Introducción
El mundo del trabajo ha estado experimentando grandes cambios debido a la globalización y al desarrollo tecnológico, por lo que cada día se necesita estar interconectado, lo que genera desafíos y oportunidades para las instituciones de educación superior (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico [OECD], 2017). A esta situación se ha sumado el enfrentamiento a la pandemia de covid-19 y la necesidad de formar competencias en el uso de plataformas virtuales para el trabajo profesional en la modalidad no presencial.
La innovación tecnológica y otros cambios en la sociedad del conocimiento han provocado que muchos puestos de desempeño manual se pierden diariamente debido a las nuevas competencias exigidas, como el conocimiento y aplicación de la inteligencia artificial, la automatización de procesos, el uso de plataformas virtuales, entre otros. Al mismo tiempo, nuevos puestos y roles son creados, de lo cual se infiere que los trabajadores de hoy en día necesitan flexibilidad, competencias bien fundadas y un aprendizaje de toda la vida para asegurar y aumentar su empleabilidad o su capacidad de emprender. Estas fuerzas externas están moldeando el contexto en el cual las instituciones académicas operan, lo que significa que dichos fenómenos afectan la estrategia de las instituciones, sus programas de estudio e inclusive su propio financiamiento. Además de los desafíos relacionados con el incremento de la competitividad, se generan, por otro lado, oportunidades en la cooperación internacional, en la formación en línea que permiten nuevas modalidades no presenciales de la movilidad estudiantil (Balan, 2017).
Las universidades fueron testigos de un cambio de siglo que generó una serie de transformaciones en los abordajes de enseñanza superior, entre los que cabe destacar la expansión de la educación superior a todos los sectores poblacionales, condición que Kearney (2009) conceptualiza como una educación universal, más allá de una educación para las élites, así como la apertura transnacional del conocimiento como recurso esencial de ventaja competitiva en una economía y sociedad global, interconectada y en red.
Para muchos, esta no es simplemente una época de transformaciones, sino el nacimiento de una nueva era (Santana, 2013); en palabras de Michavila (2011), “el final de una época y el nacimiento de otra” (p. 18). Una era del conocimiento, cuya gestión y organización es responsabilidad de la sociedad en su conjunto, pero adquieren un papel esencial todo aquello vinculado a la universidad como principal institución responsable del avance del capital profesional (Hargreaves y Fullan, 2014), acrecentado a partir de declararse la pandemia de covid-19 a principios de 2020 con el cambio hacia la llamada nueva normalidad en los escenarios previstos pos pandemia.
Aun cuando existen evidencias de mejoras en la cobertura en educación superior en El Salvador, persisten los problemas relacionados con la calidad y la pertinencia, situación que ha sido abordada por diversos autores, entre ellos la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional [USAID/El Salvador], 2012), que en su informe El Salvador: evaluación de la educación superior y recomendaciones, señala:
Durante las últimas décadas, El Salvador ha dado pasos importantes para elevar el número de trabajadores altamente calificados a través del incremento de la matrícula nacional en la educación superior.
Sin embargo, el sistema salvadoreño de educación superior todavía enfrenta muchos retos. Las tasas de graduación son bajas, las instituciones de educación superior (IES) encaran múltiples problemas para brindar una educación de calidad, y las desigualdades entre estudiantes son amplias. Más aún, existe una incongruencia significativa entre las ofertas académicas y las demandas del mercado laboral. El reto es el de ofrecer una educación pertinente, oportunidades de investigación y perspectivas de empleo para los salvadoreños talentosos con el fin de garantizar una oferta suficiente de trabajadores que cuenten con habilidades académicas de alta calidad para mejorar la economía nacional. El reto es el de ofrecer una educación pertinente, oportunidades de investigación y perspectivas de empleo para los salvadoreños talentosos con el fin de garantizar una oferta suficiente de trabajadores que cuenten con habilidades académicas de alta calidad para mejorar la economía nacional (p. 1).
Otro informe, determinó que “el producto de la educación superior no está respondiendo a las necesidades del mercado laboral salvadoreño” (Fundación para la Educación Integral Salvadoreña [Fedisal], 2013, p. 11), situación que se agrava porque hasta hace poco la educación tenía valor en la medida en que ofrecía un conocimiento sólido y perdurable (Bauman, 2007), pero en estos tiempos la saturación y complejidad del conocimiento acumulado es difícilmente transmisible en forma de educación inicial (Alonso, Fernández y Nyssen, 2009), por lo que el conocimiento que se genere en la universidad tendrá que ser un bien social y económico que deberá ser actualizado para poder enfrentar los cambios que se generen desde una perspectiva inestable y líquida -como diría Bauman (2007)- y global (Haug y Villalta, 2011).
