Introducción
La violencia de pareja (VP) es un problema de salud pública y representa una clara violación a los derechos humanos.1,2 Específicamente, la VP contra las mujeres es una práctica social considerada como parte del ejercicio del poder en contextos sociales asimétricos que dañan su integridad y fomentan su subordinación por parte del hombre, tomando como base la inequidad de género.3
La violencia contra las mujeres es un problema mundial y de gran magnitud; en 2010, un estudio realizado en diferentes países demostró que a nivel mundial 30% (IC95%: 27.8-32.2%) de las mujeres sufrían VP.4 Dicha prevalencia varía según las regiones del mundo: sureste asiático (37.7%), región del este mediterráneo (37.0%), África (36.6%), región de las Américas (29.8%), región europea (25.4%) y región del pacífico oeste (24.6%). En México, según las Encuestas Nacionales sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (Endireh), la magnitud de VP contra las mujeres continua elevada. En 2006, la prevalencia de VP contra las mujeres fue de 43.0%, porcentaje que incrementó a 47.0% para 2011 y disminuyó a 43.9% para 2016.5,6
Estudios recientes de VP han incluido no sólo a las mujeres, sino también a los hombres, y han demostrado que ambos pueden experimentar VP. No obstante, esta problemática es de mayor gravedad en mujeres que en hombres.2,7,8 En Estados Unidos, aproximadamente 32.9% de las mujeres y 28.1% de los hombres han experimentado violencia física por parte de la pareja a lo largo de su vida.8 Encuestas realizadas en Brasil han reportado prevalencias de VP en el último año de 6.7% en hombres y 8.8% en mujeres para 2006. Estas prevalencias han disminuido a través del tiempo, y reportan para 2012, 5.7% en hombres y 6.8% en mujeres.9
En un estudio realizado en países de América Latina se encontraron prevalencias de VP contra las mujeres de 28.0% en Brasil, 31.0% en Chile y 31.0% en México, y en hombres, de 17.0% en México, 24.0% en Brasil y 31.0% en Chile.10 En México, la encuesta de hogares sobre adicciones de 2005 incluyó por primera vez preguntas para conocer la situación de la VP en ambos sexos. Los resultados mostraron que la VP en los últimos dos años fue mayor en mujeres que en hombres: 7.6 y 3.7% respectivamente.11 En la Encuesta Nacional de Adicciones (ENA) 2011 se obtuvo una prevalencia de VP a lo largo de la vida de 23.6%, mayor en mujeres (26.9%, IC95% 25.0-28.6) que en hombres (20.2%, IC95% 18.2-22.2). La prevalencia de VP en el último año fue de 15.6% (17.6% en mujeres y 13.4% en hombres).*
En cuanto a los factores asociados con la VP, existen múltiples estudios que han reportado asociaciones entre la VP y las adicciones, sin embargo, existe controversia sobre la direccionalidad de dicha asociación. El modelo de intoxicación-violencia propuesto por Øverup y colaboradores considera al consumo de alcohol como una estrategia “para enfrentar situaciones personales o emocionales”, por lo que es el predictor inicial de una cadena que conlleva al consumo problemático de alcohol que incrementa el riesgo de VP.12
Diversos estudios coinciden en que el consumo de alcohol es un factor de riesgo para VP, tanto en hombres como en mujeres;9 de la misma manera también se ha encontrado asociación entre el consumo de tabaco, marihuana y sedantes con la VP.9,10,11,12,13,14,15,16 Sin embargo, otras investigaciones han reportado una direccionalidad opuesta al encontrar que la VP puede aumentar el consumo de sustancias.1,8,17
Independientemente de la direccionalidad que tiene la relación de la VP y el uso de sustancias, ambas problemáticas conllevan a daños graves a la salud y al desarrollo social.12
En México se han realizado pocas investigaciones de VP que incluyan a ambos sexos y su asociación con las adicciones. Por lo tanto, el presente estudio tiene como objetivo estimar la prevalencia de VP tanto en mujeres como en hombres y su asociación con el consumo de tabaco, alcohol, drogas y medicamentos psicotrópicos sin receta (MPSR) en una muestra representativa de México.
