Introducción
Dentro de la teoría clásica de las migraciones, la discusión sobre las corrientes y contracorrientes propuesta por Lee (1966) aporta que “la migración tiende a ocurrir en gran medida dentro de caminos bien definidos” (p. 54), lo que en la práctica coincide con lo que ocurre en México. Casillas (2008) afirma que “los migrantes no construyen caminos, hacen suyos los que ya existen” (p. 7). Sin embargo, en la actualidad, para los centroamericanos que desean llegar a Estados Unidos (EE. UU.), es posible que aplique mejor la teoría neoclásica abordada por Sjaastad (1962) y Todaro (1976), que establece que los migrantes al seleccionar su ruta, valoran permanentemente la seguridad y los riesgos económicos. Ahora, al presentar estos dos fenómenos, los cambios repentinos motivan constantemente a los migrantes a hacer ajustes en sus itinerarios (Casillas, 2008), al mismo tiempo que sus victimarios también lo hacen en búsqueda de sus recursos (Foote y Small, 2013). La organización Médicos Sin Fronteras (MSF) identifica que debido al miedo, muchos migrantes no utilizan los albergues, comedores o casas dedicadas, ya sean públicas o de organizaciones no gubernamentales, sino que prefieren permanecer en las calles, independientemente de que dichos espacios tengan capacidad para apoyarlos (Médicos Sin Fronteras, 2019a).
El objetivo del presente artículo es profundizar en la discusión sobre la posible existencia de una red permeable cuya viabilidad permita múltiples opciones de caminos para la ruta de los migrantes en México, y graficar dichas rutas de tránsito. Así mismo, se ambiciona progresar en la discusión sobre la factibilidad de construir una barrera (The White House, 2017)1 o no (The White House, 2021)2 para controlar la migración lineal. En este sentido, se sugiere como pregunta de investigación: ¿existen dentro de la ruta de los migrantes en México ciudades que pueden considerarse de control, debido a su grado de intermediación?
Migrantes mexicanos y latinoamericanos en Estados Unidos
Desde hace muchas décadas, los investigadores prevén un creciente volumen migratorio en el mundo (Lee, 1966). En la actualidad, estas proyecciones siguen confirmándose. Recientemente, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) destacó que hubo un aumento de 81 por ciento del número total de migrantes internacionales en el mundo. El número de migrantes internacionales en 2020 fue de 272 millones, cifra que representa 3.5 por ciento de la población mundial (OIM, 2019).
En el caso de Estados Unidos, la población inmigrante ha ido en aumento (Gaspar Olvera, 2012). Su cifra se ha cuadruplicado desde la entrada en vigor la Ley de Inmigración y Naturalización (Public Law89-236 de 1965). Los nacidos en el extranjero que residen en EE. UU. en 2018 alcanzaron los 44.8 millones, es decir, 13.7 por ciento de su población (OIM, 2019).3 En el caso particular de los nacidos en México, éstos representan 25 por ciento, mientras que los nacidos en otras naciones de Latinoamérica representan otro 25 por ciento (Budiman et al., 2020).
La migración de Latinoamérica, y en particular la de México, hacia Estados Unidos ha sido un fenómeno permanente donde, de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU, 2009), “la complejidad multidimensional del fenómeno migratorio sólo se puede entender si se considera a México como un país de origen, tránsito y destino” (p. 22). La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (2013), caracteriza este fenómeno como movimientos de población complejos, que comprenden diferentes perfiles de personas en la búsqueda de una vida digna, trabajo, asilo o refugio, que “en lo particular provienen de grupos vulnerables” (p. 28).
Lo que las bases de datos pueden capturar del movimiento de migrantes que pasan por México
El tránsito hacia EE. UU. es un proceso que se ha hecho intrínseco al contexto de vida de muchas familias que buscan la fortaleza de la economía estadounidense (Keeley, 2012; Médicos Sin Fronteras, 2019b). En 2010, las cifras oficiales y de organizaciones civiles ubican el tránsito de personas que pasan por México hacia EE. UU. entre 400 000 y 500 000 anuales (ONU, 2009; Ponces et al., 2010). Para 2019, la Secretaría de Gobernación confesó: “Esa es una cantidad que yo quiero decirles que no sé de dónde pasaron o por dónde pasaron 144 mil personas por nuestro país” (Delgado, 2019, p. 1).
En enero de 2019, el informe del Instituto Nacional de Migración (INM) declaró que, por razones humanitarias, recibió en el territorio mexicano al primer extranjero centroamericano que solicitó asilo a Estados Unidos, y el informe de julio de ese mismo año indicó que las solicitudes llegaron a 18 503 (INM, 2019). Hay miles de personas que buscan entrar a EE. UU. pero no todos lo logran. Por ejemplo, las cifras de retorno del primer semestre de 2018 fueron: 4 798 en Ciudad Juárez, Chihuahua; 4 435 en Tijuana y 2 689 en Mexicali, Baja California (Amnistía Internacional, 2018d).
Parece que el tránsito por México ya no es temporal; la población migratoria empieza a beneficiarse de las ofertas que les hace el gobierno y la iniciativa privada: talleres escolares, albergues, salud, “se ha dado tanto en empleos formales como en el sector informal, dependiendo de la fecha de su arribo a la entidad” (Ramírez Meda y Moreno Gutiérrez, 2022, p. 3), sin embargo, de acuerdo con la experiencia internacional, estas políticas asistencialistas pudieran no ser permanentes (Castles, 2004).
El tiempo del movimiento de migrantes por México
La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) estimó que el tiempo que dura el viaje por México, desde el punto de entrada hasta el punto donde se planea cruzar a EE. UU., es de entre una y cuatro semanas en promedio (CNDH, 2018). Los testimoniales indican que el tiempo del recorrido es variable en función de los cambios de ruta que se hagan en el camino. Nájar (2018) identificó que los migrantes pueden optar por trayectos más largos por ser más seguros: “lo que tarde, lo que tardemos en llegar pero vivos, no importa el tiempo” (p. 1). Veintitrés días fue el tiempo del recorrido documentado por Tucker y Tillotson (2018) desde Honduras hasta la capital de México.
