SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.28 número1"Virtute adipisci civitatem" (Nota in margine all'orazione Pro L. Cornelio Balbo)Notas sobre la tradición clásica en el Laberinto de Fortuna de Juan de Mena índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

Links relacionados

  • No hay artículos similaresSimilares en SciELO

Compartir


Nova tellus

versión impresa ISSN 0185-3058

Nova tellus vol.28 no.1 Ciudad de México jun. 2010

 

Artículos

 

Relación entre el epigrama griego y latino tardoantiguo: algunas calas*

 

Links between Greek Epigram and Late Antiquity Latin Epigram: some Probing

 

Begoña Ortega Villaro1 y Ma Jesús Pérez Ibáñez2

 

1 Universidad de Burgos. Correo electrónico: bortegav@ono.com.

2 Universidad de Valladolid.

 

Recepción: 22 de abril de 2010.
Aceptación: 24 de mayo de 2010.

 

Resumen

En época tardoantigua, muchos autores latinos de epigramas encuentran su inspiración en modelos griegos. En el presente artículo se analizan las tendencias fundamentales y algunos ejemplos notables de esta relación en dos tipos de epigramas, los morales y los burlescos. Esta relación tiene dos fases: una primera, la selección de tipos y temas, y una segunda, la traducción o paráfrasis, en la que destacan como principales procedimientos de los autores latinos la adaptación literaria o cultural y la amplificación estilística y temática. Se señalan también las más importantes diferencias que sobre estos procedimientos se observan en las tres colecciones latinas estudiadas.

Palabras clave: epigrama latino, epigrama griego, traducción, poesía tardoantigua.

 

Abstract

In the Late Antiquity, Greek epigrams were used as models by many Latin poets, like Ausonius and the writers of the Epigrammata Bobiensia and the Latin Anthology. In this paper, we study the main tendencies and some significative epigrams about this influence in two types of epigrams, the gnomic and the skoptic ones. This relation has two stages: the first, the selection of types and themes and the second, the traslation or variation; in this stage, the main procedures in the latin epigrams are the literary or cultural adaptation and the stylistic and thematic amplification. The most important differences in these procedures among the three Latin corpora are analysed as well.

Keywords: Greek epigram, Latin epigram, translation, Late Antiquity poetry.

 

Introducción

La relación entre el epigrama griego y el latino abarca varios siglos y, debido a las cambiantes circunstancias que la rodean, se concreta de muy diferentes maneras. Desde la imitación a la traducción, de la influencia de lo griego en lo romano o de lo romano en lo griego, pasando por los juegos intertextuales, son muchas las perspectivas con las que podemos afrontar su estudio y muchas las épocas en las que detenernos. Nuestro interés se centra en los epigramas latinos, esencialmente en los de carácter burlesco y moral, de la época tardo-antigua y en su relación con el epigrama griego.

En esta época, hay una gran producción epigramática en ambas lenguas, después de unos siglos bastante estériles; hay contactos constantes entre los escritores de una y otra zona del Imperio y también un fondo común del que todos participaban, aunque parece que la dirección de la influencia era, como en siglos anteriores, de este a oeste, pero que —como trataremos de ver— en el Occidente no es siempre de aceptación servil.1

En Occidente, los autores que componían epigramas formaban parte de la elite intelectual, profesores o eruditos, que conocían en profundidad la literatura y la cultura anteriores, tanto latina como griega,2 y que disfrutaban imitando y emulando textos de todo tipo y, en concreto, los que aquí nos ocupan, los epigramas. Entre ellos destaca, por la variedad y extensión de su obra, Ausonio (ca. 310-395 d. C.), con sus deudas respecto a los epigramatistas griegos así como a Catulo o Marcial.3 También hay que incluir al grupo de autores que elaboran la colección hoy llamada Epigrammata Bobiensia4 [EB], una sylloge que se puede datar entre fines del IV y principios del V y en la que participan autores como Naucelio y Anicio Probino. A la misma época pertenecen algunos de los autores vinculados a la Anthologia Latina [AL], nombre que se viene aplicando a un conjunto de textos literarios, predominantemente epigramas, que responden a un espectro cronológico bastante amplio. Su origen como colección podemos atribuirlo a un grupo de poetas que escribe en el reino vándalo y hacia el año 530.5

En general, puede decirse que hay dos líneas fundamentales en el desarrollo del epigrama en época tardoantigua: una que atraviesa los epigramas de los más importantes poetas de la Antología Latina (Luxorio y el "poeta anónimo", principalmente)6 y que se relaciona con Marcial; la segunda liga a Ausonio y a los autores de los EB con el epigrama griego de manera notable.7

En la misma época, el epigrama griego vive un extraordinario renacimiento, tanto en su vertiente inscripcional como en la literaria. En esta última, el autor más importante es Páladas, que escribe a finales del siglo IV y, desde entonces, no deja de leerse y editarse, como demuestran las sucesivas antologías en las que aparece y que influyen a autores como Juliano de Egipto. El epigrama secular vive su último gran momento de manos de los autores del Ciclo de Agatías, un grupo de intelectuales de Constantinopla que escriben en la época de los autores latinos que hemos visto anteriormente. Todas estas antologías se nos han transmitido a través de la Antología Griega, una colección elaborada en los siglos X-XI .8

 

1. La relación entre el epigrama griego y el latino. Una historia de selecciones

Si hay un género donde la creación sobre modelos previos forma parte de su naturaleza, ese es el epigrama. Ya se ha señalado que el objetivo principal de esta forma de composición es "decir, mejor, lo que ya se ha dicho".9 Podemos ver que este tipo de relación emulativa —formas de creación sobre modelos— se establece entre los textos epigramáticos en lengua griega y lengua latina de la etapa que nos ocupa. En buena medida se cifra en la traducción por parte de autores latinos de textos previamente compuestos en griego. Pero tomando la terminología procedente del estudio de la técnica de traducción de Ausonio,10 se pueden establecer diversos grados que van desde la traducción literal a la versión más o menos libre.

Para ver cómo en los textos latinos de estos siglos se trabaja a partir del epigrama griego tenemos que aceptar que la transmisión del poema pasa por un doble proceso de selección: en primer lugar, el que va implícito en su natural difusión en forma de antología y, en segundo lugar, en la selección que lleva a cabo, de entre los materiales que se le ofrecen, el imitador.

Comparando los epigramas de Ausonio con los EB —dos de los grupos más significativos de la producción epigramática en lengua latina de esta época— vemos que ambas colecciones presentan, dentro de su variedad, una tendencia a los epigramas descriptivos,11 gnómicos, epidícticos, personales y humorísticos —en este orden de preferencia.

De estos tipos de epigramas hemos optado por tomar para nuestro estudio ejemplos de las composiciones gnómicas, pues su presencia es una constante desde los orígenes del género epigramático. También serán objeto de nuestro interés los epigramas burlescos, los menos representados en este momento en lengua latina —algo más en Ausonio que en los EB— y tanto más llamativo si tenemos en cuenta que es un componente destacado en las antologías griegas que podrían haber circulado en Occidente.12

 

2. La reflexión moral

Las verdades generales, pensamientos universales más o menos profundos y complejos, están en presentes en todas las culturas, de modo que su trasvase lingüístico puede parecer en principio una operación relativamente sencilla, especialmente cuando las dos partes relacionadas comparten tanto, pero veremos que no siempre hay completa afinidad en la reflexión entre los textos de la cultura griega y los de la latina.

 

2.1 Formas de la reflexión moral

2.1.a La expresión básica de lo moral es la sententia. Una sentencia () podemos definirla13 como una declaración de carácter universal, general y común, referida a las acciones humanas, en especial la conducta, y que no concierne a particularidades individuales, pues para que sean realmente efectivas han de ir dirigidas a toda la humanidad o a un grupo, pero no a una persona concreta. Estas expresiones, al margen de la variación formal a la que puedan estar sometidas, tienden a la brevedad.

La presencia de estas en el epigrama griego es relativamente importante. El ritmo dactílico y la brevedad que caracterizó al género desde sus inicios como inscripción, unido a que algunos contextos, como el funerario, se prestan a la reflexión moral y a la proposición filosófica, explican la presencia de estas expresiones formulares en el epigrama, si bien con el tiempo fueron haciéndose independientes.14

2.1.b Esta enseñanza moral puede ilustrarse al menos de dos modos, el exemplum y la chría.

El exemplum () introduce, en principio, algo ajeno al tema de que se trata, pero que, precisamente por ser un caso concreto, puede servir para corroborar, ilustrar, probar o explicar el tema del discurso. Un exemplum es básicamente narrativo ('así lo hizo, dijo X', 'lo mismo le ocurrió a X cuando ...'):

 

2.1.c La otra forma de ilustrar una enseñanza moral es la chría,17 un hecho o dicho de un personaje célebre que contiene una forma apreciable de sabiduría. Su rasgo diferenciador es que se particulariza en una persona o circunstancia dada; en cierto modo la chría puede presentarse como un relato corto orientado a una palabra o gesto final ('en tal circunstancia, el protagonista al que le ocurrieron tales cosas, concluyó haciendo o diciendo ...'). La chría estuvo muy ligada a la enseñanza filosófica y las escuelas estoica y cínica y posteriormente al cristianismo.18

Un ejemplo prototípico de esta forma de ilustración de contenidos que aparece en ambas culturas es el de la enumeración de las principales sentencias de los siete sabios, que encontramos en griego en el anónimo AP IX.366 y en latín en Luxorio, AL 346 ShB = 351R, y en el anónimo AL 882R además en Plutarco, Septem sapientum Convivium, Sidonio Apolinar, Carmina 2.156-163, 15.42-50, 23.101-110; Ausonio, Ludus Septem Sapientum, Higinio, Fabulae 221, y una cita en Agustín, De civitate dei 8.2 (PL, XLI, 225-226).