Varios autores manifiestan la importancia de realizar un ejercicio de reflexión sobre la función de las universidades, entre los que destacan Mundy (2005) y Rengifo-Millan (2015). Todos ellos indican la necesidad de construir un modelo educativo adecuado a los desafíos de la sociedad en la actualidad, desde el punto de vista social, económico, político y cultural en continuo desarrollo, una condición que ha sido abordada en algunas de las pocas investigaciones precedentes, entre las cuales resalta el estudio que llevó a cabo USAID/El Salvador (2012), en el cual se recalca:
Las universidades no suelen analizar el comportamiento de los mercados laborales vinculándolos a las carreras que ofrecen, de tal manera que sus ofertas de carreras se definen sobre la base de la demanda de los estudiantes, y no en términos de las necesidades del mercado laboral (p. 52).
Esta apreciación no es solamente de parte de los empleadores, sino que -como señalan Alonso et al. (2009)- es compartida por los estudiantes y egresados, quienes resienten excesiva burocracia, programas académicos obsoletos y distanciados del desempeño del trabajo real.
La formación continua es, por ende, un factor estratégico y clave en el desarrollo de las competencias de sus trabajadores para lograr los objetivos propuestos, y tener una formación por competencias no significa tener un título (Mourshed, Patel y Suder, 2014).
El reciente concepto de profesionalidad de los nuevos perfiles asociados, basados no tanto en conocimientos como en la capacidad de adaptarlos a las necesidades y requerimientos de su entorno laboral. El desafío es grande para las instituciones formadoras, tomando en cuenta que existen dificultades para seguir el ritmo de los sistemas productivos cuando cambian a un ritmo tan rápido.
Se puede apreciar que el papel de las universidades para cumplir con este acometido se encuentra siendo examinado por diversos organismos, en especial para estudiar el desajuste formativo la Organización Internacional del Trabajo (OIT, 2015), con la finalidad de conseguir compatibilidad entre la enseñanza universitaria y las necesidades del mundo del trabajo, lo que llegó a la Cumbre de las Naciones Unidas celebrada en 2015, en cuya Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible se incluyen entre sus metas aumentar el número de jóvenes y adultos que tienen las competencias necesarias, en particular técnicos y profesionales para acceder al empleo, el trabajo decente y el emprendimiento.
Así pues, la formación debe estar orientada, fundamentalmente, a responder en forma eficiente y eficaz a las demandas reales, económicas y sociales de las empresas y diseñar un modelo de formación que contenga las competencias tanto genéricas como específicas alineadas entre el binomio universidad-empresa, que mejoren la empleabilidad y la capacidad de emprender de sus graduados, entendiendo la empleabilidad bajo un concepto amplio, que no se relacione solamente con favorecer la entrada del graduado al mundo laboral, sino también con las posibilidades de desarrollo profesional dentro y fuera de las fronteras de las organizaciones (Rodríguez Espinar, Prades, Bernáldez y Sánchez Castiñeira, 2010).
En este contexto, diagnosticar la pertinencia de los planes de estudio de carreras universitarias con respecto a las necesidades del mundo laboral es un primer paso para instrumentar acciones de mejora continua que incidan en la formación superior pertinente. Sin embargo, este tema que parece tan importante -es decir, la pertinencia- no es muy considerado en los escasos modelos de evaluación de programas de estudio existentes en El Salvador, pues son modelos orientados a evaluar si los resultados obtenidos corresponden a la misión y objetivos planteados; es decir, se evalúa la eficacia del programa, aunque lo que se quiere es averiguar si los objetivos planteados satisfacen necesidades e intereses reales de los beneficiarios y de las partes interesadas. En pocas palabras, evaluar la pertinencia del programa. Si bien USAID (2012) coincide con lo afirmado por Fedisal (2013) en cuanto a que el producto de la educación superior salvadoreña no está respondiendo a las necesidades del mundo laboral, lo cierto es que a la fecha ninguno de los citados estudios especifican cuáles son las carreras que presentan déficits formativos ni mucho menos en qué áreas de formación o tipo de competencias existe una posible brecha, con el agravante de que en su mayoría siguen un enfoque cualitativo y, por ende, subjetivo en cuanto a su aproximación a la realidad. En suma, no se identificaron estudios relacionados a la evaluación de las percepciones de las partes relacionadas de programas de formación superior, con métodos cuantitativos y aplicación de estadística inferencial que, haciendo uso de métodos paramétricos o no paramétricos, permitan evaluar la pertinencia de los planes formativos.
Desde las consideraciones anteriores, el enfoque principal que se siguió en la presente investigación giró en torno al objetivo de proponer una metodología que permita determinar la pertinencia de los programas de estudio en la formación de competencias alineadas a las necesidades reales de la sociedad, expresadas a través de sus requerimientos a las empresas de producción de bienes y servicios, para ser aplicado al caso de la carrera de Administración de Empresas de la Región Oriental de El Salvador.
Se trata de una investigación en la episteme positivista de la ciencia, con un enfoque con énfasis en el paradigma cuantitativo en la que participaron profesionales graduados de la licenciatura en Administración de Empresas entre los años 2010-2015, docentes de las universidades de la Región Oriental de El Salvador, así como empresarios, utilizando un cuestionario adaptado del que originalmente utiliza el proyecto Tuning América Latina, en donde se recoge información relevante de acuerdo con las preguntas de investigación, estructurado de forma tal que se aborden el sistema de formación de competencias, el dominio y la importancia de estas para generar empleabilidad o capacidad de emprendimiento en los graduados, en las condiciones del entorno laboral.
