Introducción
Las selvas tropicales son los biomas más productivos del mundo (Malhi et al. 2011), ya que forman un gran reservorio de carbono (Pan et al. 2011, Hansen et al. 2020) y evapotranspiración (Malhi 2012). En estos biomas se estima que albergan más de la mitad de toda la biodiversidad terrestre del mundo (Pimm y Raven 2000, Barlow et al. 2018). Las selvas son de gran importancia debido que desempeñan un papel importante en la regulación del ciclo hidrológico, los ciclos biogeoquímicos y la mitigación del cambio climático a través de su papel como sumideros de carbono (Millennium Ecosystem Assessment 2005, Bonan 2008, Beer et al. 2010, Hansen et al. 2020). Estos biomas están influenciados por variaciones topográficas, y particularmente por las actividades antrópicas tales como aprovechamiento inadecuado de los recursos forestales (Bautista-Bello et al. 2019), generando modificaciones en la estructura y dinámica en las comunidades vegetales (Céspedes-Flores y Moreno-Sánchez 2010, Calderón-Aguilera et al. 2012).
Las comunidades vegetales de todo el mundo, especialmente en América Latina, han sido afectadas por actividades antrópicas, las cuales son uno de los factores que ejerce mayor impacto en la vegetación natural (Celentano et al. 2011), para ser convertidas en agricultura, ganadería, crecimiento de áreas urbanas, infraestructura de vías de comunicación y la extracción selectiva de especias arbóreas (Calderón-Aguilera et al. 2012). Una consecuencia inmediata de las actividades antrópicas es la disminución de la cobertura vegetal que provoca cambios en la estructura de las comunidades vegetales, composición, abundancia de las especies y riqueza específica (González-Castillo et al. 2007, Calderón-Aguilera et al. 2012). A pesar de muchas presiones que tienen que pasar las comunidades vegetales, carecemos de conocimiento sobre la riqueza de especies, composición y estructura, en particular de las selvas tropicales y de la selva baja caducifolia (SBC) (Palacios-Wassenaar et al. 2014, Avilés-Ramírez et al. 2018).
La SBC en México es un tipo de selva tropical que tiene una amplia distribución tanto en la vertiente del Océano Pacífico, el Golfo de México, y particularmente al norte del estado de Yucatán (Flores y Espejel 1994, Rzedowski 2006, Islebe et al. 2015). La Península de Yucatán es una región del sureste de México, con una extensión de 450 000 km2, bordeada por el Golfo de México y el Mar Caribe, incluidos los estados de Campeche, Quintana Roo y Yucatán (Bauer-Gottwein et al. 2011). Esta región es considerada una provincia biogeográfica en la región Neotropical y alberga una alta diversidad (Morrone 2005). Entre los estudios cuantitativos que describen la composición, variación y la estructura de la SBC en la Península de Yucatán destacan los de Rico-Gray y García-Franco (1992), White y Darwin (1995), y González-Iturbe et al. (2002).
La estructura y composición florística de la SBC varían dependiendo de las especies dominantes. Para la Península de Yucatán, las especies que caracterizan a este tipo de vegetación alcanzan alturas entre seis y 12 m, aun cuando pueden encontrarse árboles aislados que por lo general no sobrepasan los 15 m (Islebe et al. 2015) y sus diámetros a la altura del pecho (DAP) entre 10 y 30 cm (Flores y Espejel 1994). Entre las especies dominantes que componen la SBC en la Península de Yucatán se encuentran Senegalia gaumeri (S.F. Blake) Britton & Rose, Alvaradoa amorphoides Liebm., Bursera simaruba (L.) Sarg., Cenostigma gaumeri (Greenm.) Gagnon & G.P. Lewis, Erythrostemon yucatanensis (Greenm.) Gagnon & G.P. Lewis, Ceiba aesculifolia (Kunth) Britten & Baker f., Diospyros tetrasperma Sw., Gymnopodium floribundum Rolfe, Hampea trilobata Standl., Jatropha gaumeri Greenm., Neomillspaughia emarginata (H. Gross) S.F. Blake, Parmentiera aculeata (Kunth) Seem., Piscidia piscipula (L.) Sarg., Randia longiloba Hemsl., Sideroxylon americanum (Mill.) T.D. Penn., entre otras (Miranda 1978, Flores y Espejel 1994).
