obstante, la saturación parcial de oxígeno (SpO2) no cambia de basal a final en cada grupo; en el grupo de obesidad mórbida hay tendencia a incrementar la SpO2 al final de la prueba. Correlación IMC vs. SpO2%, r: –0.378 (p < 0.0001). La presión arterial sistémica (PAS) incrementa hacia el final de la prueba, aunque aún considerados en límites normales. La PAS media, mmHg basal vs. final en los grupos de obesidad (92.52 ± 11.82 vs. 97.11 ± 11.97) y obesidad mórbida (91.79 ± 10.92 vs. 97.76 ± 12.30) inician de valores basales ligeramente mayores a los de IMC normal (82.33 ± 11.34 vs. 88.19 ± 10.64) (p < 0.05), y la respuesta de la presión al final de la prueba en estos grupos fueron mayores al grupo de IMC normal (p < 0.05 respectivamente). La correlación IMC vs. PAS sistólica, media y diastólica fueron respectivamente: r: 0.432 (p < 0.0001), r: 0.489 (p < 0.0001) y r: 0.404 (p < 0.0001).
Total | Normal (n = 120 ) | Sobrepeso (n = 120) | Obesidad (n = 120) | Obesidad mórbida (n = 120) | |
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FC, lat/min | Basal | 73 ± 11 | 75 ± 9 | 78 ± 10 | 79 ± 12‡ |
Final | 87 ± 10† | 90 ± 14† | 92 ± 15† | 101 ± 15† | |
FR, resp/min | Basal | 16 ± 2 | 16 ± 2 | 17 ± 2 | 17 ± 2 |
Final | 19 ± 3† | 19 ± 2† | 20 ± 4† | 19 ± 4† | |
SpO2, % | Basal | 94.16 ± 2.10 | 94.06 ± 1.85 | 93.88 ± 1.98 | 91.56 ± 1.89 |
Final | 94.81 ± 1.90 | 94.81 ± 1.69 | 94.12 ± 2.06† | 92.62 ± 2.07† | |
PAS-s, mmHg | Basal | 111.87 ± 15.18‡ | 121.42 ± 16.25 | 124.90 ± 15.96 | 124.06 ± 15.11 |
Final | 120.49 ± 15.64†‡ | 128.40 ± 16.49† | 133.43 ± 17.43† | 135.60 ± 17.72† | |
PAS-m, mmHg | Basal | 82.33 ± 11.34‡ | 89.72 ± 11.84 | 92.52 ± 11.82 | 91.79 ± 10.92 |
Final | 88.19 ± 10.64†‡ | 93.74 ± 11.22† | 97.11 ± 11.97† | 97.76 ± 12.30† | |
PAS-d, mmHg | Basal | 67.52 ± 10.37‡ | 70.20 ± 11.12 | 76.58 ± 11.72 | 75.49 ± 10.45 |
Final | 71.96 ± 10.19†‡ | 76.56 ± 10.70† | 79.14 ± 12.55† | 78.85 ± 12.27† | |
Escala de Borg | Basal | 0 | 0 | 0 | 0 |
Final | 1 ± 0.50† | 1 ± 0.80† | 2 ± 0.84†‡ | 2 ± 1†‡ | |
Metros caminados | Basal | - | - | - | - |
Final | 466 ± 61 | 456 ± 53 | 438 ± 61‡ | 423 ± 55‡ |
*Normal, 18.5-24.9 kg/m2; sobrepeso, 25-29.9 kg/m2; obesidad, IMC: 30-39.9 kg/m2; obesidad mórbida, IMC: > 40 kg/m2.
†Prueba t para grupos dependientes (basal vs. final), p < 0.05.
‡Anova de una vía con ajuste de Bonferroni (se muestran los grupos diferentes según el IMC), p < 0.05. IMC: índice de masa corporal; kg/m2; FC: frecuencia cardiaca, latidos/minuto; FR: frecuencia respiratoria, respiraciones/minuto; SpO2: saturación parcial de oxígeno; PAS: presión arterial sistémica, PAS-s: presión arterial sistémica sistólica; PAS-m: presión arterial sistémica media; PAS-d: presión arterial sistémica diastólica.