Algunas teorías sobre temas de migración
Los libros de De Haas et al. (2020) y de Massey et al. (1998) sintetizan las definiciones y las teorías migratorias. No obstante, no hay una definición aceptada universalmente para los conceptos de migración ni de migrante, ya que hay varias elaboradas para diferentes contextos. En las recomendaciones sobre las migraciones internacionales del Departamento de Asuntos Económicos y Sociales (DAES) de Naciones Unidas, se define como migrante internacional a “toda persona que cambia de país de residencia habitual”, distinguiéndose de los migrantes por breve plazo que cambian de país por períodos de hasta un año (OIM, 2019, p. 27).
En relación con el tema de los caminos que toman los migrantes, es relevante el aporte de Ravenstein (1885) al proponer que las rutas son fijas y bien definidas. El autor plantea que “el grueso de migrantes procede de distancias cortas” y que “el número de migrantes que llegan a un centro decrece a medida que la distancia se incrementa” (p. 198), dependiendo de la existencia de cuatro factores: a) los asociados con el área de origen, b) el área de destino, c) los obstáculos intermedios, y d) los factores personales como la percepción, la inteligencia, los contactos o la información. En particular es de utilidad para la presente investigación el tercer punto, ya que los obstáculos intermedios, así como la violencia o los filtros de autoridad, parecen ser las causas del cambio de planes en la ruta original que pasa por México (Casillas, 2008; Foote y Small, 2013; Médicos Sin Fronteras, 2019a).
Peligrosidad sobre las rutas
Hasta hace menos de una década, los migrantes centroamericanos podían transitar por México con relativa seguridad, pero a partir de 2007, el crimen organizado encontró en el secuestro de migrantes una fuente estable de ingresos (Izcara Palacios, 2015). Los migrantes son agredidos por mafias y grupos pandilleros durante el tránsito por México (González Arias y Aikin Araluce, 2015), pero también son forzados a participar en actividades ilícitas sumándose a los cárteles de la droga, es decir, son transformados de jornaleros a criminales (Izcara Palacios, 2016, 2017). Los migrantes carecen de recursos y no están amparados por organizaciones formales (Sampson, 2008), por lo que parece que la violencia y la migración conviven permanentemente, ambos siempre en busca de nuevas rutas (Ponces et al., 2010).
Un segundo riesgo lo experimentan los migrantes en las estaciones migratorias, por la posibilidad de ser deportados a sus países de origen, el cual se acentúa por el maltrato que ejercen algunos agentes. Al respecto, el INM tiene una serie de denuncias interpuestas sobre casos de abuso (Amnistía Internacional, 2017, Comisión Nacional de Derechos Humanos, 2017, 2018).4
Las caravanas
Una reciente estrategia de protección masiva implementada por los migrantes centroamericanos son las caravanas (Gandini et al., Gutiérrez, 2020). Amnistía Internacional (2018a, 2018c) estima que cada una de estas caravanas puede alcanzar hasta las 10 000 personas. No es claro si estos movimientos se identifican como coyunturales a la dinámica migratoria actual de los cruces por México (García Aguilar, 2020) o si va a ser un fenómeno permanente a menor escala; no obstante, estas caravanas utilizan las rutas migratorias que pasan por México.
La Teoría de Grafos para el estudio de flujos migratorios
De una manera no muy rigurosa, podemos definir los grafos como representaciones esquemáticas de una red de conexiones, cuyos puntos (nodos) están relacionados entre sí mediante caminos (aristas). Estas representaciones hacen más fácil la visualización e interpretación de estos problemas y el estudio de sus propiedades (Ortega Reyes, 2020). Un primer ejemplo de la aplicación de la Teoría de Grafos es la solución del problema de Euler de los puentes de Königsberg de 1736 (Núñez et al., 2004), representado en la figura 1, donde se compara el mapa del sitio con su grafo equivalente.
El análisis de las migraciones ha utilizado herramientas de redes desde hace mucho tiempo. Un ejemplo es el estudio de la parroquia Uppsala-Näss en Suecia, que narra que a finales del siglo XIX la aldea “se parecía a una estación de tren donde entran y salen personas” (Hanagan, 2008, p. 59). Ahora bien, Izquierdo Escribano y Noya (1999) proponen que para el estudio de las migraciones es preciso que se mejoren las herramientas para operacionalizar sus conceptos, es decir, se “debe contar con los presupuestos de las técnicas de análisis en la investigación empírica: el análisis multinivel y el análisis matemático de grafos y redes” (p. 38).
Estudios recientes ya utilizan con mayor frecuencia la Teoría de Grafos para estudiar la migración. García Flores (2013) analiza los patrones de migración interna en Colombia. Ramirez (2014), con un modelo aplicable a distintas escalas, encuentra que los datos de una región de Chile se acercan a una red de mundo pequeño5 con 36 nodos, 977 enlaces, un coeficiente de clustering promedio de 0.813 y una longitud media de camino de 1.225. Lomelí Carrillo e Ybáñez Zepeda (2017) muestran las diferencias de dos regiones en la frontera noroeste de México, mientras que Ruiz-Santacruz (2019) afirma que al analizar las redes sociales éstas “proporcionan una herramienta para estudiar las relaciones entre países, la importancia de cada uno dentro de la red y la influencia de las variables del país en los patrones de migración” (p. 79).
En resumen, la Teoría de Grafos sirve para saber si saliendo de una ciudad se puede llegar a otra, para conocer las similitudes entre las regiones y para determinar los tipos de relación que hay entre cada una ellas. El aporte de esta teoría a los flujos migratorios radica básicamente en que permite conocer cuáles ciudades concentran más poder en términos de tráfico y cuáles están más aisladas dentro de la red.
Preguntas e hipótesis de investigación
Partiendo de la tesis de Lee (1966) y considerando que los migrantes pueden optar por trayectos largos por ser más seguros (Nájar, 2018), para responder a la primera pregunta de investigación (¿existe una red permeable cuya viabilidad permita múltiples opciones de caminos para la ruta de los migrantes en México?), a continuación se propone la primera hipótesis:
H1. Se puede conectar por más de un camino a la frontera norte con la frontera sur.
Si dentro del mapa de posibilidades se bloquea un camino que conecta a dos ciudades, entonces existe la posibilidad de acceder a cualquiera de ellas por otro camino.
Ahora bien, respecto de la segunda pregunta “¿existen ciudades dentro de la ruta de los migrantes en México que pueden considerarse de control debido a su grado de intermediación?, En principio la teoría indica que parece que sí (Ravenstein, 1885). Por lo tanto, a partir del grado de intermediación de las ciudades en la ruta, se propone la hipótesis dos:
H2. Existen ciudades en México que pueden considerarse como de control.