 

2.2 Distintos contextos para la reflexión moral

2.2.a Un nutrido grupo de epigramas vehículo de enseñanza moral son los reflexivos, en su mayoría recogidos en el libro X de la Antología Griega. Estos epigramas exponen una línea de pensamiento que lleva a una conclusión de tipo moral, normalmente expresada bajo la forma de gnome. Este tipo de epigramas también se presentan en lengua latina y en algunos casos son traducción de algún poema griego. Veamos el ejemplo siguiente: AP X.26 Luciano y EB 69:


En el texto griego se trata un lugar común con cierta difusión, el contraste entre el ahorro y el despilfarro21 y sus consecuencias, en un poema con dos partes bien definidas, la parénesis y la gnome en la que aquella se basa; el destinatario de la primera se concreta sin duda en la actualización de la fórmula general .

En la versión latina, se mantienen tanto el carácter reflexivo como el esquema del poema griego, aunque muy abreviado, lo que hace mucho más directa la parénesis: 'gasta y guarda'. La gnome que la sustenta es relativamente diferente en uno y otro caso pues en el poema griego es la sabiduría la que hace reflexionar sobre la doble condición humana: la vida y la muerte; en cambio, en el poema latino, la traducción en mortal/inmortal ha provocado un cambio desde una sabiduría que se proclama 'es hombre sabio aquel que' a otra forma de sabiduría 'indirecta' que no se posee sino que se predica 'se dice que' y se proyecta en un objetivo, la felicidad, que no se contempla expresamente en el modelo griego.

De una forma paralela, una vez establecida la gnome, el juego literario puede consistir en no modificarla, sino en integrarla en un contexto radicalmente distinto y subvertir su sentido primigenio.

Uno de los ejemplos más llamativos de alteración de la gnome por el contexto nos lo ofrece el epigrama AL 712R, veinticuatro senarios yámbicos que aparecen bajo el título ex Menandro, título que se tiene por auténtico y responde a un bien conocido personaje de Menandro (frag. 431). Parece que la composición, con cierta verosimilitud, puede ser de Apuleyo,22 quien, si aceptamos el testimonio de Aulo Gelio (XIX.11.4),23 también habría traducido con notables amplificaciones y libertades un epigrama atribuido a Platón (AP V.78) cuya versión latina se encuentra en las Noches Áticas.

Los tres primeros versos del epigrama latino presentan la forma y contenido de la , pero el resto (vv. 4-23) supone una aplicación de los mismos que, de acuerdo con la obra conservada de Menandro, hemos de suponer muy alejada del original,25 pero que se explicarían aceptando la autoría de Apuleyo y sus ya ejercitadas amplificaciones en la traducción, como deja entender el testimonio de Aulo Gelio. La amplificación en sentido erótico sirve para dar un giro radical a las declaraciones morales, que pierden validez, al tiempo que se inserta el texto en una tradición de epigrama erótico que en lengua latina cuenta con maestros como Catulo y Marcial, y que después también practicará Ausonio.

2.2.b En el ámbito griego, los contenidos morales no sólo aparecen en el subgénero del epigrama gnómico, como los incluidos en el libro X de la Antología Palatina; asimismo pueden aparecer en otros subgéneros como los epitafios o los epigramas epidícticos. Y el primer cambio que hemos de valorar es cómo el epigrama latino presenta estos contenidos con una distribución parcialmente distinta.

En ambas colecciones encontramos epitafios literarios. En la griega tales epitafios suelen dedicarse a personas anónimas e incorporan consideraciones acerca de la vida y la muerte, y también muy diversos exempla de los que se deducen, con formulaciones explícitas o implícitas, modelos de conducta: y así una amante esposa resulta exemplum de comportamiento casto (Agatías, AP VII.614, Leoncio Escolástico, AP VII.575, etc.) o un náufrago, de los peligros de la vida en el mar (Antípatro de Tesalónica, AP VII.286, Juliano, AP VII.586). En el epigrama latino de la época que nos atañe llama la atención el proporcionalmente escaso número de epitafios y el hecho diferenciador de que, en general, no están dedicados a personas anónimas o del círculo del autor; los casos, en cierto modo excepcionales, no son muchos: los anónimos De christiano infante mortuo (AL 92R = 81 ShB) o los dedicados In tumulo cuiusdam medici (261R y 662R = 255 ShB); los epitafios de Luxorio: Epitaphion de filia Oagedis infantula (345R = 340 ShB), In epitaphion supra scripti Olympii (354R = 349 ShB); el de Séneca, De custodia sepulcri (410R = 406 ShB). Lo más frecuente, por el contrario, es que estén dedicados a personajes históricos o mitológicos, hombres de algún modo ilustres; así, por ejemplo, tenemos epigramas escritos para los túmulos de Virgilio o Cicerón en el ciclo de epigramas (AL 495-638 R2) conocido como Symposium duodecim sapientium, o el conjunto de epitafios de Séneca dedicados a personajes como Catón, Pompeyo, etc. En ellos se observa cómo lo laudatorio se utiliza como exemplum por la vía de la auctoritas,26 tal como sucede en este epigrama de Séneca:27

Tenemos por otra parte algún ejemplo de epitafios latinos vinculados a epigramas griegos. Mayoritariamente son poemas dedicados a personajes mitológicos o históricos. El ejemplo más interesante, aunque temprano con respecto a la época aquí estudiada, es el proporcionado por Germánico César, ya que él mismo elabora las dos versiones, griega y latina, a propósito de la tumba de Héctor (AP IX.387 y AL 708).29 En los pocos ejemplos posteriores, los autores latinos nos ofrecen meras traducciones sin ninguna innovación sobre su modelo: EB 52 De fratribus Thebanis sobre AP VII.396, EB 63 De Theombroto sobre AP VII.471 y EB 71 a partir de AP VII.247, a los muertos en la batalla de Cinoscéfalas (197 a. C.). Hay que añadir el epigrama 24 Green de Ausonio, sobre AP V.229, al espartano Trasíbulo.

2.2.c. También los epigramas epidícticos o demostrativos30 aportan contenidos morales. Dentro de ellos, destacamos una serie con particular fortuna, que gira en torno a la pregunta "¿Qué camino seguir en la vida?": sobre este tema escriben en griego Posidipo AP IX.359, Metrodoro AP IX.360, Gregorio Nacianceno, Poemata Moralia 1.2.16.5, Juliano de Egipto, AP IX.446 y Agatías, AP V.302; y en latín Ausonio, Ecl. 19 Green, EB 25-26 y EB App. 2-3.31 Partimos de la relación entre AP IX.359 de Posidipo, el primero de la serie, y EB 25.32

 

AP IX.359 es una forma en verso de uno de los ejercicios típicos (progymnasmata) de la retórica, en concreto una thesis con su análisis lógico, sobre los distintos géneros de vida. Como conclusión del ejercicio tenemos una gnome (v. ).

La versión que leemos en EB 25 es bastante fiel al original griego,34 si no tomamos en cuenta las lógicas modificaciones y aceptamos la tendencia amplificadora general en el epigrama latino que aquí está presente en la expansión de determinados detalles, como en vv. 3-4: // v. 4: tum pavor ingressis navifragum pelagus; además trenza en las expresiones ecos de textos poéticos.35

Interesante y llamativa en tanto que habla de formas de vida no contempladas por el original griego es la inclusión por el traductor latino de las referencias a la vida militar y a la evolución de los cargos (tanto civiles como militares) en el dístico referido al cursus honorum (vv. 7-8: militiae incerto fato labor, actus honorum / lubricas: in summo culmine fluxa fides). Aunque tiene una clara explicación cultural, el añadido rompe el paralelismo con el modelo griego y la simetría interna del poema, puesto que sin contar con este dístico, tendríamos seis versos centrados en distintos modos de ganarse la vida y otros seis que hablan de aspectos de la vida personal, confluyendo todo ello en el dístico final.

Por otra parte, este dístico latino, frente a todos los demás de la composición bobiense, no plantea disyuntivas o dos situaciones claramente diferenciadas e igualmente malas, sino que parece una simple repetición y ampliación de la misma idea, lo incierto e inseguro de la vida militar.

Este dístico central sobre la vida militar viene precedido de un verso (v. 6) que conforma una especie de pausa reflexiva, en principio aplicable a los peligros de la vida en el extranjero (vv. 5-6: si peregri quid habes, trepidum; miserabile, si nil: / aut pudor aut crux est, alterum in alterutro), pero que actúa como anticipación del dístico final.

En el caso latino, como en el griego, el dístico final contiene la enseñanza, aunque al abreviar sorprendentemente el enunciado de las disyuntivas —sin dejar de ser fiel al modelo—, el texto latino tiene espacio para una demoledora declaración, "todo es dolor" (vv. 15-16: unum de geminis optes, aut progenerari / nunquam, aut dissolvi: cetera cuncta dolor). Esta disyuntiva tiene una formulación muy cercana en Ausonio: optima Graiorum sententia: quippe homini aiunt / non nasci esse bonum aut natum cito morte potiri (Ecl. 19 Green, 48-50), que reelabora con amplificaciones el poema de Posidipo,36 insistiendo incluso en la filiación griega de la sententia.

El autor de EB 2537 en este dístico final además de trabajar con Ausonio tiene en cuenta la refutación que Metrodoro (AP IX.360) hace del poema de Posidipo, pues la contundente declaración cetera cuncta dolor del último hemistiquio es la antítesis de con que concluye el epigrama de Metrodoro y que resulta ser la mayor innovación de EB 25 en relación al modelo de Posidipo.

El texto de Metrodoro es el siguiente:38

El epigrama de Metrodoro presenta, además de idéntico número de versos, la misma estructura básica que su modelo y refuta a través de antónimos, no de argumentos contrarios; mantiene muchos términos colocados en las mismas posiciones (cf. v. 1: ) e incluso precedidos de formas con semejanzas fónicas en distintos grados (cf. v. 3: Posidipo: , / Metrodoro: ).

