Introducción
El acceso de las poblaciones al agua potable y servicios de saneamiento es vital para la salud humana, y tiene otros beneficios importantes que van desde lo identificable y cuantificable (costos evitados, tiempo ahorrado) hasta lo intangible (comodidad, bienestar, dignidad, privacidad y seguridad)1. Los servicios de agua y saneamiento ausentes, inadecuados o inadecuadamente administrados, exponen a las personas a riesgos prevenibles para la salud2,3.
En el Perú, la brecha de acceso al agua potable entre las zonas urbana y rural es grande. En las zonas urbanas el déficit de acceso al agua potable alcanza al 10.5 %, mientras en las zonas rurales el déficit es de 60,4%4,5. Las políticas de distribución y regulación del agua limpia, entre otros problemas, son los responsables de mantener a muchas personas pobres6.El desafío del acceso universal al saneamiento básico está en la sostenibilidad financiera del país7 y los responsables de la formulación de políticas deben concentrarse en los determinantes sociales que afectan a la salud8.
En Huancavelica, el 82.2% de las viviendas, no tienen servicio de saneamiento,4. La proporción nacional de niños menores de cinco años que vive en hogares con calidad adecuada de agua para consumo, alcanza solo a 19,5% del total9.
Los problemas de salud que son consecuencia directa de la falta de disponibilidad de agua segura es la parasitosis intestinal y diarreas, los que tienen nexos clínicos y epidemiológicos con la anemia y desnutrición 10,11. Los niños menores son más propensos a las enfermedades derivadas por falta de disponibilidad de agua segura12.
La presencia de parasitosis intestinal en los niños es un problema de salud pública, especialmente en las zonas rurales donde las condiciones de saneamiento básico aún no han mejorado. Los departamentos más afectados con esta problemática son Huancavelica, Puno y Cajamarca. En Huancavelica, zona donde se desarrolla el trabajo de investigación, las enfermedades infecciosas intestinales son la segunda causa de morbilidad en menores de un año. En el distrito de Cora-Cora, Ayacucho (departamento colindante con Huancavelica), el 96,05% de niños entre 2 y 10 años están parasitados por alguna especie. La tasa de prevalencia para G. Lamblia 30,22% y Entamoeba Histolytica es 20,89%, seguido por H. Nana y A. Lumbricoides13.
Las Enfermedades Diarreicas Agudas continúan siendo una causa importante de morbilidad en la niñez. Entre los años 2015 y 2016 se ha presentado un incremento de casos en la zona de Huancavelica. En el año 2015 se presentaron 956 casos con una tasa de 1.9. En el año 2016 se reportó 1206 casos con 2.4 como tasa, siendo el incremento en un 26.2%14.
La hemoglobina en niveles adecuados en niños menores de cinco años es importante para el normal crecimiento y desarrollo, ya que cumplen funciones fisiológicas importantes15,16. El nivel de anemia en niños de 6 a 36 meses de edad en el año 2013 a nivel nacional fue 39.4% mientras en Huancavelica muestra un nivel de 54.3%, y en la provincia de Angaraes un nivel de anemia de 52.7%17,18. La prevalencia de anemia en menores de cinco años confirma su importancia como problema de salud pública19.
El MINSA, órgano rector en salud, sostiene que la anemia y la desnutrición infantil constituyen problema de salud pública, ya que las cifras nacionales no se han reducido a pesar de haberse desarrollado diversas estrategias20.La propuesta de Plan Nacional para la Reducción de la Desnutrición Crónica Infantil y la Prevención de la Anemia en el País, periodo 2017 - 2021 tiene como objetivo reducir, en dicho periodo, la anemia en menores de 3 años al 20% a través del fortalecimiento de intervenciones efectivas en el ámbito intrasectorial e intersectorial21.
La educación y la salud están relacionadas y se refuerzan mutuamente, contribuyendo a ofrecer a la población la oportunidad de desarrollar plenamente su potencial humano, ya que es un arma poderosa para romper el ciclo de la pobreza, la enfermedad, la miseria y la persistencia intergeneracional del bajo nivel socioeconómico de la mujer22. No se trata solo de transmitir información, sino de desarrollar un proceso educativo que tiene como finalidad responsabilizar a los ciudadanos en la defensa de la salud propia y colectiva. Es un instrumento de la Promoción de la Salud y una función importante de los profesionales de la salud. El campo de acción es la comunidad, grupo o persona y debe tomarse en cuenta la realidad cultural y social. Se utilizan métodos de comunicación persuasiva, destinados a desarrollar conocimientos, actitudes y comportamientos para un estilo de vida saludable, a fin de lograr un empoderamiento con control sobre las decisiones conscientes y autónomas sobre su propia salud23. Tradicionalmente estaba ligado a la persona, actualmente conlleva la modificación de factores externos como ambientales y de la sociedad para que puedan participar activamente del mejoramiento de la calidad de vida, generando mejores condiciones.
