Señor editor: La introducción de la vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH) en el Esquema Nacional de Vacunación en la población de niñas entre 9 y 13 años ocurre ante la necesidad de reducir el riesgo de cáncer de cérvix en población femenina (RM Nº 255-2015/MINSA). No obstante, no es la única población en la que la vacuna puede reducir el riesgo de cáncer asociado con este virus.

Se menciona que ciertos grupos, como hombres que tienen sexo con hombres (HSH), tienen una mayor preponderancia de infección por VPH que la población heterosexual,¹ por ser este virus un factor de riesgo independiente para el desarrollo posterior de VIH a partir de prácticas de riesgo como sexo anal y oral sin protección, con lo que se demuestra en diversos estudios que las tasas de infección de VIH más altas se observan en pacientes que ya están infectados con el VPH.^2,3

La infección por VPH en HSH se asocia con una incidencia en cáncer anal de 17 veces más que en los heterosexuales;⁴ además de que su incidencia es más alta que las tasas de cáncer de cérvix en las mujeres,^5,6 pues estos últimos tienden a regresar a la normalidad después de los 30 años de edad. Ocurre lo contrario con los HSH, pues están en riesgo de lesiones anales y orofaringeas asociadas con VPH de células escamosas intraepiteliales a lo largo de su vida.⁵

Perú no incluye en su estrategia de vacunación gratuita contra el VPH a niños y hombres, a diferencia de otros países como Estados Unidos, donde el uso de esta vacuna ha sido aprobado en sus esquemas de vacunación y se han obtenido grandes resultados al reducir los indicadores de morbilidad y mortalidad, además de costos relacionados con salud pública en la prevención de complicaciones por el VPH.⁷

Con el implemento de la vacuna contra el VPH en Estados Unidos, los HSH tienen cada vez mayor interés en ser vacunados, así implique revelar su preferencia sexual. Un estudio arrojó que más de 93% de los integrantes de un grupo encuestado dijo estar dispuesto a revelar su historial sexual para recibir la vacunación gratuita,⁸ ya que los costos particulares de la vacuna dificultan la accesibilidad a la población de los grupos no incluidos, de los cuales cerca de 80% de sus integrantes no podría acceder a su compra, situación que se revierte en caso de accesibilidad gratuita.^9,10

Por lo tanto, la inclusión de la población masculina, principalmente de los HSH, en el programa de vacunación contra el VPH a nivel nacional agregaría una tasa de protección en una población potencial actualmente olvidada y desprotegida del riesgo de infección y cáncer no cervical asociado con VPH en nuestro país.