Introducción
Este trabajo de investigación tiene como objetivo central estudiar la existencia y naturaleza de una posible relación entre el crecimiento de las actividades turísticas y el desarrollo humano en las comunidades que son receptoras de este tipo de actividades. Por muchas décadas, la promesa de beneficios económicos derivados de esta actividad ha constituido un argumento influyente para alentar la proliferación de estas actividades en todo el mundo, causando una profunda transformación en las comunidades que fueron consideradas para ser parte de tal industria. La discusión de los impactos sociales del turismo, sin embargo, no formó parte del discurso desarrollista sino hasta la década de los setentas, donde múltiples estudios a partir de la óptica de la antropología y la sociología empezaron a cuestionar seriamente los alcances de esta actividad como un agente real de desarrollo (Britton, 1982; Cooper, Ruhanen & Archer, 2005; De Kadt, 1979; Deery, Jago & Fredline, 2012; Francisco, 1983; Marzuki, 2009; Pearce, 1989; Wilson, 2008). Gracias a los hallazgos en estos y otros estudios similares el turismo fue concebido por primera vez no solo como una actividad que genera beneficios sino también costos que, en muchos casos, suelen ser altos y profundamente negativos.
No hay duda que los múltiples cuestionamientos que se han hecho alrededor de los aportes reales de la industria turística al desarrollo económico y bienestar de las comunidades han permitido visualizar de mejor manera aquellos factores que influyen en determinar si esta actividad puede o no ayudar a mejorar las condiciones de vida en las comunidades donde se desenvuelve. Richards (2010) y Telfer & Sharpley (2008) señalan que en todos los territorios donde se desarrollan las actividades turísticas existe un gran dilema, ya sea por favorecer el crecimiento de las actividades turísticas o bien por apoyar el desarrollo local. En ese sentido, la disposición y capacidad de organización en estas localidades son factores clave para hacer que el aparato productivo contribuya realmente a generar condiciones de bienestar. Lo cierto es que en la mayoría de los casos no se visualiza la existencia de este dilema pues claramente se favorece la expansión de la industria turística a costa del beneficio social.
El caso de México no es ajeno al apoyo del crecimiento de actividades turísticas. El gobierno de este país ha sido especialmente activo tanto en labores de financiamiento directo como de promoción. El turismo en México ha sido considerado y publicitado históricamente como un pilar de la economía nacional solo después de la renta petrolera, la inversión extranjera directa y la recepción de remesas. Desde la década de 1920, el gobierno mexicano ya expresaba abiertamente su intención por incrementar las actividades turísticas en el territorio intentando aprovechar la dinámica de crecimiento que se venía desarrollando a nivel regional (Berger, 2006; Ely, 2013; McCormick, 2010; Merrill, 2009). Este interés se vio reforzado una vez que se decidió incursionar en el financiamiento público directo a través de la construcción de nuevas ciudades turísticas en la década de los sesentas y el diseño e implementación de múltiples estrategias para fomentar el crecimiento del turismo en muchas zonas en los años 70s, 80s, 90s y 2000 (Brenner, 2005; Clancy, 1999; 2001a; 2001b; Wilson, 2008). De esta forma, México se convirtió en uno de los destinos turísticos que más turistas internacionales recibe (número 7 a nivel mundial de acuerdo con información de la Organización Mundial de Turismo, 2017), generando un 8.5% del Producto Interno Bruto (PIB) nacional en valores corrientes y contribuyendo con el 6% del total de empleos a nivel nacional (Compendio Estadístico del Turismo en México, Secretaría de Turismo [Sectur], 2015).
No hay duda que el turismo ha ido adquiriendo un papel cada vez más preponderante dentro de la economía mexicana, especialmente considerando que las otras fuentes principales de ingresos se han venido desplomado en los últimos años. Por un lado, está la renta petrolera que por muchos años significó el soporte básico del presupuesto público y que ha experimentado un descenso dramático a consecuencia tanto de la fluctuación en el precio internacional del crudo como el proceso de liberalización del sector energético. Otra fuente importante de ingresos se encuentra en la recepción de remesas que también por muchos años, se convirtió en el principal soporte económico de muchas familias especialmente en contextos rurales, y que su flujo es amenazado actualmente por la administración estadounidense liderada por el presidente Donald Trump quien ha expresado en múltiples foros su deseo por establecer un impuesto que sin duda tendría un impacto negativo en la cantidad final de recursos que se podrían obtener por este concepto. Por último, en lo que se refiere al tema de fuentes de ingresos para México se encuentra la inversión extranjera directa, que ha sido determinante para el crecimiento de industrias como la automotriz que es responsable de una gran proporción de las actividades de exportación. Al igual que las otras dos fuentes mencionadas, este rubro no tiene por el momento un panorama alentador, considerando los recientes anuncios de múltiples cancelaciones de proyectos de inversión en México debido a la política comercial que se desarrolla en Estados Unidos y que tiene una fuerte influencia negativa (para ilustrar lo anterior se pueden mencionar los casos de FIAT y Ford). Por lo anterior, no hay duda que el turismo hoy posee una importancia estratégica para México. En ese sentido, sería recomendable conocer si esta actividad, además de su aportación económica, también está contribuyendo con beneficios directos en el tema de desarrollo humano.
Una de las preguntas principales que motivaron este estudio fue: ¿en qué medida el turismo contribuye o no al desarrollo humano en México? Intentando contestar esta pregunta se pensó investigar los niveles de bienestar que presentan las comunidades que tienen una dinámica turística importante y que son identificados como destinos prioritarios en México. La hipótesis central de este estudio es que considerando los beneficios generados por el desarrollo turístico, estos municipios deberían presentar un panorama de bienestar proporcional.