En caso de aceptar esta segunda hipótesis, sería posible plantear esquemas de monitoreo en microregiones locales para el estudio del tránsito de la migración en México.
Sobre los problemas de inseguridad que enfrentan los migrantes, es de esperarse que intenten evadir los puntos de peligro en su ruta (Nájar, 2018). Por lo que se propone la siguiente tercera hipótesis:
H3: Las rutas más cortas entre las dos fronteras tienen por lo menos un nodo con situación de peligro.
En caso de aceptar la hipótesis tres, se estaría generando una información útil para el diseño de políticas públicas en materia de seguridad.
Estrategias metodologícas
Problemática del registro de cifras del movimiento de migrantes por México
Uno de los problemas para los estudios de migración, especialmente en los países latinoamericanos, es su limitada capacidad para recopilar datos y proporcionar cifras confiables sobre el tránsito de personas, esto se debe básicamente a la geografía y a la complicada gestión de las fronteras. Por ejemplo, en algunas regiones representa un reto debido a la nula existencia de fronteras marítimas, a lo alejado de los pasos montañosos o al control de caminos aislados dentro de los bosques tropicales (Gallagher y McAuliffe, 2016). También, registrar el número preciso de migrantes presenta otra serie de problemas por el hecho de que no todos los movimientos de las personas se contabilizan, como los ingresos o salidas de México con visa de turismo, de trabajo o para cursos educativos (OIM, 2018a).
Otro fenómeno que hace que el volumen del movimiento sea difícil de calcular son las caravanas, ya que el número de personas varía constantemente, pues hay quienes regresan a sus casas, otras se suman en el trayecto y otras que se dividen para formar grupos nuevos (Amnistía Internacional, 2018a, 2018c). Por lo tanto, es un reto construir una base de datos específica y tiene las salvedades propias del método utilizado.
En lo particular, debido a que las estadísticas de los movimientos son irregulares, la construcción de la base de datos del presente estudio es artificial ya que se construye con base en diferentes fuentes.
Fuentes de información
La primera fase metodológica fue a partir de una exploración cuyo objetivo fue la construcción de una base de datos de las ciudades de México por donde transitan los migrantes. En esta fase se siguió la recomendación de la organización Arquitectos con la Gente (2016), la cual propone trazar el tránsito de la migración a partir de la ubicación de las zonas de ayuda y de los lugares en donde las personas pueden conseguir mejores condiciones de alimentación, alojamiento, entre otros servicios. En esta línea, se obtuvieron los directorios de albergues o centros de apoyo para migrantes por parte de organizaciones de gobierno, la CNDH o de distintas organizaciones civiles, como Médicos Sin Fronteras. Como complemento, se hizo una revisión exhaustiva de artículos académicos publicados en revistas indexadas sobre el tema en México, siguiendo la sugerencia de Hernández Sampieri et al. (2006).
Para construir la base de datos se realizó una búsqueda en Internet a partir de las construcciones: “rutas de/para migrante”, “albergues de/para migrante”, “casas del/para migrante” y “comedores de/para migrantes”. El listado de las organizaciones públicas y privadas identificadas que manejan esta información entre 2010 y 2018 se presenta en el cuadro 1.
Organización (en orden alfabético) | Documento |
---|---|
Amnistía Internacional (2010) | Víctimas invisibles: Migrantes en movimiento. |
Arquitectos con la Gente (2016) | Mapeo: Ruta migrante. |
Instituto Nacional de Migración (INM, 2014) | Grupos Beta de protección. |
Consulados en México. | |
Médicos Sin Fronteras (MSF, 2018) | MSF en la ruta de migrantes y refugiados. |
Organización Internacional para las Migraciones (OIM, 2018b) | Directorio de casas y albergues para personas migrantes. |
Organización Internacional para las Migraciones (OIM, 2015) | Directorio de albergues para personas migrantes. |
Fuente: Elaboración propia.
También se incluyeron en la base de datos los puntos ubicados en los trabajos de Casillas (2008) y de González Arias y Aikin Araluce (2015). Adicionalmente se integraron los puntos identificados en 26 fuentes periodísticas complementarias que respondieron al criterio de búsqueda indicando alguna de las rutas tomadas por los migrantes (cuadro 2).
Fuente (en orden alfabético) | Título del artículo | |
---|---|---|
1 | Animal Político (2018a) | Solo queremos trabajo: migrantes logran llegar… |
2 | La Prensa (2018a) | Caravana migrante se dirige a Ciudad de México… |
3 | Martín Pérez (2018) | Caravana migrante llega a Oaxaca. |
4 | La Prensa (2018b) | Caravana de migrantes: hondureño muere… |
5 | Cortés (2018) | Avanza parte de caravana migrante a Santiago… |
6 | agonzalez (2018) | Caravana migrante emprende camino a Juchitán… |
7 | Cabezas (2018) | Una nueva caravana con 2.000 migrantes sale… |
8 | Hernández y Campos (2018) | Salvadoreños en caravana cruzaron hacia México. |
9 | Animal Político (2018b) | Caravana migrante cambia de ruta hacia Veracruz… |
10 | Aristegui Noticias (2018) | Caravana migrante, en Sayula y Acayucan, Veracruz. |
11 | Animal Político (2018c) | Caravana migrante llega a Isla, Veracruz… |
12 | El Economista (2018) | Córdoba, parada del contingente mayor. |
13 | Animal Político (2018d)) | Caravana se fragmenta: migrantes viajan de Veracruz… |
14 | El Universal (2018) | Mapa muestra día a día el tránsito de las caravanas. |
15 | Licea Vélez (2018) | Caravanas de migrantes se extienden en CDMX… |
16 | Ávila (2018) | Caravana de migrantes sale de Puebla… |
17 | Excélsior (2018a) | Migrantes llegan a San Juan del Río, Querétaro. |
18 | Vázquez (2018) | Migrantes se dispersan en su viaje a EU. |
19 | Excélsior (2018b) | Comienza a llegar caravana migrante a Irapuato. |
20 | Rincón (2018) | Hidalguenses apoyan con víveres a caravana… |
21 | Santiago (2018) | Primera ola de migrantes de la caravana llega a Tijuana. |
22 | Luna (2018) | Primer grupo de caravana migrante llega a Guadalajara. |
23 | Morales (2018) | Arriba a Tijuana segundo grupo de caravana… |
24 | Camhaji (2018) | El delirante viaje de la caravana migrante: 48 horas… |
25 | La Prensa (2018c) | Caravana migrante de centroamericanos se reagrupa… |
26 | Romero (2019) | Crimen usa 5 rutas para traficar con migrantes… |
Fuente: Elaboración propia.
