Editor asociado: Héctor Gómez de Silva Garza
Introducción
El chipe garganta amarilla (Setophaga dominica) es una especie de ave paseriforme de la familia de los parúlidos que anida en el oriente de América del Norte (AOU 2015). Es un ave migratoria que en invierno se distribuye en las Antillas, México (costa este y el sur del país, hasta la península de Yucatán, América Central y el Caribe (BirdLife International 2013). Este chipe mide 13.5 cm y pesa 10 g., es blanco con gris, con la garganta amarilla. Los adultos muestran la garganta y el pecho amarillo brillante y la coronilla negra (más extensa en el macho). El resto de la región superior es gris pizarra y las dos barras alares son blancas y gruesas. Las cejas, los lados del cuello y el vientre son blancos. Las listas a través del ojo y que bajan por la mejilla son negras, y estas últimas se unen con las listas negras gruesas de los costados. La maxila es negra, la mandíbula gris y las patas negruzcas. Los individuos inmaduros son similares, pero presentan los flancos, terciales, cobertoras de las primarias y con frecuencia la espalda teñidos de parduzco, sobre todo las hembras (CONABIO 2016).
Esta especie difiere de otros integrantes del género Setophaga (antes Dendroica), en su área de distribución en verano, que es más hacia el sur en el continente; y durante el invierno su área de distribución es más al norte en el continente. Esta especie tiene una población residente en un área mayor en el sur de Estados Unidos que otras especies del mismo género (McKay y Hall 2012). En México, su presencia está restringida a la época de estancia migratoria neotropical y ésta se concentra principalmente en la costa este y el sur del país, hasta la península de Yucatán (Navarro y Peterson 2007; Figura 1). A pesar de presentar un área de distribución muy amplia (BirdLife International 2013), en las bases de datos de Lepage (2016) y del Global Biodiversity Information Facility GBIF (2016) no hay registros de su presencia en el estado de Chihuahua.
Descripción del avistamiento
Registré dos individuos de Setophaga dominica posando en un mezquite (Prosopis spp) el 12 de enero de 2016 a las 11:19 h en un predio particular sin vegetación, localizado dentro de la zona urbana de Aldama, Chihuahua (UTM 13N 0410882 E, 3189923 N; Datum WGS84, 1275 msnm). La observación duró cerca de 50 min, tiempo suficiente para apreciar el comportamiento característico de la especie: búsqueda de alimento en la corteza de troncos y ramas inclinadas con su largo pico (NAS 2016); asimismo, tomé las fotografías necesarias para su identificación. Tres fotografías de buena calidad fueron obtenidas con una cámara reflex fotográfica Canon t3 con un lente 55-250 mm f/ 4.0-5.6. La distancia mínima de observación se logró en cerca de 4 m. En ellas se logró apreciar la garganta y pecho amarillo brillante que dan el nombre común a la especie, así como la combinación blanca y negra en el resto de la cabeza que semeja una máscara (Stephenson y Whittle 2013). El ave (Figura 2) mostró el comportamiento típico que describen McKay y Hall (2012), movimientos poco característicos para un chipe, y que asemejan más a los de un trepador. Esta habilidad es inusual entre la mayoría de los chipes, lo cual reduce la competencia por alimento entre diferentes especies (Wildscreen Arkive 2016).
En fechas posteriores a la primera observación logré encontrar nuevamente a los individuos en la misma locación y en horarios similares, en ocasiones a un individuo solitario o incluso el par. Realicé una fotografía de un individuo, con fecha anterior al registro, aun cuando desconocía la identidad de la especie, motivo por el cual decidí iniciar con la identificación del ave, lo que fue un nuevo registro de S. dominica en el estado de Chihuahua. El día 4 de enero a las 11:14 h obtuve la primera imagen de un individuo de esta especie (Figura 3). Posteriormente registré otro individuo el 12 de enero y los días posteriores 13, 14 y 16 de enero a las 10:05, 11:28 y 12:03 h, respectivamente. El 19 de enero nuevamente observé el par de individuos entre las 11:33 y las 11:35 h., y fotografié un individuo (Figura 4) el día 26 de enero a las 12:46 h; finalmente, obtuve una fotografía más el 2 de febrero.
Discusión
Lepage (2016) clasifica a esta especie como “Presente” en Estados Unidos en los estados del este del país, incluido Texas, pero como “Rara” en estados al oeste como Nuevo México y Arizona. Para el norte de México, con los mismos criterios de búsqueda de “reportes de presencia en el estado”, el ave se encuentra “Presente” en los estados de Baja California, Sonora y Coahuila y como “Rara” en Baja California Sur y Sinaloa. Los estados de Chihuahua y Durango no se encuentran clasificados en esta base de datos por lo que no hay registros actuales de su presencia.
Esté avistamiento representa el primer registro en Chihuahua, incrementando su listado a 481 especies (I. Moreno com. pers.). BirdLife International (2013) menciona que “la tendencia de la población parece estar aumentando…” por lo que quizá éste puede ser un motivo por el que la especie pudiera estar incrementando su área de distribución, pero considero que este reciente primer reporte es aún insuficiente para determinar incrementar el área de distribución de la especie hasta el estado de Chihuahua.
La baja abundancia en reportes, la escasa participación de las personas como observadores de aves y el poco interés en cuanto a estudios sobre sus distribuciones, son factores que influyen en el desconocimiento de la presencia en el estado de Chihuahua de esta u otras especies de aves. No obstante, la especie se clasifica como migratoria rara en el estado de Texas, siendo casual durante primavera en la región de Trans-Pecos, Texas (Lockwood y Freeman 2014). En Nuevo México, existen por lo menos 48 registros por el New Mexico Bird Records Committee (1973-2011), donde la especie es consi derada migratoria muy rara, con un total de 30 reportes en primavera (marzo-mayo), y relativamente pocos durante invierno (diciembre-enero, n = 30) (NMOS 2016). En el estado de Sonora hay un registro: un individuo alimentándose sobre una acacia con otros chipes en Quitovac, un pueblo localizado a 40 km del sureste de Sonoita, el 15 de mayo de 1982 (Russell y Monson 1998); lo cual sugiere que posiblemente el estatus sea muy similar a lo largo del estado de Chihuahua.
Plataformas de ciencia ciudadana como eBird/aVerAves contribuyen a incrementar los registros de las aves, y la educación ambiental ayuda a elevar la participación de las personas en su conservación. Sin embargo, deberán de incrementarse los estudios de distribución de las aves en todo México. Rivera-López et al. (2016) consideran que se podría incrementar incluso hasta el doble, los reportes de especies consideradas como accidentales o migratorias neotropicales en México, si se incrementa el número de observadores de aves activos que reporten sus avistamientos en plataformas de ciencia ciudadana como eBird/aVerAves.