Hombre | Normal (n = 120) | Sobrepeso (n = 120) | Obesidad (n = 120) | Obesidad mórbida (n = 120) | |
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FC, lat/min | Basal | 73 ± 12 | 75 ± 10 | 78 ± 11 | 79 ± 11π |
Final | 85 ± 16† | 91 ± 14† | 93 ± 16‡ | 101 ± 12‡ | |
FR, resp/min | Basal | 16 ± 2 | 17 ± 1 | 17 ± 2 | 17 ± 2 |
Final | 19 ± 2† | 19 ± 2† | 20 ± 14† | 19 ± 4† | |
SpO2, % | Basal | 94.16 ± 2.1 | 94.05 ± 1.85 | 93.88 ± 1.98 | 92.56 ± 1.89 |
Final | 94.65 ± 1.90 | 94.88 ± 1.69 | 94.12 ± 2.06 | 93.62 ± 2.07 | |
PAS-s, mmHg | Basal | 112.43 ± 16.91‡ | 123.72 ± 16.60 | 126.47 ± 14.04 | 124.48 ± 13.17 |
Final | 122.17 ± 17.73‡ | 130.40 ± 15† | 134.95 ± 13.41† | 134.38 ± 16.94† | |
PAS-m, mmHg | Basal | 82.62 ± 12.47‡ | 92 ± 12.27 | 93.27 ± 10.95 | 91.18 ± 8.42 |
Final | 89.12 ± 12.61‡ | 96.74 ± 9.47† | 98.36 ± 10.96† | 97.71 ± 12.08† | |
PAS-d, mmHg | Basal | 67.72 ± 10.87‡ | 76.36 ± 11.68 | 76.67 ± 11.58 | 74.53 ± 8.48 |
Final | 72.60 ± 12‡ | 79.92 ± 9.35 | 80.07 ± 13.13 | 79.37 ± 11.93 | |
Escala de Borg | Basal | 0 | 0 | 0 | 0 |
Final | 1.25 ± 0.93† | 1.51 ± 0.80† | 1.91 ± 1.24‡ | 1.87 ± 1.38‡ | |
Metros caminados | Basal | - | - | - | - |
Final | 483 ± 56 | 471 ± 55 | 455 ± 70‡ | 443 ± 49‡ |
*Normal, 18.5-24.9 kg/m2; sobrepeso, 25-29.9 kg/m2; obesidad, IMC: 30-39.9 kg/m2; obesidad mórbida, IMC: > 40 kg/m2.
†Prueba t para grupos dependientes (basal vs. final), p < 0.05.
‡Anova de una vía con ajuste de Bonferroni (se muestran los grupos diferentes según el IMC), p < 0.05. IMC: índice de masa corporal; kg/m2; FC: frecuencia cardiaca, latidos/minuto; FR: frecuencia respiratoria, respiraciones/minuto; SpO2: saturación parcial de oxígeno; PAS: presión arterial sistémica, PAS-s: presión arterial sistémica sistólica; PAS-m: presión arterial sistémica media; PAS-d: presión arterial sistémica diastólica.