La segunda fase consistió en la concentración de datos bajo el siguiente proceso: 1) se asignó a cada ciudad un número de nodo; 2) se clasificaron las ciudades en tres tipos de nodos: de origen (ubicado en Centroamérica), de tránsito (ciudades de México) y de destino (ubicado en Estados Unidos; 3) se agruparon los nodos por entidad federativa para efectos de su ubicación geográfica.
Construcción del mapa de caminos
La tercera fase de la metodología consistió en la construcción del mapa de interconexión de nodos. Para la construcción de caminos se siguieron los siguientes criterios: 1) si la conexión entre ciudades fue declarada en alguna de las fuentes consultadas, se respetó el camino indicado; 2) si la fuente mencionó alguna ciudad sin señalar sus rutas de entrada o salida, ésta se conectó con los nodos vecinos más cercanos (en metros lineales, siguiendo la recomendación de Kuz et al., 2016);
para el presente artículo se excluyeron las conexiones relativas a los flujos de la transportación aérea ya que presentan un volumen no significativo (Casillas, 2008).
Se decidió por un modelo de red mixta, dirigida en los nodos de ingreso y egreso del país, y no dirigida en los nodos internos, ya que existen casos en los que los migrantes regresan a puntos previos para modificar su camino (Amnistía Internacional, 2018b).
Puntos con situación de peligro
Para identificar los nodos que representan peligro para los migrantes, se adoptaron dos indicadores:
La tasa estatal de homicidio, calculada a partir de los registros del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en relación con la población estatal estimada por el Consejo Nacional de Población (Conapo). Este indicador se recomendó como una métrica confiable de violencia por ser el que presenta una menor cifra negra (Álvarez y Manzotti, 2008). Se tomó como criterio de selección aquellos estados que tuvieran una tasa de homicidios superior al promedio más una desviación estándar (Méndez, 2017).
La ubicación de alguna de las estaciones de migración del INM, no solo por el riesgo a ser deportados, sino por la violencia detectada (Amnistía Internacional, 2017)
Procedimiento de prueba de las hipótesis
Para el análisis y prueba de las hipótesis se recurrió a las siguientes definiciones (Ortega Reyes, 2020):
Nodo: ciudad o frontera. Por ejemplo, Guadalajara y Comitán son nodos ciudad, mientras que Estados Unidos y Centroamérica serían nodos frontera.
Arista: es la conexión de tránsito entre dos nodos. Por ejemplo, la ruta del tren que une a Los Mochis en Sinaloa con Cd. Cuauhtémoc en Chihuahua; la carretera que une a Santa Rosalía con Guerrero Negro en Baja California Sur; la ruta por mar que conecta Cancún con Progreso en la Península de Yucatán, o el río que une Peñitas con Belisario Domínguez en Chiapas.
Camino: es el conjunto de aristas que se requieren para conectar dos nodos (ciudades) cualesquiera; por ejemplo, un camino de orden 6, que conecta Centroamérica con Estados Unidos, incluiría las ciudades: 1. Centroamérica, 2. Tenosique, 3. Guadalajara, 4. Chihuahua, 5. Ojinaga, 6. Estados Unidos.
Grafo: es el conjunto de nodos y caminos identificados. El grafo de estudio incluye los 183 nodos y las 720 aristas de posibilidades ubicados.
Camino elemental: es aquel camino que nunca pasa más de una vez por un mismo nodo. Por ejemplo, la ruta 1. Centroamérica, 2. Tenosique, 3. Guadalajara, 4. Chihuahua, 5. Guadalajara, 6. Hermosillo, 7. Nogales, 8. Naco, 9. Estados Unidos, no podría ser un camino elemental porque se repite Guadalajara.
Camino más corto: es aquel que une a dos nodos con el mínimo de aristas posibles. Por ejemplo, entre las opciones: Celaya-Aguascalientes (por carretera), y Celaya-Salamanca-Irapuato-León- Aguascalientes (por tren), el primer camino es el más corto pues el segundo tiene tres nodos intermedios.
Para probar la H1 (se puede conectar por más de un camino a la frontera norte con la frontera sur) se recurrió a un proceso iterativo de reducción del total de caminos elementales más cortos entre ambas fronteras: a) se identificaron los nodos de entrada a Estados Unidos; b) se identificaron todos los nodos que conectan por una arista a los nodos anteriores; c) de forma iterativa se identificaron los nodos que conectan a los nodos anteriores, a través de un proceso de árbol inverso, hasta ubicar los nodos de salida de Centroamérica, y d) se descartaron los caminos elementales que no fueran los más cortos.
Para probar la H2 (existen ciudades en México que pueden considerarse como de control) se recurrió al análisis comparativo de nodos de la Teoría de Grafos, a partir de dos variables que miden la centralidad estructural (Kuz et al., 2015): a) el grado de centralidad (degree of centrality), y b) el grado de intermediación (betweenness centrality). Ambas métricas se definen en el cuadro 3. Para el análisis comparativo se utilizó el sistema Gephi versión 0.9.2 (2017) para el análisis de redes sociales.
Variables | Explicación | Interpretación |
---|---|---|
Grado de centralidad (GC) | El GCx del nodo x, es el número de aristas que conectan al nodo x con cualquiera de los otros n-1 nodos de la red | A mayor grado de centralidad de una ciudad, mayor permeabilidad y por lo tanto mayor cantidad de rutas de escape. |
GCx = 0 si es un nodo aislado. | El GC de una ciudad es el número de ciudades con las que está directamente conectada. | |
GCx = n-1 si es un nodo conectado con toda la red. | ||
Grado de intermediación (GI) | El GIx,n,2 del nodo x, es el número de veces que aparece el nodo x dentro del conjunto de todos los caminos más cortos que se pueden construir en un grafo de tamaño n. | El GI mide la probabilidad de que una ciudad ocupe una posición intermedia (puente) dentro del camino más corto entre dos ciudades. |
Las ciudades con alto GI son candidatas a establecerse como puntos de control debido a la alta presencia de tránsito. |
Fuente: Elaboración propia con base en Freeman et al. (1992).