Material y métodos
Diseño y población de estudio
Estudio transversal proveniente de datos de la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco (Encodat) 2016, la cual es una encuesta de hogares elaborada para realizar inferencias a nivel nacional con un muestreo probabilístico, polietápico y estratificado.18 En cada una de las viviendas elegidas, se seleccionó aleatoriamente un(a) adolescente entre 12 y 17 años y una persona adulta entre 18 y 65 años de edad. Para mayor detalle se puede consultar el reporte metodológico de la Encodat.19
Se incluyeron 56 877 personas (12 440 adolescentes y 44 437 adultos) y la tasa de respuesta fue de 74%. El presente análisis incluyó a 34 861 personas de 12 a 65 años de edad, con antecedente de pareja.
El protocolo fue aprobado por las Comisiones de Ética e Investigación del Instituto Nacional de Salud Pública y del Instituto Nacional de Psiquiatría Dr. Ramón de la Fuente Muñiz (Conbioética: 17CEI00120130424; Cofepris:13 CEI 17 007 36; FWA: 00015605).
Instrumentos
El cuestionario de la Encodat 2016 fue autoadministrado por computadora (ACASI) o cara a cara, y se diseñó para recolectar información sobre el consumo de tabaco, alcohol y drogas.19
La encuesta contempla tres cuestionarios: 1) Cuestionario del hogar, 2) Cuestionario individual y 3) Cuestionario de Encuesta Nacional de Adicciones tradicional. El presente estudio utilizó principalmente preguntas del cuestionario individual acerca de tabaco, exposición a drogas, violencia de pareja, consumo de drogas médicas, consumo de drogas ilegales y consumo de alcohol, entre otros.
Variable dependiente
Violencia de pareja
Se construyó un índice de violencia durante los últimos 12 meses, considerando los siguientes reactivos: Su pareja actual “le ha gritado, insultado o humillado”, “le ha amenazado con pegarle”, “le ha golpeado”, “le ha forzado a tener relaciones sexuales”, “le ha controlado la mayor parte de sus actividades”, “ha manifestado sus celos a golpes, insultos, humillaciones o controlando sus actividades”, “le ha amenazado con suicidarse, o lo ha intentado” o “le ha controlado con no darle dinero para los gastos de la casa o se lo ha quitado”. Para conocer la prevalencia de VP se generó una variable con la suma de los reactivos, se obtuvo una variable continua, la cual se dicotomizó (0=sin violencia y 1=con violencia); también se construyó una variable de VP con tres categorías (sin violencia; de 1 a 2 eventos de violencia; 3 y más eventos de violencia). La escala ha sido validada previamente por Natera y colaboradores (Alfa de Cronbach= 0.76).20
Variables independientes
Zona geográfica de residencia
Se categorizó en 3: rural (<2 500 habitantes), metropolitano (>100 000 habitantes, capitales de estado o localidad con ≥2 500 habitantes de los municipios que formaban las áreas metropolitanas) y urbano (localidades no incluídas en el estrato rural ni metropolitano).19
Nivel socioeconómico
Se estimó mediante la construcción de un índice de bienes del hogar, en donde el primer quintil corresponde al menor nivel socioecónomico y el quinto, al mayor.19
Consumo de tabaco en el último año
Se clasificó en tres categorías: fumador actual (personas que reportaron consumir tabaco en el último año), exfumador (personas que han consumido tabaco fumado, pero no en el último año) y nunca ha fumado.
Consumo excesivo de alcohol en el último año
Se definió como el consumo de cuatro o más copas en una ocasión en el último año en las mujeres y cinco o más en el caso de los hombres.21
Análisis estadístico
Inicialmente, se realizó un análisis estadístico descriptivo para cada una de las variables del estudio. Posteriormente, para el análisis bivariado se utilizó la prueba de ji cuadrada, haciendo comparaciones entre la VP con cada una de las variables independientes. Se utilizaron modelos de regresión logística politómica y se obtuvieron razones de momios (RM) crudas y ajustadas con intervalos de confianza al 95% (IC95%). Los análisis se ajustaron por el diseño de la encuesta mediante el comando “SVY”, Stata versión 15.‡
Resultados
Características de la población
Del total de población, la mayoría fueron mujeres. El grupo de edad más prevalente fue el de 18 a 28 años, la mayoría cursó la secundaria y bachillerato y 58.18% fue residente del área metropolitana. El 15.77% de la población consumió alcohol de manera excesiva; 22.33% fumaba al momento del estudio; 0.76% consumió marihuana y sólo 0.27% utilizó MPSR (cuadro I).