La investigación se unió a la idea de diversos autores quienes indican que para conseguir la armonía entre la universidad y el mundo laboral es necesario desarrollar competencias como elementos integradores de un círculo capaz de impulsar el crecimiento económico duradero y sostenible, la calidad de empleo y la productividad. En ese sentido, la OIT (2011) afirma que una mejor formación “alimenta la innovación, la inversión, la diversificación económica y la competitividad, además de la movilidad social y ocupacional, y por tanto, la creación de más trabajos que a la vez sean más productivos y gratificantes” (p. 2).
Cabe señalar que existen muchas investigaciones a nivel internacional que estudian las condicionantes para la inserción laboral de los egresados a través de sus condiciones de empleabilidad (Sánchez-Elvira, López-González y Fernández-Sánchez, 2010), todos dejando demostrada la importancia de la empleabilidad en el proceso de inserción laboral y de las expectativas de autoeficacia en los procesos de búsqueda de oportunidades laborales de los universitarios a la hora de conseguir empleo. Sin embargo, solo se ajustan a los paradigmas impuestos al modelo educativo de la era industrial (el cual está en crisis), y no a la era actual de la información, el conocimiento y la influencia basada en el liderazgo para formar competencias en capacidad de emprendimiento.
Derivado de lo anterior, las preguntas de investigación están orientadas a responder lo siguiente: ¿existen diferencias entre las percepciones de los empresarios, docentes y egresados de la carrera de Administración de Empresas en las universidades de la Región Oriental de El Salvador en relación con la importancia de las competencias genéricas formadas? Esto significaría, en el caso de que existieran diferencias significativas, que los planes de estudio deberían actualizarse; en cambio, si no existieran diferencias significativas, se podría decir que los planes de estudio de la carrera de Administración de Empresas están alineados con las percepciones de los demás grupos de interés.
Sin embargo, en ambos casos, la pregunta anterior permite también identificar cuáles son las competencias genéricas mejor valoradas por su importancia, según la percepción de los tres principales grupos de interés en la formación universitaria de la carrera de Administración de Empresas en las universidades de la Región Oriental de El Salvador, así como cuáles son aquellas que más se requieren en las empresas del Oriente de El Salvador y, por lo tanto, las que más empleabilidad y capacidad de emprender pueden generar a los graduados. Esto puede constituir una guía de actualización permanente del programa de Administración de Empresas de la de la Región Oriental de El Salvador.
La metodología propuesta, además, puede servir de referencia para evaluar y adaptar los planes de estudio de las carreras universitarias de otras instituciones de educación superior con sus respectivos entornos empresariales o industriales, los cuales son cada vez más dinámicos y demandantes. La robustez de la metodología propuesta se basa en las pruebas de confiabilidad y validez, mediante los estadísticos de alfa de Cronbach y KMO y la flexibilidad en que, en el caso de que se cumplan los supuestos de normalidad y homocedasticidad, se puede aplicar la prueba paramétrica de varianza de una vía Anova, y en el caso de que no se cumpla uno de estos supuestos la prueba no paramétrica de Kruskal- Wallis.
Método
Diseño de la investigación
La investigación se realizó bajo la episteme positivista con un diseño en el paradigma cuantitativo transversal, descriptivo y no experimental. Es transversal porque la recogida de datos se realizó en un solo momento, en cada unidad de análisis; descriptivo porque -según Hernández Pina, Maquilón Sánchez y Cuesta Sáenz de Tejada (2006)- este tipo de diseño describe un aspecto de la realidad, y a su vez mide de manera independiente los conceptos y variables a las que se refiere el estudio.
En cuanto a su alcance, este es de tipo descriptivo. También Hernández, Fernández y Baptista (2010) expresan que “los estudios descriptivos buscan especificar las propiedades, las características y los perfiles de personas, grupos, comunidades, procesos, objetos o cualquier otro fenómeno que se someta a un análisis” (p. 80). Silva (2008) considera que la investigación descriptiva se enfoca en caracterizar un objeto de estudio o una situación concreta: señala sus características y propiedades, interpreta lo que es y describe la situación de las cosas en el presente.
La investigación es no experimental porque no se pretendió manipular intencionalmente las variables de estudio, lo cual contrasta con lo afirmado por Hernández, Fernández y Baptista (2007), quienes afirman que desde el diseño no experimental “no se construye ninguna situación, sino que se observan situaciones ya existentes, no provocadas intencionalmente en la investigación que se realiza” (p. 205), como en esta investigación, en donde se exploran las percepciones de los docentes, graduados y empleadores sobre la formación universitaria y las competencias en su momento actual.
Muestra
Los elementos de la población en estudio fueron profesionales graduados entre los años 2011 a 2015 de cualquiera de las cinco universidades que ofrecen la carrera en los cinco departamentos que componen la región (como se muestra en la Tabla 1), ocupados en cualquier sector o subsector de la actividad económica; asimismo, el empresariado se seleccionó de cualquier sector económico, para lo cual se determinó el tamaño de la muestra utilizando el Censo Económico de la Dirección General de Estadísticas y Censos de El Salvador, año 2012; mientras que los profesores de la carrera, a partir de los datos estadísticos del Ministerio de Educación.