Veamos ahora el poema latino donde se desarrolla la refutación:

EB 26, como el poema latino que lo precede, se nos ofrece plagado de retazos y ecos de textos poéticos.40 Respeta el inicio de su modelo, en principio el poema de Metrodoro, que a su vez es bastante fiel al de Posidipo, aunque luego lo amplifica con temas de la sátira y el epigrama romanos y con motivos tratados por EB 25 ausentes en Posidipo, como por ejemplo, las referencias a la vida militar (26, 9-10). Evita la alusión a la tranquilidad de la vida en casa que hay en el griego y continúa con lo que parece una refutación, pero no como la de Metrodoro de lo dicho por Posidipo, sino una refutación de lo dicho por EB 25. Es decir, EB 26 está siguiendo y refutando las propuestas de EB 25, al tiempo que las amplía de dos maneras: una, dando más espacio a ideas ya presentes en EB 25: a modo de ejemplo, mientras en EB 25 hay dos versos dedicados a reflexionar sobre la esposa, EB 26 expone cuatro (vv. 11-14), y en cuanto a los hijos EB 25 dedica otros dos (vv. 11-12) y EB 26 cuatro (vv. 15-19); y dos, insertando dos pausas con reflexiones de tipo moral: una de ellas sobre la pobreza honrada (vv. 7-8: insontem exiguo praestat quia vivere victu / quam male quaesitis luxuriare opibus) y la otra, sobre la vida como algo que se nos da a crédito y que tenemos que devolver con intereses: (vv. 19-20: reddendum est mundo naturaeque omniparenti / quod nobis lucis fenore crediderit), un argumento original en el contexto de la tradición del epigrama, aunque atestiguado en la cultura popular latina.41 Ambos incisos rompen completamente el ritmo del epigrama y deshacen la mecánica perfecta que han venido manteniendo los autores anteriores. A pesar de estas diferencias, es muy estrecha la relación con EB 25 y la prueba más clara se encuentra en el v. 26 cetera deliciae, incomprensible si no se lee junto a EB 25 cetera cuncta dolor.

Sin embargo, Speyer42 ha demostrado que, aunque no fue su modelo principal, el poeta latino tuvo delante la refutación de Metrodoro: por ejemplo, el v. 6, tacitus pauperiem toleres, se explica a partir de v. 5 , pero como se trata de una reflexión demasiado negativa, necesita el poeta latino aportar una visión más positiva de la pobreza y de ahí los versos 7-8. De igual modo, el v. 14poteris vivere liberius parece inspirado por el v. 6 , y el v. 21 mens viget ut corpus iuvenum recoge tanto EB 25,13 como AP IX 360.7-8.

Esto plantea una interesante cuestión acerca de la transmisión de los epigramas griegos: si como hemos visto, el autor de EB 25 presenta una innovación, la sentencia final, que no aparece en Posidipo pero sí en Metrodoro, es probable que su autor tuviera entonces como modelo ambos epigramas griegos, que se estarían transmitiendo ya como un par inseparable, como demuestra también la existencia de dos epigramas editados como apéndice 2 y 3 a los EB de autor y fecha desconocidos, pero que son traducciones muy cercanas a los originales griegos.43 El peculiar tratamiento de los modelos por parte del autor de EB 26 parece confirmar la existencia de un díptico de transmisión conjunta,44 que habría servido de modelo para los autores de los Bobiensia. Habría que considerar también como modelo la reelaboración de Ausonio del poema de Posidipo en su Egloga 19 Green, en el que ha podido inspirarse el autor de EB 26 para su amplificación sobre su modelo más inmediato, EB 25. Esta relación ya ha sido probada por Benedetti para otros poemas de la colección de Bobio, cuyos autores conocían y se inspiraban en la obra completa de Ausonio y no sólo en los epigramas: al estudiar las formas de traducción del poeta galo y la relación que se puede establecer con los textos de la sylloge del Bobiensis, viene a concluir que, en aquellos poemas traducidos dos veces al latín, una por Ausonio y otra por los autores de los Epigrammata Bobiensia, este segundo texto se pliega más al modelo griego que la 'traduzione artística' de Ausonio y que lo hace "con intenti emulativi alla corrispondente traduzione ausoniana".45

 

3. Distintas formas de acercamiento al humor

Traducir el humor es más difícil que escribirlo.46 En una traducción ad verbum puede morir el humor, algo especialmente claro en casos en que la comicidad está vinculada a determinados juegos semánticos, como los dobles sentidos, o fónicos, como la paronimia. La dificultad o facilidad que el autor latino encuentre en verter el texto griego será, sin duda, un criterio de selección tan importante como el del tema del epigrama.

 

3.1 Formas del humor

3.1.a Es fácil, por ejemplo, traducir lo humorístico cuando el chiste toma forma de verdad de tipo general para ambas lenguas y culturas, una gnome; así nos ocurre con este ejemplo de Menandro, cuyas sentencias están muy cerca de los epigramas, como ya hemos visto.


En ambas lenguas tienen perfecto sentido la reflexión, la única diferencia radica en la tendencia del latín a la amplificación estilística.

3.1.b Un grado mayor de complejidad lo presentan las traducciones de escenas cómicas. A pesar de su brevedad, el epigrama griego sabe expresar con pocas palabras situaciones cómicas a veces muy complejas. Entonces, las operaciones de traducción o adaptación pueden ser varias y de variada dificultad. Veamos un ejemplo.

El epigrama latino mantiene el mismo esquema de historieta:51 a) presentación del personaje en su montura b) caída-coceamiento hasta la muerte c) últimas palabras.

Por su parte, los cambios más importantes corresponden a la contextualización necesaria de determinados grecismos, y al ritmo del epigrama.

• El efecto cómico comienza con el nombre del protagonista. Los nombres griegos son especialmente transparentes y dan mucho juego a los autores cómicos que conocen bien la lengua y, desde luego, las referencias culturales que llevan asociadas: Menéstrato en griego tiene resonacias épicas y se genera con ello un fuerte contraste con la palabra ('hormiga') y posteriormente con toda la historieta. Puede también hacer referencia en clave cómica a la historia que cuenta Pausanias (IX.26.7) sobre un Menéstrato que luchó contra un dragón en la tebana Tespias. Estas resonancias y su consecuente efecto desaparecerían casi por completo si se mantuviera este nombre en latín. Por ello, una de las primeras operaciones que se lleva a cabo en la adaptación es la cambiar las palabras para buscar el mismo efecto, o uno similar. La traducción, aquí, se ha hecho a través del nombre Faustulus, con una forma de diminutivo que es coherente con la historia pero que también es, en cierto modo, despreciativa, cuando éste no se utiliza en el contexto afectivo que le es propio. El juego paródico con resonancias épicas o pseudoépicas se podría percibir si se recuerda que el pastor que recoge de las aguas del río a Rómulo y Remo llevaba ese nombre. Por otro lado, faustulus (gracias a la implícita asociación con faustus-infaustus) nos prepara para el infausto destino del protagonista. Por lo demás, se le da mayor relieve con su posición en principio de verso, algo métricamente imposible en el caso griego.

• En la segunda parte, el poema latino ralentiza la narración, en oposición a la síntesis y condensación del griego. La primera parte del segundo hexámetro griego se corresponde con dos versos y medio en la versión latina. Ésta se detiene más en el detalle e insiste en el estado agónico del protagonista gracias a la repetición efectiva de vix, que abre dos hemistiquios sucesivos.

• En la parte final, la versión latina gana de nuevo en intensidad al ampliar la increpación a la Envidia, a la que se llama improba, y al dirigirle una pregunta directa. Por lo demás, la conclusión de ambas escenas es la misma, el enano es además soberbio, cuando se compara con otros excelsos jinetes; bien es cierto que la comparación es desproporcionada y que en ambos casos el referente mitológico está alterado de manera interesada —en sentido estricto Faetón es un auriga—, pero a pesar de las diferencias en el detalle ambas composiciones coinciden en no modificar ese referente mítico que, con el elemento humorístico que en este punto adopta, es igualmente válida para los eruditos compositores y no necesita mayor adaptación.

3.1.c Presentan un grado mayor de dificultad los epigramas cuya efectividad radica en elementos lingüísticos:


Como en el caso anterior, en la versión latina se mantiene la estructura de tres partes del epigrama griego: presentación-situación-increpación, y se expande la segunda, la situación, describiéndola de forma más detallada. En griego, el humor radica en el juego pseudoetimológico entre ('famélicas') y ('fuentes'), y en la parodia homérica que encontramos en el v. 3, cuyo primer hemistiquio (= Il. 11,403), prepara el compuesto ('de brillo argénteo'), de clara resonancia homérica, pero utilizado por primera vez por Lucilio; este compuesto, aplicado a ('hambre') supone una atrevida sinestesia, que incrementa aquella por la que empieza el poema: ('en hambre de plata'). En latín se sustituye —quizá un poco más pobremente— por los contrastes entre los términos opuestos: dives/parvula; multa oculis/pauca gulae, non oculos/sed ventrem en correlación y quiasmo. Entre ellos destaca otro par: pone dapes/aufer opes, que aparece en el último verso, viene reforzado por la anáfora de vel y contiene la forma dapes que, aunque puede aparecer en más autores y contextos, presenta ciertas resonancias épicas por su uso relativamente frecuente en Eneida de Virgilio, Argonáuticas de Valerio Flaco o en tamorfosis de Ovidio; opes, además de en las Metamorfosis es una forma recurrente en los textos historiográficos (Salustio, Livio, Tácito, Amiano Marcelino), lo que le confiere, igualmente, un aire noble. Con todo, estas dos formas no pueden competir ni rivalizar con el juego de resonancias homéricas, aunque sí provocar cierta evocación de Virgilio.