La H2 se comprueba si se identifica a más de una ciudad con un GI estadísticamente significativo (p-val < 0.001).
Para probar la H3 (las rutas más cortas entre las dos fronteras tienen por lo menos un nodo con situación de peligro), se recurrió a la confrontación cruzada de la base de datos de los caminos elementales más cortos identificados entre ambas fronteras,6 contra la base de datos de puntos en situación de peligro.7
Resultados
El análisis de los datos reportados por ciudad y por entidad federativa, revela que entre el nodo Centroamérica y el nodo Estados Unidos existe una red de caminos que pasan por 181 nodos de tránsito o ciudades dentro de 30 de los 32 estados de la República Mexicana. Las 181 ciudades ubicadas ofrecen en conjunto 545 servicios para los migrantes, como consulados, hospedaje, alimentación, atención médica, orientación religiosa, legal o en derechos humanos (cuadro 4). Se identificaron 204 servicios principales relacionados con alimentación y hospedaje (37.43 %) y 120 que ofrecen atención médica (22.02 %).
Entidad Federativa | Frontera | Ciudades | Servicios |
---|---|---|---|
1. Aguascalientes | 1 | 4 | |
2. Baja California | Norte | 7 | 52 |
3. Baja California Sur | 11 | 0 | |
4. Campeche | Sur | 3 | 0 |
5. Chiapas | Sur | 34 | 103 |
6. Chihuahua | Norte | 6 | 20 |
7. Ciudad de México | 1 | 35 | |
8. Coahuila | Norte | 5 | 25 |
9. Colima | 1 | 0 | |
10. Guanajuato | 4 | 15 | |
11. Guerrero | 3 | 0 | |
12. Hidalgo | 4 | 6 | |
13. Jalisco | 6 | 14 | |
14. Estado de México | 4 | 12 | |
15. Michoacán | 2 | 4 | |
16. Nayarit | 3 | 4 | |
17. Nuevo León | Norte | 3 | 28 |
18. Oaxaca | 11 | 28 | |
19. Puebla | 1 | 10 | |
20. Querétaro | 3 | 15 | |
21. Quintana Roo | Sur | 8 | 0 |
22. San Luis Potosí | 1 | 14 | |
23. Sinaloa | 6 | 9 | |
24. Sonora | Norte | 19 | 42 |
25. Tabasco | Sur | 7 | 14 |
26. Tamaulipas | Norte | 11 | 38 |
27. Tlaxcala | 1 | 9 | |
28. Veracruz | 12 | 40 | |
29. Yucatán | 2 | 2 | |
30. Zacatecas | 1 | 2 | |
Total | 181 | 545 |
Fuente: Elaboración propia.
Como hallazgo al agrupar la información, se identificaron 26 ciudades con tránsito y sin reporte de servicios. Lo cual puede ser una línea de mejora para la atención a migrantes.
En México hay seis estados fronterizos que colindan con Estados Unidos y cuatro que tienen frontera con Centroamérica. La suma de nodos dentro de los estados fronterizos es de 105 nodos (58.0 %). En la frontera sur, el estado de Chiapas tiene 34 ciudades con tránsito de migrantes (18.78 %), lo que lo convierte en el estado con más ciudades de tránsito en el país. Así mismo, Chiapas cuenta con 103 puntos de servicios para migrantes, siendo la entidad que más ofrece (18.9 %) del total de servicios identificados. Mientras que en la frontera norte, el estado de Sonora, colindante con el estado de Arizona en Estados Unidos, es el segundo estado con más ciudades de tránsito al tener 19 (10.5 %). Dentro de las fuentes consultadas, no se identificaron nodos de tránsito en los estados de Durango y Morelos.
Los 181 nodos de tránsito ubicados en México tienen la siguiente configuración: a) 70 nodos (38.25 %) que son ciudades con una entrada y una salida (GC=2), b) 110 nodos (60.11 %) que tienen más de dos conexiones (GC>2), y c) un solo nodo tiene una única conexión con otro (GC=1).8 El mapa de ciudades que se puede construir consta de 720 aristas. El trazado de caminos en México se presenta en el mapa 1.
Los estadísticos básicos del grafo de ciudades y caminos son los siguientes:
a) El grado de centralidad promedio del grafo, es de 𝐺𝐶= 3.814 (con una desviación estándar de 2.545), lo que indica que cada ciudad del mapa de ciudades, tiene en promedio 3.8 ciudades conectadas que pueden ser utilizadas por los migrantes. En la gráfica 1 se presenta la distribución de frecuencia del grado de centralidad de las ciudades de tránsito en México.
Cabe mencionar que la mayoría de las ciudades identificadas (70 de ellas), solo tienen dos conexiones, una entrada y una salida. En particular se destacan las ciudades con más conexiones directas: Guadalajara con 14, Mazatlán con 13, Saltillo y Querétaro con 11 y Tenosique con 10.
El diámetro del grafo es de 12 aristas, lo que significa que el mayor camino, dentro del conjunto de todos los caminos más cortos, tiene 12 conexiones. En particular, este camino conecta las ciudades de: 1. Frontera Comalapa; 2. Mesilla; 3. Trinitaria; 4. San Cristóbal de las Casas; 5. Tuxtla Gutiérrez; 6. Arriaga; 7. Ixtepec; 8. Guadalajara; 9. Mazatlán; 10. Cabo San Lucas; 11. Puerto San Carlos; 12. Punta Prieta; 13. Isla de Cedros.
Dos ejemplos de caminos más cortos con 11 aristas conectarían las ciudades de: A) 1. Soyaló, 2. Chicoasén, 3. Malpaso, 4. Peñitas, 5. Coatzacoalcos, 6. Tenosique, 7. Guadalajara, 8. Mazatlán,9. Los Mochis, 10. Punta Chivato, 11. Guerrero Negro, 12. Isla de Cedros; y B) 1. Tecpatán, 2. Tapilula, 3. Pichucalco, 4. Reforma (Chiapas), 5. Coatzacoalcos, 6. Tenosique, 7. Guadalajara, 8. Mazatlán, 9. Los Mochis, 10. Punta Chivato, 11. Guerrero Negro, 12. Isla de Cedros.