Universidad | 2011 | 2012 | 2013 | 2014 | 2015 | Total | % |
---|---|---|---|---|---|---|---|
Universidad de El Salvador-FMO | 45 | 47 | 58 | 54 | 54 | 258 | 23.85 |
Universidad de Oriente | 70 | 82 | 75 | 79 | 65 | 371 | 34.29 |
Universidad Gerardo Barrios | 64 | 71 | 25 | 61 | 104 | 325 | 30.04 |
Universidad Doctor Andrés Bello | 21 | 10 | 37 | 10 | 3 | 81 | 7.48 |
Universidad Modular Abierta | 6 | 19 | 6 | 11 | 5 | 47 | 4.34 |
Total | 206 | 229 | 201 | 215 | 231 | 1082 | 100 |
Fuente: Elaboración propia con base en datos del Ministerio de Educación (2016)
La metodología propuesta permitió determinar la relación entre la percepción de la importancia que tienen las competencias declaradas en los programas de la carrera de Administración de Empresas por los grupos de interés para satisfacer los requerimientos de empleabilidad o la capacidad de emprendimiento con respecto a la pertinencia de dichas competencias para la inserción en el mercado laboral o desarrollar proyectos de emprendimiento en negocios de bienes y servicios. Esta metodología se aplica mediante un instrumento cuantitativo (encuesta) que permite comprobar las siguientes hipótesis de la investigación:
H1: Existe una brecha entre las competencias genéricas de los graduados de la licenciatura Administración de Empresas en la Región Oriental de El Salvador y las demandadas por las empresas, por lo que hay diferencias en la percepción de la importancia que tienen estas competencias por parte de los grupos de interés.
H0: No existe una brecha entre las competencias genéricas de los graduados de la licenciatura Administración de Empresas en la Región Oriental de El Salvador y las demandadas por las empresas, por lo que no hay diferencias en la percepción de la importancia que tienen estas competencias por parte de los grupos de interés.
La información recabada por la encuesta se codificó en una base de datos en el programa Ms Excel y en el programa estadístico SPSS V. 25 para Windows, para realizar análisis descriptivos a efecto de conocer la distribución de frecuencias y estadísticos de posición y dispersión, como la media y la desviación típica en cada uno de los ítems definidos en esta investigación. Al no presentar normalidad los datos, se dejó al margen la prueba paramétrica de análisis de varianza de una sola vía (Anova), aplicando la prueba no paramétrica de Kuskal-Wallis, la cual compara las percepciones de las medianas de los distintos grupos de interés con respecto a la pertinencia del programa de estudio de la licenciatura en Administración de Empresas.
Instrumento
El instrumento utilizado fue un cuestionario derivado del proyecto Tuning América Latina, el cual una vez adaptado al contexto de investigación y realizadas las pruebas de confiabilidad y validez, se aplicó a la muestra de estudio. La Tabla 2 presenta el detalle de la muestra por grupo de interés.
Sujeto de estudio | Población | Muestra | Porcentaje |
---|---|---|---|
Graduados | 1082 | 301 | 27.82 |
Empleadores | 26 103 | 379 | 1.45 |
Profesores | 94 | 76 | 80.85 |
Total | 22 279 |
Fuente: Elaboración propia con base en datos del Ministerio de Educación (2016)
Para determinar la fiabilidad del instrumento se calculó el estadístico alfa de Cronbach, el cual arrojó los resultados que se muestran en la Tabla 3.
Alfa de Cronbach | Alfa de Cronbach basada en elementos estandarizados | N de elementos |
---|---|---|
0.965 | 0.966 | 54 |
Fuente: Elaboración propia
Se pudo determinar que el resultado estadístico de 0.966 es significativo, por lo que se concluye que el instrumento de investigación es fiable, pues se encuentra por encima del 0.7.
Para analizar la validez del instrumento se utilizó el test KMO (Kaiser, Meyer y Olkin), el cual relaciona los coeficientes de correlación observados entre las variables. Cuanto más cerca de 1 tenga el valor obtenido del test KMO, implica que la relación entre las variables es alta. Si KMO ≥ 0.9, el test es muy bueno; notable para KMO ≥ 0.8; mediano para KMO ≥ 0.7; bajo para KMO ≥ 0.6, y muy bajo para KMO < 0.5. El resultado del test KMO de la presente investigación es el mostrado en la Tabla 4.
Medida Kaiser-Meyer-Olkin de adecuación de muestreo | N de elementos |
---|---|
0.874 | 54 |
Fuente: Elaboración propia
La prueba KMO indica un valor de 0.874 que se aproxima a 0.90, por lo que se concluye que la validez del instrumento es muy buena.