 

3.2 Temas humorísticos

3.2.a Muchos son los tipos a los que tradicionalmente ataca el epigrama burlesco: malos anfitriones, parásitos, avaros, charlatanes, profesionales incapaces... Pero, sin duda, uno de los favoritos es el gramático. Ya desde época alejandrina, nos encontramos burlas contra sesudos gramáticos y las distintas facciones que conforman —los homéricos, los calimaqueos.—, y las propias pullas se formulan en un lenguaje complejo y con elaboradas imágenes. El personaje del gramático engloba también al poetastro y erudito que tanto cansa con sus versos como con sus etimologías o sus solecismos,54 todo palabrería hueca que después ayudará a incorporar a este grupo de profesionales criticados a los rétores.

Las críticas más frecuentes se centran en su incapacidad y su ignorancia, y lo vemos en las versiones que los Bobiensia presentan sobre este tipo de epigrama y personaje.55

El autor (o autores) de los Bobiensia se interesó tan sólo por el primer dístico de la composición de Luciano, la invocación que hace a la Gramática, lo suficiente para hacer dos versiones aunque se diferencian entre sí muy poco: la primera es más próxima al original en tanto que reproduce mejor el orden de palabras del epigrama griego. Sin embargo, en su selección del primer dístico, ambos poemas han subvertido un tanto el sentido del original. El epigrama de Luciano es un canto a la capacidad de la Gramática para acoger a cualquiera, por inútil o estúpido que sea, algo que en griego está expresado muy condensadamente en el epíteto , pero, al mismo tiempo, si lo vemos atendiendo a las frecuentes quejas de las que está llena la Antología Griega, es profundamente irónico porque los gramáticos suelen ser unos muertos de hambre que apenas se sacian a sí mismos, cuánto menos a otros. Esta idea a propósito de la Gramática se elimina de las composiciones latinas, que, de este modo, suprimen el epíteto, si bien mantienen la idea de remedio o solución, no general para el hambre, sino para los hambrientos. Salvo esta operación de selección, el único cambio notable y obvio es la sustitución del primer verso de la llíada por el de la Eneida, lo que supone una fácil adecuación de los referentes literarios a los objetivos buscados.

También Páladas, el autor mejor representado en la Antología Griega —algo coherente con la fama de la que disfrutaron sus composiciones, las más imitadas por parte de los autores occidentales—, nos proporcionó alguna aguda crítica contra gramáticos:


El juego de palabras de Páladas —un recurso cómico al que era extraordinariamente aficionado— se basa en la disemia de los términos , hablando de un niño o de un gramático. La disemia, en este caso, es perfectamente traducible en latín, y es lo que hace Ausonio. Pero los latinos no parecen encontrarse cómodos en la brevedad y sequedad del chiste griego y Ausonio lo reutiliza en dos niveles distintos: como crítica a un orador pedante, pero también inoportuno: ¿quién va a querer tener hijos del género neutro? La ampliación se hace a costa de las propias circunstancias culturales: era habitual en la época invitar a un orador a dar un discurso en una celebración importante,60 y uno de los deseos frecuentemente expresados en ellos es que lleguen los hijos. Se discute la relación entre ambos poetas,61 pero parece lógico pensar que la inspirada escena de Ausonio ha de ser posterior al seco esquema cómico de Páladas: el imitador ha superado con mucho al modelo.

En cierto modo Páladas era un 'gramático' ya que fue profesor de escuela y enseñaba letras a los niños en Alejandría en la segunda mitad del siglo IV.62 Expresa sin pudor una profunda amargura por una vida llena de privaciones y disgustos: su mujer, su profesión, la pobreza en la que vive, mientras contempla la ascensión de personajes incapaces y venales ... Y ello lo expresa con su casi enfermiza debilidad por los juegos de palabras:

Estamos ahora ante un caso de interesado cambio cultural por parte del traductor. Páladas nos ofrece un epigrama satírico contra el filósofo Temistio, que fue Prefecto de la Ciudad de Constantinopla en el 384 d. C. El epigrama tiene una estrecha relación con el discurso XXXIV del filósofo, donde justifica su acceso al poder.66 Tuvo tanto éxito la aguda crítica de Páladas que llegó también a conocimiento del autor del epigrama latino, posiblemente Naucelio.67

La versión latina muestra, en primer lugar, una interesada selección sobre el epigrama original: elimina por completo toda referencia política. Es sugerente pensar que esta eliminación la pudo realizar Naucelio a causa de su amistad con Símaco,68 que ese mismo año fue Prefecto de la Ciudad, pero de Roma; tal alusión hubiera sido completamente inadecuada entre amigos. Con ingenio, y para no renunciar al chiste, lo atribuye a un gramático. El sutil juego alusivo del texto griego ahora se concreta y la lectura cambia radicalmente. El librarius, uno de los encargados de 'subir', colocar los libros en las estanterías de las bibliotecas se ha vuelto gramático y, al subir, ha bajado en una jocosa inversión entre los significados de las escaleras de la vida y de la biblioteca. Hay una hábil traslación cultural que va mucho más allá de la casi mecánica traslación lingüística, para la que retoma el juego etimológico entre , y lo vierte mediante el uso de escendens-scande/descendisti y las formas adverbiales deorsum/sursum, está última en una disposición destacada pues es la palabra que abre y cierra la composición. En el texto latino las formas que implican subir o ascenso (sursum (x2), escendens, scande) tienen más presencia que las ligadas al descenso (descendisti, deorsum), frente al perfecto paralelismo entre ambas en el epigrama griego. Además el juego etimológico, como en el modelo, va asociado al oxímoron.

3.2.b Hemos visto que es posible reutilizar el humor y convertir lo griego en romano en aquellas colecciones (Ausonio y Epigramata Bobiensia) donde tenían como modelos principales los epigramas griegos. Pero ¿cuando no era así?, ¿hay humor basado en lo griego? El autor latino no parte de un chiste griego, sino que hace un chiste con ello. ¿Griegos frente a romanos? A menudo sólo es "el Otro",69 al que se le achacan defectos diversos; aunque los epigramáticos latinos vivían con gentes de otros pueblos, sobre los griegos siguen recayendo algunos de los tópicos que se les habían aplicado durante siglos y entre ellos, el de ser unos depravados sexuales de todo tipo. Y está claro en el siguiente epigrama:

El leno maritus es un tipo muy frecuente en la epigramática de la época [Luxorio 302R (297 ShB), 322R (317 ShB) 323R (318 ShB) y el poeta anónimo 128R (117 ShB)], Ausonio [epigr. 101 Green],71 pero al insulto por su depravación se suma el ser 'grieguillo', un defecto añadido y que supone, implícitamente, otros más. Aunque Shackleton-Baley en su edición lo presenta como un cognomen, parece que debemos ponerlo en duda con Kay,72 porque no está atestiguado en ningún otro lugar y el término siempre se ha utilizado despectivamente en un contexto xenófobo.

Pero lo habitual no es el empleo del epíteto genérico, sino una más sutil referencia implícita gracias al uso de un nombre propio, que sirve para caracterizar, en una sola palabra, al personaje. En los epigramas de la Antología Latina que podemos adscribir a la época tratada, encontramos juegos con los nombres propios; en ocasiones creaciones ad hoc, útiles por 'sonar' diferente. Entre ellas aparecen formas 'bárbaras' no atestiguadas en otro lugar como Becca,73 un afeminado que regala sus favores por nada [Luxorio AL 321R (316ShB)] o Blumarit, un anfitrión interesado [Luxorio, AL 326R (321ShB)]; o formas 'barbarizadas', por ejemplo en el nombre de un borracho al que se llama Nerfa (por Nerva) [Luxorio AL 311R (306ShB)].

¿Y los griegos? Los nombres griegos remiten a personajes con los mismos defectos tópicos de siempre: Filipo, un médico asesino [AL 205R (196ShB)]; un mal poeta es Zenobio [Luxorio, AL 316R (311ShB)]; un mal auriga se puede llamar Ciriaco [Luxorio, AL 306R (301ShB)] y Filagro designa un abogado que saciaba sus apetitos con una yegua [De equa Philagri advocati. Insultatio pro concubitu AL 148R (137ShB)]: aunque ya está latinizado,74 su estructura es la de un nombre griego y puede interpretarse como 'el que ama lo salvaje' y recuerda a onager 'asno salvaje'.

Este último ejemplo nos introduce en las posibilidades humorísticas que presenta la etimología de los nombres griegos: no es muy frecuente en la Antologia Latina, dado que ni Luxorio ni el poeta anónimo al que se atribuye la sylloge (carmina 90-197 R = 78-188ShB) a la que pertenece el poema sobre Filagro, antes mencionado, parecen interesados en la epigramática griega; sin embargo, hay dos ejemplos para los que hay que suponer conocimiento del griego y capacidad de análisis de los nombres propios:

La efectividad del chiste se basa en el juego con el caballo y su dominio, ideas asociables a la forma del nombre del médico de Cos, desde luego no a su ciencia. A este efecto hay que sumar que el conocimiento de la tradición hipocrática por los médicos y por los eruditos del mundo romano permiten al autor y a su público jugar con el famoso aphorismo 1,1 de Hipócrates: [v. 5: artis prolixae breviavit tempora]. Aunque la forma más conocida de este aforismo tiende a ser Vita brevis, ars vero longa (cf. Sen. De Brev. vit. 1.1: Inde illa maximi medicorum exclamatio est, 'uitam breuem esse longam artem'), la versión primera de este texto hipocrático y que conservan los manuscritos más antiguos (algunos del siglo VIII) es 'vita brevis, ars autemprolixa',76 forma que subyace en el verso 5 de este epigrama.

Una comprensión similar del significado del nombre hemos de suponer en la demoledora crítica de Luxorio a un tal Eutiquio del que nos dice el título: In ministrum regis, qui alienas facultates vi extorquebat [AL 341 y 342R (ShB 336 y 337)]. Con tal nombre el autor parece querer velar el nombre del sujeto real al que critica, muy probablemente Bonifacio,77 del que Eutychius es calco exacto.