La SBC en el estado de Campeche esta poco representada, distribuyéndose solamente desde el norte del municipio de Champotón hacia Yucatán, y al norte del municipio de Calakmul (Palacio-Aponte et al. 2002). En Campeche, hay pocos estudios que evalúen aspectos cuantitativos de la SBC (Zamora-Crescencio et al. 2011, Dzib-Castillo et al. 2014), y hasta la fecha se desconocen aspectos de la riqueza de especies, composición y estructura de la vegetación de la SBC en diferentes sitios del estado (Dzib-Castillo et al. 2014). El presente trabajo es una contribución al estudio de la diversidad florística leñosa y la estructura en la localidad de Lerma municipio de Campeche, Campeche. En este contexto, el objetivo de esta investigación fue determinar la composición, estructura y diversidad de la vegetación leñosa de una sección de la SBC en la localidad de Lerma Campeche.
Materiales y métodos
Área de estudio
El estudio se llevó a cabo en un área de aproximadamente 1.5 km2 dentro del ejido de Lerma, municipio de Campeche, Campeche, México (Figura 1). En esta localidad se localiza un relicto de la SBC; sin embargo, hasta el momento se desconoce la composición, estructura y la diversidad de las especies leñosas en este tipo de vegetación.
El sitio de muestreo (19° 46' 43.4” LN y 90° 36' 29.2" LO, Figura 1), se ubicó utilizando un mapa topográfico a escala 1:50 000 (INEGI 2010) e imágenes satelitales obtenidas de Google Earth (2023) versión 10.43.02, además, se realizó un recorrido de campo para verificar el sitio seleccionado, adoptando el criterio de la mínima perturbación posible, ya sea por causa natural o por actividades humanas. La topografía del sitio comprende una serie de lomeríos que alcanzan elevaciones de 10 a los 50 msnm (INEGI 1999, Palacio-Aponte et al. 2010). El lecho rocoso sedimentario subyacente pertenece a formaciones de piedra caliza de edad Eocénica (INEGI 1985, Flores y Espejel 1994). El suelo es del tipo Redzinas combinado con Litosol y Gleysol Vértico (E + l + Gy/2) (INEGI 1984, 2024). En general, el clima es cálido subhúmedo (Awo) con lluvia en el verano y una temperatura media anual de 27.6 °C con precipitación total anual de 1 012.9 mm, siendo el período entre marzo y abril el más seco y agosto el mes con mayor precipitación (CONAGUA 2010).
Muestreo de vegetación
Para describir las características florísticas, estructurales y de diversidad de una comunidad vegetal, se sugiere cubrir un área de muestreo de al menos 1 000 m2 (0.1 ha) (Gentry 1982, Trejo 2005). De este modo, para el muestreo de la vegetación leñosa en el sitio de estudio se utilizaron 10 parcelas cuadradas (10 × 10 m = 100 m2) distribuidas de manera equitativa (Gallardo-Cruz et al. 2009) en línea recta con dirección este-oeste, sobre un lomerío de 10 msnm, cubriendo un área total de 1 000 m2 (Figura 1). El muestreo de vegetación se realizó durante los meses de agosto y septiembre de 2018. En cada parcela de muestreo se registraron todas las plantas leñosas con un diámetro a la altura del pecho (DAP = 1.30 m) DAP ≥ 1 cm y se estimó la altura total de las plantas mediante apreciación visual (m) (Ibarra-Manríquez et al. 2023).
