Introducción
El calostro es la primera secreción mamaria compuesta por varios componentes (Baumrucker et al. 2010), como los antimicrobianos, lactoferrina, lisozima y lactoperoxidasa, así como las inmunoglobulinas (Ig) que proporcionan inmunidad pasiva al recién nacido y los factores de crecimiento que estimulan el desarrollo del intestino (Menon et al. 2010). Las becerras nacen agammaglobulinémicas debido a que la placenta de los bovinos no permite el traspaso de Ig de la madre al feto durante la gestación (Godden, 2008), por lo tanto la única fuente de inmunidad para los becerros es el calostro (Stelwagen et al. 2009). El factor más importante que influye en la salud de los becerros y la producción futura es garantizar una ingesta correcta de calostro con alto contenido de inmunoglobulinas tan pronto como sea posible después del nacimiento (Bielmann et al. 2010). Por lo tanto un calostro de mala calidad con una concentración inadecuada de inmunoglobulina contribuye a la transferencia fallida de la inmunidad pasiva en los becerros, lo que conduce a una mayor morbilidad y mortalidad (Drikic et al. 2018). La diarrea de los becerros y otras enfermedades digestivas representan más del 62% de toda la mortalidad de las vaquillas antes del destete (Baumrucker et al. 2010).
Por otra parte, la concentración de IgG se mide de forma rutinaria en el calostro y en la sangre de los becerros 24 a 48 h después del nacimiento para determinar la calidad del calostro (Gelsinger et al. 2015). Se han utilizado muchos métodos para evaluar la concentración de IgG del calostro. Sin embargo, se necesitan herramientas de evaluación mejoradas y validadas (Bielmann et al. 2010). Históricamente, la inmunodifusión radial (RID) ha sido el único método que mide directamente la IgG (Gelsinger et al. 2015). Sin embargo, la lectura de calidad de calostro con pruebas al pie de la vaca es determinantes en la toma de decisiones con respecto a la calidad del calostro. Existen diferentes métodos para evaluar la calidad de calostro y los utilizados a nivel de granja son el calostrómetro y el refractómetro de grados Brix (°Bx). El calostrómetro se puede utilizar para la evaluación cualitativa del calostro o para estimar la cantidad de Ig (Fleenor & Stott, 1980). El calostrómetro mide la gravedad específica de un líquido. En el caso del calostro, la gravedad específica está altamente correlacionada con los sólidos totales (ST), la proteína representa el 64% de ST y las globulinas representan un 47% de la proteína total (Fleenor & Stott, 1980). Por lo tanto, la gravedad específica del calostro se correlaciona con su contenido de inmunoglobulinas (Bielmann et al. 2010). Por su parte, el refractómetro de °Bx también es una herramienta rápida y convenientes para la clasificación de la calidad del calostro (Bartens et al. 2016). La refractometría Brix muestra un buen potencial para estimar de manera confiable las concentraciones de IgG en el calostro de vaca en múltiples laboratorios y puede recomendarse para ayudar en las decisiones de manejo del calostro en los hatos lecheros (Gamsjäger et al. 2020), además el refractómetro Brix es fácil de usar y es una herramienta más específica para detectar calostro de calidad adecuada (Bartier et al. 2015). Sin embargo, existen pocos estudios en donde se compare ambos métodos para determinar la calidad del calostro. Por lo tanto, el objetivo de este estudio fue determinar la correlación de la calidad del calostro de vacas lecheras de alta producción a través del refractómetro °Bx y calostrometría.
Material y métodos
General
Todos los métodos y manejo de las unidades experimentales utilizadas en este estudio fueron en estricto acuerdo con los lineamientos para el uso ético, cuidado y bienestar de animales en investigación a nivel internacional (FASS, 2010) y nivel nacional (NAM, 2010) con número de referencia de aprobación institucional UAAAN-UL/ 38111-4255010022706.
Localización del estudio y manejo de los animales
El presente estudio se realizó en un establo lechero en el norte de México, localizado 103°29´213” longitud oeste y 25° 92´199” latitud norte, a una altura de 1,100 msnm, durante el periodo de 2012-2014. Dicha explotación se ubica en una zona con altas temperaturas diurnas en época de verano (alrededor de 40° C) y radiación solar intensa, con una baja humedad relativa (THI medio= 80 con rango de 69.8 a 85.0) y la precipitación media anual es de 230 mm. Se tomaron 340 muestras de calostro fresco del mismo número de vacas inmediatamente después del parto. Las vacas donantes fueron de un hato de 2,300 vacas Holstein de una a cinco lactancias.