Variable |
% |
IC95% |
Sexo |
||
Mujer |
51.9 |
50.9-52.9 |
Hombre |
48.1 |
47.0-49.0 |
Edad en años |
||
≤17 |
5.5 |
5.1-5.8 |
18-28 |
26.3 |
25.3-27.1 |
29-39 |
25.5 |
24.7-26.3 |
40-50 |
22.2 |
21.4-23.0 |
≥51 |
20.6 |
19.7-21.3 |
Escolaridad* |
||
Primaria |
24.3 |
23.2-25.2 |
Secundaria |
34.9 |
33.9-35.9 |
Bachillerato |
25.9 |
24.8-26.8 |
Universidad y posgrado |
15.0 |
14.0-15.9 |
Nivel socioeconómico en quintiles |
||
Primero |
16.6 |
15.8-17.3 |
Segundo |
20.6 |
19.8-21.3 |
Tercero |
19.3 |
18.4-20.0 |
Cuarto |
20.8 |
19.9-21.6 |
Quinto |
22.7 |
21.5-23.9 |
Zona Geográfica |
||
Rural |
23.1 |
22.3-23.8 |
Urbano |
18.8 |
18.1-19.3 |
Metropolitano |
58.2 |
57.2-59.0 |
Consumo excesivo de alcohol‡ |
||
No |
84.2 |
83.4-84.9 |
Sí |
15.8 |
15.0-16.5 |
No |
43.8 |
42.7-44.8 |
Exfumador |
33.9 |
32.9-34.8 |
Fumador actual |
22.3 |
21.4-23.2 |
No |
99.7 |
99.6-99.8 |
Sí |
0.3 |
0.2-0.3 |
Consumo de marihuana‡ |
||
No |
99.2 |
99.0-99.4 |
Sí |
0.8 |
0.6-0.9 |
Encodat: Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco; IC95%: intervalo de confianza al 95%
La N total ponderada fue de 55 262 465 participantes de las 32 entidades federativas de México. La n muestral fue de 34 861: 17 421 hombres y 17 440 mujeres
* Los totales en estas variables varían ya que algunos/as participantes no contestaron todas las preguntas del cuestionario
‡ Consumo en el último año
§ Todos aquellos que reportaron consumir medicamentos opiáceos, barbitúricos o anfetaminas en el último año sin médica
Prevalencia de violencia de pareja
La prevalencia nacional de cualquier tipo de VP fue de 15.14%, más frecuente en mujeres (18.16%) que en hombres (11.89%) (p<0.001). Por entidad federativa, Aguascalientes y Nayarit presentaron las prevalencias más altas de VP (20.3 y 20.0%, respectivamente) en ambos sexos (figura 1). Por actos de violencia, los gritos, insultos o humillaciones fueron los más prevalentes. Todos los actos de violencia fueron más frecuentes en mujeres que en hombres (p<0.001) (figura 2).
Todas las preguntas mostraron una diferencia estadísticamenre significativas entre hombres y mujeres (p<0.001)
La prevalencia de VP de acuerdo con el número de eventos violentos fue de 11.29% en la población que reportó de 1 a 2 eventos de violencia, y 3.86% presentó más de 2 eventos. El grupo de edad que presentó mayor proporción de 3 y más eventos de violencia fue el de 29 a 39 años. Además, las personas que cursaron secundaria y las que se encontraban en el segundo quintil tuvieron mayores prevalencias de 3 y más eventos de violencia. En cuanto al consumo excesivo de alcohol, 14.85% presentó de 1 a 2 eventos de VP y 4.31% más de 2 eventos de VP; proporciones similares se observaron con el consumo de tabaco. El 29.27% de las personas que utilizaron MPSR y 30.53% que consumió marihuana presentó de 1 a 2 eventos de VP (cuadro II).