La distancia promedio entre dos nodos es de 4.944 aristas, lo que significa que en promedio se requiere pasar por cinco aristas para conectar dos ciudades cualesquiera del mapa de ciudades.
La densidad del grafo es de 0.0216, lo que quiere decir que sólo 2.16 por ciento de las aristas posibles del grafo son utilizadas por los migrantes. El porcentaje se obtiene de dividir las 720 aristas identificadas entre el total de 16 653 aristas viables que se pudieran construir entre los 183 nodos.10
El coeficiente medio de clustering de los nodos es de 0.259. Este coeficiente se calcula por ciudad y corre de 0 a 1, donde un coeficiente de 0 le corresponde a una ciudad cuyas ciudades vecinas no se conectan entre ellas; por ejemplo Loreto, que tiene un coeficiente de 0 de clustering ya que sus dos únicos vecinos, Punta Chivato y Puerto San Carlos, no se conectan entre ellos. Mientras que una ciudad con coeficiente de 1 es aquella cuyas ciudades vecinas están perfectamente conectadas entre ellas; por ejemplo, Salamanca tiene un coeficiente de clusstering 1, ya que sus dos únicos vecinos, Celaya e Irapuato, sí están conectados entre ellos. Un coeficiente de 0.259 significa que, habiendo tomado un camino equivocado, sólo en 25.9 por ciento de estas situaciones se puede regresar por una ruta alterna sin necesidad de regresar.
La distancia más corta, entre el nodo de origen (Centroamérica) y el de destino (Estados Unidos), es de cuatro aristas, lo que significa que los migrantes requieren como mínimo pasar por tres ciudades intermedias; por ejemplo, de Guatemala a Tenosique, a Saltillo, a Ciudad Acuña y a Estados Unidos.
Ahora bien, el número mínimo de caminos que de forma inversa se pueden construir en la red de ciudades para conectar a EE. UU. con Centroamérica es de 42, lo que sugiere que se acepte la hipótesis H1. Por lo tanto, se puede conectar la frontera sur con la frontera norte de México por más de un camino. En el cuadro 5 se enlistan los 42 caminos más cortos que conectan a Centroamérica con Estados Unidos.
Nodo salida | Nodo 1 | Nodo 2 | Nodo 3 | Nodo 4 | Nodo 5 | Nodo 6 |
---|---|---|---|---|---|---|
Sásabe | Altar | Caborca | B. Hill | Hermosillo | Guadalajara | Tenosique |
Sásabe | Altar | Santa Ana | B. Hill | Hermosillo | Guadalajara | Tenosique |
Reforma Son. | Caborca | B. Hill | Hermosillo | Guadalajara | Tenosique | |
Sonoyta | Caborca | B. Hill | Hermosillo | Guadalajara | Tenosique | |
Sonoyta | Mexicali | P. Peñasco | Hermosillo | Guadalajara | Tenosique | |
C. Díaz Ordaz | C. Camargo | C. Alemán | Saltillo | Tenosique | ||
C. Díaz Ordaz | Reynosa | Monterrey | Saltillo | Tenosique | ||
C. Díaz Ordaz | Reynosa | Tampico | Veracruz | Carmen Xhán | ||
C. Díaz Ordaz | Reynosa | Tampico | Veracruz | Tenosique | ||
C. Díaz Ordaz Mexicali Naco | P. Peñasco | Hermosillo | Guadalajara | Tenosique | ||
Naco | Agua Prieta | Chihuahua | Guadalajara | Tenosique | ||
Naco | Agua Prieta | Chihuahua | Torreón | Tenosique | ||
Naco | Nogales | Chihuahua | Guadalajara | Tenosique | ||
Naco | Nogales | Chihuahua | Torreón | Tenosique | ||
Naco | Nogales | Hermosillo | Guadalajara | Tenosique | ||
Naco | Nogales | Mazatlán | Guadalajara | Tenosique | ||
Nvo. Progreso | Reynosa | Monterrey | Saltillo | Tenosique | ||
Nvo. Progreso | Reynosa | Tampico | Veracruz | Carmen Xhán | ||
Nvo. Progreso | Reynosa | Tampico | Veracruz | Tenosique | ||
S. L. R.Colorado | P. Peñasco | Hermosillo | Guadalajara | Tenosique | ||
Tecate | Tijuana | Mazatlán | Guadalajara | Tenosique | ||
Agua Prieta | Chihuahua | Guadalajara | Tenosique | |||
Agua Prieta | Chihuahua | Torreón | Tenosique | |||
C. Camargo | C. Alemán | Saltillo | Tenosique | |||
Matamoros | Tampico | Veracruz | Carmen Xhán | |||
Matamoros | Tampico | Veracruz | Tenosique | |||
Nogales | Chihuahua | Guadalajara | Tenosique | |||
Nogales | Chihuahua | Torreón | Tenosique | |||
Nogales | Hermosillo | Guadalajara | Tenosique | |||
Nogales | Mazatlán | Guadalajara | Tenosique | |||
Ojinaga | Chihuahua | Guadalajara | Tenosique | |||
Ojinaga | Chihuahua | Torreón | Tenosique | |||
P. Palomas | C. Juárez | Torreón | Tenosique | |||
Reynosa | Monterrey | Saltillo | Tenosique | |||
Reynosa | Tampico | Veracruz | Carmen Xhán | |||
Reynosa | Tampico | Veracruz | Tenosique | |||
Tijuana | Mazatlán | Guadalajara | Tenosique | |||
C. Acuña | Saltillo | Tenosique | ||||
C. Juárez | Torreón | Tenosique | ||||
C. Alemán | Saltillo | Tenosique | ||||
Nuevo Laredo | Saltillo | Tenosique | ||||
Piedras Negras | Saltillo | Tenosique |
Fuente: Elaboración propia con apoyo del software Gephi, versión 0.9.2.
El diagrama de ciudades y caminos
El diagrama de ciudades y caminos (nodos y aristas) construido con el software Gephi, a partir de la distribución Force Atlas (figura 4), se creó a partir de un algoritmo que acomoda los nodos en un plano con base en dos reglas iterativas: los nodos se atraen en función de su distancia geométrica11 y se repelen en función de la cantidad de vecinos conectados12 (Jacomy et al., 2014). Como resultado, el software calcula una partición óptima de clústeres, la cual concluyó en 8 regiones, mismas que se presentan en el diagrama de la figura 2.