En cualquier caso, la presencia de los nombres griegos en la Antología Latina es cuantitativamente reducida, en especial si lo comparamos con lo que nos ofrece Ausonio, quien multiplica estos juegos basados en nombres propios. Así, aparecen en sus traducciones del griego nombres parlantes o extremadamente difundidos, o que remiten a personajes relacionados con el tema que se trata:78 de todo ello vemos ejemplos en el siguiente epigrama.

Hermógenes (médico) y Diofanto (astrólogo) se transforman en Alcón (médico con referencia marcialesca cf. VI.70 y XI.84), Marco (paciente, nombre romano absolutamente común) y Diodoro (el harúspice, nombre griego, sigue relacionado con , algo conveniente para un adivinador, aunque más común que Diofanto). Hay, por tanto, un acercamiento cultural, en el que se dibuja un mundo más romano aunque sin olvidar el componente griego.

Como veíamos en los epigramas de la Anthologia Latina que podemos datar en esta época, también en la obra de Ausonio encontramos el uso intencionado de nombres griegos sobre tipos —griegos— tradicionales: un médico incapaz es Éunomo (79 Green) y tiene un paciente llamado Gayo (romanos frente a griegos); un gramático se llama Filomuso81 (44 Green); un afeminado, Zoilo (101 Green); un sarnoso, Polygiton (115 Green); un fellator, Castor82 (75 Green); otro, llamado Euno, maestro además, que pretende a una vendedora de perfumes llamada Filida en 82-87 Green.

En Ausonio un llamativo juego es aquel que encontramos en los epigramas en los que todo el poema gira en torno a la interpretación etimológica de los nombres de los personajes. El recurso aparece tanto en la literatura griega como en la latina: AP XI.230 y 181 (de Amiano) y XI.355 y 355 (anónimos), Marcial VI.17; Priapea 7, EB 70, etcétera, y siempre está utilizado con intención burlesca y satírica; por supuesto, en todos los casos se trata de nombres griegos, que son mucho más abiertos a la interpretación, más dúctiles para el juego y, al mismo tiempo, son nombres del "Otro": la borracha Méroe (21 Kay) lleva un nombre apropiado a su vicio: la 'sin mezcla'; los hermanos Chrestos y Akindynos que deberían cambiar sus nombres83 dados sus moribus malis:

La opción que sigue Ausonio está a medio camino entre el comentario y la paráfrasis. Si Cresto se asocia con la virtud y Akindinos con la ausencia de riesgo (algo transparente, si se sabe griego), la simple mutación de los nombres añadiendo a uno la a- que al otro se le quita nos desvela la verdadera naturaleza de esos hombres que así portarían nombres más adecuados a sus costumbres: el uno vicioso, el otro lleno de peligros. Estos sentidos etimológicos y el cambio de posición de la alfa son las bases de una comicidad que se basa en la erudición lógicamente, de un autor (y un público) que puede mezclar —como aquí mezcla— ambas lenguas.

 

4. Conclusión

Con estos ejemplos hemos podido ver diversas formas de tratamiento, la mayoría de las ocasiones entre la traducción y la paráfrasis, que los autores latinos tardíos aplican a los epigramas que componen a partir de los modelos griegos. Es verosímil que esos modelos los conocieran por medio de antologías que circularían por el territorio grecoparlante del imperio romano y que de ahí pasaran al área latina, en muchas ocasiones con sorprendente rapidez, y creando en algunos casos notables una verdadera serie de textos griegos y latinos entrecruzados, como los epigramas centrados en la pregunta 'qué camino elegir en la vida'.

Como podemos apreciar por estos textos, representativos del género en esta época, el epigrama latino ha procedido a diversas operaciones en su apropiación de los epigramas griegos, de sus modelos y de sus temas.

En primer lugar, hay que considerar que ello no ha sucedido de una manera indiscriminada. La selección de lo que se elige para traducir en un género tan menudo como el epigrama opera como auténtico "punto cero" en la tarea de la traducción. Aunque las máximas, las enseñanzas y las reflexiones de tipo moral no plantean dificultades a un autor de cultura y lengua latinas, pues la gravitas y la severitas de la tradición romana no parecen tener problemas en asumir las enseñanzas generales de las gnomai, sin embargo los subgéneros en los que mayoritariamente expresaban los griegos estas enseñanzas no fueron los elegidos por los romanos, que prefirieron los epigramas demostrativos a los funerarios; en el caso de optar por el epitafio, lo dedicaban a los modelos morales que les aportaba su propia tradición histórica o mitológica. Pero, por otro lado, la selección se podía operar dentro de un solo epigrama, del que un dístico separado del resto podía reutilizarse con una finalidad distinta (Apuleyo, EB 64 y 46, EB 50), en un procedimiento que podríamos llamar, en terminología genettiana, 'transvalorización'.85

En segundo lugar, una vez seleccionado lo que se quiere (¿o se puede?) traducir, el trabajo con los epigramas griegos para elaborar composiciones en lengua latina es algo más que un simple ejercicio retórico y alarde de habilidad. El texto generado tiene una finalidad en sí mismo y, por tanto, puede exigir complejos procedimientos de traducción que consigan comunicar tanto la enseñanza moral como la comicidad.

Hay procedimientos de adaptación literaria o cultural, en la que las alusiones, consustanciales al género, se sustituyen por alusiones a la propia literatura latina (AL 796), o los personajes se sustituyen por los habituales en el mundo romano (Ausonio 77).

Pero, sin duda, la característica más destacable, compartida por los epigramas de contenido moral y burlesco, es una marcada tendencia a la expansión, tanto desde el punto de vista estilístico (mayor detenimiento en la descripción o mayor juego retórico, EB 49, etc.), como temático, introduciendo elementos nuevos, que aportan el contexto necesario para la comprensión completa del poema (EB 25).

Pero lo habitual es la amplificación, la unión de expansión estilística y extensión temática, a veces buscando la traducción que podríamos llamar pragmática, la que pretende el mismo efecto que el poema original y que exige las múltiples y más complejas adaptaciones que vemos en los epigramas burlescos (Ausonio 50); otras veces no se observa que ese efecto se haya conseguido y sólo nos encontramos un alarde versificador poco eficaz (EB 26).

Indudablemente, y como ya señalábamos al principio del trabajo, hay importantes diferencias entre las tres colecciones que aquí hemos relacionado: Ausonio y Epigrammata Bobiensia, por un lado, y Anthologia Latina, por otro. Aunque las conclusiones aportadas son aplicables casi exclusivamente a las dos primeras, hemos podido observar que en la Antología, cuyos autores estaban mucho más alejados de la literatura griega, perviven, sin embargo, algunos de estos rasgos, como la reutilización de las máximas, la selección previa interesada y el uso cómico de los nombres propios.

En resumen, en distinto grado, todas ellas nos muestran los modos mediante los que convertir epigramas de griegos en epigramas de romanos.

 

BIBLIOGRAFÍA

Alvar, A., "Notas para la recepción de la literatura griega en Occidente en el s. iv: Homero en Ausonio", en A. Sánchez-Ostiz et al. (coords.), De Grecia a Roma y de Roma a Grecia: un camino de ida y vuelta Pamplona, EUNSA, 2007, pp. 67-90.         [ Links ]

Barnwell, P. S., Emperor, prefects and kings: the Roman West, 395-565, Chapel Hill, University of North Carolina Press, 1993.         [ Links ]

Beckby, H., Anthologia graeca, München, Ernst Heimeran, 1957.         [ Links ]

Benedetti, F., La tecnica del vertere negli epigrammi di Ausonio, Florencia, Olschki, 1980.         [ Links ]

Benjamin, I., The invention of racism in classical antiquity, Princeton, University of Princeton, 2004.         [ Links ]

Bernt, G., Das Lateinische Epigramm im Übergang von der Spätantike zu frühen Mittelalter, München, Arbeo-Gesellschaft, 1968.         [ Links ]

Breitenbach, A., Kommentar zu den Pseudo-Seneca-Epigrammen der Anthologia Vossiana, Hisdesheim, Weidmann, 2009.         [ Links ]

Buisset, D., "Le bronze et le papier", Anthologie greque, I: La couronne de Méléagre, épigrammes choisies, París, Éd. de La Difference, 1990, pp. 7-18.         [ Links ]

Cameron, A., "Notes on Palladas", CQ, 15, 1965, pp. 215-229.         [ Links ]

----------, The Greek Anthology: from Meleager to Planudes, Oxford, Oxford University Press, 1993.         [ Links ]

C. E.: Bücheler, F., Carmina Latina Epigraphica, I-II, Leipzig, E. Lommatzsch, 1895.         [ Links ]

Courtney, E. (com., ed.), The fragmentary Latin Poets, Oxford, Clarendon University Press, 1993.         [ Links ]

Dingel, J., Senecas Epigramme und andere Gedichte aus der Anthologia Latina. Ausgabe mit Übersetzung und Kommentar, Heidelberg, Universitátsverlag Winter GmbH, 2007.         [ Links ]

Dagron, G., "L'Empire romain d'Orient au ive siécle et les traditions politiques de l'hellénisme. Le témoignage de Thémistios", TM, 3, 1968, pp. 1-240.         [ Links ]

E. G.: Kaibel, G., Epigrammata Graeca ex lapidibus collecta, (Berlín 1878) reimpr. Hildesheim, G. Olms, 2001.         [ Links ]

Francis, J. A., "Visual and Verbal representation: Image, text, Person and Power", en P. Rousseau (ed.), A Companion to Late Antiquity, Oxford, Oxford University Press, 2009, pp. 285-305.         [ Links ]

Galli Calderini, I. G., "L'epigramma greco tardoantico. Tradizione e innovazione", Vichiana, 16, 1987, pp. 103-134.         [ Links ]

Genette, G., Palimpsestos: la literatura en segundo grado, Madrid, Taurus, 1989 (trad. del orig. francés París, 1982).         [ Links ]

Giangrande, G., "Gli epigramma alessandrini come arte allusiva", QUCC, 15, 1973, pp. 7-31.         [ Links ]

Green, R. P. H., The Works of Ausonius, Oxford, Clarendon Press, 1991.         [ Links ]

