¿Qué significa realizar una investigación en medicina familiar? Al respecto se podría argumentar que el estudio de la dinámica familiar, o de la funcionalidad familiar, o del ciclo vital familiar, es lo que caracteriza la investigación en medicina familiar, pero esto no es del todo cierto. En realidad, los temas señalados podrían corresponder a líneas de investigación propias de la investigación en medicina familiar, pero no necesariamente conciernen a investigación en medicina familiar ¹.

¿Pero entonces qué es lo que distingue a la investigación en medicina familiar de cualquier otra especialidad médica? Pareciera que lo que determina a qué especialidad corresponde la investigación es la unidad de análisis, entendiendo por ella el objeto en torno al cual se determinan las características y la indagación. Desde esta perspectiva, la mujer embarazada, el infante, el adulto joven, el paciente geriátrico, el sometido a un proceso quirúrgico o aquel con un proceso oncológico, o asumir cualquiera de ellos y agregarle la dinámica familiar o la funcionalidad familiar, o cualquier otro tema de familia, no necesariamente significará investigación en medicina familiar^2,3.

Cada una de las entidades señaladas corresponden a unidades de análisis y estas son propias de cada una de las especialidades existentes. En ese tenor, la investigación en medicina familiar deberá identificar su unidad de análisis propia y definirla claramente como la familia, entendida esta no como un discurso, sino como una unidad que tiene características propias y que está integrada por un conjunto de individuos en los cuales las particularidades de cada uno de ellos en conjunto se integran en un ente que se constituyen como unidad de análisis: la familia⁴.

Entonces, desde esta perspectiva se podrá investigar el control metabólico en la familia con diabetes mellitus, o se podrá investigar la adherencia al tratamiento como factor asociado al control de la hipertensión en la familia geriátrica, o incluso se podrá investigar la funcionalidad familiar en la familia pediátrica con sobrepeso, o la dinámica familiar en la familia con enfermedad renal crónica, o en cualquier familia con alguna patología en particular, y corresponderán al ámbito de la investigación en medicina familiar^4,5.

Sin duda el planteamiento deberá ser discutido por los médicos familiares dedicados a realizar investigación en medicina familiar. En tanto no lo conceptualicen y se continúe investigando al paciente geriátrico, la mujer embarazada o el niño como unidad de análisis, estarán lejos del ámbito de la investigación en medicina familiar; incluso cuando el tema corresponda al ciclo vital familiar, o a la funcionalidad familiar, estarán alejados de la investigación en medicina familiar. Es verdad que estas corresponderán a líneas de investigación, pero podrían ser líneas de investigación de cualquier especialidad. Mientras la caracterización del objeto de estudio siga siendo el individuo y no las particularidades de la familia, la investigación continuará lejos de constituirse como investigación en medicina familiar; será investigación realizada por el médico familiar, pero lejos del enfoque propio de la investigación en medicina familiar.

La investigación en medicina familiar debe definir y conceptualizar la unidad de análisis que le corresponde y, al interior, las líneas de investigación. El debate académico está abierto.