INTRODUCCIÓN
El cultivo de fresa (Fragaria × ananassa Duch.) ha dependido de la utilización de desinfectantes del suelo; se han buscado alternativas con menos impacto al ambiente, pero que aseguren la eficiencia del sistema productivo. La prohibición mundial del bromuro de metilo (BM) a partir de 2005, el cual tenía un amplio espectro en el control de plagas y enfermedades del suelo y del que se hizo dependiente el cultivo de fresa, generó la necesidad de investigar nuevas alternativas como el 1,3 diclopropano, el dazomet, el metam sodio (MS), la cloropicrina y el dimetil disulfito, los cuales son productos permitidos en México por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios, COFEPRIS (Koron et al., 2014; Lloyd et al., 2016; López-Aranda et al., 2016a).
Metam sodio es considerado como el tercer desinfectante más utilizado en el mundo. Entre las principales ventajas que tiene el MS es un menor costo en relación con el resto de desinfectantes químicos y, al igual que el BM, tiene un amplio espectro de control de malezas, nematodos y hongos (Goodhue et al., 2005). Aunque el MS no proporciona un adecuado control contra Verticillium, uno de los principales patógenos en el cultivo de fresa, sí logra controlar la presencia de Rhizoctonia spp. (Camprubí et al., 2007).
Actualmente, la preferencia de los consumidores ha cambiado, y su exigencia en la utilización de productos más amigables con el ambiente ha llevado a buscar alternativas a los desinfectantes químicos. López-Aranda et al. (2016a) mencionaron que el uso de desinfectantes químicos del suelo ha disminuido en 30 % y que se requieren otras alternativas que no dañen al ser humano ni al medio ambiente. Entre los métodos alternativos utilizados está el uso de sustratos y el uso de micorrizas (Montoya-Martínez et al., 2019).
Entre los sustratos utilizados en la producción de fresa se encuentra el peat-moss (turba de Sphagnum), la perlita, la fibra de coco, la vermiculita y los residuos y materiales orgánicos, que coadyuvan en la mejora de las características de crecimiento como área foliar, peso seco y fresco, rendimiento, y mejoran parámetros de calidad de fruto como el contenido de solidos solubles totales (SST), ácido cítrico, ácido ascórbico, pH, y tamaño y forma de fruto (Alvarado et al., 2014; Lieten, 2013; Singh et al., 2010). Con respecto al peat-moss, se debe mencionar su desventaja económica y ambiental, que ha llevado a varios países a buscar sustitutos más rentables como la composta (Lanzi et al., 2009), la cual también ha sido sugerida como una vía no química para el control de plagas y agentes causales de enfermedades del suelo como Phythium ultimum, Rhizoctonia solani y Sclerotinia minor (Pane et al., 2011) y para asegurar el suministro de micro y macroelementos para la planta (Lloyd et al., 2016).
Por otra parte, las micorrizas pueden mejorar el desarrollo de las plantas y coadyuvar en el control de plagas y enfermedades del suelo. Las micorrizas forman relaciones simbióticas planta-hospedero y reciben compuestos de carbono de las plantas para subsistir y completar su ciclo biológico (Pandey et al., 2007). Esta simbiosis tiene efecto positivo en el crecimiento, desarrollo, producción y contenido de minerales en plantas de fresa (Fan et al., 2008); además, las protege contra patógenos como Sclerotium cepivorum, Fusarium oxysporum, Verticillium dahliae, Helicobasidium mompa, Rhizoctonia solani, Aphanomyces euteiche, Cylindrocladium, Macrophomina, Phytophthora, Pythium, Thielaviopsis y varios nemátodos (Gosling et al., 2006); también se ha reportado que las micorrizas tienen buen efecto en el incremento del metabolismo secundario, como la síntesis de fenoles y antocianinas (Baslam et al., 2013).
