Sr. Editor:
Los trabajos del Dr. Leonardo Viniegra Velázquez, Educación y proyecto vital en un mundo en colapso civilizatorio1,2 y Aptitudes y educación médica en tiempos obscuros3 dibujan la disyuntiva en la que están la atención médica y, en consecuencia, la educación médica en el momento actual: ¿la salud es un derecho o una mercancía? Si la salud es un derecho la educación médica también tiene que serlo.
La afirmación del Dr. Viniegra en cuanto a que la época en que vivimos se caracteriza por "el agotamiento y la ruina de una civilización basada en el lucro sin límites que mercantiliza lo más sublime y lo más vil de la condición humana, y hace rentable las peores atrocidades y la devastación planetaria" apunta a la tendencia a comercializar la relación médico-paciente y la educación médica.
La atención médica considerada como mercancía es parte de lo que... "imprime en el imaginario de las y los estudiantes una idea de progreso basada en el poder adquisitivo y de consumo." y contribuye a que se perciban como bienes vendibles que entre más estudien y más sepan mejor se podrán vender. Esto, además, lleva a la despersonalización, a la deshumanización y a la desprofesionalización médicas, al grado de que la profesión médica corre el riesgo inminente de desaparecer como tal y de transformarse en una ocupación técnica desprovista de. "connotaciones dignificantes del progreso: superación espiritual, intelectual, moral y convivencial de la condición humana". La medicina nace del deseo de ayudar a otros, de la bondad y del amor al prójimo; crece y se desarrolla con la ciencia y se corrompe cuando el lucro le hace olvidar su razón de ser.
La educación médica que contribuye a la pasividad, el individualismo, la competitividad, el consumismo y la especialización excluyente favorecen una visión mercantil de la atención y de la educación médica; pro mueven la deshumanización al subordinar los valores propios de la medicina a los que rigen el "mercado". Así, la desprofesionalización médica y su contraparte educativa, la educación médica pasiva, son un capítulo más del "colapso civilizatorio y de los tiempos obscuros". En este sentido, la educación médica participativa es una propuesta que favorece los valores de la profesión médica y de la atención médica como derecho.