Variable |
Sin violencia |
Violencia |
Violencia |
Valor p |
|||
(1-2 eventos) |
(3 y más eventos) |
||||||
% |
IC95% |
% |
IC95% |
% |
IC95% |
||
Sexo |
|||||||
Hombre |
88.1 |
87.2-88.9 |
9.8 |
8.9-10.6 |
2.1 |
1.7-2.5 |
0.000 |
Mujer |
81.8 |
80.8-82.7 |
12.7 |
11.8-13.5 |
5.5 |
4.9-6.2 |
|
Edad |
|||||||
≤17 |
89.9 |
87.7-91.6 |
8.6 |
6.8-10.7 |
1.5 |
1.0-2.21 |
0.000 |
18-28 |
84.0 |
82.4-85.4 |
11.6 |
10.3-12.9 |
4.4 |
3.7-5.2 |
|
29-39 |
83.7 |
82.4-84.9 |
11.8 |
10.6-13.0 |
4.5 |
3.94-5.12 |
|
40-50 |
82.9 |
81.5-84.2 |
12.7 |
11.5-13.9 |
4.4 |
3.7-5.2 |
|
≥51 |
88.1 |
86.7-89.3 |
9.5 |
8.38-10.7 |
2.4 |
1.9-2.9 |
|
Escolaridad |
|||||||
Primaria |
84.6 |
83.3-85.8 |
11.0 |
9.9-12.2 |
4.4 |
3.7-5.0 |
0.003 |
Secundaria |
83.8 |
82.7-84.8 |
11.6 |
10.7-12.4 |
4.7 |
4.0-5.3 |
|
Bachillerato |
85.3 |
83.8-86.6 |
11.4 |
10.0-12.7 |
3.4 |
2.7-4.0 |
|
Universidad y posgrado |
86.4 |
84.4-88.0 |
11.5 |
9.8-13.3 |
2.1 |
1.6-2.7 |
|
Nivel socioeconómico en quintiles |
|||||||
Primero |
84.4 |
82.9-85.7 |
10.7 |
9.6-11.8 |
4.9 |
4.1-5.7 |
0.000 |
Segundo |
82.4 |
80.8-83.6 |
12.6 |
11.2-14.0 |
5.0 |
4.3-5.8 |
|
Tercero |
84.6 |
83.1-85.9 |
11.3 |
10.1-12.4 |
4.1 |
3.3-5.0 |
|
Cuarto |
85.3 |
83.8-86.6 |
11.3 |
10.0-12.6 |
3.4 |
2.7-4.2 |
|
Quinto |
87.2 |
85.6-86.6 |
10.5 |
10.7-11.9 |
2.2 |
1.7-2.8 |
|
Zona geográfica |
|||||||
Rural |
86.2 |
85.0-87.2 |
10.2 |
9.2-11.1 |
3.7 |
3.1-4.2 |
0.120 |
Urbano |
84.5 |
83.1-85.8 |
11.3 |
10.2-12.3 |
4.2 |
3.5-5.0 |
|
Metropolitano |
84.4 |
83.4-85.3 |
11.7 |
10.7-11.9 |
3.8 |
3.3-4.3 |
|
Consumo excesivo de alcohol* |
|||||||
No |
85.6 |
84.8-86.3 |
10.6 |
10.0-11.2 |
3.8 |
3.4-4.1 |
0.000 |
Sí |
80.8 |
78.8-82.6 |
14.9 |
13.1-16.7 |
4.3 |
3.5-5.1 |
|
Consumo de tabaco* |
|||||||
No |
87.0 |
86.0-87.8 |
9.9 |
9.0-10.6 |
3.2 |
2.8-3.5 |
0.000 |
Exfumador |
84.4 |
83.2-85.5 |
11.3 |
10.3-12.3 |
4.3 |
3.7-4.9 |
|
Fumador actual |
81.3 |
79.5-82.8 |
14.1 |
12.6-15.7 |
4.6 |
3.8-5.5 |
|
No |
84.9 |
84.2-85.6 |
11.2 |
10.6-11.8 |
3.8 |
3.5-4.1 |
0.000 |
Sí |
52.6 |
37.6-67.1 |
29.3 |
17.6-44.4 |
18.1 |
7.7-36.7 |
|
Consumo de marihuana* |
|||||||
No |
85.0 |
84.3-85.6 |
11.1 |
10.5-11.7 |
3.8 |
3.5-4.1 |
0.000 |
Sí |
63.5 |
49.7-75.3 |
30.5 |
18.8-45.3 |
5.9 |
2.8-11.9 |
Encodat: Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco; IC95%: intervalo de confianza al 95%; %: porcentaje
* Consumo en el último año
‡ Todos aquellos que reportaron consumir medicamentos opiáceos, barbitúricos o anfetaminas en el último año sin receta médica
Factores asociados con violencia de pareja
Los resultados del modelo de regresión logística mostraron que las mujeres tienen 1.95 veces más posibilidad de presentar de 1 a 2 eventos de VP (RM: 1.95; IC95%:1.67-2.26) comparado con los hombres. Esta posibilidad todavía es mayor (RM: 4.60; IC95%:3.61-5.89) al presentar 3 y más eventos de VP. El consumo excesivo de alcohol, consumo actual de tabaco, consumo de MPSR y marihuana estuvieron asociados con VP, asociación que fue más fuerte cuando se presentan 3 y más eventos de VP (cuadro III).