Las especies leñosas se identificaron en el sitio por la experiencia del primer autor. Cuando no se pudo identificar una especie en el sitio, se recolectaron especímenes con flores y/o frutos para ser cotejados con ejemplares del herbario UCAM del Centro de Investigaciones Históricas y Sociales de la Universidad Autónoma de Campeche y literatura disponible (Standley y Steyermark 1946, 1949, Ortiz-Díaz 1994, Pennington y Sarukhán 2005, Borhidi 2006). El orden de la lista de especies se arregló de acuerdo con el sistema APG IV (APG 2016), mientras que los nombres de las especies se verificaron con la base de datos del Missouri Botanical Garden (MBG 2024) y con el Índice Internacional de Nombres de Plantas y Plantas del Mundo Online (IPNI 2022, RBG Kew 2024).
Análisis de los datos
Para conocer la representación de riqueza de especies vegetales leñosas en el área de estudio, se estimó una curva de acumulación de especies mediante el programa Species Acumulation Functions propuesto por Díaz-Francés y Soberón (2005). Para evaluar la composición florística se usó la técnica de observación directa y recolección de material botánico. La estructura cuantitativa de la vegetación se basó en el cálculo de la densidad, área basal (dominancia) y frecuencia. Donde la densidad es el número de individuos por área de muestreo, el área basal es la superficie de una sección transversal del tallo del individuo a determinada altura y la frecuencia se refiere a las unidades de muestreo en la cual ocurre una especie (McCune y Grace 2002).
Las diferentes clases de diámetro y altura se definieron considerando los valores de ambos parámetros y el número total de individuos censados (Bannister et al. 2008, Báez-Vargas et al. 2017). Para determinar el índice de valor de importancia (IVI) de las especies registradas en las parcelas de muestreo se calcularon y sumaron la abundancia relativa (número de individuos por especie/total de individuos de las especies × 100), la frecuencia relativa (frecuencia de una especie/suma de la frecuencia de todas las especies × 100) y la dominancia relativa (área basal de cada especie/total del área basal de todas las especies × 100) (Muller-Dombois y Ellenberg 2002).
La riqueza de especies se tomó como un recuento del número de especies presente en el sitio de muestreo. La heterogeneidad del sitio (diversidad de especies) se midió utilizando el índice de información de Shannon-Wiener (H’) (Magurran 1988) y la uniformidad o equidad (recuento de individuos de cada especie en un área de estudio) se calculó con el índice de Pielou con el paquete PAST versión 2.17 (Hammer et al. 2001). Con la siguiente fórmula:
Donde: Pi = proporción de la muestra que pertenece a la especie i.
Resultados
Composición y riqueza florística
Se registraron 40 especies leñosas, distribuidas en 35 géneros y 19 familias de plantas vasculares. Se encontró que los datos se acercan al modelo propuesto por Clench, cuyos parámetros ajustados son a = 32.700, b = 0.724, error de correlación ρ = 0.582, cociente de probabilidades de 0.036 y la riqueza estimada de 46 especies. De este modo, las especies observadas representan el 87% de la riqueza estimada (Figura 2).
Las familias con mayor riqueza específica fueron Rubiaceae (ocho especies, 19.5%), Fabaceae (cinco, 12.2%), Ebenaceae (tres, 7.3%) y Polygonaceae (tres, 7.3%), que juntas conforman el 45% de las especies registradas, mientras que todas las demás familias estuvieron representadas por una o dos especies. Las familias con mayor número de géneros fueron Rubiaceae (seis), Fabaceae (cinco) y Polygonaceae (tres), aportando el 40% de todos los géneros encontrados en el sitio de estudio. Los géneros que se destacaron por su riqueza específica fueron Diospyros L., 1753 (Ebenaceae), con tres especies, Guettarda L. (Rubiaceae), Randia L. (Rubiaceae) y Sideroxylon L., 1753 (Sapotaceae), con dos especies cada uno (Tabla 1).