Mujer | Normal (n = 120) | Sobrepeso (n = 120) | Obesidad (n = 120) | Obesidad mórbida (n = 120) | |
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FC, lat/min | Basal | 73 ± 10 | 75 ± 9 | 80 ± 13 | 80 ± 12 |
Final | 89 ± 15† | 90 ± 15† | 91 ± 14† | 101 ± 16†‡ | |
FR, resp/min | Basal | 16 ± 2 | 16 ± 2 | 17 ± 2 | 17 ± 2 |
Final | 19 ± 3† | 19 ± 2† | 20 ± 3† | 20 ± 3† | |
SpO2, % | Basal | 93.90 ± 1.17 | 94.07 ± 1.75 | 92.55 ± 1.55 | 92.48 ± 2.27 |
Final | 93.88 ± 1.35 | 94.73 ± 1.83 | 94.55 ± 2.09† | 94.43 ± 1.95† | |
PAS-s, mmHg | Basal | 111.30 ± 13.35‡ | 119.12 ± 15.70 | 123.33 ± 17.65 | 123.63 ± 16.93 |
Final | 118.82 ± 13.16†‡ | 126.40 ± 17.94† | 131.90 ± 18.70† | 136.82 ± 18.54† | |
PAS-m, mmHg | Basal | 82.03 ± 10.18‡ | 87.45 ± 11.02 | 91.77 ± 12.68 | 92.40 ± 12.99 |
Final | 87.26 ± 8.20†‡ | 90.74 ± 12.07† | 95.86 ± 12.87† | 97.81 ± 12.63† | |
PAS-d, mmHg | Basal | 67.32 ± 7.94‡ | 72.12 ± 10.22 | 76.48 ± 11.96 | 76.45 ± 12.10 |
Final | 71.32 ± 8† | 73.20 ± 10.97 | 78.22 ± 11.98 | 78.33 ± 12.69 | |
Escala de Borg | Basal | 0 | 0 | 0 | 0 |
Final | 1.12 ± 0.98† | 1.09 ± 0.81† | 1.63 ± 1.17†‡ | 1.59 ± 1.06†‡ | |
Metros caminados | Basal | - | - | - | - |
Final | 449 ± 61 | 441 ± 44 | 421 ± 47‡ | 403 ± 54‡ |
*Normal, 18.5-24.9 kg/m2; sobrepeso, 25-29.9 kg/m2; obesidad, IMC: 30-39.9 kg/m2; obesidad mórbida, IMC: > 40 kg/m2.
†Prueba t para grupos dependientes (basal vs. final), p < 0.05.
‡Anova de una vía con ajuste de Bonferroni (se muestran los grupos diferentes según el IMC), p < 0.05. IMC: índice de masa corporal; kg/m2; FC: frecuencia cardiaca, latidos/minuto; FR: frecuencia respiratoria, respiraciones/minuto; SpO2: saturación parcial de oxígeno; PAS: presión arterial sistémica, PAS-s: presión arterial sistémica sistólica; PAS-m: presión arterial sistémica media; PAS-d: presión arterial sistémica diastólica.
La sensación de disnea al final de la prueba es ligera en cada grupo (escala de Borg), aunque esta sensación es mayor en los grupos de obesidad (2 ± 0.84) y obesidad mórbida (2 ± 1). El comportamiento de acuerdo con las categorías de la disnea fue así: sin disnea 208 (43.33%), disnea leve 205 (42.71%), moderada 50 (10.42%), severa 8 (1.67%) y muy severa 9 (1.87%). Los metros caminados tienden a ser mayores en la categoría de sin disnea (447 ± 62) al de disnea muy severa (404 ± 78) (p = 0.032). En la correlación IMC vs. escala de Borg (r: 0.079; p < 0.084) no se apreció significación.
La tendencia de los metros caminados es hacia la disminución en el grupo total (Tabla 3): sano 466 ± 61 m, sobrepeso 456 ± 53 m, obesidad 438 ± 61 m, obesidad mórbida 423 ± 55 m (p < 0.05), y en cada uno de los sexos conforme el IMC incrementa. En particular el sexo femenino (Tabla 5) con respecto al masculino (Tabla 4) exhibe una cantidad menor de metros caminados en cada grupo de IMC (p < 0.05). Correlación IMC vs. metros caminados: r: –0.446 (p < 0.0001) (Fig. 1).
Discusión
En este trabajo, con la PC6M se construyó lo que podría ser considerada la «historia natural» del deterioro de la capacidad de caminar (clase funcional) en sujetos que incrementan su IMC (kg/m2). La muestra se conformó de cuatro grupos categorizados de acuerdo con el IMC: normal, sobrepeso, obesos y obesidad mórbida; se analizó como grupo total y de acuerdo con el sexo.