Debido a la poca información disponible relacionada con el efecto sobre variables de crecimiento y rendimiento que tienen los tratamientos químicos y biológicos en sustratos previos a la plantación en el cultivo de fresa, esta investigación se realizó con el objetivo de evaluar sustratos con o sin composta y tratados con MS o inoculados con micorrizas sobre el rendimiento y acumulación de materia seca en dos cultivares de fresa.
MATERIALES Y MÉTODOS
Localización del experimento y material vegetal
El experimento se llevó a cabo en invernadero de vidrio en Texcoco, Estado de México a 19° 30’ latitud N y 98° 53’ longitud O, a una altitud de 2250 m. Se utilizaron plantas de fresa del cultivar Zamorana obtenido en el programa de mejoramiento del Colegio de Posgraduados (CP) de México y del cultivar comercial Festival. Las plantas de ambos cultivares fueron extraídas a raíz desnuda entre los días 20 y 23 de noviembre de 2012, se mantuvieron en refrigeración a 0 °C hasta su plantación definitiva el 1 de marzo del 2013. Al momento de la plantación, las plantas tenían una corona mayor a 1.0 cm de diámetro y longitud de raíz de 10.0 cm aproximadamente. Dos meses después de la plantación se aplicó de forma semanal una solución Steiner compuesta de CaNO3, KNO3, MKP, MgSO4, KSO4, (NH4)2SO4 y una fórmula de Tradecorp® como fuente principal de micro-elementos. La solución nutritiva contaba con una conductividad eléctrica (CE) de 0.5 dS m-1 al inicio de la plantación hasta llegar a una CE de 1.5 dS m-1 en producción de fruta.
Tratamientos y diseño experimental
Se probaron tres métodos de tratamiento de los sustratos, dos sustratos y dos cultivares bajo un diseño completamente al azar con arreglo factorial 3 × 2 × 2. Cada uno de los 12 tratamientos contó con 20 repeticiones y la unidad experimental fue una planta en una maceta de 5 L. Los métodos de tratamiento de los sustratos consistieron en: a) testigo sin desinfección ni inoculación, b) desinfección química con metam sodio (MS) y c) inoculación con micorrizas. Para la desinfección química se utilizó un producto comercial con 42.5 % de MS como ingrediente activo y 57.5 % de diluyente, aplicado a una dosis de 1.0 L m-3 diluidos en 10 L de agua corriente. Para la inoculación con micorrizas se utilizaron 20 g de inóculo (10 g mezclados en el sustrato y 10 g directo a raíz, inoculando 350 esporas totales contenidas en 20 g de Funneliformis mosseae por unidad experimental al momento del trasplante.
El inóculo fue aislado en 2012 de la rizósfera de suelo de un huerto de mango (Mangifera indica L.) en el municipio de Manlio Fabio Altamirano, Veracruz, México. Las esporas se extrajeron al pasar una suspensión de 100 g de suelo seco por una serie de tamices graduados (Gerdemann y Nicolson, 1963); se verificó su taxonomía con base en los criterios de Schenck y Pérez (1990) para constatar la pureza de F. mosseae, la cual fue mayor al 95 % y sus esporas lucían intactas, con contenido lipídico visible, indicativo de un estado vital saludable (Walker, 1992). Con respecto a los dos tipos de sustrato, uno fue a base de peat-moss y perlita en una relación 1:1 con un pH de 3.44.10, mientras que el otro se elaboró a base de composta de ovino, peat-moss y perlita en una relación 2:1:1.
Variables respuesta
Producción de fruto
La cosecha fue a partir del 3 de octubre de 2013 y finalizó el 23 de marzo de 2014. Los frutos se cosecharon manualmente cada semana, localizando aquellos en etapa de madurez comercial (3/4 de coloración roja en epidermis). En cada recolección se registró el número y peso de frutos por planta con una balanza digital (Ohaus®, Modelo LS200, Parsipanny-Troy Hills, Nueva Jersey, EUA); al final se obtuvo el rendimiento de fruto acumulado por planta. Para esta variable, se utilizaron cinco repeticiones.