Familia | Especie | Abundancia Relativa | Frecuencia Relativa | Dominancia Relativa | IVI |
---|---|---|---|---|---|
Polygonaceae | Gymnopodium floribundum Rolfe | 22.79 | 5.99 | 19.46 | 48.24 |
Fabaceae | Lonchocarpus xuul Benth. | 14.41 | 5.99 | 8.72 | 29.12 |
Burseraceae | Bursera simaruba (L.) Sarg. | 2.23 | 4.79 | 19.09 | 26.11 |
Fabaceae | Lysiloma latisiliquum (L.) Benth. | 1.90 | 4.19 | 18.89 | 24.98 |
Sapindaceae | Thouinia paucidentata Radlk. ex Millsp.. | 6.70 | 4.79 | 6.09 | 17.59 |
Fabaceae | Senegalia gaumeri (S.F. Blake) Britton & Rose | 4.47 | 5.39 | 2.95 | 12.81 |
Cordiaceae | Cordia alliodora (Ruiz & Pav.) Oken | 2.46 | 3.59 | 5.71 | 11.76 |
Polygonaceae | Coccoloba cozumelensis Hemsl. | 5.36 | 3.59 | 2.25 | 11.20 |
Malvaceae | Hampea trilobata Standl. | 4.02 | 4.19 | 1.74 | 9.95 |
Ebenaceae | Diospyros yucatanensis Lundell ssp. yucatanensis | 4.02 | 4.19 | 1.58 | 9.79 |
Nyctaginaceae | Neea psychotrioides Donn. Sm. | 3.02 | 5.39 | 0.68 | 9.09 |
Rubiaceae | Machaonia lindeniana Baill. | 3.24 | 3.59 | 1.00 | 7.83 |
Sapotaceae | Sideroxylon celastrinum (Kunth) T.D. Penn. | 3.02 | 2.99 | 1.50 | 7.51 |
Fabaceae | Caesalpinia sp. | 2.23 | 2.40 | 1.42 | 6.05 |
Anacardiaceae | Spondias sp. | 1.68 | 3.59 | 0.78 | 6.05 |
Rubiaceae | Randia aculeata L. | 2.12 | 2.99 | 0.47 | 5.58 |
Primulaceae | Ardisia escallonioides Schltdl. & Cham. | 2.46 | 2.40 | 0.39 | 5.24 |
Rubiaceae | Guettarda elliptica Sw. | 1.68 | 2.99 | 0.49 | 5.16 |
Sapotaceae | Sideroxylon americanum (Mill.) T.D. Penn. | 0.89 | 2.99 | 0.31 | 4.19 |
Malpighiaceae | Malpighia glabra L. | 2.01 | 1.80 | 0.20 | 4.01 |
Rhamnaceae | Karwinskia humboldtiana (Schult.) Zucc. | 0.45 | 1.80 | 1.54 | 3.79 |
Polygonaceae | Neomillspaughia emarginata (H. Gross) S.F. Blake | 1.56 | 1.80 | 0.28 | 3.64 |
Rubiaceae | Guettarda gaumeri Standl. | 0.89 | 1.80 | 0.72 | 3.41 |
Rubiaceae | Exostema caribaeum (Jacq.) Roem. & Schult. | 1.01 | 0.60 | 1.68 | 3.29 |
Rubiaceae | Chiococca motleyana Borhidi | 0.45 | 2.40 | 0.07 | 2.92 |
Capparidaceae | Capparis sp. | 1.12 | 1.20 | 0.38 | 2.70 |
Ebenaceae | Diospyros sp. | 0.56 | 1.80 | 0.13 | 2.49 |
Ebenaceae | Diospyros anisandra S.F. Blake | 0.89 | 1.20 | 0.12 | 2.21 |
Primulaceae | Bonellia sp. | 0.34 | 1.80 | 0.02 | 2.15 |
Menispermaceae | Hyperbaena winzerlingii Standl. | 0.56 | 1.20 | 0.17 | 1.93 |
Salicaceae | Casearia yucatanensis (Standl.) T. Samar & M.H. Alford | 0.45 | 1.20 | 0.08 | 1.72 |
Rubiaceae | Randia longiloba Hemsl. | 0.11 | 0.60 | 0.56 | 1.27 |
Lamiaceae | Vitex gaumeri Greenm. | 0.11 | 0.60 | 0.36 | 1.07 |
Sapindaceae | Allophylus cominia (L.) Sw. | 0.11 | 0.60 | 0.08 | 0.79 |
Rhamnaceae | Krugiodendron ferreum (Vahl) Urb. | 0.11 | 0.60 | 0.06 | 0.77 |
Salicaceae | Xylosma flexuosa (Kunth) Hemsl. | 0.11 | 0.60 | 0.02 | 0.73 |
Malvaceae | Helicteres baruensis Jacq. | 0.11 | 0.60 | 0.02 | 0.73 |
Rubiaceae | Chiococca alba (L.) Hitchc. | 0.11 | 0.60 | 0.00 | 0.71 |
Fabaceae | Vachellia sp. | 0.11 | 0.60 | 0.00 | 0.71 |
Euphorbiaceae | Jatropha gaumeri Greenm. | 0.11 | 0.60 | 0.00 | 0.71 |
100 | 100 | 100 | 300.00 |
*IVI = Índice de valor de Importancia.