La problemática de salud infantil es persistente en las zonas rurales, por tanto, se plantearon dos objetivos: Determinar la efectividad del programa de intervención en la disminución de enfermedades diarreicas agudas (EDAs), parasitosis y anemia en niños menores de cinco años. Como segundo objetivo del trabajo fue elaborar una propuesta de modelo de intervención con estrategias, basado en la experiencia.
Materiales y métodos
El estudio diagnóstico se realizó en tres comunidades rurales de la localidad alto andina de Huanca Huanca, Huancavelica, Perú. El trabajo tuvo diseño pre experimental con pre prueba y post prueba, cuya hipótesis fue la siguiente, Ha: El programa de intervención es efectivo en la disminución en el número de casos de diarreas, parasitosis y anemia en niños menores de cinco años. Ho: El programa de intervención no es efectivo en la disminución en el número de casos de diarreas, parasitosis y anemia en niños menores de cinco años.
El universo estuvo conformado por 151 niños menores de cinco años que fueron atendidos en el centro de salud en el período de tiempo de estudio. Se elige el muestreo no probabilístico propositivo y se realiza basado en criterios definidos por las investigadoras, ante la imposibilidad de obtener una muestra aleatoria, sin embargo, se asegura que los grupos relevantes estén representados, aplicando los criterios de inclusión y exclusión.
La imposibilidad que sea un muestreo probabilístico radica en que no todos los niños son atendidos directamente por sus madres, en algunos casos, atiende la abuela, madrina o hermana mayor. La zona de su vivienda no es cercana al centro de salud (zona donde se realizó el programa de intervención) o en otros casos sus madres salen de la zona para pequeñas ventas. El esquema del muestreo no probabilístico está representado de la siguiente manera: (Figura 1)
La detección de parasitosis se realizó con el Test de Grahan con 3 muestras seriadas de heces. La presencia de diarreas en los últimos 6 meses, se verificó en la historia clínica del niño. La presencia de anemia se identificó a través del dosaje de hemoglobina antes y después de la intervención con el Hemocue HB 201. La medición de hemoglobina en el ámbito rural y con un dispositivo de control portátil se ajustó a la altura del lugar de procedencia del niño. Para consolidar los datos se utilizó la ficha de parasitosis, anemia y diarrea; documento oficial del ministerio de salud utilizados en el Puesto de Salud de Huanca Huanca y Ccarapa.
La medición de la calidad del agua se realizó a través del TDS (Total Dissolved Solids), éste término es utilizado “para describir las sales inorgánicas y cantidades bajas de materia orgánica presente en el agua”24. Posterior a ello se hizo entrega del método de purificación de agua MadiDrop. El proyecto obtuvo la aprobación del comité de ética de la universidad. Los padres/cuidadores de los niños que participaron en el estudio, recibieron información sobre la naturaleza y objetivos del estudio y dieron su consentimiento informado.
El enfoque que se utilizó en la implementación del programa es el Modelo Transteórico de Cambio Conductual de Prochaska y Di Clemente. El programa duró 4 meses, el mismo que incluyó educación, monitoreo, visitas domiciliarias y demostraciones de alimentación rica en hierro.
El análisis estadístico se realizó utilizando el software SPSS v23. La efectividad del programa de intervención se demostró con los estadísticos paramétrico de T-Student y no paramétrico de Mc Nemar. Para la elaboración del modelo de intervención se analizaron los resultados obtenidos, las fortalezas y debilidades del programa, así como la selección de un marco teórico y filosófico de la propuesta.
Resultados
Fase diagnóstica
Al realizar la prueba de normalidad de Shapiro-Wilk, se encontró un p-valor menor a 0,05 para las variables diarreas y parasitosis de los grupos experimentales y del grupo control; por lo tanto, se demuestra que dichas variables no siguen una distribución normal, siendo necesario para la comprobación de la hipótesis de estudio una prueba no paramétrica. Por otro lado, la variable hemoglobina del grupo experimental y del grupo control presentaron p-valor>0,05, demostrando que sigue una distribución normal, en consecuencia, para la comprobación de la hipótesis de estudio fue necesaria una prueba paramétrica.