Distribución y acumulación total de materia seca
Se realizó un muestreo destructivo al final del experimento (9 de abril del 2014, 405 días después del trasplante) en el cual se evaluaron cinco repeticiones (plantas) por tratamiento, cada una fue separada en hojas, corona (tallo) y raíz. El peso seco de fruto se determinó inmediatamente después de la recolección de cada corte semanal durante el periodo de cosecha. Estas estructuras se sometieron a secado a 70 °C hasta alcanzar peso constante en una estufa (Modelo Blue M Pom-246F, White Deer, Pennsylvania, EUA). El peso seco de cada órgano se registró en una balanza digital (Ohaus® Modelo LS200). La materia seca total por planta se obtuvo por la suma de todos los órganos de la planta.
Análisis de datos
Los datos fueron analizados con el sistema de análisis estadístico SAS Ver. 9.1 (SAS Institute, 2001). Se realizó análisis de varianza mediante el procedimiento GLM. Las variables con diferencias significativas entre tratamientos se separaron por medio de una prueba de comparación múltiple de Tukey (P ≤ 0.05).
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Efecto del método de tratamiento del sustrato, del sustrato y del cultivar sobre los componentes de rendimiento
El rendimiento por planta varió entre 361 y 410 g/planta y las plantas produjeron de 31 a 34 frutos, con pesos que oscilaron entre 10.6 y 12.8 g, pero ni el tratamiento con metam sodio (MS) ni la inoculación con micorrizas afectaron de manera significativa los componentes de rendimiento (Cuadro 1). El metam sodio aplicado al suelo en el cultivo de fresa es efectivo para disminuir los patógenos del suelo e incrementar el rendimiento y número de frutos, aunque podría reducirse el peso fresco de fruto (Conti et al., 2014). La ausencia de efecto del MS sobre las variables de rendimiento podría explicarse por la poca o nula presencia de microrganismos patógenos que se esperaría de la mezcla de materiales estériles como el peat-moss y la perlita; también, aunque la composta se considera biológicamente alta en contenido de microrganismos, es aceptado que la etapa termofílica durante el compostaje asegura la disminución de agentes patógenos, por lo cual se esperaría poca patogenicidad de este material en el sustrato de cultivo.
Factores y niveles | Rendimiento (g/planta) | Frutos por planta | Peso de fruto (g/fruto) |
---|---|---|---|
Tratamientos pre-plantación de sustrato (TP) | |||
Testigo | 392.28 a | 34.10 a | 11.73 a |
Metam sodio | 361.57 a | 31.60 a | 11.72 a |
Micorriza | 379.74 a | 32.75 a | 11.63 a |
Sustratos (S) | |||
Peat + moss + perlita (1:1) | 388.72 a | 32.87 a | 12.12 a |
composta + | 367.00 a | 32.77 a | 11.27 b |
Peat + moss + perlita (2:1:1) | |||
Cultivares (C) | |||
Festival | 345.50 b | 32.93 a | 10.59 b |
Zamorana | 410.23 a | 32.70 a | 12.79 a |
Interacciones | |||
C × TP | ns | ns | ns |
C × S | * | * | ns |
TP × S | ** | * | ns |
C × TP × S | ns | ns | ns |
Medias con letras iguales dentro de la misma columna y factor no son estadísticamente diferentes (Tukey, P ≤ 0.05). ns: no significativo, *: significativo a P ≤ 0.05, **: significativo a P ≤ 0.01.
Las micorrizas, por su parte, han demostrado ser eficientes para incrementar el crecimiento y rendimiento del cultivo al protegerlo de patógenos del suelo por su simbiosis con la raíz de la planta y al coadyuvar en la absorción de minerales (Fan et al., 2008; Gosling et al., 2006); sin embargo, al igual que con el MS, esta ventaja podría desaparecer en sustratos con baja carga de patógenos como los estudiados y la ventaja en la absorción de minerales podría no darse en cultivos que crecen en sustratos ricos en minerales disponibles para la planta (Alvarado-Raya, 2017), como se esperaría de los sustratos fertilizados con solución nutritiva en este experimento.