Para intentar calcular el volumen de actividades relacionadas a la industria turística en cada uno de los destinos, se consultaron las bases de datos municipales sobre demanda turística nacional y extranjera. Por otro lado, para intentar conocer el estado de bienestar de estas comunidades, se consultaron datos a nivel municipal del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), de manera particular en lo que se refiere al Índice de Desarrollo Humano (IDH). Con el cruce de esta información, se intentó establecer si existe una relación recíproca, así como determinar el grado de incidencia del turismo en el tema del desarrollo humano.
Este artículo está organizado en cinco secciones principales incluyendo la introducción. La segunda sección se refiere al tema del desarrollo humano y sus dimensiones. La tercera describe los métodos empleados en este estudio. La cuarta presenta los resultados principales, mientras que la quinta sección está dedicada a la discusión. La última sección está dedicada a las conclusiones de este estudio.
La perspectiva del desarrollo humano y sus dimensiones
Hablar de desarrollo desde el punto de vista humano implica ver más allá de indicadores económicos que normalmente han dominado el discurso desarrollista desde la segunda mitad del siglo XX. Considerando las grandes desigualdades que existen todavía en el mundo, es insuficiente teórica y prácticamente considerar solo la generación de la riqueza y su distribución como única dimensión determinante. Las aportaciones de trabajos como los de Andrews & Bawa (2014); Birdsall & Fukuyama (2011); Cornwall (2007); Cavalcanti (2007); Cornwall & Eade (2010); Escobar (1995; 2007); Esteva (2009); Gore (2015); Lefwitch (2008); Rapley (2004) y Sen (1999) (por mencionar algunos ejemplos) han ayudado enormemente a repensar lo que representa el desarrollo y lo que debe ser. La evolución de este concepto ha sido constante especialmente a partir de sus primeras críticas relacionadas a los procesos de dependencia económica y social de los países menos desarrollados en naciones prosperas, pasando por reconocer la inclusión de la sustentabilidad en el discurso, hasta discutir la perspectiva de las capacidades y más recientemente la inclusión de una visión más humana. Es esta última perspectiva de desarrollo, se recoge en este trabajo con el objeto de discutirla en la arena del turismo.
El PNUD ha sido muy útil para ayudar a construir esta óptica humana de desarrollo desde su creación en el año 1965. La función de principal de este programa es "contribuir a la mejora de la calidad de vida de las naciones trabajando con los gobiernos y las personas para ayudarles a encontrar sus propias soluciones a los retos mundiales y nacionales de desarrollo”1. A partir del año 1990, el PNUD publica anualmente un informe de desarrollo mundial desde una perspectiva social a través del cálculo de un IDH. Este índice, evalúa sistemáticamente los avances en materia de desarrollo desde el punto de vista de las personas y las estructuras institucionales donde éstas se desenvuelven. Para su cálculo, el IDH considera la evaluación de tres dimensiones fundamentales: 1) Salud, entendiéndola como la posibilidad de tener una vida larga y saludable; 2) Educación, entendiéndola como la posibilidad de adquirir los conocimientos necesarios en un sistema escolar que permita la inclusión y funcionalidad de las personas; 3) Ingreso, entendiéndolo como la posibilidad de las personas por acceder a un trabajo remunerado que permita disfrutar de un nivel de vida digno. La dimensión de salud se evalúa según la esperanza de vida al nacer, la de educación por los años promedio de escolaridad y la de ingreso conforme al ingreso neto bruto per cápita. Las puntuaciones de los tres índices dimensionales se agregan a un índice compuesto utilizando la media geométrica2. Es importante señalar que, aunque, el IDH no evalúa ni refleja cuestiones importantes para el desarrollo humano como la desigualdad, la pobreza, la seguridad o el empoderamiento, este representa una importante base de información que permite comenzar a comprender la situación de desarrollo que prevalece en un territorio determinado.
De acuerdo con el PNUD (2014), México se clasifica dentro de un grupo de países que presentan un desarrollo humano alto (IDH = 0.739), destacando la Ciudad de México (IDH = 0.831), Nuevo León (IDH = 0.790) y Baja California Sur (IDH = 0.785) entre los estados de la república con los mayores niveles. En contraste, las entidades que muestran los niveles más bajos son Chiapas (IDH = 0.647), Oaxaca IDH = 0.666) y Guerrero (IDH = 0.673). Si se intenta analizar el nivel de desarrollo humano en una escala local, los contrastes son aún más profundos entre los 2456 municipios que componen el universo administrativo nacional. De esta manera, se puede observar que México alberga tanto localidades con IDH muy altos (Delegación Benito Juárez, en la Ciudad de México, 0.917) como localidades con IDH muy bajos (Cochapa El Grande, en Guerrero, 0.362). Este cálculo sugiere que coexisten realidades muy distantes dentro del mismo territorio.
La Figura 1 es muy útil para visualizar las diferencias que existen en México en lo que se refiere al IDH a nivel municipal. Como se puede observar, de acuerdo a la nueva metodología del PNUD (2010) existen cuatro umbrales de desempeño (bajo, medio, alto y muy alto) lo que permite apreciar que estados como Chiapas, Oaxaca y Veracruz, son los que poseen el mayor número de municipios con nivel de desarrollo humano bajo. De igual forma, en el mapa se pueden apreciar entidades como Baja California, Baja California Sur, Ciudad de México, y Nuevo León, que son las que concentran el mayor número de municipios con un nivel de desarrollo alto. Sin embargo, la pregunta que orientó este estudio fue: ¿cuál es la situación de desarrollo humano en los municipios que tienen como actividad económica dominante al turismo? Con el objeto de intentar responder a esta pregunta, se examinaron los resultados de IDH en algunos municipios que son considerados como destinos prioritarios en México. En la siguiente sección se explican los métodos de recolección y análisis que se emplearon en este estudio.
Materiales y métodos
Para proceder a recolectar y analizar la información relacionada al objeto de estudio, este estudio adoptó una metodología cuantitativa y una orientación primordialmente exploratoria. La principal hipótesis de referencia fue: a mayor número de actividades turísticas en un territorio X, mayor es la probabilidad que se presente un escenario de IDH alto. Como se puede apreciar, esta hipótesis correlacional posee dos variables principales: 1) número de actividades turísticas; 2) índice de desarrollo humano. Para estudiar estas variables, se definieron las principales fuentes donde se recolectaría la información para su posterior análisis.