Determinadas la confiabilidad y la validez del instrumento, se realizaron las pruebas de normalidad a los ítems para determinar el procedimiento estadístico más adecuado para el contraste de hipótesis mediante la prueba de Kolmogórov-Smirnov, la cual es una prueba de bondad de ajuste que sirve para verificar si las puntuaciones que se han obtenido de la muestra siguen o no una distribución normal. Es decir, permite medir el grado de concordancia existente entre la distribución de un conjunto de datos y una distribución teórica específica. El resultado de la prueba se muestra en la Tabla 5.
Dado que el p valor es de 0.0001, menor al nivel de significancia definido de 0.05, se demuestra que los datos nos siguen una distribución normal, por lo cual se justifica la realización de pruebas no paramétricas para el contraste de hipótesis de investigación, en este caso particular, la prueba de Kruskal-Wallis.
Resultados
Con el análisis de los resultados de la encuesta se establecieron las correspondientes comparaciones para encontrar si existen diferencias significativas entre los grupos de interés implicados en el estudio. Los resultados encontrados fueron organizados de acuerdo con cada uno de los bloques de competencias planteadas en los cuestionarios. La Tabla 6 muestra que 26 de las 27 competencias analizadas fueron calificadas con un promedio superior a 2.99, límite mínimo fijado en la investigación para determinar si dichas competencias son críticas o importantes. Solamente una de las 27 está por debajo de dicha puntuación, por lo que se considera complementaria o no necesaria.
Competencias | N | Mínimo | Máximo | Media | Desviación |
---|---|---|---|---|---|
Compromiso con la calidad | 756 | 2.0 | 4.0 | 3.6562 | 0.48893 |
Compromiso ético | 756 | 2.0 | 4.0 | 3.5926 | 0.54498 |
Capacidad de trabajo en equipo | 756 | 2.0 | 4.0 | 3.4882 | 0.54302 |
Capacidad de motivar y conducir hacia metas comunes | 756 | 2.0 | 4.0 | 3.4593 | 0.58590 |
Habilidades interpersonales | 756 | 2.0 | 4.0 | 3.4213 | 0.57291 |
Habilidades en el uso de las tecnologías de información y de las comunicaciones | 756 | 2.0 | 4.0 | 3.4213 | 0.65026 |
Capacidad para tomar decisiones | 756 | 2.0 | 4.0 | 3.4199 | 0.53229 |
Capacidad de aprender y actualizarse permanentemente | 756 | 2.0 | 4.0 | 3.4132 | 0.59452 |
Capacidad de comunicación oral y escrita | 756 | 2.0 | 4.0 | 3.4003 | 0.64125 |
Capacidad para identificar, plantear y resolver problemas | 756 | 2.0 | 4.0 | 3.3648 | 0.55756 |
Conocimientos sobre el área de estudios y la profesión | 756 | 2.0 | 4.0 | 3.3202 | 0.56609 |
Capacidad para actuar en nuevas situaciones | 756 | 2.0 | 4.0 | 3.3058 | 0.56129 |
Capacidad de aplicar los conocimientos en la práctica | 756 | 1.0 | 4.0 | 3.2751 | 0.7180 |
Capacidad creativa | 756 | 1.0 | 4.0 | 3.2218 | 0.66003 |
Capacidad para organizar y planificar el tiempo | 756 | 2.0 | 4.0 | 3.2126 | 0.61685 |
Capacidad para formular y gestionar proyectos | 756 | 1.0 | 4.0 | 3.1995 | 0.67980 |
Capacidad de abstracción, análisis y síntesis | 756 | 1.0 | 4.0 | 3.1916 | 0.61734 |
Compromiso con la preservación del medio ambiente | 756 | 1.0 | 4.0 | 3.1850 | 0.85392 |
Habilidad para trabajar de forma autónoma | 756 | 1.0 | 4.0 | 3.1759 | 0.73974 |
Valoración y respeto por la diversidad y multiculturalidad | 756 | 1.0 | 4.0 | 3.1732 | 0.81472 |
Habilidad para buscar, procesar y analizar información procedente de fuentes diversas | 756 | 1.0 | 4.0 | 3.1535 | 0.64951 |
Compromiso con su medio sociocultural | 756 | 1.0 | 4.0 | 3.1325 | 0.78220 |
Responsabilidad social y compromiso ciudadano | 756 | 1.0 | 4.0 | 3.1089 | 0.69913 |
Capacidad crítica y autocrítica | 756 | 2.0 | 4.0 | 3.1089 | 0.72677 |
Habilidad para trabajar en contextos internacionales | 756 | 1.0 | 4.0 | 3.0853 | 0.78876 |
Capacidad de investigación | 756 | 1.0 | 4.0 | 3.0066 | 0.76776 |
Capacidad de comunicación en un segundo idioma | 756 | 1.0 | 4.0 | 2.7254 | 0.97441 |
Fuente: Elaboración propia
Para efectos de comprobar la hipótesis nula planteada y tomando en cuenta que la distribución de la muestra no sigue una distribución normal, se realizó la prueba no paramétrica de Kruskal-Wallis y se obtuvieron los resultados mostrados en la Tabla 7.