Al observar las interacciones de los factores, se encontró significancia en la interacción entre el método de tratamiento del sustrato y tipo de sustrato para rendimiento y número de fruto (Figuras 1a y 1b). Al comparar las medias de las interacciones de cada nivel y de cada factor fue evidente que la inoculación de micorrizas resultó en mayores rendimientos y peso de fruto por planta cuando se cultivó en sustratos sin composta. El pH del sustrato de composta en este experimento alcanzó valores de 7.2 a 7.3, mientras que el del sustrato sin composta tuvo un pH de 3.4 a 4.1. McMillen et al. (1998) encontraron que la alcalinidad de un sustrato puede reducir la colonización de la micorriza debido a que inhibe la germinación de esporas y el desarrollo de la hifa en la raíz, lo que provoca disminución en el crecimiento y producción de la planta (Robinson Boyer et al., 2016).
El tipo de sustrato afectó de manera significativa al peso de fruto, el cual fue mayor cuando no se utilizó composta en el sustrato (Cuadro 1). Existen reportes que mencionan que el rendimiento de fresa y el número de fruto por planta se ve incrementado cuando se adiciona composta o vermicomposta al suelo o sustrato (Alvarado et al., 2014; Arancon et al., 2004; Hammad et al., 2014); sin embargo, otros estudios mencionan que la adición de composta en el cultivo de fresa disminuye su rendimiento (Abu-Zhara y Tahboub, 2008) y peso fresco en fruto (Alvarado et al., 2014). Se debe considerar que el uso de composta en el sustrato podría disminuir, incrementar o no afectar el rendimiento del cultivo, lo cual va a depender del tipo de composta usada ya que puede diferir en propiedades físicas, químicas y biológicas (Lloyd et al., 2016).
Con respecto a los cultivares, Zamorana tuvo un rendimiento y peso de fruto significativamente superior a Festival (Cuadro 1). Zamorana prosperó en los dos sustratos estudiados, pero en el sustrato con composta el rendimiento fue superior a Festival (Figura 2). El mayor peso de fruto y rendimiento en Zamorana se debió al incremento en materia seca de fruto (Cuadro 2), cuya acumulación es un parámetro altamente relacionado con la producción (Fernandez et al., 2001).
Factores y niveles | Hoja | Raíz | Corona | Fruto | Total |
---|---|---|---|---|---|
Tratamientos Pre-plantación de Sustrato (TP) | |||||
Testigo | 9.79 a | 4.67 a | 6.82 a | 34.38 a | 55.65 a |
Metam sodio | 10.59 a | 4.95 a | 6.91 a | 31.84 a | 54.30 a |
Micorriza | 11.05 a | 4.33 a | 6.08 a | 33.30 a | 54.78 a |
Sustratos (S) | |||||
Peat + moss + perlita (1:1) | 11.34 a | 6.04 a | 6.98 a | 34.16 a | 58.52 a |
Composta + | 9.61 b | 3.26 b | 6.22 a | 32.18 a | 51.28 b |
Peat + moss + perlita (2:1:1) | |||||
Cultivares (C) | |||||
Festival | 10.88 a | 5.06 a | 7.21 a | 30.38 b | 57.09 a |
Zamorana | 10.07 a | 4.23 a | 5.99 b | 35.96 a | 52.71 a |
Interacciones | |||||
C × TP | ns | ns | ns | ns | ns |
C × S | ns | ns | ** | * | * |
TP × S | * | ns | ns | ** | ** |
C × TP × S | ns | ns | ns | ns | ns |
Medias con letras iguales dentro de la misma columna y factor no son estadísticamente diferentes (Tukey, P ≤ 0.05). ns: no significativo, *: significativo a P ≤ 0.05, **: significativo a P ≤ 0.01.