Para medir la efectividad del programa de intervención, a través de un pre y pos-test es necesaria la elección de una prueba que mida diferencias entre las medias de la población. En este caso, para la variable que siguió una distribución normal (Hb), se empleó la prueba T-Student para muestras relacionadas y para las variables que no siguieron una distribución normal, se empleó la prueba no paramétrica de McNemar, que mide un antes y después con alternativas de respuestas dicotómicas. (Tabla 1)
Hemoglobina (mg/dl) | Grupo experimental | T-Student | Grupo control | T-Student | |||||
IC 95% | t | P | C 95% | t | p | ||||
Inicial | Me | 9,515 | LI: -2,9 | -7,03 | ,000 | 10,295 | LI: -0,65 | -0,44 | 0,662 |
DS | 1,5425 | 1,0743 | |||||||
Final | Me | 11,805 | LS: -1,6 | 10,410 | LS: 0,42 | ||||
DS | 0,7783 | 0,9781 |
Me Media aritmética
DS Desviación Standard
En la tabla 1 se observa que los niños pertenecientes al grupo experimental, presentaron al inicio del programa una Hb promedio de 9,5. Por otro lado, se registró una Hb promedio de 11,8 para el grupo de experimentación al finalizar el programa de intervención. Al análisis de la estadística inferencial, a partir de la prueba estadística T-Student, se encontró un p-valor de 0,0001, al ser menor de 0,05, se acepta la Ha y se rechaza la Ho, quedando demostrado que existe diferencia significativa en las mediciones de Hb al inicio y final del programa de intervención. Por otro lado, no se encontró diferencia significativa en los niveles de Hb del grupo control, con un promedio de Hb de 10,2 al inicio del programa y de 10,4 al final del mismo. Finalmente, podemos inferir que, el programa de intervención fue efectivo en el mejoramiento de los niveles de Hb en niños de una zona altoandina rural.
En la tabla 2 se observa que el 90% de los niños pertenecientes al grupo experimental, presentaron parásitos en la muestra de heces al inicio del programa. Por otro lado, el 95% de los niños no presentaron parásitos, al finalizar el programa de intervención. Al análisis de la estadística inferencial, a partir de la prueba estadística McNemar, se encontró un p-valor de 0,0001, al ser menor de 0,05, se acepta la Ha y se rechaza la Ho, quedando demostrado que existe diferencia significativa en la presencia de parásitos al inicio y final del programa de intervención.
Parásitos en muestra de heces | Grupo experimental | McNemar | Grupo control | McNemar | ||
Inicial | Positivo | n | 18 | 0,001 | 13 | 0,125 |
% | 90 | 65 | ||||
Negativo | n | 2 | 7 | |||
% | 10 | 35 | ||||
Final | Positivo | n | 1 | 18 | ||
% | 5 | 90 | ||||
Negativo | n | 19 | 2 | |||
% | 95 | 10 |
Por otro lado, no se encontró diferencia significativa en la presencia de parásitos del grupo control, donde el 65% de los niños si evidenciaban parásitos en la muestra de heces al inicio del programa y el 90% de igual manera al final del mismo. Finalmente, podemos inferir que, el programa de intervención fue efectivo en la disminución de la presencia de parasitosis en niños de una zona altoandina rural.
En la tabla 3 se observa que el 100% de los niños pertenecientes al grupo experimental presentaron diarreas al inicio del programa. Al finalizar el programa de intervención el 85% de los niños no presentaron diarreas en el grupo de experimentación. Al análisis de la estadística inferencial, a partir de la prueba estadística McNemar, se encontró un p-valor de 0,0001, al ser menor de 0,05, se acepta la Ha y se rechaza la Ho, quedando demostrado que existe diferencia significativa en la presencia de diarreas al inicio y final del programa de intervención. Por otro lado, se encontró diferencia significativa en la presencia de diarreas del grupo control, donde el 70% de los niños si evidenciaban diarreas al inicio del programa y el 100% al final del mismo. Finalmente, podemos inferir que, el programa de intervención fue efectivo en la disminución de la presencia de diarreas en niños de una zona altoandina rural.