Con un nivel de significancia de 5 % (0.05), da como resultado un estadístico de la prueba Kruskal-Wallis = 1.659 y un grado de significancia asintótica de 0.436, superior al nivel de significancia de 0.05. Por tanto, se rechaza la hipótesis de investigación que afirma que existen diferencias significativas entre la opinión de los empleadores con respecto a la de los graduados y la de los profesores. En otras palabras, se concluye que no existe diferencia alguna entre las opiniones de los tres grupos porque un p-valor = 0.436 evidencia que H1 es rechazada, por lo que no se rechaza la hipótesis nula de igualdad.
El detalle de la importancia en promedio que cada grupo le da a cada competencia es el que se muestra en la Tabla 8.
Competencias | Graduados | Empleadores | Profesores |
---|---|---|---|
Compromiso con la calidad | 3.6047 | 3.7150 | 3.5921 |
Compromiso ético | 3.6367 | 3.5515 | 3.6184 |
Capacidad de trabajo en equipo | 3.5880 | 3.4301 | 3.3684 |
Capacidad de motivar y conducir hacia metas comunes | 3.4385 | 3.4776 | 3.4868 |
Habilidades interpersonales | 3.4053 | 3.4485 | 3.3816 |
Habilidades en el uso de las tecnologías de información y de las comunicaciones | 3.2890 | 3.5752 | 3.1842 |
Capacidad para tomar decisiones | 3.3488 | 3.4485 | 3.5658 |
Capacidad de aprender y actualizarse permanentemente | 3.2867 | 3.5145 | 3.4133 |
Capacidad de comunicación oral y escrita | 3.2957 | 3.4881 | 3.3816 |
Capacidad para identificar, plantear y resolver problemas | 3.2824 | 3.4116 | 3.4868 |
Conocimientos sobre el área de estudios y la profesión | 3.1827 | 3.4063 | 3.4342 |
Capacidad para actuar en nuevas situaciones | 3.2126 | 3.3668 | 3.4211 |
Capacidad de aplicar los conocimientos en la práctica | 3.1993 | 3.3061 | 3.4211 |
Capacidad creativa | 3.2027 | 3.2322 | 3.2632 |
Capacidad para organizar y planificar el tiempo | 3.3023 | 3.1266 | 3.3289 |
Capacidad para formular y gestionar proyectos | 3.0897 | 3.2902 | 3.2237 |
Capacidad de abstracción, análisis y síntesis | 3.2193 | 3.1003 | 3.5526 |
Compromiso con la preservación del medio ambiente | 3.3156 | 3.4776 | 3.4868 |
Habilidad para trabajar de forma autónoma | 3.0432 | 3.2559 | 3.3684 |
Valoración y respeto por la diversidad y multiculturalidad | 3.1894 | 3.1451 | 3.2105 |
Habilidad para buscar, procesar y analizar información procedente de fuentes diversas | 3.1429 | 3.1319 | 3.2895 |
Compromiso con su medio sociocultural | 3.1761 | 3.0712 | 3.1974 |
Responsabilidad social y compromiso ciudadano | 3.3090 | 2.9499 | 3.0921 |
Capacidad crítica y autocrítica | 3.1229 | 3.0686 | 3.2368 |
Habilidad para trabajar en contextos internacionales | 2.9402 | 3.2375 | 2.9342 |
Capacidad de investigación | 3.0598 | 2.9578 | 3.0658 |
Capacidad de comunicación en un segundo idioma | 2.5967 | 2.7968 | 2.9342 |
Fuente: Elaboración propia
De las 27 competencias, solo la Capacidad de comunicación en un segundo idioma es considerada como no necesaria o complementaria por los tres grupos de estudio. Sin embargo, se identifican otras competencias consideradas como no necesarias en forma independiente por cada uno de los grupos analizados. Los empleadores, por ejemplo, opinan que la Responsabilidad social y compromiso ciudadano y la Capacidad de investigación no son necesarias; los graduados y los profesores de la carrera, por su parte, piensan que además de la Capacidad de comunicación en un segundo idioma, la Habilidad para trabajar en contextos internacionales no es una competencia necesaria.
La Tabla 9 muestra las competencias más valoradas y las que menos interés representan para los empleadores, de acuerdo con el promedio de nivel de importancia mostrado.