La clase funcional (capacidad de realizar ejercicio), objetivo de la PC6M (ejercicio submáximo), puede conocerse por medio del número de metros caminados y su repercusión en la escala de disnea de Borg3,4,8-10,17,20. En este estudio todos estuvieron en clase funcional 1; la repercusión en la sensación de disnea fue leve en la mayoría de los sujetos y solo fue discretamente mayor a partir del grupo de obesidad. En los metros caminados, como grupo total (Tabla 3) se caminan menos metros conforme el IMC incrementa, y esta diferencia se mantiene en cada categoría, donde el sexo masculino (Tabla 4) camina más que el femenino (Tabla 5). También es de notar que la muestra de sexo masculino exhibe mayor peso, talla y superficie corporal que la de sexo femenino (Tabla 1), y que esto podría contribuir junto con otros factores como origen de esta diferencia.
En las últimas tres décadas la obesidad ha incrementado rápidamente, y se ha asociado con morbilidad, mortalidad prematura, deterioro de la calidad de vida y mayores costos relacionados con la salud1-3. En el trabajo de Carga Global de la Enfermedad1 se estudiaron 68.5 millones de personas para evaluar la tendencia del sobrepeso y obesidad en niños y adultos, entre los años 1980 y 2015. El grupo de sujetos con IMC > 30 kg/m2 contribuyó a 4 millones de muertes (7.1%), dos tercios fueron por enfermedad cardiovascular. El 4.9% correspondió a disminución de los años de vida ajustados por discapacidad. Un 39% de las muertes y un 37% de la disminución de años de vida ajustados por discapacidad ocurrió en sujetos con IMC < 30 kg/m2. El riesgo de muerte más bajo1 se observó en sujetos con IMC entre 20-25 kg/m2. La prevalencia de enfermedad fue mayor en mujeres que hombres, y su pico de prevalencia fue en el quinquenio de 60-64 años en mujeres y 50-54 años en hombres. La diabetes mellitus fue la segunda causa de muerte, un 9.5% en sujetos con IMC ≥ 30 kg/m2 y un 4.5% con IMC < 30 kg/m2, y en años de vida ajustados por discapacidad 18 y 7.2% respectivamente al IMC1. La edad de los sujetos en nuestro trabajo en promedio abarcó las décadas de 40 y 50 años (Tabla 1), y la morbilidad se centró en las categorías de obesidad y obesidad mórbida (a partir de IMC ≥ 30 kg/m2), y en menor frecuencia en los grupos con IMC ≤ 29.9 kg/m2 (Tabla 2).
El incremento del peso corporal tiene efectos en la apariencia personal, autoestima, relaciones sociales, salud, y en las condiciones y eficiencia del cuerpo25. La cantidad de tejido graso reduce la masa muscular y su fuerza, lo que aunado a lo previo comentado lleva a fatiga y deterioro de la caminata4, intolerancia al esfuerzo y una alta demanda metabólica, que obliga a caminar más lentamente y reportar la sensación de disnea con mayor frecuencia que en sujetos no obesos26,27, como también ha sido el comportamiento de esta variable en este trabajo.
La PC6M puede mostrar las limitaciones de la tolerancia al ejercicio y niveles de oxigenación submáximo y cronotropismo en sujetos con invalidez por obesidad4. Algunas variables, como la edad, demográficas, composición corporal y fuerza muscular, impactan la prueba en grado diverso3-5,19,25,26. Los resultados son altamente reproducibles27 y muestran el efecto en los signos vitales que hacen de la prueba un instrumento seguro8-10,15; sin embargo, están influenciados por diversos factores, como el grado de obesidad18, capacidad aeróbica5,26, la variabilidad24, el sexo y el estado de la función pulmonar19,20.
La correlación IMC vs. FC (r: 0.301; p < 0.0001) previamente obtenida nos señala que a mayor IMC la FC es más elevada, con significancia estadística, sin embargo, el valor de la r es bajo, lo que puede ser debido a que hay otros factores que contribuyen a esta correlación, como previamente se ha mencionado.