Las especies más abundantes fueron Gymnopodium floribundum Rolfe (204 individuos), Lonchocarpus xuul Lundell (129 individuos) y Thouinia paucidentata Radlk. ex Millsp. (60 individuos), aportando el 43.9% (393 individuos) del total de individuos registrados. Las siguientes nueve especies fueron las menos representadas porque solo se registró un individuo para cada una: Vachellia sp., Allophylus cominia (L.) Sw., Chiococca alba (L.) Hitchc., Helicteres baruensis Jacq., Jatropha gaumeri Greenm., Krugiodendron ferreum (Vahl) Urb., Randia longiloba Hemsl., Vitex gaumeri Greenm. y Xylosma flexuosa (Kunth) Hemsl. La comunidad vegetal en el sitio tuvo una diversidad de Shannon-Wiener de H’ = 2.92 y el índice de equidad fue E = 0.79.
Estructura de la vegetación
La densidad fue de 8 950 ind ha-1 con DAP ≥ 1 cm. El 53.7% del total de individuos inventariados correspondió a cinco especies, de las cuales G. floribundum presentó la mayor densidad (2 040 ind ha-1), seguida de L. xuul (1 290 ind ha-1), T. paucidentata (600 ind ha-1), C. cozumelensis (480 ind ha-1), y S. gaumeri (400 ind ha-1). La distribución de altura de los individuos (Figura 3) muestra que la mayoría (70.7%) se presentó en la clase de 1-4.9 m de altura, con una riqueza de 35 especies de las cuales las especies mejor representadas (más de 30 individuos) en orden descendente fueron: G. floribundum (157 individuos) L. xuul (83 individuos), C. cozumelensis (41 individuos) y T. paucidentata (32 individuos). Le sigue en proporción de individuos la clase de altura 5-8.9 m con el 22.8% y riqueza de 24 especies, de las cuales G. floribundum, L. xuul, T. paucidentata y S. gaumeri fueron las mejores representadas. El menor porcentaje (6.5%) de individuos se registró en la última clase (9-12.9 m) de altura con una riqueza de 9 especies, las especies que predominaron fueron L. latisiliquum, L. xuul, T. paucidentata y B. simaruba. Los individuos de las especies B. simaruba, C. alliodora, L. xuul y L. latisiliquum lograron alcanzar los 12 m de altura. Las especies que se presentaron en las tres clases de altura y con mayor abundancia fueron G. floribundum (204 individuos), L. xuul (129 individuos) y T. paucidentata (60 individuos).
En la Figura 4, se aprecia que la mayoría de los individuos leñosos pertenecen a la clase de diámetro más pequeño, 1-4.9 cm (75.3%). Mientras que el 0.1% de los individuos pertenecen a la última clase de diámetro más grande (más de 29 cm). Las especies que aportaron mayor número (más de 30) de individuos en la clase de menor diámetro (1-4.9 cm) fueron G. floribundum (147 individuos), seguida de L. xuul (101), T. paucidentata (42), C. cozumelensis (39), D. yucatanensis ssp. yucatanensis y H. trilobata con 30 individuos cada una, y la especie que alcanzó la última clase diamétrica (más de 29 cm) fue B. simaruba con un solo individuo.