Las 8 regiones resultantes (clustering process) se identifican con el nombre de la ciudad con mayor grado de centralidad: 1) Región Mazatlán; 2) Región frontera norte; 3) Región Saltillo;
Región Guadalajara; 5) Región Veracruz; 6) Región Tenosique; 7) Región frontera sur; y
8) Región Chicoasén.
Agujeros estructurales
En el grafo se identifican seis puntos de articulación, esto es, nodos que cuando se eliminan se divide el mapa en dos mapas desconectados. Tales son los casos de las ciudades de Campeche14 y Progreso en la península de Yucatán, así como de Reynosa, Chihuahua, el Paso y Altar en el norte. Si se eliminan estos nodos se produce un conjunto aislado de ciudades del mapa general, tipo árbol treer.15 A este tipo de nodos también se les conoce como agujeros estructurales (structural holes), ya que, si se establece un control de paso, éstos pueden romper el tránsito de un sector de la red (Borgatti, 2005; Jimeng y Jie, 2011).
Ciudades de control debido a su grado de intermediación
Al calcular el grado de intermediación -el número de veces que aparece la ciudad en cuestión dentro de todos los caminos más cortos- de cada una de las ciudades de la red de migrantes en México,16 se identifica su grado de influencia en el tránsito al interior del grafo. Por otra parte, si el GI se divide entre el total de posibilidades de aristas, se calcula la probabilidad de control del tránsito del grafo. En el cuadro 6 se presentan las ciudades más influyentes.
Ciudad | Grado de intermediación | Probabilidad de control del tráfico (%) |
---|---|---|
Guadalajara | 15 679.34 | 94.2 |
Tenosique | 8 164 | 49 |
Ixtepec | 6 675.39 | 40.1 |
Mazatlán | 6 383.17 | 38.3 |
Veracruz | 4 510.38 | 27.1 |
Coatzacoalcos | 4 345.22 | 26.1 |
Arriaga | 4 330.98 | 26 |
Hermosillo | 4 324.40 | 26 |
Querétaro | 3 511.28 | 21.1 |
Saltillo | 3 192.72 | 19.2 |
Fuente: Elaboración propia con base en los datos obtenidos de los autores indicados en los cuadros 1 y 2.
En otras palabras, Guadalajara, Tenosique, Ixtepec y Mazatlán son las ciudades por las que puede pasar un mayor número de interconexiones mínimas dentro de la red.17
Con la ubicación de ciudades control, cuya probabilidad de control del tráfico > 0 (p- val < 0.001) se aprueba la H2, por lo tanto, existen ciudades en México que se pueden considerar de control debido a su grado de intermediación.
Ahora bien, el grado de intermediación promedio del grafo es de GI = 709.91 (DSM18=120.92), lo que rechaza la idea de que la red de migrantes en México sea una red perfectamente conectada (P-val < 0.001), lo cual sucedería si GI fuera igual a cero (como ocurre en un grafo completo).
Red de factores “negativos” que inciden en la decisión del migrante
Para probar la hipótesis, se construyó una base de datos de las ciudades con situación de peligro.
Se calculó la tasa de homicidios para cada uno de los estados en México con la información del Inegi (2019) y del Conapo (2019) sobre el número de homicidios cometidos por estado y el número de personas por estado durante 2017, 2018 y 2019. El promedio nacional fue de 30.9 homicidios por cada 100 000 habitantes (con una desviación estándar de 23.7). El cuadro 7 presenta de forma descendente la tasa de homicidios.
Estado | TPH | Estado | TPH |
---|---|---|---|
Colima | 106.3 | Tabasco | 22.5 |
Baja California | 74.1 | Veracruz | 19.2 |
Chihuahua | 72.6 | S. L. P. | 18.7 |
Guerrero | 63.6 | Puebla | 18.5 |
Guanajuato | 53.2 | Estado de México | 18.4 |
Baja California Sur | 45.7 | Nuevo León | 15.1 |
Zacatecas | 43.8 | Ciudad de México | 15.1 |
Michoacán | 43.7 | Hidalgo | 12.4 |
Sinaloa | 42.7 | Tlaxcala | 11.5 |
Morelos | 42.0 | Chiapas | 11.1 |
Quintana Roo | 40.8 | Querétaro | 10.1 |
Sonora | 33.9 | Durango | 10.0 |
Tamaulipas | 32.6 | Coahuila | 8.7 |
Nayarit | 28.9 | Campeche | 8.2 |
Jalisco | 28.3 | Aguascalientes | 6.8 |
Oaxaca | 26.8 | Yucatán | 2.4 |
Fuente: Elaboración propia con información del Inegi (2019) y Conapo (2019).
La ubicación de las estaciones migratorias y de los Grupos Beta se obtuvieron del directorio del INM y se detallan en el cuadro 8.
Estado | Autoridad | Estado | Autoridad |
---|---|---|---|
Aguascalientes | • Aguascalientes | Morelos | • Cuernavaca |
Baja California | • Mexicali | Nayarit | • Nuevo Vallarta |
• Tecate | |||
• Tijuana | |||
Baja California Sur | • Cabo San Lucas | Nuevo León | • Monterrey |
Campeche | • Campeche | Oaxaca | • Ixtepec |
• Oaxaca | |||
Chiapas | • Arriaga | Puebla | • Puebla |
• Comitán | |||
• Palenque | |||
• Tapachula | |||
• Tuxtla Gutiérrez | |||
Chihuahua | • Ciudad Juárez | Querétaro | • Querétaro |
• Ojinaga | |||
• Puerto Palomas | |||
Coahuila | • Ciudad Acuña | Quintana Roo | • Cancún |
• Piedras Negras | |||
• Saltillo | |||
Colima | • Manzanillo | Sinaloa | • Mazatlán |
Ciudad de México | • Ciudad de México | S.L.P. | • S. L. P. |
Durango | • Durango | Sonora | • Agua Prieta |
• Hermosillo | |||
• Nogales | |||
• S. L. Río Colorado | |||
• Sásabe | |||
• Sonoyta | |||
Estado de México | • Toluca | Tabasco | • Tenosique |
• Villa Hermosa | |||
Guanajuato | • León | Tamaulipas | • Matamoros |
• Nuevo Laredo | |||
Guerrero | • Acapulco | Tlaxcala | • Tlaxcala |
Hidalgo | • Pachuca | Veracruz | • Acayucan |
• Veracruz | |||
Jalisco | • Guadalajara | Yucatán | • Mérida |
Michoacán | • Morelia | Zacatecas | • Zacatecas |
Fuente: Directorio del Instituto Nacional de Migración (2021).