Variable |
Modelo general* |
Hombres* |
Mujeres* |
|||||||||
Violencia |
Violencia |
Violencia |
Violencia |
Violencia |
Violencia |
|||||||
(1-2 eventos) |
(3 y más eventos) |
(1-2 eventos) |
(3 y más eventos) |
(1-2 eventos) |
(3 y más eventos) |
|||||||
RM |
IC95% |
RM |
IC95% |
RM |
IC95% |
RM |
IC95% |
RM |
IC95% |
RM |
IC95% |
|
Sexo |
||||||||||||
Hombre |
1.00 |
1.00 |
||||||||||
Mujer |
1.95 |
1.69-2.26 |
4.60 |
3.61-5.88 |
||||||||
Edad |
||||||||||||
≤ 17 |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
||||||
18-28 |
1.25 |
0.95-1.65 |
2.74 |
1.80-4.19 |
1.49 |
0.98-2.29 |
2.03 |
0.87-4.74 |
1.14 |
0.80-1.65 |
3.40 |
2.08-5.59 |
29-39 |
1.35 |
1.03-1.77 |
2.95 |
1.99-4.39 |
1.44 |
0.96-2.18 |
2.05 |
0.91-4.62 |
1.33 |
0.92-1.94 |
3.61 |
2.31-5.67 |
40-50 |
1.58 |
1.22-2.06 |
3.45 |
2.23-5.36 |
1.67 |
1.12-2.49 |
2.03 |
0.84-4.92 |
1.59 |
1.11-2.28 |
4.07 |
2.46-6.75 |
≥51 |
1.19 |
0.91-1.57 |
1.89 |
1.21-2.97 |
1.31 |
0.84-2.05 |
1.13 |
0.46-2.82 |
1.18 |
0.79-1.76 |
2.24 |
1.31-3.86 |
Escolaridad |
||||||||||||
Primaria |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
||||||
Secundaria |
1.15 |
0.85-1.52 |
1.30 |
0.72-2.36 |
1.15 |
0.85-1.52 |
1.30 |
0.72-2.36 |
0.94 |
0.79-1.14 |
0.89 |
0.70-1.15 |
Bachillerato |
1.36 |
0.97-1.92 |
1.30 |
0.69-2.45 |
1.36 |
0.97-1.92 |
1.30 |
0.69-2.45 |
0.82 |
0.66-1.02 |
0.61 |
0.45-0.83 |
Universidad y posgrado |
1.07 |
0.72-1.61 |
0.98 |
0.46-2.10 |
1.07 |
0.72-1.61 |
0.98 |
0.46-2.10 |
1.11 |
0.85-1.45 |
0.44 |
0.30-0.66 |
Quintiles socioeconómicos |
||||||||||||
Primero |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
||||||
Segundo |
1.15 |
0.96-1.39 |
0.95 |
0.76-1.19 |
1.40 |
1.06-1.88 |
1.24 |
0.74-2.10 |
1.00 |
0.78-1.28 |
0.86 |
0.67-1.11 |
Tercero |
0.99 |
0.84-1.17 |
0.81 |
0.60-1.08 |
1.01 |
0.76-1.33 |
1.20 |
0.37-2.27 |
0.96 |
0.78-1.21 |
0.70 |
0.52-0.95 |
Cuarto |
0.94 |
0.79-1.12 |
0.65 |
0.50-0.86 |
1.04 |
0.78-1.40 |
0.88 |
0.52-1.51 |
0.86 |
0.69-1.09 |
0.58 |
0.43-0.81 |
Quinto |
0.81 |
0.66-0.98 |
0.45 |
0.33-0.61 |
0.97 |
0.67-1.40 |
0.62 |
0.35-1.10 |
0.69 |
0.54-0.89 |
0.38 |
0.26-0.57 |
Zona geográfica |
||||||||||||
Rural |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
||||||
Urbano |
1.13 |
0.97-1.32 |
1.25 |
0.99-1.65 |
0.99 |
0.78-1.27 |
1.76 |