Ninguna especie estuvo presente en todas las clases de diámetro. Por otro lado, la única especie que se encontró en siete de las ocho clases fue B. simaruba, mientras que G. floribundum, L. xuul, L. latisiliquum y T. paucidentata se registraron en las cuatro clases de diámetro más pequeño (Figura 4). Las especies que presentaron los mayores valores de DAP fueron C. alliodora (25.7 cm), L. latisiliquum (28.6 cm) y B. simaruba (36 cm). Asimismo, el área basal de la SBC en el sitio de estudio fue 22.6.
En la Tabla 1 se señalan los componentes y el índice de valor de importancia (IVI), en donde dos especies mostraron valores superiores al resto, Gymnopodium floribundum (48.24) y Lonchocarpus xuul (29.12). Los valores altos de IVI encontrados para G. floribundum y L. xuul están dadas por sus altas densidades. Otras especies codominantes encontradas en el sitio de estudio fueron B. simaruba (IVI = 26.11), L. latisiliquum (IVI = 24.98), T. paucidentata (IVI = 17.59) y S. gaumeri (IVI = 12.81). Los valores de IVI encontrados para B. simaruba y L. latisiliquum se deben por su alta dominancia, mientras que para T. paucidentata se le atribuyó a su densidad y dominancia, y para S. gaumeri se debió a su frecuencia y densidad. Estas seis especies representaron el 53% del total del IVI de todas las especies, mientras que las especies restantes representan menos del 4% del IVI total.
Discusión
Composición y riqueza florística
La riqueza florística encontrada (40 especies) es relevante, principalmente porque el estudio se realizó en un sitio en la localidad de Lerma en el estado de Campeche donde se desconocía la riqueza, composición y la abundancia de las especies leñosas presentes dentro un fragmento de SBC. Los valores de riqueza florística encontrada en este estudio son similares a los reportados en la SBC de Tepakan, Campeche con 42 especies (Zamora-Crescencio et al. 2011) y las 42 y 41 especies documentadas en los estados de Baja California Sur y Michoacán, México (Arriaga y León 1989, Ibarra-Manríquez et al. 2023), pero son diferentes respecto a las 51 especies de Pomuch, Campeche (Dzib-Castillo et al. 2014) y las 45, 46 y 48 especies de Chamela, en el estado Jalisco (Durán et al. 2006). Estas diferencias en términos de riqueza florística pueden deberse al número y al tamaño del área muestreada (Dzib-Castillo et al. 2014 y Durán et al. 2006) y posiblemente a cambios ambientales y topográficos de cada uno de estos sitios. En cuanto a la composición florística, los resultados del presente estudio indican que las familias Rubiaceae y Fabaceae fueron las más dominantes con ocho y cinco especies, respectivamente. Estos resultados coinciden con lo documentado por otros estudios realizados en la Península de Yucatán (Zamora-Crescencio et al. 2011) y en otras entidades federativas de México, tales como: Guerrero (Pineda-García et al. 2007), Jalisco (Lott et al. 1987, Durán et al. 2006), Michoacán (Méndez-Toribio et al. 2014) y Veracruz (Palacios-Wassenaar et al. 2014).
Las especies con mayor densidad por unidad de área fueron G. floribundum (2 040 ind ha-1) y L. xuul (1 290 ind ha-1). Los altos valores de densidad de estas especies en el sitio de estudio posiblemente se deban a que son de rápido crecimiento (González-Iturbe et al. 2002). Además, la presencia de G. floribundum se relaciona por ser una planta melífera ampliamente reconocida y apreciada en la Península Yucatán, es fuente principal para la obtención de miel (Moguel-Ordóñez et al. 2005) y tiene propiedades antinflamatorias y analgésicas (Mendoza-Osorno et al. 2023). Mientras que L. xuul ha sido utilizada para construcción de techos, ya que es una especie no resistente para postes (Zamora-Crescencio et al. 2009).