Uno de los primeros trabajos metodológicos en esta investigación consistió en seleccionar aquellos municipios que cumplieran con la condición de ser considerados como turísticos. Es importante señalar en este punto que, para fines estadísticos, cualquier localidad que posea una afluencia de visitantes a su territorio podría ser considerado como un destino con interés de visita. Si se tomara este simple criterio de selección, México posee un universo muy amplio de localidades que cumplen con esta característica, lo que obligaría a imponer otros criterios o filtros (por ejemplo: tamaño del destino, oferta turística, segmento de mercado, entre otros) e intentar reducir la complejidad del ejercicio. Para este estudio, se decidió seleccionar solo aquellos municipios que fueran considerados destinos turísticos “prioritarios” para el gobierno mexicano, señalados por la Secretaría de Turismo Federal (Sectur). Un destino turístico “prioritario”, de acuerdo con la Sectur (2015) se denomina a “aquellas localidades seleccionadas que poseen un amplio potencial turístico para detonar el desarrollo económico y social e impactar directamente sobre las comunidades”. En total, la Sectur considera que existen en México 44 destinos turísticos prioritarios mismos que se encuentran divididos en cinco segmentos geográficos y de mercado. A continuación, se presenta la lista completa de estos destinos (Tabla 1):
Segmento de mercado | Destinos prioritarios |
---|---|
Bloque Pacífico y Mar de Cortés | Acapulco, Guerrero |
Guadalajara, Jalisco | |
Huatulco, Oaxaca | |
Ixtapa, Zihuatanejo, Guerrero | |
Los Cabos, Baja California Sur | |
Manzanillo, Colima | |
Mazatlán, Sinaloa | |
Nuevo Vallarta, Nayarit | |
Oaxaca, Oaxaca | |
Puerto Vallarta, Jalisco | |
Frontera Norte | Ciudad Juárez, Chihuahua |
Ensenada, Baja California | |
Hermosillo, Sonora | |
Monterrey, Nuevo León | |
Tampico-Madero, Tamaulipas | |
Tijuana, Baja California | |
Torreón, Coahuila | |
Mundo Maya | Campeche, Campeche |
Cancún, Quintana Roo | |
Cozumel, Quintana Roo | |
Xalapa, Veracruz | |
Mérida, Yucatán | |
Riviera Maya, Quintana Roo | |
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas | |
Villahermosa, Tabasco | |
Tesoros Coloniales | Aguascalientes, Aguascalientes |
Durango, Durango | |
Ixtapan de la Sal, México | |
Morelia, Michoacán | |
Pachuca, Hidalgo | |
Querétaro, Querétaro | |
San Luis Potosí, S.L.P. | |
San Miguel de Allende, Guanajuato | |
Zacatecas, Zacatecas | |
Virreinal | Veracruz-Boca del Río, Veracruz |
Chalma, México | |
Cuernavaca, Morelos | |
Ciudad de México | |
Guanajuato, Guanajuato | |
León, Guanajuato | |
Puebla, Puebla | |
Tlacotalpan, Veracruz | |
Tlaxcala, Tlaxcala | |
San Juan de los Lagos, Jalisco |
Fuente: Elaboración propia con información de la Sectur.
Como se puede apreciar en la Tabla 1, este grupo de destinos turísticos seleccionados por la Sectur destaca por su alta heterogeneidad. En él se pueden encontrar destinos con características profundamente diferentes como los que reportan una gran dinámica turística (como es el caso de los Cabos, Cancún o Riviera Maya), grandes urbes (como la Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey), destinos del interior reconocidos como patrimonio de la humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco, por sus siglas en inglés) (como es el caso de Campeche, Guanajuato, Morelia, San Miguel de Allende, Querétaro, Oaxaca, Puebla, Tlacotalpan y Zacatecas), así como pequeñas localidades sin reconocimiento o con una dinámica turística limitada (como es el caso de Chalma, Ixtapan de la Sal y Xalapa). No hay duda que la existencia de estas diferencias, incrementa la complejidad de análisis al intentar compararlos entre sí. Por esa razón, en una sección posterior de este documento, se discute la pertinencia de esta lista propuesta por la Sectur, intentando ubicar las razones detrás de esta decisión.
En lo que se refiere a la variable número de actividades turísticas, este estudio optó por recolectar información relacionada a la demanda efectiva en cada uno de los 44 destinos turísticos. Demanda efectiva o actual, de acuerdo con Sancho (1998) es: “el número de personas que participan en la actividad turística, es decir, que efectivamente viajan…este grupo es el que se mide más fácilmente y el que se encuentra reflejado en las estadísticas mundiales”. Para su estudio, esta demanda se puede dividir a su vez en dos grupos principales: demanda doméstica o nacional, y demanda internacional. Es importante mencionar que, algunos destinos reciben en mayor cantidad un tipo de demanda (ya sea nacional o internacional) y esto puede tener una repercusión directa, tanto en la configuración de la oferta turística local como en el nivel de gasto que realiza cada visitante. Para el objetivo de este estudio, se recolectaron ambas cifras por municipio provenientes del Sistema Nacional de Información Estadística del Sector turismo en México (Datatur, Análisis Integral de Turismo) en su versión más actualizada (año 2014). Una vez recolectados ambos datos, se calculó una cifra global para establecer un ranking de demanda en el grupo de destinos turísticos prioritarios asumiendo que si una localidad recibe un mayor número de visitantes que otra mayor será la posibilidad que se generen más actividades turísticas en el territorio.