Recolección del calostro y análisis de las muestras
El calostro se recolectó de cada vaca de acuerdo a los procedimientos del establo mediante una máquina de ordeño previa desinfección de la ubre. El calostro se recolectó inmediatamente después del parto. Se tomaron en total 340 muestras de calostro de vacas Holstein. Para las muestras analizadas mediante el calostrómetro (Kessler/Chase) se utilizaron 500 mL a una temperatura de 22 °C, el cual tiene un rango de densidad específica de 1.027 - 1.076 el cual corresponde a 142-126.62 g/L de Ig. La clasificación de la calidad del calostro fue inferior <1.036 (<24.35 g/L de Ig), moderada 1.036-1.046 (24.35-49.82 g/L de Ig) y alta >1.046 (>49.82 g/L de Ig) (Fleenor & Stott, 1980). Las muestras analizadas con el refractómetro digital de °Bx (MISCO Palm Abbe #PA203 US Patent 10880) con un rango de medición del 0% al 56%, se usaron 60 μL de calostro a temperatura ambiente para llenar el disco de medición y se registró el porcentaje Brix (%) para determinar los sólidos totales (Quigley et al. 2013). El refractómetro se calibró usando agua destilada antes de su uso y se lavó con agua destilada entre muestras.
Análisis Estadísticos
En análisis de los datos se realizó con el paquete estadístico SPSS 25.0 se realizó un análisis de regresión lineal simple y se determinó el coeficiente de determinación (R²) de acuerdo al siguiente modelo:
Donde:
X= Variable independiente
Resultados
Los resultados se muestran en la figura 1. El coeficiente de correlación obtenido en este estudio mediante el análisis de regresión y se muestra en la figura 1. Donde se encontró con una R2 0.707 con un valor de P<0.0001.
Discusión
En nuestro estudio se obtuvo una r2 0.706 (P<0.0001) para ambos métodos siendo igualmente efectivos en determinar los niveles de Ig en el calostro. Fleenor & Stott (1980), demostraron que la gravedad específica que mide el calostrómetro se asociaba estrechamente con los sólidos totales (r2 0.900) y con la concentración de inmunoglobulinas (r2 0.699). En la actualidad, el calostrómetro es la herramienta más comúnmente utilizada para evaluar la calidad del calostro antes de alimentar a los terneros (National Animal Health Monitoring System, 2010). Sin embargo, Mechor et al. (1992), refieren que su frágil diseño, y que la toma de lectura es fuertemente condicionada por la temperatura del calostro al momento del análisis, esto lo hacen menos deseable como herramienta en la granja. Además, la densidad también se ve afectada por la raza, numero de lactancias y mes de parto (Morin et al. 2001). Por su parte, los refractómetros Brix funcionan bien a cualquier temperatura (Bielmann et al. 2010). los refractómetros digitales estiman los sólidos totales informando un valor Brix (medida del índice de refracción), que luego se correlaciona con la IgG calostral o las concentraciones de sólidos totales (Chigerwe & Hagey, 2014). Mientras que Bartens et al. (2016), mencionan que los refractómetros Brix proporcionaron la evaluación más precisa de la calidad del calostro y demostraron una excelente precisión en términos de repetibilidad. Bielmann et al. (2010) sugieren que el uso del refractómetro digital es muy útil para medir las concentraciones de Ig en muestras de calostro, y que al congelar y descongelar las muestras no altera las lecturas. Por lo tanto, muestran un potencial enorme para ser herramientas de manejo útiles que se incluirán en un programa de monitoreo de calostro para mejorar la salud de los terneros neonatales en las operaciones lecheras además son duraderos y accesibles y el proceso de calibración es sencillo.
Los resultados de este estudio mostraron que el calostro de las vacas muestreadas con refractómetro digital fue en promedio de 26.19±18 grado Brix. Estos valores se aproximan a los valores reportados por Bartier et al. (2015), ellos analizaron 569 muestras de calostro y su resultado obtenido fue de 24.3 como media y rango de 42.2. Morrill et al. (2015) reportaron valores medios de 21.2 con rango de 18.1, sin embargo, nuestros resultados difieren de los datos obtenidos por Johnsen et al. (2019), quienes obtuvieron lectura de refractometría de 19.7 ± 20.4. Mientras que Hassan et al. (2020) mostro estar un poco por debajo de los resultados obtenidos en esta prueba, sus valores fueron de 20.32 como media y rangos de 26.9. Estas diferencias, pueden deberse a los diferentes aspectos que afectan la calidad del calostro, principalmente la paridad, los días en periodo de secado, la raza y la alimentación de las vacas en el periodo de reto. Por otra parte, los datos de calostrometría de nuestra investigación fueron de 87.94±110. lo cual es similar a los reportados por Bartier et al. (2015), quienes analizaron 519 muestras de calostro y la media fue de 82.3±140.
Para proporcionar una salud óptima a los terneros recién nacidos, es esencial una ingesta suficiente de calostro de buena calidad. Los refractómetros Brix proporcionan herramientas rápidas y útiles y convenientes para la clasificación de la calidad del calostro (Bartier et al. 2015). Otra ventaja es la poca cantidad de leche para utilizarse (Buczinski & Vandeweerd, 2016). La refractometría Brix muestra un buen potencial para estimar de manera confiable las concentraciones de IgG en el calostro de vaca en múltiples laboratorios y puede recomendarse para ayudar en las decisiones de manejo del calostro en las granjas (Gamsjäger et al. 2020).
Conclusión
El refractómetro Brix tuvo una correlación aceptable con los valores obtenidos con el calostrómetro, lo cual puede ser una herramienta fácil de verificación de calidad de calostro de manera sencilla. Por lo tanto, la refractometría puede ser una herramienta eficaz que sustituya al calostrómetro.