Guichard, L. A., "AP.9.359 (Posidipo *133 A-B) como ejercicio de thesis", Prometheus, 33.2, 2007, pp. 97-114.         [ Links ]

G. V.: Peek, W., Griechische Versinschriften. I. Grabepigramme, Berlín, Akademie Verlag, 1955.         [ Links ]

Harrison, S. J., "Apuleius eroticus: Anth.Lat. 712 Riese", Hermes, 120.1, 1992, pp. 83-89.         [ Links ]

Heredia Correa, H., Petronio. Fragmentos y poemas, México, Universidad Nacional Autónoma de México, 1998.         [ Links ]

Herrera Montero, R., "Venus armata (I). Ausonio traduce AP 16.174", CFC (Lat) 14, 1998, pp. 115-125.         [ Links ]

Hertel, D., Die Mauern von Troja. Mythos und Geschichte im antiken Ilion, München, C. H. Beck, 2003.         [ Links ]

Hickey, L., "Aproximación pragmalingüística a la traducción del humor", Aproximaciones a la Traducción, Instituto Cervantes, 1999, http://cvc.cervantes.es/obref/aproximaciones/hickey.htm.         [ Links ]

Kajanto, I., The Latin cognomina, Helsinki, Helsingfors, 1965.         [ Links ]

Kassel, R.-Austin, C., Poetae Comici Graeci. VI.2: Menander, testimonia et fragmenta apud scriptores servata, Berlín-New York, Walter de Gruyter, 1998.         [ Links ]

Kay, N. M., Ausonius. Epigrams. Text with introduction and commentary, London, Duckworth, 2001, pp. 11-27.         [ Links ]

----------, Epigrams from the Anthologia Latina: Text, Translation and Commentary, London, Duckworth, 2006.         [ Links ]

Kibre, P., Hippocrates latinus. Repertorium of Hippocratic Writings in the Late Middle Ages, Nueva York, Fordham University Press, 1985.         [ Links ]

Körte, A., Menandri quae supersunt, II, Leipzig, Teubner, 19592.         [ Links ]

Labarbe, J., "Les aspects gnomiques de l'épigramme grecque", L'épigramme grecque, Géneve, Entretiens Hardt, 1968, pp. 249-386.         [ Links ]

Lattimore, R., Themes in Greek and Latin Epitaphs, Urbana, University of Illinois Press, 1942, pp. 170-171.         [ Links ]

Laurens, P., L'abeille dans l'ambre. Célébration de l'épigramme de l'époque alexandrine à la fin de la Renaissance, Paris, Les Belles Lettres, 1989.         [ Links ]

Lauxtermann, M. D., "The Palladas Sylloge", Mnemosyne, 50.3, 1997, pp. 329-336.         [ Links ]

----------, "What is an Epideictic Epigram?", Mnemosyne, 51.5, 1998, pp. 525-537.         [ Links ]

Liubzhn, A., "Anicius Probinus: l'auteur des versions poétiques des épigrammes grecques dans le corps des Epigrammata Bobiensia", Hyperboreus, 7.1-2, 2001, pp. 257-275 (en ruso).         [ Links ]

Mariotti, M., "Sul contrasto di modelli nella retorica dell'aegritudo: 'consolatio per exempla' e 'fletus immodicus' in AL 692 R. e Petron. 115, 6-20", MD, 38, 1997, pp. 87-123.         [ Links ]

Mazzoli, G., "Epigrammatici e grammatici: cronache d'una familiarita poco apprezzata", Sandalion, 20, 1997, pp. 99-116.         [ Links ]

McGill, S., "Menin Virumque: Translating Homer with Virgil in Epigrammata Bobiensia 46, 47, and 64", Classical Journal, 101.4, 2006, pp. 425-431.         [ Links ]

Munari, F., Epigrammata Bobiensia, Roma, Edizioni di Storia e Letteratura, 1955.         [ Links ]

----------, "Die Spätlateineische Epigrammatik", Philologus, 102, 1958, pp. 127- 139.         [ Links ]

Opsomer, Th., "Excusez la matière insensée: Catulle et les élégiaques latins dans l' Anthologie latine", en Rémy Poignault (ed.), Présence de Catulle et des Elégiaques Latins Clermont-Ferrand, s. l., Centre de Recherches A. Piganiol, 2005, pp. 235-254.         [ Links ]

Ortega Villaro, B., "Páladas, un pagano entre cristianos", en A. Ruiz-C. Pérez (eds.), Paganismo y Cristianismo, ruptura y continuidad, Burgos, Universidad de Burgos, 2003, pp. 157-166.         [ Links ]

Page, D. L., The epigrams of Rufinus, Cambridge, Cambridge University Press, 1978.         [ Links ]

----------, Further Greek Epigrams. Epigrams before A.D. 50 from the Greek Anthology and other Sources, revised by R. D. Dawe y J. Diggle, Cambridge-New York, Cambridge University Press, 1981.         [ Links ]

P. L. M. : Poetae latini minores. Recensuit et emendavit Aemilius Baehrens, Lipsiae, G. B. Teubner, 1879-1883.         [ Links ]

Riese, A., -Bücheler, F., Anthologia Latina sive Poesis Latinae Supplementum eddiderunt Franciscus Buecheler et Alexander Riese. Pars prior: carmina in codicibus scripta, recensuit Alexander Riese, Leipzig, Teubner, 1894-19062.         [ Links ]

Rodríguez-Pantoja, M., "Traducciones del griego al latín en la poesía epigráfica", en M. Valverde et al. (eds.), Koinòs lógos: homenaje al profesor José García López II (E. Calderón et al. edd.), Murcia, Universidad de Murcia, Servicio de Publicaciones, 2006, pp. 887-896.         [ Links ]

Rosellini, M., "Sulla tradizione dei 'Carmina duodecim sapientum' ('Anth. Lat'. 495-638)", RFIC, 122.4, 1994, pp. 436-463.         [ Links ]

Rosenblum, M., Luxorius: a Latin poet among the Vandals, together with a text of the poems and an English translation, London-New York, Columbia University Press, 1961.         [ Links ]

Shackleton Bailey, D. R., Anthologia latina. I, Carmina in codicibus scripta, Stuttgart, Leipzig, Teuber, 1982.         [ Links ]

Speyer, W., Naucellius und sein Kreis. Studien zu den Epigrammata Bobiensia, München, Beck, 1959.         [ Links ]

----------, Epigrammata Bobiensia, Leipzig, G. B. Teubner, 1963.         [ Links ]

Stemmler, M., "Auctoritas exempli. Zur Wechselwirkung von kanonisierten Vergangenheitsbildern und gesellschaftlicher Gegenwart in der spátrepublikanischen Rhetorik", Mos maiorum. Untersuchungen zu den Formen der Identitätsstiftung und Stabilisierung in der römischen Republik (Linke, B.-Stemmler, M., ed.), Stuttgart, F. Steiner, 2000, pp. 141-205.         [ Links ]

Tracy, V. A., 'The Leno-Maritus", CJ, 72, 1976, pp. 62-64.         [ Links ]

Trouillet, F., "Les sens du mot des origines à son emploi rhétorique", La Licorne 3 "Formes brèves. Métamorphoses de la sententia", 1979, pp. 41-64.         [ Links ]

Zurli, L., Unius poetae sylloge (Anthologia Latina, cc. 90-197, Riese = 78-188, Shackleton Bailey), Hildesheim, G. Olms, 2007.         [ Links ]

 

Notas

* Este trabajo ha sido realizado en el marco del Proyecto BU 008A07 financiado por la Consejería de Educación de la Junta de Castilla y León.

1 Para el epigrama griego en la tardoantigüedad cf. Galli Calderini 1987 y para el latino, Bernt 1968.

2 Para la formación de estas elites, vid. Ausonio, Liber protrepticus ad nepotem, vv. 45-55, y Alvar 2007.

3 Vid. Kay 2001, pp. 11-27. Citamos por esta edición, cuya numeración coincide con la de Green 1991.

4 Editados por F. Munari 1955 y Speyer 1963. Un estudio de algunos de los poemas puede verse en Speyer 1959.

5 La edición completa y que aún tiene vigencia es la de A. Riese —F. Bücheler 1894-19062 [R]. De las ediciones parciales que se han venido elaborando destacamos y utilizamos la todavía incompleta, pero que tiene como objetivo sustituir la antigua edición de Riese, de Shackleton Bailey 1982 [ShB].

6 Edita a Luxorio, Rosenblum 1961 y al "poeta anónimo" [AL 90-197R (78-188 ShB)], Kay 2006 y Zurli 2007.

7 Vid. Munari 1958, pp. 128-129.

8 Como estudio general sobre la formación de la Antología Griega o Palatina (AP), puede consultarse Cameron 1993, y como edición completa Beckby 1957.

9 Buisset 1993, p. 13. Lo vieron con toda claridad los compiladores de la Antología Palatina que ordenaron muchos epigramas en series sobre el mismo tema. El caso más excepcional es el de la Vaca de Mirón (AP IX.713-747): 35 epigramas a cargo de autores que van desde Anacreonte a Juliano de Egipto, del siglo VI. Ausonio también hace su aportación (epig. 63). Y ¿no hace lo que los demás, decir lo mismo con otras palabras?

10 Entre otros, Benedetti 1980. Un ejemplo concreto se puede ver en Herrera 1998.

11 La abundancia de epigramas ecfrásticos es consecuente con la tendencia del momento. Cf., por ejemplo, Francis 2009.

12 Para la posible antología que manejaron estos autores cf. Cameron 1993, pp. 90-96. Sobre ella, entre otros, plantea dudas Kay 1991, pp. 13-14.