En lo que se refiere a la segunda variable, índice de desarrollo humano, la fuente de información principal fue la base de datos del PNUD misma que sirvió para la elaboración del reporte denominado “Índice de Desarrollo Humano Municipal en México: nueva metodología” (2014). Los datos que se reflejan en ese reporte, como su nombre lo indica, corresponden al cálculo del IDH en los 2456 municipios que componen el universo administrativo de México. De esta base de datos, se extrajeron los datos de IDH relacionados a los 44 destinos de interés en este estudio. Es importante mencionar en este punto que se hizo un tratamiento especial de datos en seis destinos: Ciudad de México, Chalma, Nuevo Vallarta, Riviera Maya, Veracruz-Boca del Río y Tampico-Madero. En los casos de Ciudad de México, Veracruz-Boca del Río y Tampico-Madero, se procedió a realizar un cálculo de media geométrica debido a que estos destinos se componen de más de un municipio o localidad. Para los casos de Chalma, Nuevo Vallarta y Riviera Maya, se seleccionaron los municipios más representativos relacionados al destino (Malinalco, Bahía Banderas y Solidaridad respectivamente). Al igual que con las cifras de demanda turística, los resultados del IDH se organizaron en una lista para generar un ranking de municipios donde se pudiera observar que localidades presentan mayores y/o menores niveles de desarrollo humano.
Finalmente, para el análisis de la información recolectada tanto en Datatur como en el PNUD, se decidió comparar los datos de ambas variables por destino con el objetivo de explorar si existe una correspondencia. Este ejercicio fue diseñado para poder validar (o no) la hipótesis generada en este estudio. La siguiente sección de este artículo presenta los resultados obtenidos en esta investigación.
Resultados
A continuación, se presentan los resultados de demanda efectiva en los 44 destinos prioritarios de México.
Si se revisan los datos por bloque o segmento en la Tabla 2, claramente se pueden identificar tanto aquellos municipios que reciben un número importante turistas como aquellos que no muestran un nivel importante de demanda. En el bloque Pacífico, por ejemplo, destacan los municipios de Acapulco, Guadalajara, Mazatlán, Los Cabos, Nuevo Vallarta y Puerto Vallarta. De estos destinos, Acapulco es el que recibe más demanda nacional mientras que Los Cabos es el destino que más turistas internacionales acoge. En el bloque denominado Frontera Norte, destacan los destinos de Monterrey y Tampico-Madero, siendo el primero el que recibe una mayor cantidad de turistas tanto nacionales como extranjeros. En el bloque Mundo Maya, destacan claramente los destinos de Campeche, Cancún y Mérida. El destino que más turistas recibe tanto nacionales como extranjeros en este grupo es Cancún. Cabe mencionar que Campeche y la Riviera Maya son dos destinos que también reciben una cantidad considerable de turistas extranjeros. En el bloque Tesoros Coloniales, destacan los destinos de Querétaro, San Luis Potosí y Zacatecas. El destino que más turistas nacionales e internacionales recibe es Querétaro. Finalmente, en el bloque Virreinal, destacan los destinos de Puebla, León, Ciudad de México y Veracruz-Boca del Río. El destino que más destaca por su recepción de turistas nacionales y extranjeros es la Ciudad de México. Importante mencionar que en este bloque hay dos destinos donde no se cuenta con datos (los casos de Chalma y Tlacotalpan) y uno más que solo presenta datos de demanda nacional (el caso de San Juan de los Lagos).
Segmento de mercado | Destinos prioritarios | Demanda Nacional | Demanda Internacional |
---|---|---|---|
Bloque Pacífico y Mar de Cortés | Acapulco, Guerrero | 4 481 155 | 109 795 |
Guadalajara, Jalisco | 2 826 391 | 361 697 | |
Huatulco, Oaxaca | 360 645 | 42 088 | |
Ixtapa, Zihuatanejo, Guerrero | 507 086 | 91 971 | |
Los Cabos, Baja California Sur | 182 128 | 586 236 | |
Manzanillo, Colima | 483 728 | 22 555 | |
Mazatlán, Sinaloa | 1 604 972 | 316 979 | |
Nuevo Vallarta, Nayarit | 1 554 038 | 582 874 | |
Oaxaca, Oaxaca | 853 882 | 98 705 | |
Puerto Vallarta, Jalisco | 1 996 668 | 478 874 | |
Frontera Norte | Ciudad Juárez, Chihuahua | 432 067 | 76 729 |
Ensenada, Baja California | 322 979 | 132 377 | |
Hermosillo, Sonora | 513 878 | 34 726 | |
Monterrey, Nuevo León | 1 434 656 | 364 439 | |
Tampico-Madero, Tamaulipas | 1 038 608 | 64 182 | |
Tijuana, Baja California | 671 664 | 263 954 | |
Torreón, Coahuila | 382 690 | 52 185 | |
Mundo Maya | Campeche, Campeche | 190 058 | 997 769 |
Cancún, Quintana Roo | 2 018 363 | 4 402 460 | |
Cozumel, Quintana Roo | 235 920 | 349 166 | |
Xalapa, Veracruz | 519 882 | 519 882 | |
Mérida, Yucatán | 1 012 157 | 224 450 | |
Riviera Maya, Quintana Roo | 53 998 | 721 226 | |
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas | 556 683 | 26 769 | |
Villahermosa, Tabasco | 553 746 | 64 019 | |
Tesoros Coloniales | Aguascalientes, Aguascalientes | 467 115 | 46 743 |
Durango, Durango | 284 080 | 9 666 | |
Ixtapan de la Sal, México | 287 021 | 13 957 | |
Morelia, Michoacán | 735 901 | 13 335 | |
Pachuca, Hidalgo | 441 166 | 10 420 | |
Querétaro, Querétaro | 989 308 | 59 227 | |
San Luis Potosí, S.L.P. | 646 030 | 42 398 | |
San Miguel de Allende, Guanajuato | 291 244 | 33 758 | |
Zacatecas, Zacatecas | 519 178 | 15 552 | |
Virreinal | Veracruz-Boca del Río, Veracruz | 2 623 706 | 42 174 |
Chalma, México | N.d. | N.d. | |
Cuernavaca, Morelos | 441 710 | 68 357 | |
Ciudad de México | 9 006 292 | 2 013 481 | |
Guanajuato, Guanajuato | 677 950 | 19 616 | |
León, Guanajuato | 1 295 323 | 9 590 | |
Puebla, Puebla | 1 814 667 | 279 168 | |
Tlacotalpan, Veracruz | N.d. | N.d. | |
Tlaxcala, Tlaxcala | 89 872 | 2 965 | |
San Juan de los Lagos, Jalisco | 741 132 | N.d. |
Fuente: Elaboración propia con información del Sistema Nacional de Información Estadística del Sector Turismo en México (Sectur, 2015).