0.99-3.15 |
1.23 |
1.04-1.46 |
1.11 |
0.85-1.48 |
Metropolitano |
1.15 |
0.99-1.32 |
1.18 |
0.97-1.45 |
1.08 |
0.86-1.37 |
1.29 |
0.84-1.98 |
1.16 |
0.97-1.40 |
1.14 |
0.90-1.46 |
Consumo excesivo de alcohol |
||||||||||||
No |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
||||||
Sí |
1.64 |
1.38-1.96 |
1.89 |
1.46-2.46 |
1.59 |
1.31-1.95 |
1.69 |
1.17-2.46 |
1.86 |
1.27-2.74 |
2.82 |
1.55-3.37 |
Consumo de tabaco |
||||||||||||
No |
1 |
1 |
1 |
1 |
1 |
1 |
||||||
Exfumador |
1.34 |
1.17-1.55 |
2.01 |
1.65-2.46 |
1.22 |
0.93-1.60 |
2.17 |
1.31-3.60 |
1.42 |
1.22-1.66 |
2.10 |
1.69-2.63 |
Fumador actual |
1.71 |
1.42-2.07 |
2.61 |
2.04-3.34 |
1.53 |
1.13-2.08 |
3.06 |
1.86-5.07 |
1.84 |
1.44-2.37 |
2.54 |
1.90-3.41 |
Consumo de medicamentos psicotrópicos sin receta |
||||||||||||
No |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
||||||
Sí |
3.72 |
1.76-7.80 |
7.43 |
2.79-19.80 |
4.40 |
1.62-11.96 |
9.60 |
1.95-47.16 |
2.66 |
0.97-7.29 |
5.85 |
2.05-16.76 |
Consumo de marihuana |
||||||||||||
No |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
1.00 |
||||||
Sí |
3.06 |
1.58-5.91 |
2.24 |
0.98-5.16 |
3.05 |
1.47-6.36 |
2.51 |
1.01-6.23 |
2.73 |
0.94-7.98 |
0.87 |
0.25-3.09 |
La N total ponderada fue de 55 262 465 participantes de las 32 entidades federativas de México. La n muestral fue de 34 861; por sexo, participaron 17 421 hombres y 17 440 mujeres
* Modelos de regresión logística ajustados por sexo, edad categórica, escolaridad, nivel socioeconómico y zona geográfica
Encodat: Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco; RM: razón de momios; IC95%: intervalo de confianza al 95%
En ambos sexos, el consumo excesivo de alcohol estuvo asociado con VP, asociación que fue más fuerte cuando se presentan 3 y más eventos de violencia (hombres RM:1.69; IC95%:1.17-2.46 y mujeres RM:2.82; IC95%:1.54-3.37). De igual manera, las mujeres y los hombres fumadores de tabaco tuvieron mayor posibilidad de presentar VP (mujeres RM:2.54; IC95%:1.90-3.41 y hombres RM:3.06; IC95%:1.85-5.07). Se encontró una fuerte asociación entre consumo de MPSR y VP (hombres RM:9.60; IC95%:1.95-47.16 y mujeres RM:5.85; IC95%:2.05-16.76). Los hombres que consumieron marihuana tuvieron mayor posibilidad de presentar VP (RM:3.05; IC95%:1.47-6.36) (cuadro III).