Fase propositiva: Modelo de intervención participativa
Contexto
El modelo de intervención participativa con estrategias preventivas para disminuir la parasitosis intestinal, diarreas agudas y anemia infantil, está diseñado para una población con grupo de riesgo que son los niños menores de cinco años, de una población rural de bajo nivel educativo y socioeconómico.
Descripción del modelo
Se trata de en un programa sostenible, ecológico y social, que incluye a las familias, la comunidad organizada y las autoridades de salud y del gobierno. El rol del de los profesionales de salud es vital ya que desarrollan estrategias que catalizan las acciones preventivo promocionales. El modelo está basado en la experiencia del programa desarrollado en el lugar de estudio.
Fundamentos filosóficos
El modelo propuesto corresponde a un esquema básico de comportamiento social, cuyo enfoque filosófico es la Concepción Metodológica Dialéctica, la cual se comprende como una forma de percibir la realidad, de aproximarse para transformarla, es una cosmovisión. Hablar de dialéctica significa que existe una relación mutuamente transformante entre la persona, su mundo interior y su mundo que le rodea, su contexto. Se trata de dialogar las contradicciones a partir del cual resultan los cambios. “Hay que llevar al individuo a una actitud responsable de su cuidado, a hacer un mayor activismo social”25. Está implícito el desarrollo, la transformación de la persona y su entorno.
El proceso de la educación en salud se logra mediante la interacción, reconociendo la relación dialéctica sujeto-objeto y las transformaciones mutuas que en ella se producen por la actividad, teniendo en cuenta la influencia del contexto socio histórico y socio cultural en que se desenvuelve dicha relación26. La lógica (camino lógico) del proceso de educación para la salud es asumida con criterios y principios metodológicos que permitan estructurar la estrategia de trabajo: planificar, diseñar, ejecutar, evaluar y sistematizar procesos ordenados y coherentes. Permite articular lo particular con lo general, lo concreto y lo abstracto. Favorece la respuesta proactiva a la dinámica cambiante y contradictoria de la realidad, ya que permite vincular la práctica con la teoría para conocer la realidad y transformarla. Es decir, las prácticas en salud derivadas de un nuevo conocimiento como medio de relación entre un sujeto y la realidad, generado por un conflicto y lleva hacia una nueva realidad: personas con conocimientos capaces de asumir la transformación de su realidad de manera personal y colectiva27.
Para lograr que las personas asuman su rol transformacional se aplica el pensamiento de Enrique Pichón Riviére, quien sostiene que aprendizaje es un proceso histórico-cultural, donde se debe desestructurar lo conocido para construir en conjunto una realidad distinta en el que se visualizan cambios. “El valor que se persigue es el bienestar social entendido como un emergente del aprendizaje de grupos sociales en relación a sus necesidades”28.
Los objetivos de la propuesta
a. Contribuir en la disminución de episodios de parasitosis intestinal, diarreas y anemia en niños menores de cinco años
b. Favorecer la generación de políticas gubernamentales en la dotación de agua segura
c. Fortalecer el empoderamiento de la comunidad hacia una autogestión de la promoción de la salud de los niños y sus familias con cambios conductuales sostenibles.
Justificación
La propuesta se justifica por la situación epidemiológica de las parasitosis intestinal, diarreas agudas y anemia en menores de cinco años, cuya presencia tiene repercusiones en su crecimiento y desarrollo armonioso. La disponibilidad de agua segura conlleva un trabajo interdisciplinario e intersectorial, donde el equipo de salud multidisciplinario, desarrolla programas de intervención.
Pilares estratégicos
a. Educación y diálogo
Lograr el consenso para realizar programas educativos con metodologías participativas donde se privilegie el diálogo (dialéctica) destinado a construir en base a lo conocido nuevos saberes y haceres, logrando un contrato social.
Es importante para la prevención de parasitosis intestinal en niños menores de cinco años educar a las madres o cuidadoras, así como a las familias, en prácticas saludables (lavado de manos, agua segura, alimentación saludable, lonchera saludable, etc.), es decir dar una atención adecuada a las poblaciones indígenas de zonas rurales29.
