Señor editor: Un aspecto que puede contribuir a una mayor comprensión de los niveles de exceso de peso (obesidad y sobrepeso) en la población en edad escolar de México, entre los más altos del continente,1 es el análisis de los hogares en los que vive dicha población. Ya algunos estudios han documentado el parecido en la composición corporal entre padres e hijos.2
La pertinencia de analizar la cohabitación con otros familiares se apoya en la evidencia de que éstos suelen ofrecer alimentos a los niños sin el conocimiento de sus padres.3 Al mismo tiempo, la exploración del trabajo extradoméstico materno en México ha demostrado que los hijos de madres empleadas presentan, con mayor frecuencia, desviaciones respecto de un peso adecuado (desnutrición y sobrepeso).4
Por lo anterior, se buscó evaluar el papel de diferentes arreglos familiares y la participación laboral extradoméstica materna en el exceso de peso de la población en edad escolar (5 a 11 años). Para ello, se analizó una muestra de 17 418 individuos, proveniente de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) 2012, mediante modelos de regresión logística binomial.
Tras controlar por características individuales (edad, sexo y origen étnico), de la madre (escolaridad), del hogar (nivel socioeconómico, tamaño y seguridad alimentaria) y contextuales (tipo de localidad), se encontró que los hogares en los que corresidían la madre y otros familiares, y en los que estaban ambos padres y otros familiares, incrementaron la propensión de los escolares al exceso de peso (razones de momios de 1.21 y 1.33, respectivamente); mientras que cohabitar sólo con la madre la reducía (R.M.:0.74) respecto de los hogares con ambos padres sin otros familiares, como muestra la figura 1. La participación materna en el mercado laboral no se relacionó estadísticamente con la composición corporal de los escolares.
Lo anterior permite señalar la importancia de otros familiares y de ambos padres en el exceso de peso. Esto puede estar relacionado con las formas de autoridad en el hogar, pues la madre, o incluso la pareja, en hogares con otros familiares podría carecer de apoyo para la formación de prácticas saludables de alimentación y actividad física en su descendencia.