13 Cf. Labarbe 1968.

15 Citamos la edición de Heredia 1998, p. 32. Vid. para este poema, Mariotti 1997. "Perdida la nave, un náufrago desnudo busca a otro / abatido por el mismo golpe, y a ese llorarle su destino. / Quien por el granizo perdió la cosecha y el trabajo del año / llora en parecido regazo su triste sino. / Las desgracias unen a los desdichados y los padres sin hijos / juntan sus lamentos y el tiempo los hace iguales. / Nosotros también juntando nuestras voces llegaremos a los astros: / las súplicas unidas —se dice— van más lejos".

16 "La consunción no es la única muerte (posible), / sino que la gordura excesiva produce muchas veces el mismo efecto. / De esto da testimonio Dionisio el tirano de / Heraclea Póntica, que lo ha sufrido". Dionisio (337-305 a. C.) fue un famoso gordo; cf. Ateneo XII 549.

17 En su acepción retórica se especializa en 'palabra o acción que comporta utilidad', cf. Prisciano (praeex.2), que en buena medida traduce a Hermógenes (prog. 3, p. 5, 25-27 Spengel II = p. 6, 4-6 Rabe).

18 Vid. Trouillet 1979.

19 "Ya que vas a morir, goza de tus bienes; / pero, ya que vas a vivir, economiza tus bienes; / pues es hombre sabio aquél que con estas dos ideas en la cabeza / ahorra y pone medida a su gasto".

20 "Pues has nacido mortal, goza de tus bienes, pero cuídalos / cual inmortal, se dice que en ambas situaciones está la felicidad".

21 La idea también está en Baquílides 3, 78-82, Isócrates, Demon. 3, Bias, citado en Estobeo 3,36 nr. 93 Hense y en GV 1364.

22 Cf. Harrison 1992, pp. 83-89. Le apoya, con reservas, Courtney 1993, pp. 397-400.

23 Gell.XIX.11.3 "hoc distichon (= Plato AP V.78) amicus meus oük áu.ouaoc adulescens in plures versiculos licentius liberiusque vertit".

24 "Esté permitido amar, si no es lícito poseer; /gócenlo otros, no estoy loco, no soy envidioso; / se tortura quien envidia a los dichosos; / a los que Venus amó, los hace dueños del amor; / a nosotros Cupido nos concede querer, nos niega poder. / Aquellos que liban purpúreos besos / con piadoso mordisco exciten labios rojos..."

25 Vid. Körte 19592, p. 31.

26 En un procedimiento característico de la literatura latina, vid., entre otros, Stemmler 2000.

27 Sobre los epitafios de Séneca vid. Dingel 2007, pp. 27-29 y para éste en particular (cuyo segundo verso evoca Luc. Phars. I 128: Victrix causa deis placuit, sed victa Catoni) cf. Breitenbach 2009, pp. 57-67.

28 "Muerte de Catón: ¡Invicto en el partido derrotado!, César que / pudo vencerlo todo, a ti, Catón, no pudo".

29 Vid. PLM IV. 102 y Page 1981, pp. 557-559; para la explicación de este epigrama en su contexto histórico, Hertel 2003, pp. 280-281.

30 Vid. Lauxtermann 1998.

31 Para esta colección de epigramas es imprescindible Guichard 2007, que ofrece un profundo estudio de los epigramas griegos y una útil aproximación a los textos latinos. A él remitimos para todos los aspectos concretos que quedan fuera de nuestro foco de interés, como autoría, versiones ofrecidas por otras fuentes, etc.

32 Munari 1955, p. 135, califica el epigrama latino como interpretatio de este texto griego.

33 "Posidipo o Platón cómico: ¿Qué camino hay que elegir en la vida? En el ágora / hay peleas y penosos asuntos, en casa / desvelos; en el campo fatigas abundantes, en el mar / terror; en el extranjero, si algo tienes, miedo, / pero si nada posees, abandono; ¿contraes matrimonio? No quedarás / sin preocupaciones. ¿No te casas? Vivirás más solo. / Los hijos son angustia, mutilada está la vida sin ellos. / son insensatos los jóvenes; las canas, en cambio, débiles. / Hay que elegir una de dos: o no haber nacido / jamás, o morir recién nacidos".

La versión latina: "Nada conviene en la vida: ¿Qué camino en la vida seguirías? / Los foros son un hervidero de disputas, / y lo que intentaras emprender, no fácilmente lo conseguirás. / Hay angustiosas preocupaciones en casa, el trabajo es ingente en el campo, / y espanto sienten los que se adentran en el mar proceloso que quiebra las naves. / En el extranjero, si algo tienes, inquietud; miseria si nada: / O vergüenza o castigo, lo uno con lo otro. / La tarea militar es de incierto destino, el camino de los ascensos resbaladizo: en la cima más alta, efímera es la lealtad. / Un corazón preocupado sin fin arrastras junto a tu esposa; por el contrario, una vida sin pareja es astrosa. / Te acucia el miedo de tener descendencia y el dolor de su pérdida; desamparado se queda quien no ha plantado renuevos. / Imprudente la época de la juventud, y por contra privada de vigor / la de la vejez, inútil para cualquier placer. / Desearás una de dos: o no haber nacido / nunca o morir: todo lo demás es dolor".

34 Una tendencia general en esta colección de poemas, como ha demostrado Benedetti 1980, pp. 70-107, en comparación con las reelaboraciones de Ausonio.

35 Para los paralelos con otros textos poéticos latinos cf. Speyer 1963, ad loc. y 1959, pp. 109-110.

36 Ausonio sigue el modelo especialmente en su parte inicial (vv. 1-17) y también, mas con inclusión de ideas renovadas, en la parte final (vv. 35-50); en la parte central del poema (vv. 18-34) amplifica a base de distintos exempla.

37 Para Speyer 1959, p. 107, sin duda Naucelio.

38 "Elige cualquier camino en la vida. En el ágora / hay honores y discretos asuntos; en casa, / descanso, en el campo, la gracia de la naturaleza, en el mar, / beneficio; en el extranjero, si algo tienes, fama; / pero si nada posees, sólo tú lo sabes. ¿Contraes matrimonio? Tendrás / el mejor hogar. ¿No te casas? Vivirás más ligero. / Los hijos son anhelo, tranquila es la vida sin ellos. Los jóvenes / son fuertes, las canas en cambio, piadosas. / No hay que elegir una de dos: o no haber nacido / jamás o morir: todo en la vida es excelente".

39 "Ningún camino en la vida es difícil. Si el for arde / en litigios, la gloria acompaña a los litigantes. / Se alaba a quien actúa rectamente: tu hacienda hace crecer tu riqueza; / segura la nave surca el mar que se atraviesa a vela: / si en el extranjero las ganancias son abundantes, gozoso es el deleite: / si faltan, en silencio soportas tu pobreza, / porque al inocente le vale más vivir con un pequeño bocado / que con riquezas mal conseguidas. / En la milicia son excelsos los resultados: con frecuencia se llega a la más / alta cima del poder por los méritos militares. / La esposa comparte las preocupaciones, una mujer provee los pequeños / detalles y las riquezas brillan más por tu cónyuge. / Pero ¿evitas las riñas y peleas que suele promover la esposa? / Sea, podrías vivir más libremente, / y con seguridad te faltará la preocupación y el miedo por los hijos / y a menudo el descrédito por las manchas de la lujuria. / Pero el linaje de los hombres crece con los hijos, excelsa se eleva / la fama del padre, si el hijo es mejor que él. / Hay que devolver al mundo y a la naturaleza que todo lo domina / cuanto nos cedió en prenda de nuestra vida. / La mente, como el cuerpo, de los jóvenes está fuerte. Buenos consejos da la edad: / los ancianos ofrecen circunstancias oportunas para los consejos: / evitan los amargos estímulos de Venus como el siervo, / cuando huye de la furia y la rabia de su amo. / No tienes que decidir entre lo uno y lo otro: pues dulce es vivir / y no hay que apresurarse a morir: todo lo demás es gozo".

40 Para ambos casos puede verse el aparato de fuentes señalado por Speyer 1963, ad loc. y 1959, pp. 110-112.

41 Cf. Lattimore 1942, pp. 170-171.

42 Speyer 1959, p. 100.

43 Los epigramas aparecen en el cod. Vat. Lat. 2836, del s. XV, que contiene también los Epigrammata Bobiensia. Fueron editados por Speyer 1963 (pp. 87-88) pero no por Munari.

44 Una prueba que se podría añadir a las ya presentadas por Guichard 2007, pp. 108-109, pero que para él no son suficientes para afirmar la temprana circulación conjunta.

45 Benedetti 1980, p. 107, algo que se puede ver en los paralelos verbales con la obra de Ausonio, detallados en Speyer 1959, pp. 109-110.

46 La traducción del humor es uno de los aspectos más conflictivos dentro del ya conflictivo tema de la traducción, vid. Hickey 1999.

47 "Un perezoso sano es mucho más dañino / que uno febril: pues come el doble / para nada".

48 "Un perezoso sano es mucho más dañino / que uno febril: pues bebe el doble y devora doblados manjares".

49 "Menéstrato cabalgaba en una hormiga como si fuera en un elefante; / de repente, el desgraciado, quedó tendido de espaldas. / Recibió tal coz que fue un golpe mortal: 'Ay, Envidia, —dijo— / también así en su cabalgadura murió Faetón' ".

50 Sobre el autor, cuyo grado de participación en la colección es muy discutido, vid. Speyer 1959, pp. 113-122, y más recientemente, Liubzhin 2001, que lo considera responsable de una buena parte de la colección. "Faustulo montado en una hormiga cual en un gran elefante / cayó y con la espalda dio en tierra; / acto seguido, fue golpeado hasta la muerte por sus pezuñas / hasta que, ya perdido, apenas podía contener su último aliento. / Aún así alcanzó a decir: '¿por qué te ríes, malvada envidia, / porque caí? No de otro modo cayó Faetón'".

51 Para este tipo de procedimiento cómico, cf. Laurens 1989, pp. 142-145.

52 "Un tipo me invitó a un festín en hambre de plata, / y casi me mata al servirme las famélicas fuentes. / Y he aquí que dije apesadumbrado, entre la brillante plata hambrienta: / '¿Dónde estás, hartazgo en fuentes de barro?' ".