La realización de talleres permite detectar la carencia de información científica y la falta de conciencia respecto a los factores de riesgo30. Se planifica la realización de talleres y sistematización de experiencias en el programa, plenarias de análisis de los resultados del programa desarrollado en la comunidad. El método de enseñanza estará en concordancia con la andragogía, utilizando metodologías participativas.
b. Cambio conductual
La prevención y el control de parasitosis, enfermedades diarreicas y anemia infantil, están relacionadas con los conocimientos, las prácticas y actitudes que tienen las personas. En el año 1984, Prochaska y Di Clemente propusieron un modelo de cambio intencional del comportamiento y su aplicación en la recuperación de las conductas adictivas. Este modelo tiene su origen en un intento de integración de distintas escuelas psicoterapéuticas. Explica la estructura del cambio de comportamiento, proponiendo tres dimensiones básicas para su análisis: los procesos, los estadios y los niveles del cambio. El modelo ha ido adquiriendo consistencia y ha sido aplicado en diferentes ámbitos a fin de lograr cambios de conducta. Es así que se propone utilizar este modelo, el mismo que ha sido efectivo en la intervención.
c. Empoderamiento con participación comunitaria
Las comunidades necesitan asumir el liderazgo transformacional de sus historias, alcanzando poder. En ese camino se requiere de cooperación “para alcanzar un desarrollo humano que implica dos tipos de poder: el personal (endógeno) que constituye a la persona; el capacitador (exógeno) que, desde la interacción y el entorno, aporta los suministros afectivos, psicosociales, sociopolíticos y económicos que nutren el desarrollo humano”31. Está relacionado con el aspecto teleológico del modelo, el cual es mejorar la calidad de la salud infantil.
En la parte operativa se deben formar comités de salud, donde se refuerce la identidad de la persona y su grupo social, para lograr el aprendizaje y transformación social, con enfoque intercultural y de grupos de riesgo (binomio madre-niño).
Las enfermedades diarreicas son multifactoriales, ya que no todo depende de la persona, sino también de las políticas de gobierno. Por ello la autogestión de los pueblos en el tratamiento del agua y saneamiento es necesario, empoderando a sus autoridades locales y organizando a la comunidad para realizar el análisis TDS (Total Dissolved Solids), para conocer la calidad del agua, identificando la calificación según los parámetros establecidos por la OMS. Todas las actividades respetando la diversidad cultural.
d. Gestión intersectorial
Basado en un diálogo vinculante con los grupos políticos y autoridades para lograr la estructura que favorezca los cambios conductuales sostenibles. Generar compromisos de alianzas estratégicas con las organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, así como de empresas privadas que puedan cooperar. La problemática se debe enfrentar intersectorialmente32, la que permita gestionar financiamiento para el tratamiento del agua bebible y mejoramiento de condiciones de saneamiento como la disposición adecuada de basuras y excretas.
Para obtener agua segura se propone utilizar MadiDrop que es un disco cerámico que libera iones de plata para desinfectar el agua. Está elaborado para personas en países en desarrollo que tienen acceso deficiente a agua potable. Los iones de plata se liberan gradualmente de la tableta, matando a los patógenos al penetrar en las membranas celulares y alterando la división celular. Extensas pruebas en los laboratorios de la Universidad de Virginia de NA muestran que la tableta causa una reducción superior al 99,99 por ciento en bacterias infecciosas transmitidas por el agua33.
Monitoreo y Evaluación
Se realizará con el modelo cualitativo participativo, aplicando entrevistas de profundidad a grupos focales e informantes clave de la comunidad. La aplicación de este método permite mayor apropiación y autogestión de los programas paramejorar la salud de los menores de cinco años. Asimismo, la evaluación se realizará con enfoque cuantitativo identificando el comportamiento de los indicadores y tasas, así como generación de trabajos de investigación que permita el feed back.
Discusión
Los resultados evidencian que en la primera muestra de descarte de parasitosis antes de la ejecución del programa de intervención se encontró parasitosis intestinal (90%). Los resultados son similares a los hallazgos de Marcos en niños del valle del Mantaro, Jauja, Perú en niños de 1 a 6 años, donde encontró que la prevalencia de parasitosis intestinal fue alta, el 100% de ellos tenía parásitos y el 64% alojaba patógenos. Las características sociodemográficas de esta población muestran precarias condiciones de vida, pobres hábitos higiénicos, falta de agua potable y hacinamiento humano, esto explicaría la alta endemicidad de parasitosis intestinal34. De la misma manera Ccanto encontró en niños de 3 a 5 años atendidos en el puesto de salud de San Gerónimo, Huancavelica, 2015, el 58.7% de los niños evaluados padece del parasito Giardia Lambia y 41.3% de los niños padece de Entamoeba Endolimax Nana. Además, el 49% del total de niños evaluados presenta desnutrición35.