Efecto del método de tratamiento del sustrato, del sustrato y del cultivar sobre la acumulación de materia seca
La aplicación de MS y la inoculación con micorriza no afectaron la distribución de materia seca dentro de la planta; la adición de composta al sustrato redujo la materia seca acumulada en hoja, raíz y materia seca total. En comparación con Festival, Zamorana tuvo menor materia seca acumulada en corona, pero mayor materia seca acumulada en fruto (Cuadro 2). Los fumigantes químicos pueden incrementar el crecimiento vegetativo (raíz) de frambuesa (Rubus idaeus) debido a la disminución de la población de patógenos del suelo (López-Aranda et al., 2016b). De igual manera, la inoculación con micorrizas en fresa mejora significativamente el peso seco de la hoja (Castellanos-Morales et al., 2012) y el peso seco de raíz (Li et al., 2010; Matsubara et al., 2009); sin embargo, en sustratos con baja carga de patógenos, como los utilizados en esta investigación, la utilización de estos tratamientos resultó innecesaria. En lo que respecta al efecto del sustrato en la acumulación de materia seca, los pesos secos de la hoja, raíz, tallo y fruto de fresa se incrementan al adicionar composta o derivados de vermicomposta en el suelo o el sustrato de crecimiento (Alvarado et al., 2014; Arancon et al., 2004; Hammad et al., 2014); en cambio, Abu-Zahra y Tahboub (2008) no encontraron diferencias significativas en el peso seco de planta de fresa cuando utilizaron diferentes compostas (ovino, avícola y bovino). Es necesario señalar que el efecto benéfico de la composta en cultivos como el de fresa depende de su origen y del tipo de composta que se utiliza (Lloyd et al., 2016).
Se observaron interacciones significativas entre los efectos de sustrato y tratamiento de sustrato antes de plantación, éstos afectaron la acumulación de materia seca de hoja, de fruto y total de la planta (Cuadro 2). Al analizar las combinaciones de los factores, se observó que la inoculación de micorrizas al sustrato incrementó de manera significativa la materia seca de hoja, fruto y total cuando no hubo composta en el sustrato (Figuras 3a, 3b y 4); en este sentido, Alvarado-Raya (2017) encontró que el efecto promotor de crecimiento que las micorrizas pueden tener en plántulas de durazno (Prunus persica) se diluye cuando se comparan plantas inoculadas o no con micorrizas, mientras crecen en sustratos con compostas.
En relación con los cultivares, se observó significancia del efecto de interacción entre cultivar y sustrato sobre la acumulación de materia seca en corona, fruto y total de la planta (Cuadro 2). Lo anterior resultó de la mayor acumulación de materia seca en las coronas de Festival en comparación con las de Zamorana cuando crece en el sustrato sin composta (Figura 5a), lo que contrasta con la mayor acumulación de materia seca en fruto de Zamorana cuando se cultivó en los sustratos con composta (Figura 5b). El hecho que Zamorana haya acumulado más materia seca en su fruto, lo ubica como un cultivar con mejor potencial que Festival para producción en sustratos, en maceta y bajo condiciones de invernadero.
CONCLUSIONES
La aplicación de metam sodio y la inoculación de micorriza a los sustratos, previo a la plantación, no tuvieron efecto significativo sobre los componentes de rendimiento ni sobre la distribución de materia seca en la planta de fresa, por lo que estos tratamientos no son necesarios para producir fresa en los sustratos estudiados. La adición de composta al sustrato disminuyó el peso seco de la raíz y el peso seco total de la planta, así como el peso fresco de fruto, pero no afectó el rendimiento total de la planta; únicamente en plantas inoculadas con micorrizas la composta en el sustrato resultó en un menor peso seco de hoja y fruto, así como menos frutos por planta, lo que se tradujo en un menor rendimiento por planta. Zamorana fue el cultivar más productivo y con un mayor peso fresco de fruto comparado con Festival, por lo que el primero tiene mejor potencial para cultivarse en sustratos.