En la Tabla 3 se puede observar el ranking de destinos prioritarios tomando como criterio principal la demanda global al destino (demanda nacional + demanda internacional = demanda global). De acuerdo con estos datos, los municipios más turísticos del grupo de 44 destinos prioritarios son: Ciudad de México, Cancún, Guadalajara, Veracruz, Puerto Vallarta, Nuevo Vallarta, Puebla, Mazatlán y Monterrey. Estos resultados muestran que las tres grandes urbes del país concentran una gran cantidad de turistas en su territorio, en tanto que destinos nuevos y tradicionales compiten por la preferencia de los viajeros. Los destinos que presentan una menor afluencia de visitantes son: Ciudad Juárez, Manzanillo, Ensenada, Pachuca, Torreón, Huatulco, San Miguel de Allende, Ixtapan de la Sal, Durango y Tlaxcala. El dato a resaltar en estos resultados es el caso de Huatulco, que es un destino relativamente nuevo y que ha gozado de un importante flujo de inversión tanto pública y privada para su desarrollo (Brenner, 2005). También destacan los casos de Manzanillo, Ensenada y San Miguel de Allende, que por muchos años han sido reconocidos como destinos tradicionales y preferidos por los turistas nacionales; los datos, sin embargo, apuntan a una realidad diferente.
Lugar en ranking | Destino | Demanda global |
---|---|---|
1 | Ciudad de México | 11 019 773 |
2 | Cancún | 6 420 823 |
3 | Acapulco | 4 590 950 |
4 | Guadalajara | 3 188 088 |
5 | Veracruz-Boca del Río | 2 665 880 |
6 | Puerto Vallarta | 2 475 542 |
7 | Nuevo Vallarta | 2 136 912 |
8 | Puebla | 2 093 835 |
9 | Mazatlán | 1 921 951 |
10 | Monterrey | 1 799 095 |
11 | León | 1 304 913 |
12 | Mérida | 1 236 607 |
13 | Campeche | 1 187 827 |
14 | Tampico-Madero | 1 102 790 |
15 | Querétaro | 1 048 535 |
16 | Oaxaca | 952 587 |
17 | Tijuana | 935 618 |
18 | Riviera Maya | 775 224 |
19 | Los Cabos | 768 364 |
20 | Morelia | 749 236 |
21 | San Juan de Los Lagos | 741 132 |
22 | Guanajuato | 697 566 |
23 | San Luis Potosí | 688 428 |
24 | Villahermosa | 617 765 |
25 | Ixtapa-Zihuatanejo | 599 057 |
26 | Cozumel | 585 086 |
27 | Tuxtla Gutiérrez | 583 452 |
28 | Hermosillo | 548 604 |
29 | Zacatecas | 534 730 |
30 | Xalapa | 530 477 |
31 | Aguascalientes | 513 858 |
32 | Cuernavaca | 510 067 |
33 | Ciudad Juárez | 508 796 |
34 | Manzanillo | 506 283 |
35 | Ensenada | 455 356 |
36 | Pachuca | 451 586 |
37 | Torreón | 434 875 |
38 | Huatulco | 402 733 |
39 | San Miguel de Allende | 325 002 |
40 | Ixtapan de la Sal | 300 978 |
41 | Durango | 293 746 |
42 | Tlaxcala | 92 837 |
43 | Chalma | N.d. |
44 | Tlacotalpan | N.d. |
Fuente: Elaboración propia con información del Sistema Nacional de Información Estadística del sector turismo en México (Sectur, 2015).
La Tabla 4 muestra el resultado de los valores de IDH en las tres dimensiones que lo componen (educación, ingreso y salud) en cada uno de los 44 destinos que fueron investigados. Se puede observar que los municipios con menor nivel en el tema de educación son: Chalma, San Juan de los Lagos, Ixtapan de la Sal y San Miguel de Allende (resaltados en color rojo). En contraste, los municipios con mejor nivel educativo son: Tlaxcala, Ciudad de México, Cuernavaca, Oaxaca y Zacatecas (resaltados en negritas). Por otro lado, en lo que se refiere a la dimensión de ingreso, los municipios que presentan resultados bajos son: Chalma, Ixtapan de la Sal, San Juan de los Lagos, Huatulco e Ixtapa-Zihuatanejo. Los municipios que tienen los niveles más altos de ingreso son: Guadalajara, Los Cabos, Oaxaca, Monterrey, Cuernavaca y Tlaxcala. Finalmente, en lo que se refiere a la dimensión de salud, los municipios con el nivel más bajo son: Chalma, San Miguel de Allende, Ixtapan de la Sal, Ensenada, Pachuca y Tijuana. En contraste, los municipios con mejores resultados en el tema de salud son: Oaxaca, Torreón y Zacatecas. Es importante mencionar en este punto que, la dimensión de Salud en México es la mejor evaluada de manera general; lo anterior significa que la población en estos destinos turísticos tendría una alta expectativa de vida.