Según el análisis TDS (Total Dissolved Solids), se observa que en la comunidad estudiada se obtuvo un resultado de 1220 ppm lo cual significa que la calidad es “muy mala” y “no apta para tomar” según los parámetros establecidos por la OMS. En estos casos, se requiere purificación del agua para poder prevenir la morbilidad y mortalidad. El método que se utilizó para la purificación del agua fue el Madidrop, el cual tuvo un resultado de <1 NMP/100ml de coliformes totales en el reporte de análisis de agua del agua del caño. Este resultado indica que el agua después del tratamiento es apta para el consumo humano.
Se demostró que la metodología fue efectiva, ya que el 96% de niños que consumían agua tratada, obtuvieron un resultado negativo en el segundo descarte de parasitosis. Al no presentar parasitosis intestinal posteriormente podrán mejorar el nivel de hemoglobina y estado nutricional, entre otros.
El programa de intervención evidenció que del 100% de niños con eventos diarreicos en los últimos seis meses, disminuyó al 15% al finalizar el programa. Situación similar encontraron Henríquez, Guillén, Benavente, Gotuzzo, Echeverría & Seas, en un trabajo realizado en las comunidades rurales del Perú, donde identificaron la mayor prevalencia de diarrea en los niños menores de 5 años (58.66%). Además, se encontró que 82.2% de los niños que presenta diarrea no tuvieron acceso a saneamiento básico36. De la misma manera, los resultados del trabajo realizado por Cabezas en la evaluación final de la intervención educativa demostraron cambios positivos estadísticamente significativos en los conocimientos de los factores determinantes para prevenir diarrea. El grupo de madres que participaron en el programa manifestaron que los casos de diarrea disminuyeron y ellas creen que fue debido a la técnica correcta de lavado de manos, preparación de alimentos y purificación del agua en el hogar37.
Con respecto a la relación entre parasitosis intestinal, anemia y diarrea, la investigación “Parasitosis intestinal y anemia en indígenas del resguardo Cañamomo-Lomaprieta, Colombia” realizada por Cardona demostró una prevalencia de anemia del 23% y parasitosis intestinal del 73%. Asimismo, identificó asociación significativa de la anemia con la parasitosis intestinal, también determinó que la forma de eliminación de excretas, el nivel educativo y los ingresos económicos como los principales factores de riesgo para la parasitosis intestinal en el grupo de estudio. Asevera la existencia de una elevada prevalencia de parasitosis intestinal la que se asocia con la presencia de anemia y se atribuye a condiciones higiénico-sanitarias y falta de agua potable38. De la misma manera, la investigación titulada “relación del grado de anemia con parasitosis intestinal en niños menores de 5 años en la unidad educativa “Monte Verde”, demostró que existe una relación entre anemia y parasitosis intestinal39.
La anemia es un problema de salud pública en Latinoamérica y el Caribe. Perú es un país que presenta este problema de salud40. En la primera toma de hemoglobina 80,0% evidenciaron anemia. El ASIS (Análisis de situación de salud) de Huancavelica 2015 reporta que 44.37% de los niños menores de 3 años padecen de anemia en la provincia de Angaraes13. No obstante, los niños del programa, presentan un porcentaje mayor de anemia que cualquier otro distrito, sin embargo, posterior al programa de intervención solo el 20%, aceptando que el programa fue efectivo en la disminución de anemia. Resultados similares identificó Medina cuyo título fue “Programa educativo supervisado y su eficacia en la administración de multimicronutrientes para prevenir la anemia ferropénica en niños de 2 a 3 años en centros de estimulación”. Se comprobó que el programa educativo fue altamente eficaz en la recuperación y prevención de anemia con un nivel de significancia de 0,000<p41.
Conclusiones
El programa de intervención fue efectivo, ya que se observó una diferencia significativa entre el pre test y pos test al 0,001 con p<0,5, para los casos de diarrea y parasitosis intestinal. Para el caso de anemia demostró disminución con diferencia bilateral de 0,00 con p<0,05. El modelo propuesto para disminuir los casos de diarrea, parasitosis y anemia en menores de cinco años de manera sostenible, está basado en la Concepción Metodológica Dialéctica y sustentado por el pensamiento de Pichón, el cual consta de cuatro pilares estratégicos: educación y diálogo, cambio conductual, empoderamiento con participación comunitaria y gestión intersectorial.