Competencias | Promedio de importancia | Lugar |
---|---|---|
Compromiso con la calidad | 3.7150 | 1.º |
Habilidades en el uso de las tecnologías de información y de las comunicaciones | 3.5752 | 2.º |
Compromiso ético | 3.5515 | 3.º |
Capacidad de aprender y actualizarse permanentemente | 3.5145 | 4.º |
Capacidad de comunicación oral y escrita | 3.4881 | 5.º |
Capacidad de motivar y conducir hacia metas comunes | 3.4776 | 6.º |
Habilidades interpersonales | 3.4485 | 7.º |
Capacidad para tomar decisiones | 3.4485 | 8.º |
Capacidad de trabajo en equipo | 3.4301 | 9.º |
Capacidad para identificar, plantear y resolver problemas | 3.4116 | 10.º |
Conocimientos sobre el área de estudios y la profesión | 3.4063 | 11.º |
Capacidad para actuar en nuevas situaciones | 3.3668 | 12.º |
Capacidad de aplicar los conocimientos en la práctica | 3.3061 | 13.º |
Capacidad para formular y gestionar proyectos | 3.2902 | 14.º |
Habilidad para trabajar en forma autónoma | 3.2559 | 15.º |
Habilidad para trabajar en contextos internacionales | 3.2375 | 16.º |
Capacidad creativa | 3.2322 | 17.º |
Valoración y respeto por la diversidad y multiculturalidad | 3.1451 | 18.º |
Habilidad para buscar, procesar y analizar información procedente de fuentes diversas | 3.1319 | 19.º |
Capacidad para organizar y planificar en el tiempo | 3.1266 | 20.º |
Capacidad de abstracción, análisis y síntesis | 3.1003 | 21.º |
Compromiso con su medio sociocultural | 3.0712 | 22.º |
Capacidad crítica y autocrítica | 3.0686 | 23.º |
Compromiso con la preservación del medio ambiente | 3.0633 | 24.º |
Capacidad de investigación | 2.9578 | 25.º |
Responsabilidad social y compromiso ciudadano | 2.9499 | 26.º |
Capacidad de comunicación en un segundo idioma | 2.7968 | 27.º |
Fuente: Elaboración propia
Las competencias más valoradas por los empresarios están relacionadas con aspectos de calidad, uso de tecnologías de información y comunicación, actualización constante, manejo de habilidades comunicativas, ética, capacidad de resolver problemas, habilidades interpersonales, formación continua y trabajo en equipo.
Por el contrario, las competencias menos valoradas son el manejo de un segundo idioma, la responsabilidad social, el compromiso con el medio ambiente y la capacidad crítica y autocrítica.
Discusión
Abordar la pertinencia de los programas educativos en la formación de las competencias que necesita el sector empresarial resulta fundamental como medida diagnóstica para identificar áreas de oportunidad que deben atenderse con estrategias de formación adecuadas, y así eventualmente disminuir índices de déficit formativo que desencadenan baja empleabilidad, ineficiencia e improductividad.
Del análisis estadístico de los resultados de la encuesta se pudo comprobar que 26 de las 27 competencias genéricas consideradas para la carrera de Administración de Empresas por el Proyecto Tuning para América Latina se consideran importantes para los grupos de interés, lo que significa que diseñar programas y estrategias didácticas para formar estas competencias debe ser prioridad para las universidades de la Región Oriental de El Salvador.
La competencia que no es considerada con el mismo nivel de importancia es la de Capacidad de comunicación en un segundo idioma, lo que -según criterio de los autores- representa un problema cultural debido a la creencia de que los graduados solo son formados para ser empleados y resolver problemas de la profesión a escala local. Esto resulta contradictorio con la propuesta de Tuning, pues lo considera como un requerimiento de la globalización para garantizar la movilidad y la capacidad no solo de emplearse localmente, sino de emprender a escala internacional.
Por otra parte, resulta urgente atender la formación efectiva de las competencias que han resultado ser las más demandadas por las empresas en la zona Oriental, áreas de oportunidad manifestada por los empresarios de las diferentes empresas de los cinco departamentos que componen la región, ya que el orden de prioridad o importancia que brindan a las competencias no implica que tengan la misma puntuación en su nivel de desarrollo.
De manera general, estos hallazgos evidencian la necesidad de atender los retos que plantea una formación superior basada en competencias en El Salvador y que estas estén alineadas a las necesidades del mundo laboral, lo cual, sin desatender los matices que se presentan, coinciden con los resultados encontrados en estudios similares en otros países de Latinoamérica.
Aunado a lo anterior, tratándose de un programa de formación superior, lo aquí descrito se ajusta a los resultados de Tuning (2007), de manera específica en cuanto a que las competencias planteadas resultan pertinentes para el perfil de egreso de un licenciado en Administración de Empresas de acuerdo con la percepción de las partes interesadas, aunque no coincide con las deficiencias detectadas por USAID (2012) respecto a la alineación de las competencias formadas con las necesidades de las empresas, ya que esta investigación se centra en las competencias genéricas propuestas, mientras que el informe de USAID (2012) se enfoca principalmente en las competencias específicas para cambiar la percepción de las partes interesadas.
En cuanto a la fortaleza del presente estudio se puede mencionar la posibilidad de aplicar la metodología propuesta para diagnosticar la pertinencia de programas académicos de nivel superior con un método cuantitativo, comparando la percepción de las diferentes partes interesadas, lo que podrá servir de referente o punto de partida para aplicarlo en otras carreras, instituciones de educación superior u otros territorios. Para esto, lógicamente, se deben realizar las adecuaciones pertinentes según las características específicas del entorno para determinar las acciones de mejora que deben plantearse y emprenderse en el binomio universidad-empresa. De ese modo se puede facilitar la empleabilidad de los graduados, así como la productividad y eficiencia empresarial.