Si se considera que las ciudades de peligro son aquellas que pertenecen a los estados cuya tasa de homicidios es superior al promedio nacional, más una desviación estándar (>54.6), tales como Colima, Baja California, Chihuahua, Guerrero, y aquellas que alberguen alguna oficina del INM, se puede verificar que todos los caminos más cortos identificados en el cuadro 5 pasan por lo menos por dos ciudades con situación de peligro. Esto confirma la hipótesis H3, pues las rutas más cortas entre ambas fronteras incluyen por lo menos un nodo con situación de peligro. Por ejemplo, se identificó una ruta que pasa por cuatro puntos de peligro: Centroamérica, Tenosique, Guadalajara, Chihuahua, Ojinaga, Estados Unidos.
Distribución pragmática
Un hallazgo se presentó ante la posibilidad de subdividir el mapa de ciudades y caminos de los migrantes en un hipergráfico de orden 3 a partir de una construcción de tres bloques mutuamente excluyentes y colectivamente exhaustivos. El diagrama de Venn se presenta en la figura 3.
Una particularidad de este esquema de partición en tres bloques o clústeres, es que se pueden distinguir una serie de fronteras tangentes entre ellos. Ahora bien, al interior de cada bloque se presenta una amplia red de interconexión. El bloque norte tiene tres regiones, el centro sur dos y el sureste tres regiones. Hay 14 aristas entre el bloque norte y el centro sur, 14 entre el centro-sur y el sureste, y solo dos entre el norte y el sureste.
Discusión y conclusiones
La presente investigación se basa en la aplicación de la Teoría de Grafos la cual ha sido ampliamente usada para el estudio de las migraciones desde su primera aplicación en el problema de los puentes de Königsberg en Prusia. Al respecto, en México existen estudios recientes como los de Lomelí Carrillo e Ybáñez Zepeda (2017) o en Latinoamérica el de Ruiz-Santacruz (2019), sin embargo, uno de los mayores retos de esta teoría es la operacionalización de sus conceptos; por ejemplo, definir qué es un nodo, un camino, o un grafo (Ortega Reyes, 2020). En este sentido, una de las aportaciones metodológicas de la presente investigación es la exhaustiva revisión documental y la aplicación de la Teoría de Grafos para ejemplificar dichos conceptos en materia de migración.
Por una parte, se comprobó que existe una red permeable cuya viabilidad permite múltiples opciones de caminos para la ruta de los migrantes en México, en su viaje desde Centroamérica hasta Estados Unidos, con lo que se comprueban las tesis de Lee (1966), siempre y cuando no presenten obstáculos intermedios, como los identificados por Casillas (2008): 1) los operativos de las estaciones de migración, 2) la instalación de puestos de control de la Guardia Nacional, 3) los desastres naturales, 4) los cambios de agentes migratorios en controles que impliquen la renegociación de protección, y, en particular, 5) la violencia del crimen organizado. Por otra parte, la permeabilidad identificada le da formalidad a las observaciones de los índices de violencia reportados (Médicos Sin Fronteras, 2019a) y a las conclusiones de permeabilidad (CNDH, 2018); dichas instituciones identifican que 20 por ciento de los migrantes no cuenta con un camino planeado y 30 por ciento cambia su ruta de acuerdo con las circunstancias que se van presentando en su tránsito por México.
Por otra parte, se identificó que ciudades como Guadalajara, Mazatlán, Ixtepec y Tenosique son candidatas a ser puntos de control debido a su grado de intermediación, así como las ciudades de Campeche, Progreso, Reynosa, Chihuahua, el Paso y Altar, que tienen la cualidad de aislar e incomunicar el tráfico dentro de algunas subregiones (agujeros estructurales), confirmando la teoría de Ravenstein (1885).
A partir de los hallazgos se presentan las siguientes conclusiones:
Existe una complejidad inherente al fenómeno migratorio que dificulta la construcción de mapas de los caminos que utilizan, básicamente porque ellos no quieren ser detectados, lo que hace que las bases de datos tanto públicas como privadas sean cuestionables, mismas que son cimiento de los estudios geográficos, sin embargo, es posible trabajar con aproximaciones.
Existe un efecto de mutación permanente de las rutas que utilizan los migrantes, ya que mientras ellos ajustan sus itinerarios de viaje en función de tener mayor seguridad, sus victimarios
-el crimen organizado y/o algún otro tipo de operativos- constantemente también se disgregan y/o reubican en un mismo espacio geográfico; por lo que es previsible que el camino definitivo que usan los migrantes se va definiendo en su andar.
Debido a la conectividad de las rutas que se pueden construir en México, a partir de los 16 653 posibles tramos (o aristas) que enlazan a las 183 ciudades identificadas (o nodos), es imposible pensar en un muro dentro del territorio nacional que obstaculice la permeabilidad existente de la migración.
Los factores negativos hacen que las rutas más cortas entre Centroamérica y Estados Unidos pasen por lo menos por dos puntos de peligro, por lo que es de esperarse que se verifique que los migrantes prefieren optar por trayectos más largos, pero más seguros (Nájar, 2018).
A manera de aportación, vale mencionar que los 545 puntos de ayuda identificados dentro de los caminos de los migrantes (hospedaje, comida, sanitarios, atención médica, entre otros) favorecen la movilidad e influyen en sus trayectorias. Sin embargo, si se quiere monitorear el flujo migratorio, se sugiere montar estaciones de observación y puestos de seguridad en las ciudades de Guadalajara, Mazatlán, Ixtepec, Tenosique, Campeche, Progreso, Reynosa, Chihuahua, el Paso, y Altar.
Partiendo de las cifras anuales de casos de violencia reportadas por Médicos Sin Frontera (2019b), en futuras líneas de investigación se podría estudiar el tránsito (volumen de migrantes) de las 181 ciudades identificadas en los caminos de migrantes y su relación con los índices de violencia de cada una, a fin de profundizar en la discusión de si la migración es fuente o receptora de casos de violencia y abusos a los derechos humanos.