Discusión
En el presente estudio se encontró una mayor frecuencia de eventos de VP asociados con el consumo excesivo de alcohol, tabaco, marihuana y de MPSR, en una muestra representativa de mujeres y hombres mexicanos. Los resultados obtenidos muestran que la VP se encuentra presente en ambos sexos, sin embargo, la prevalencia sigue siendo mayor en mujeres que en hombres.
Tradicionalmente, se pensaba en el hombre como el perpetrador de VP, sin embargo, al igual que este estudio, otras investigaciones han encontrado que tanto hombres como mujeres ejercen violencia hacia sus parejas.10,11,22,23 Comparado con el estudio multicéntrico realizado en América Latina, las presentes prevalencias de VP son menores en ambos sexos.10 Al comparar este estudio con la ENA 2011, se encuentra una ligera disminución de la VP (15.60 vs. 15.14%) principalmente la violencia hacia los hombres (13.40 vs. 11.89%). En contraste, en las mujeres, la prevalencia de VP aumentó entre 2011 y 2016 (17.60 vs. 18.60%). Cabe señalar que la VP que se ejerce hacia las mujeres implica generalmente consecuencias más severas en salud en comparación a la que se ejerce hacia los hombres.24
En el presente estudio, el consumo de excesivo de alcohol, tabaco, marihuana y MPSR estuvo asociado con la VP en ambos sexos. Los hombres y mujeres que consumieron alcohol de manera excesiva tuvieron mayor posibilidad de presentar VP, la cual fue más fuerte cuando ocurrieron 3 o más eventos de violencia. Lo anterior es consistente con la literatura internacional que asocia al consumo de alcohol con la VP.9,16,25 Esta asociación podría explicarse mediante el modelo de intoxicación-violencia propuesto por Øverup y colaboradores.12 En este modelo se propone que el consumo de alcohol es una estrategia para “afrontar alguna situación personal o emocional difícil”, lo que conllevaría a problemas de mayor consumo de alcohol y se favorecerían los ambientes violentos.12
El consumo de tabaco estuvo asociado con VP, es decir, las y los fumadores tuvieron mayor posibilidad de presentar VP. Dichos resultados son consistentes con estudios previos en donde se reportó una asociación entre la VP y el consumo de tabaco.9,17
Otras de las sustancias adictivas que estuvieron asociadas con la VP fue el consumo de MPSR. Existen pocos estudios que exploren esta asociación debido a la baja prevalencia de consumo de dichos medicamentos en población general. Por ello, los estudios que analizan esta asociación se llevan a cabo en poblaciones que se encuentran en tratamiento para el consumo de sustancias.26 En el presente estudio, el consumo de marihuana estuvo asociado con la VP únicamente en los hombres, sin embargo, otras investigaciones han encontrado esta asociación en ambos sexos.15,16
El presente trabajo cuenta con algunas limitaciones; por ejemplo, al tratarse de un estudio transversal, no se puede establecer causalidad. Sin embargo, los resultados son consistentes con estudios previos. Debido al uso del autorreporte como técnica de recolección de información y por la sensibilidad del tema tratado, podría existir un subregistro de VP. De existir un error de medición, éste sería no diferencial al medir de la misma manera tanto en mujeres como en hombres. Asimismo, no se pudieron medir otro tipo de variables de interés como el antecedente de violencia durante la niñez27 y variables del perpetrador como el consumo de alcohol y otras sustancias.
Se considera importante incluir en la siguiente Encodat otros reactivos de VP para ser comparables con otras encuestas y realizar un análisis comparativo de la prevalencia de VP, ya que se espera un incremento de la VP por el efecto del aislamiento y distanciamiento social de la pandemia de Covid-19.28
Es importante mejorar las intervenciones dirigidas a prevenir y eliminar la VP en México mediante programas que integren la prevención y tratamiento del consumo de alcohol, tabaco29 y drogas. Por consiguiente, es necesario mejorar y fortalecer los sistemas de vigilancia epidemiológica orientados a la identificación del consumo de sustancias adictivas en personas que denuncian o son denunciadas por VP y viceversa. También es necesario el fortalecimiento de las competencias psicosociales de las personas para lograr la equidad de género, la mejora de la calidad de vida y el acceso a los servicios de salud mental y adicciones para prevenir y disminuir esta problemática en México.