La capacidad de realizar ejercicio está limitada con el incremento de la altitud, por lo que se ha categorizado de acuerdo con los metros sobre el nivel del mar (msnm) en que se habita. La Ciudad de México21 (2240 msnm) está considerada dentro del grupo de altitud moderada, y se ha referido como sin efectos en la capacidad de hacer ejercicio, aunque a esta altitud se han demostrado alteraciones en el intercambio gaseoso22. La clasificación incluye: 1) moderada altitud: 1,500-2,500 m (no se sienten efectos en ejercicio); 2) alta altitud: 2,500-3,500 m (se sienten efectos en ejercicio); 3) muy alta altitud: 3,500-5,800 (se sienten efectos hasta en reposo), y 4) extremadamente alta altitud: > 5,800 m (la vida permanente parecería imposible)22,28.
A nivel del mar se han reportado estudios como el de Maniscalco et al.12, donde se incluyeron mujeres con IMC 42.1 (rango: 39-49 kg/m2) y metros caminados de 475.7 (rango 380-580) y su escala de Borg se mantuvo entre 0 y 2; Larsson et al.17, cuya muestra de hombres y mujeres con IMC de 39.6 (30.4-59.1 kg/m2) caminaron 534 (508-560) metros y solo un sujeto se detuvo por disnea; Ramírez-Cardona et al.18 reportaron un rango de metros caminados de 265.64-584.74, no se reportó disnea; Luchesa et al.19 estudiaron mujeres con IMC 45 ± 8 kg/m2, tuvieron 428.3 ± 85.7 metros; y en otro trabajo de Luchesa et al.20 con sujetos de sexo masculino con IMC 48.1 ± 8.4 kg/m2, estos caminaron 439.1 ± 82.3 metros. En ambos trabajos no se reportó disnea. Estos resultados según el sexo en obesidad mórbida están en concordancia con los datos obtenidos en este trabajo, además del hallazgo que los sujetos de sexo masculino caminan más que los de seso femenino. Estos resultados fueron obtenidos a una altitud del nivel mar; los aquí informados fueron a una altitud de 2,240 msnm en la Ciudad de México.
Finalmente, Larsson et al.17 compararon el grupo de obesos con sujetos con IMC normal; los sujetos obesos caminaron 161 metros menos que el grupo con IMC normal. Esta diferencia (variabilidad) en los metros caminados se explicó en el 38% solo por el incremento del IMC17, sin embargo, si se toma en cuenta el análisis de las alteraciones de la función pulmonar en los sujetos obesos, la diferencia en los metros caminados puede ser explicada hasta en el 41%19,20.
Limitaciones del estudio
El trabajo exhibe limitaciones, como el ser un solo centro y a una altitud moderada; aunque puede ser útil para evaluar las limitaciones para caminar (ejercicio submáximo), incluso en sujetos con obesidad mórbida en forma segura, al menos hasta una altitud de 2,240 msnm. Los hallazgos aquí presentados solo aplican al uso de la PC6M en el contexto de la obesidad, y no los que se podrían obtener en la prueba de función cardiopulmonar en ejercicio, que incluye la medición del consumo de oxígeno y otras variables. El uso del oxímetro de pulso para estimar la frecuencia cardiaca podría ser limitada, aunque la herramienta es de uso clínico habitual en la prueba. También la PC6M podría ser de utilidad para monitorear sus variables posterior a intervenciones para tratamiento de sujetos con obesidad3,6,12,14,17.
Conclusiones
Los metros caminados disminuyeron conforme incrementó el IMC de los sujetos. El sexo masculino caminó más metros que las del femenino en todas las categorías. Estas diferencias estuvieron correlacionadas con el IMC, el peso, la talla y la superficie corporal. La respuesta de sus signos vitales al final de la PC6M estuvieron en límites normales en los grupos de IMC (kg/m2) normal y sobrepeso y se incrementaron levemente en el grupo de obesidad y el incremento fue evidente en el grupo con IMC > 30 kg/m2. La PC6M es segura de realizar en esta población con sobrepeso y obesidad.