Segmento de mercado | Destinos prioritarios | Índice de educación |
Índice de ingreso |
Índice de salud |
---|---|---|---|---|
Bloque Pacífico y Mar de Cortés | Acapulco, Guerrero | 0.688 | 0.686 | 0.889 |
Guadalajara, Jalisco | 0.750 | 0.771 | 0.884 | |
Huatulco, Oaxaca | 0.601 | 0.666 | 0.893 | |
Ixtapa, Zihuatanejo, Guerrero | 0.639 | 0.666 | 0.888 | |
Los Cabos, Baja California Sur | 0.734 | 0.781 | 0.872 | |
Manzanillo, Colima | 0.695 | 0.749 | 0.867 | |
Mazatlán, Sinaloa | 0.742 | 0.736 | 0.872 | |
Nuevo Vallarta, Nayarit (Bahía de Banderas) | 0.676 | 0.713 | 0.882 | |
Oaxaca, Oaxaca | 0.821 | 0.776 | 0.906 | |
Puerto Vallarta, Jalisco | 0.711 | 0.711 | 0.862 | |
Frontera Norte | Ciudad Juárez, Chihuahua | 0.703 | 0.734 | 0.827 |
Ensenada, Baja California | 0.682 | 0.730 | 0.831 | |
Hermosillo, Sonora | 0.780 | 0.765 | 0.892 | |
Monterrey, Nuevo León | 0.755 | 0.784 | 0.895 | |
Tampico-Madero, Tamaulipas | 0.806 | 0.768 | 0.898 | |
Tijuana, Baja California | 0.710 | 0.748 | 0.835 | |
Torreón, Coahuila | 0.743 | 0.745 | 0.908 | |
Mundo Maya | Campeche, Campeche | 0.758 | 0.737 | 0.906 |
Cancún, Quintana Roo | 0.715 | 0.759 | 0.877 | |
Cozumel, Quintana Roo | 0.710 | 0.725 | 0.869 | |
Xalapa, Veracruz | 0.816 | 0.760 | 0.878 | |
Mérida, Yucatán | 0.778 | 0.758 | 0.892 | |
Riviera Maya, Quintana Roo | 0.690 | 0.750 | 0.881 | |
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas | 0.769 | 0.752 | 0.889 | |
Villahermosa, Tabasco | 0.801 | 0.766 | 0.897 | |
Tesoros Coloniales | Aguascalientes, Aguascalientes | 0.738 | 0.743 | 0.897 |
Durango, Durango | 0.741 | 0.726 | 0.873 | |
Ixtapan de la Sal, México | 0.566 | 0.645 | 0.810 | |
Morelia, Michoacán | 0.737 | 0.745 | 0.874 | |
Pachuca, Hidalgo | 0.807 | 0.769 | 0.835 | |
Querétaro, Querétaro | 0.761 | 0.764 | 0.877 | |
San Luis Potosí, S.L.P. | 0.782 | 0.755 | 0.861 | |
San Miguel de Allende, Guanajuato | 0.568 | 0.646 | 0.815 | |
Zacatecas, Zacatecas | 0.817 | 0.775 | 0.901 | |
Virreinal | Veracruz-Boca del Río, Veracruz | 0.750 | 0.771 | 0.876 |
Chalma, México | 0.534 | 0.614 | 0.765 | |
Cuernavaca, Morelos | 0.834 | 0.789 | 0.862 | |
Ciudad de México | 0.866 | 0.775 | 0.883 | |
Guanajuato, Guanajuato | 0.727 | 0.735 | 0.867 | |
León, Guanajuato | 0.661 | 0.735 | 0.862 | |
Puebla, Puebla | 0.799 | 0.754 | 0.827 | |
Tlacotalpan, Veracruz | 0.608 | 0.674 | 0.887 | |
Tlaxcala, Tlaxcala | 0.874 | 0.778 | 0.847 | |
San Juan de los Lagos, Jalisco | 0.553 | 0.658 | 0.863 |
Fuente: Elaboración propia con información del PNUD (2014).
La Tabla 5 muestra el ranking de municipios utilizando el criterio principal del valor general de IDH (valor educación + valor ingreso + valor salud = media geométrica) en los 44 destinos estudiados. De manera general, se puede observar que los destinos con mejor valor general de IDH son: Oaxaca, Tlaxcala, Zacatecas, Cuernavaca, Ciudad de México, Tampico-Madero, Villahermosa, Xalapa, Hermosillo y Monterrey. Por el contrario, los destinos con un valor bajo de IDH son: Chalma, Ixtapan de la Sal, San Miguel de Allende, San Juan de los Lagos, Huatulco, Tlacotalpan, Ixtapa-Zihuatanejo, Ensenada, León, Acapulco y Nuevo Vallarta. De estos resultados, destaca el hecho que destinos que gozan de una alta demanda turística (como los casos de Acapulco y Nuevo Vallarta), se encuentren en una posición tan baja en este ranking.
Lugar en ranking | Destino | Valor de IDH |
---|---|---|
1 | Oaxaca | 0.832 |
2 | Tlaxcala | 0.832 |
3 | Zacatecas | 0.830 |
4 | Cuernavaca | 0.828 |
5 | Ciudad de México | 0.823 |
6 | Tampico-Madero | 0.822 |
7 | Villahermosa | 0.819 |
8 | Xalapa | 0.817 |
9 | Hermosillo | 0.810 |
10 | Monterrey | 0.809 |
11 | Mérida | 0.807 |
12 | Pachuca | 0.803 |
13 | Tuxtla-Gutiérrez | 0.801 |
14 | Guadalajara | 0.800 |
15 | Veracruz-Boca del Río | 0.800 |
16 | Querétaro | 0.799 |
17 | San Luis Potosí | 0.798 |
18 | Campeche | 0.797 |
19 | Torreón | 0.795 |
20 | Los Cabos | 0.794 |
21 | Puebla | 0.793 |
22 | Aguascalientes | 0.789 |
23 | Morelia | 0.783 |
24 | Cancún | 0.781 |
25 | Mazatlán | 0.781 |
26 | Durango | 0.777 |
27 | Guanajuato | 0.774 |
28 | Riviera Maya | 0.770 |
29 | Manzanillo | 0.767 |
30 | Cozumel | 0.765 |
31 | Tijuana | 0.762 |
32 | Puerto Vallarta | 0.758 |
33 | Ciudad Juárez | 0.753 |
34 | Nuevo Vallarta | 0.752 |
35 | Acapulco | 0.749 |
36 | León | 0.748 |
37 | Ensenada | 0.745 |
38 | Ixtapa-Zihuatanejo | 0.723 |
39 | Tlacotalpan | 0.714 |
40 | Huatulco | 0.710 |
41 | San Juan de los Lagos | 0.680 |
42 | San Miguel de Allende | 0.669 |
43 | Ixtapan de la Sal | 0.666 |
44 | Chalma | 0.631 |
Fuente: Elaboración propia con información del PNUD (2014).
