Señor editor: Ante el incremento de la carga y mortalidad de cáncer colorrectal (CCR) en la Ciudad de México, existe el interés en su detección temprana mediante programas de tamizaje con prueba inmunoquímica-fecal (PIF) y colonoscopía diagnóstica. Para su implementación, es indispensable evaluar la capacidad diagnóstica usada, la capacidad máxima y la capacidad disponible de colonoscopías. Esta capacidad ha sido estimada en otros países mediante encuestas que evalúan el número de procedimientos por unidad de endoscopía.1
A continuación se presentan los resultados de la aplicación de la encuesta Survey of Endoscopic Capacity (Secap) de los Centers for Disease Control and Prevention de Estados Unidos, la cual fue modificada para México con el fin de evaluar la capacidad de colonoscopías en la capital del país.1,2,3 En nueve meses se identificaron 51 unidades de endoscopía públicas y privadas de las cuales, se excluyeron unidades en las que no se identificó responsable o que atendían población pediátrica (n=8) por lo que finalmente se invitó a participar a 43 unidades. Se recibieron 39 respuestas (90.7%) y se realizó un análisis descriptivo en el que se definió como capacidad usada al número de colonoscopías realizadas actualmente a la semana; capacidad máxima como el número máximo de colonoscopías que se podrían realizar sin mayor inversión de recursos, y como capacidad disponible la diferencia entre la capacidad máxima y la usada. Para calcular la capacidad anual de colonoscopías se multiplicó la capacidad semanal por el número de semanas laborales al año (50 semanas). Para estimar la necesidad de colonoscopías diagnósticas en Ciudad de México se consideró la población proyectada por el Consejo Nacional de Población (Conapo) de 50 a 74 años para 2021.4 Para el cálculo de población con riesgo mayor de CCR se consideró el número de casos prevalentes estimados de enfermedades inflamatorias intestinales y CCR en 2019,5 y el número estimado de población con historia de familiar de primer grado con CCR, considerando una prevalencia de 9.4%.6 La población restante se consideró población con riesgo promedio para CCR.
Se encontró que en la Ciudad de México actualmente se cuenta con 138 torres de endoscopía, 142 videocolonoscopios y 354 endoscopistas. Se reportó que la capacidad actual usada era de 49 700 colonoscopías anuales; la capacidad anual máxima fue de 72 950 colonoscopías, y la disponible de 23 250 colonoscopías anuales adicionales, de las cuales 40.2% (n=9 350) corresponde a instituciones públicas.
Considerando resultados mexicanos con 70% de retorno de PIF,* se estimó que, para un programa de tamizaje en 2021 con una positividad de 5%, se requería realizar un total de 70 133 colonoscopías (figura 1). La cantidad de colonoscopías necesarias disminuirían a 23 144 si la positividad de la PIF fuera de 1.65%, las cuales podrían ser cubiertas con la capacidad anual disponible. Para que estas colonoscopías pudieran ser cubiertas por las instituciones públicas, sería necesario obtener 0.66% de positividad de la prueba PIF (9 258 colonoscopías anuales).
Este es el primer estudio de capacidad diagnóstica para CCR que se realiza en nuestro país. Esta información es fundamental para poder planear un programa poblacional de tamizaje y diagnóstico de CCR. Es necesario evaluar la distribución de concentración de hemoglobina en heces con PIF en México para establecer el punto de corte que permitirá obtener una positividad que podría ser cubierta con la capacidad diagnóstica adicional actual. Además, será necesario evaluar la factibilidad de utilizar la capacidad disponible de unidades en instituciones privadas en un programa de tamizaje poblacional. En conclusión, en la Ciudad de México existe capacidad colonoscópica disponible que debe ser considerada en los programas de tamizaje de CCR.