Finalmente, y a pesar de lo anterior, debe reconocerse que existen limitantes en los resultados debido a que no pueden generalizarse a todas las competencias de la carrera, pues el estudio se refiere en exclusiva a las genéricas. Por otro lado, tampoco se indagó sobre las formas en que se trabaja en el aula respecto a estrategias de enseñanza que favorezcan el desarrollo competencial ni al desempeño in situ de los graduados.
Conclusiones
La metodología propuesta permite determinar la relación entre la percepción de la importancia que tienen las competencias declaradas en los programas de la carrera de Administración de Empresas por los grupos de interés para satisfacer los requerimientos de empleabilidad o la capacidad de emprendimiento con respecto a la pertinencia de dichas competencias para la inserción en el mercado laboral o desarrollar proyectos de emprendimiento en negocios de bienes y servicios. Por tanto, esta metodología puede servir de referencia para realizar estudios similares en diferentes contextos de la región con pruebas paramétricas y no paramétricas para adaptar los planes de estudio de las carreras universitarias con sus respectivos entornos empresariales, los cuales son cada vez más dinámicos y demandantes.
También se concluye que la metodología propuesta por el Proyecto Tuning América Latina tiene un carácter exploratorio, propositivo y no vinculante, igual que otros estudios (USAID, 2012, El Salvador: evaluación de la educación superior), aunque los ítems de investigación pueden aprovecharse para la realización de pruebas estadísticas robustas como en esta investigación, demostrando que pueden realizarse la prueba paramétrica de análisis de varianza de una sola vía (Anova) o la prueba no paramétrica de Kuskal-Wallis dependiendo del cumplimiento de los supuestos de normalidad y homocedasticidad.
Con un nivel de significancia de 5 % (0.05), el estadístico de la prueba Kruskal Wallis de 1.659 y con un p valor de 0.436 superior al nivel de significancia de 0.05, se rechaza la hipótesis de investigación H1 (existe una brecha entre las competencias genéricas de los graduados de la licenciatura Administración de Empresas en la Región Oriental de El Salvador y las demandadas por las empresas).
En otras palabras, se concluye que no existe diferencia alguna entre las opiniones de los tres grupos porque un p valor = 0.436 evidencia que no se rechaza la hipótesis nula de igualdad de H0 (no existe una brecha entre las competencias genéricas de los graduados de la licenciatura Administración de Empresas en la Región Oriental de El Salvador y las demandadas por las empresas).
En suma, la investigación permitió establecer aquellas competencias en las que los empresarios asignan mayor importancia para los graduados de la carrera de Administración de Empresas de la Región Oriental de El Salvador. De hecho, en orden de preferencia, las primeras seis competencias son Compromiso con la calidad, Habilidades en el uso de las tecnologías de información y de las comunicaciones, Compromiso ético, Capacidad de aprender y actualizarse permanentemente, Capacidad de comunicación oral y escrita y Capacidad de motivar y conducir hacia metas comunes.
Por el contrario, las seis competencias genéricas menos importantes para los empresarios ordenadas con base en su calificación son Capacidad de comunicación en un segundo idioma, Responsabilidad social y compromiso ciudadano, Capacidad de Investigación, Compromiso con la preservación del medio ambiente, Capacidad crítica y autocrítica y Compromiso con su medio sociocultural.
Prospectiva
Después de haber expuesto el camino que llevó a elaborar y validar la metodología para determinar la pertinencia de programa de estudios, aplicar la metodología y evaluar la pertinencia de la carrera de Administración de Empresas y determinar las competencias genéricas más requeridas por las empresas, se espera que la labor contribuya en lo posible a plantear los fundamentos y bases que permitan a otras investigaciones e investigadores proseguir con la mejora continua de argumentos y ahondar en este tema relevante para el contexto empresarial nacional e internacional. Asimismo, se hace necesario desarrollar acciones investigativas que actualicen de forma dinámica el perfil del profesional de la titulación abordado en esta investigación. Además, continuar evaluando la pertinencia en otras carreras para responder a la necesidad existente del problema señalado en artículos y estudios sobre la calidad de la formación en nuestro país, así como en el fortalecimiento de la formación de competencias en las universidades para que sean afines con la realidad y funciones necesitadas en el sector real, sin dejar de lado el compromiso ético y social que completan una educación integral del ser.
Como elemento potenciador se podría llegar a diseñar un instrumento en paralelo que complemente las técnicas utilizadas para el acopio de datos que podría dinamizarse como instrumento de autoevaluación tanto para docentes como para educandos, el cual también podría medir el nivel de aprensión y desarrollo de competencias necesarias para ser un profesional competente en el área de la administración de empresas.
Por último, a continuación se mencionan algunas líneas de investigación en las que se podría profundizar:
Análisis de nuevas tecnologías para la formación de competencias a nivel universitario.
Evaluación de las competencias prioritarias en el marco de la nueva normalidad poscovid-19.
Evolución de la ciencia y la tecnología y su aplicación en el mundo de la administración de empresas.
Estudio sobre la pertinencia de las competencias específicas para los administradores de empresas.
Aplicación de la estadística para generar modelos predictivos de empleabilidad y productividad.
Factores contextuales que condicionan la formación de competencias a nivel universitario en El Salvador.