Finalmente, la Tabla 6 concentra los resultados obtenidos tanto en el ranking de demanda global como en el ranking de IDH. Si se toma como variable de referencia la de demanda, se puede observar que no existe una relación determinante entre las actividades turísticas y los resultados de IDH. Destinos importantes de este grupo como Cancún, Acapulco, Puerto Vallarta, Nuevo Vallarta, Mazatlán, Campeche, Mérida, Los Cabos, Ixtapa-Zihuatanejo, Manzanillo y Huatulco, presentan niveles de desarrollo humano muy inferiores respecto de otros municipios que no reciben una demanda turística importante. Con excepción del caso de Cuernavaca, los municipios que parecen tener mejores niveles de desarrollo humano no serían tan dependientes de una sola actividad económica como es el turismo. Destaca también el hecho que destinos del interior que aparentemente gozan de una reputación turística importante (como los casos de San Miguel de Allende y Tlacotalpan, ambos reconocidos como patrimonio cultural de la humanidad por la Unesco) presenten niveles bajos de desarrollo humano en este grupo de 44 destinos. La siguiente sección de este artículo abordará temas que son importantes para la discusión de la relación entre el turismo y el desarrollo humano
Destino | Lugar en ranking de demanda turística | Lugar en ranking de IDH municipal |
---|---|---|
Ciudad de México | 1 | 5 |
Cancún | 2 | 24 |
Acapulco | 3 | 35 |
Guadalajara | 4 | 14 |
Veracruz-Boca del Río | 5 | 15 |
Puerto Vallarta | 6 | 32 |
Nuevo Vallarta | 7 | 34 |
Puebla | 8 | 21 |
Mazatlán | 9 | 25 |
Mazatlán | 10 | 10 |
León | 11 | 36 |
Mérida | 12 | 11 |
Campeche | 13 | 18 |
Tampico-Madero | 14 | 6 |
Querétaro | 15 | 16 |
Oaxaca | 16 | 1 |
Tijuana | 17 | 31 |
Riviera Maya | 18 | 28 |
Los Cabos | 19 | 20 |
Morelia | 20 | 23 |
San Juan de Los Lagos | 21 | 41 |
Guanajuato | 22 | 27 |
San Luis Potosí | 23 | 17 |
Villahermosa | 24 | 7 |
Ixtapa-Zihuatanejo | 25 | 38 |
Cozumel | 26 | 30 |
Tuxtla Gutiérrez | 27 | 13 |
Hermosillo | 28 | 9 |
Zacatecas | 29 | 3 |
Xalapa | 30 | 8 |
Aguascalientes | 31 | 22 |
Cuernavaca | 32 | 4 |
Ciudad Juárez | 33 | 33 |
Manzanillo | 34 | 29 |
Ensenada | 35 | 37 |
Pachuca | 36 | 12 |
Torreón | 37 | 19 |
Huatulco | 38 | 40 |
San Miguel de Allende | 39 | 42 |
Ixtapan de la Sal | 40 | 43 |
Durango | 41 | 26 |
Tlaxcala | 42 | 2 |
Chalma | 43 | 44 |
Tlacotalpan | 44 | 39 |
Fuente: Elaboración propia.
Discusión
El ejercicio de Intentar encontrar una relación directa entre el desarrollo del turismo y el desarrollo humano en un territorio sin duda es una tarea bastante compleja. Existen múltiples factores internos y externos que condicionan positiva o negativamente esta relación. Entre ellos destacan factores de diversa índole y naturaleza como son los políticos, económicos, sociales, ambientales y de poder (Benur & Bramwell, 2015; Brouder, 2012; Byrd, 2007; Bramwell, 2005; 2006; Bramwell & Meyer, 2007; Croes, 2012; Dredge, 2006; Elliot, 1997; Hall, 1994; 2007; Hall & Jenkins, 1995; Rosentraub & Joo, 2009; Sharpley & Telfer, 2002; Schülter, 1993; Wilson, 2008). A pesar de esa complejidad, se ha intentado insistentemente demostrar por años que el turismo contribuye a mejorar las condiciones de vida en las poblaciones donde se desarrollan este tipo de actividades.
En el caso particular de México, también se ha intentado demostrar que existe una relación causal entre el turismo y el desarrollo argumentando que el primero tiene el potencial de impactar positivamente a las comunidades que albergan actividades turísticas (Alter, 2008; Ruíz, 2008). Sin embargo, también existen estudios críticos que cuestionan la contribución real del turismo al desarrollo económico y social de las comunidades (Brenner, 2005; Espinosa, 2004; Guerrero-Rodríguez, 2012; Jiménez, 1992; Pelas, 2011; Torres & Momsen, 2005). Debido a la existencia de estos puntos de vista contrastantes, no hay duda que la discusión sobre los impactos del turismo en el desarrollo local se encuentra lejos de concluir.