Se han documentado diferentes valores de abundancia en las especies previamente mencionadas en la vegetación secundaria de la zona norte de Campeche. En este sentido, para L. xuul 1 070 ind ha-1; (Zamora-Crescencio et al. 2011), 1 920 ind ha-1 (Dzib-Castillo et al. 2014), 730 ind ha1 (Zamora-Crescencio et al. 2016), y 880 ind ha-1 (Zamora-Crescencio et al. 2018). En tanto que para G. floribundum 810 ind ha-1 (Dzib-Castillo et al. 2014), 1 580 ind ha-1 (Zamora-Crescencio et al. 2016) y 670 ind ha1 (Zamora-Crescencio et al. 2018). Complementariamente, en la SBC del estado de Yucatán se han reportado altas abundancias de estas especies (González-Iturbe et al. 2002).
Estructura de la vegetación
Con respecto a la distribución vertical, la comunidad vegetal de Lerma presentó individuos bajos, mostrando una estructura en forma de J inversa. El 70.7% de los individuos se encontraron dentro de la clase de altura más baja (1-4.9 m). En este sentido, se ha sugerido que la mayor presencia de individuos en esta clase de alturas pudiera indicar que se está llevando a cabo el remplazo de los individuos de mayor edad (Whitmore 1984). Ecológicamente esto pudiera ejemplificarse con el hecho de que muchos árboles pequeños y un dosel cerrado proporcionan humedad y humus, que son esenciales para la germinación de semillas y el crecimiento de árboles (Arya y Ram 2019). Así, es posible que en la comunidad de Lerma Campeche se esté llevando a cabo un proceso de regeneración; no obstante, esta premisa debe ser verificada en trabajos futuros.
Al igual que la estructura vertical, la distribución de individuos de especies en las diferentes clases diamétricas también presenta una tendencia en forma de J invertida, lo que pudiera indicar que la mayoría de los individuos son jóvenes y tienen tallos delgados ya que el 75.3% de los individuos caen dentro de la primera clase diamétrica. Este comportamiento indica que la estructura leñosa de la SBC se encuentra con un buen estado de regeneración (Zegeye et al. 2006). Adicionalmente, las especies G. floribundum, L. xuul, B. simaruba, L. latisiliquum, T. paucidentata y S. gaumeri, registraron altos valores de IVI en el sitio de estudio y fueron reportadas por Dzib-Castillo et al. (2014) como especies estructuralmente importantes para la SBC. La posible interpretación de los valores altos para estas especies podría estar en función de que ellas tienen una amplia tolerancia ecológica, ya que se presentan en diferentes etapas sucesionales desde los acahuales hasta las selvas maduras y se presentan con diferentes densidades y tamaños de diámetro, lo que hace que la SBC en el área de estudio sea más dinámica (Macario-Mendoza et al. 1995).
Conclusiones
La riqueza de especies leñosas en la sección de la SBC en la comunidad de Lerma Campeche fue de 40 especies, incluidas en 35 géneros y 19 familias botánicas. El sitio muestreado estuvo caracterizado por cuatro especies dominantes (Gymnopodium floribundum, Lonchocarpus xuul, Bursera simaruba y Lysiloma latisiliquum). La densidad de los individuos leñosos mostró un patrón decreciente con diámetros hasta alcanzar muy pocos individuos en las categorías superiores. Del total de individuos leñosos registrados, el 56.6% se agruparon en las familias Polygonaceae (3 spp.), Fabaceae (5 spp.) y Rubiaceae (8 spp.). Las especies que tuvieron más individuos fueron G. floribundum (204) y L. xuul (129). En función de las clases diamétricas, B. simaruba y L. latisiliquum presentaron valores diamétricos más altos (36 y 28.6 cm de DAP, respectivamente), con altos valores de importancia