53 "Sucedió que no hace mucho Varo me invitó a una cena: / fatuo el rico, la cena muy modesta. / Con oro, no con manjares se adornan las mesas; los criados / disponen mucho para la vista, poco para la garganta. / Entonces le digo 'He venido a alimentar mi vientre, no mis ojos, / Varo, pon comida o quita oro' ".

54 Por ejemplo, en AP XI.134; XI.137; XI.138, etc. Para el gramático como blanco de las burlas vid. Mazzoli 1997, pp. 99-116.

55 Con la crítica a los gramáticos se relaciona también EB 47, cf. Cougny 145. McGill 2006 estudia los epigramas sólo para demostrar el paralelismo funcional de la llíada y la Eneida como textos de la enseñanza griega y romana, respectivamente.

56 "¡Salve, Gramática fecunda, salve, tú que del hambre / el remedio has encontrado con "La cólera, oh diosa, canta"! / Habría que construirte un templo hermosísimo / y un altar en el que nunca faltaran las ofrendas; /pues de ti están llenos los caminos, lleno el mar / y los puertos, ¡oh tú, que a todos acoges, Gramática!"

57 EB 46: " 'Contra gramáticos necios' / ¡Salve, Gramática salve, que a los hambrientos sólo / proporcionas un remedio: 'Canto las armas y el varón'!".

EB 64: " 'Contra gramáticos inexpertos' / ¡Salve, Gramática, salve: se ha encontrado una medicina como regalo / para los hambrientos: 'Canto las armas y el varón'!".

58 "La hija de un gramático dio a luz, tras la unión amorosa, / a una criatura masculina, femenina, neutra".

59 "Fue Rufo una vez orador en una boda / (algo que suele hacerse en los banquetes importantes) / para demostrar su pericia en el arte gramatical / pronunció estos votos por los recién casados: / 'De género masculino, femenino / y neutro sean vuestros hijos' ".

60 Cf. las referencias en el amplio comentario Kay 2001, pp. 174-176.

61 La hipótesis más aceptada es que Ausonio manejaba una antología que contenía a Páladas (Cameron 1993, pp. 78-96 con las precisiones y correcciones de Lauxtermann 1997). Pero también es posible que en muchos casos ambos estén trabajando independientemente sobre chistes previos (Page 1978, pp. 19-21).

62 Cf. una aproximación a este complejo personaje en Ortega Villaro, 2003.

63 El lema aparece en Planudes: es por tanto posterior a la versión latina del mismo. Cf. Cameron 1965, pp. 220-223.

64 La lectura del v. 3 () es la presentada por el manuscrito laurentiano de las Declamaciones de Libanio, y apenas admitida por los editores. Para Cameron 1965, pp. 225-226, es la lectura original y aquella sobre la que trabajó el traductor latino. El verso, tal y como aparece en el Palatinus y que todos los editores de la Antología reproducen es: .

"Sobre un carro celeste estabas sentado, y te vino el deseo / de un carro argénteo. ¡Oh, vergüenza infinita! / Abajo eras entonces de lo mejor, pero al subir te has convertido, con mucho, en lo peor. / Ea, escala hasta tocar fondo, que ahora ya has descendido hasta la cima".

65 " 'A uno que pasó de bibliotecario a gramático': Arriba eras bastante malo, pero al ascender eres todavía peor. / Sube abajo de nuevo, porque ya descendiste hacia arriba".

66 Sobre la relación entre los dos textos cf. Dagron 1968, pp. 49-54.

67 Ninguno de sus dos editores, Munari 1955 y Speyer 1963, admiten definitivamente su autoría. Cameron 1965, p. 226, considera muy probable que sea Naucelio.

68 Cf. Speyer 1959, pp. 2-6.

69 Cf. Benjamin 2004, pp. 380-410.

70 "El 'chulo' de su esposa: 'Grieguillo', astuto experto en el viejo oficio del lenocinio, / has empezado a ser el alcahuete de tu esposa, / y, a ese a quien tal vez ella, procaz, empieza a mordisquear / tenías la costumbre de echarlo de casa".

71 Vid. Tracy 1976.

72 Kay 2006, p. 197. Sí se constatan algunos otros cognomina como Graecus, Graeca; Graccinus, Graccina o Gr(a)ecio y el femenino Graecula cinco veces en el C7L. Cf. Kajanto 1965.

73 Nombre que quizá se pueda poner en relación con beccus (pico de gallo), palabra celta que aparece en Suetonio (Vit. 18) como cognomen de Antonio Primo, el general que derrota a Vitelio, quien lo lleva por haber nacido en Toulouse, dice el biógrafo.

74 Tanto Kay 2006, epigr. 137 como Zurli 2007, epigr. 59 admiten la lectura Filagri, en contra del Philagri propuesto por Riese.

75 " 'El discípulo de un médico': / Cierto médico tomó un discípulo ya adulto / para transmitir al joven los preceptos salutíferos. / Este, en seguida, a un caballo de silla, para que aprendiera a obedecer al jinete, / lo montó en lugares públicos. / El maestro acortó así el tiempo de un arte prolijo: / y nada más empezar hizo del muchacho un Hipócrates".

76 Cf. Kibre 1985. Los Aforismos de Hipócrates son uno de los textos del médico griego más pronto traducidos y más ampliamente difundidos. La primera versión que se encuentra en los manuscritos más antiguos puede derivar de una traducción que se ha datado en torno al siglo VI (en Ravena o Corbie) —aunque los aforismos, como confirman Séneca, Celso, S. Agustín o San Jerónimo, se conocen en fechas más tempranas —. Esta temprana traducción se acompaña en la tradición de un comentario de autoría dudosa que suele considerarse compuesto a principios del siglo VII. En algunos de los manuscritos (vg. Vaticanus 3426) el comentarista se identifica como Oribasio, el norteafricano del siglo IV, médico del emperador Juliano.

77 Se trata de un oficial de Gelimer (530-534), el último rey vándalo. Si en principio fue fiel a su rey y este le confió su fortuna, más tarde hizo un trato con Belisario y se quedó con gran parte de dinero, vid. Procopio, Guerras vándalas, II 4.33-41; con el nombre latino lo mencionan el obispo Víctor de Túnez, Chronica, s.a. 533 (cf. PL 68, 954c) y Coripo, loh. III. 269-270.

Kajanto 1965, p. 23 presenta el nombre griego como perfecto equivalente del latín Bonifatius, que a su vez tiene la forma paralela Fatibona. Ambos nombres latinos se documentan especialmente en el Norte de África, en etapas tardías. Mientras Rosemblum 1961, pp. 219-220, considera que ambos nombres designan la misma persona, Barnwell 1993, pp. 214-215, cree mucho más probable que sean dos personajes distintos, porque le parece demasiada casualidad que el autor griego nos de el nombre latino y Luxorio el nombre en griego. Pero, a nuestro parecer, es ahí donde radica el chiste, precisamente.

78 Vid. el análisis de este recurso ausoniano en Benedetti 1980, p. 39.

79 "A Hermógenes el médico, el astrólogo Diofanto / le dijo que sólo le quedaban nueve meses de vida. / Y aquél, entre risas, le contestó: "Lo que dice Crono a nueve meses vista, / tú vete pensándolo, ¡que lo mío es más inmediato!" / Así habló y extendiendo la mano no hizo más que tocarle, y / fue al propio Diofanto, que había desahuciado a otro, al que le dio un patatús".

80 " 'Alcón el médico': Al moribundo Marco le dijo Diodoro el harúspice: / 'No más de seis días te quedan de vida'. / Y el medico Alcón, más poderoso que los dioses y el destino, / al instante demostró lo errado del vaticinio. / Y tomó la mano del que viviría de no haberlo tocado. / Acto seguido, claro, se le acabaron a Marco los seis días".

81 El nombre aparece también en Marcial III.10, VII.76, etc.

82 Kay, ad loc., atribuye la efectividad del nombre a la tradición popular que aseguraba que el castor mordía sus propios testículos, muy apreciados en medicina, para escapar de los cazadores. Por ello sería un nombre muy adecuado para un hombre que renuncia a la procreación. Pero pueden considerarse los dos niveles de significado a la vez: la referencia al animal y al nombre griego.

83 Similares juegos basados en cambios de nombre pueden verse en AP XI.222 o en Marcial 3,88.

84 " 'Dos hermanos': Cresto, Acíndino, hermanos y vástagos lamentables, debido /a sus costumbres depravadas llevan, los dos, nombres / falsos: ni uno es 'virtuoso' ni el otro está 'sin peligro'. / Basta una letra para corregirlos. Si Cresto tuviera la 'a' de su hermano Acíndino, 'lleno de peligro' quedaría éste / y su hermano sería un 'vicioso' ".

85 Genette 1989, pp. 444-459.

 

Información sobre las autoras

Begoña Ortega Villaro, doctora en Filología Griega por la Universidad de Valladolid (España), actualmente es profesora en la Universidad de Burgos. Su trayectoria docente e investigadora ha seguido dos líneas principales: por un lado, la Tradición Clásica, especialmente en literatura contemporánea, y por otro, el epigrama griego de época imperial y tardoantigua., doctora en Filología Griega por la Universidad de Valladolid (España), actualmente es profesora en la Universidad de Burgos. Su trayectoria docente e investigadora ha seguido dos líneas principales: por un lado, la Tradición Clásica, especialmente en literatura contemporánea, y por otro, el epigrama griego de época imperial y tardoantigua.

Ma Jesús Pérez Ibáñez es doctora en Filología Latina por la Universidad de Valladolid, donde ejerce su actividad docente. Forma parte del Grupo de Investigación, con mención de excelencia, Speculum medicinae, en cuyo marco ha realizado diversos trabajos de estudio de los textos médicos medievales y renacentistas.

Creative Commons License Todo el contenido de esta revista, excepto dónde está identificado, está bajo una Licencia Creative Commons