Este estudio intentó comprobar si la simple existencia de actividades turísticas tendría una relación con las condiciones de desarrollo humano en un determinado territorio. De acuerdo con los datos obtenidos, tanto en lo que se refiere como demanda turística como al IDH, se puede decir que no existe una relación determinante. Solo de esta manera se puede entender como en destinos turísticos de gran escala e interés como es el caso de Cancún, Los Cabos, Huatulco, Acapulco, Puerto Vallarta, Nuevo Vallarta, Mazatlán, Campeche, Riviera Maya, Ixtapa-Zihuatanejo, Manzanillo y Ensenada, se observen niveles de desarrollo humano inferiores a destinos que aparentemente no son tan visitados. Si el análisis se enfoca exclusivamente en las ciudades reconocidas como patrimonio de la humanidad por la Unesco, los resultados son altamente dispares y tampoco permiten establecer una causalidad. De esta manera, en este mismo grupo se pueden encontrar municipios como Oaxaca, que es número uno en el ranking de IDH, como San Miguel de Allende que obtuvo el lugar cuarenta y tres. Existen también en este grupo, municipios que a pesar de no recibir tanta demanda turística (como los casos de Tlaxcala, Tampico-Madero, Villahermosa, Xalapa, Hermosillo, Pachuca y Tuxtla Gutiérrez), presentan un IDH superior a sus contrapartes más visitadas.
La pregunta en este punto sería entonces ¿qué tanto influye el desarrollo de las actividades turísticas en los resultados de desarrollo humano en los destinos turísticos estudiados? A la luz de los resultados obtenidos en este estudio, parece ser que no mucho. Las explicaciones a este fenómeno pueden ser muchas y estar relacionadas a temas tan diversos como el control de los recursos turísticos, la distribución de la riqueza generada por el turismo, la dinámica histórica de las actividades, la conectividad al destino, el grado de competitividad, los niveles de corrupción, la seguridad en el destino (real y percibida), las tendencias de desarrollo turístico, entre muchas otras. Lo que es cierto es que el turismo ha sido históricamente publicitado como un agente de desarrollo en México y en muchos casos, esto no ha podido llegar a ser una realidad.
No hay que perder de vista que México ha invertido una gran cantidad de dinero público en esta actividad económica, con la expectativa que junto con el crecimiento de las actividades turísticas se pudieran mejorar las condiciones de vida, tanto en las localidades receptoras como en el país en su conjunto. No hay duda que México ha logrado hacer crecer las actividades relacionadas a esta industria y la perspectiva en el corto plazo es bastante favorable debido a la apertura de más territorios para el desarrollo del turismo año con año. Sin embargo, si el turismo no contribuye efectivamente a la mejora de las condiciones de desarrollo humano en las comunidades donde se desenvuelve entonces cabe preguntarse ¿para qué se necesita al turismo? Esta es una pregunta fundamental que se deben hacer muchos territorios, donde actualmente se favorece el crecimiento de las actividades turísticas a costa del desarrollo humano de sus habitantes.
En ese sentido, la tarea pendiente para los gobiernos locales será seguir monitoreando los resultados de desarrollo humano en sus territorios, así como identificar la manera en que las actividades económicas que se desarrollan, contribuyan a mejorar sustancialmente la calidad de vida de las personas que habitan ahí. Un último punto que es importante mencionar en esta sección de discusión se refiere al criterio de selección de los destinos prioritarios en México por parte de la Sectur. No hay duda que es altamente cuestionable ubicar en un mismo grupo destinos que no comparten las mismas características físicas, de mercado, de escala y de demanda. Es una realidad que, a pesar del esfuerzo por intentar diversificar los destinos turísticos en México en los últimos años, la principal oferta sigue recayendo en el segmento de “Sol y Playa” así como en destinos con alta conectividad como lo señalan las estadísticas de demanda presentadas. No se entiende la inclusión de destinos como Chalma, Ixtapan de la Sal y Xalapa en la lista final de destinos prioritarios, pues además de que presentan niveles muy bajos de demanda, no son reconocidos como destinos turísticos de importancia a nivel nacional. Lo anterior hace pensar que, en la conformación de esta lista, pesaron más otro tipo de intereses que el de simplemente reconocer aquellas localidades con una importante dinámica turística. El hecho que dos de los destinos mencionados se ubiquen en el Estado de México, probablemente apunta a la prevalencia de un interés mayormente político. También puede ser que esta lista tenga que ver exclusivamente con la asignación de más recursos para estas localidades, mismos que no se justificarían de otra manera. Independientemente de ello, será interesante ver en otros estudios futuros explicaciones alternativas a la conformación de esta lista que parece no tener una conexión lógica y/o práctica.
Conclusiones
El objetivo de este artículo fue explorar la relación entre las actividades turísticas y el nivel de desarrollo humano en algunos municipios de México. Como se pudo apreciar tanto en la sección de resultados como en la de discusión, no existe una relación determinante en estas dos variables, situación que lleva a cuestionar nuevamente la contribución del turismo al desarrollo humano en México. En ese sentido, la hipótesis generada en este estudio debe ser descartada al poder no contar con evidencia suficiente que la pueda sustentar.
La principal contribución de este estudio es la oportunidad de poder comparar los resultados tanto de la actividad turística como los del IDH. Hasta esta fecha, no existe un estudio que proponga un análisis similar, por lo que la información contenida en este artículo puede servir de base para futuros estudios y profundizar sobre la naturaleza de esta relación. El principal hallazgo se refiere al hecho que destinos prioritarios con una demanda turística importante, no presentan niveles de desarrollo humano superiores a aquellas localidades donde el turismo no es su principal actividad económica. Otro hallazgo importante derivado de este ejercicio de investigación es observar que municipios como Oaxaca, Tampico-Madero y Xalapa, presentan niveles de desarrollo humano considerablemente altos. Como se pudo apreciar en la figura 1, el municipio de Oaxaca pertenece a una de las entidades que posee la mayor cantidad de municipios con IDH muy bajos. Considerando lo anterior, es altamente dudoso como este municipio en particular pudo obtener evaluaciones tan altas en las tres dimensiones (educación, ingreso y salud) del IDH, a partir del contexto donde pertenece. En los casos de Tampico-Madero y Xalapa, también resaltan sus resultados altamente positivos en lo que se refiere a IDH, tomando en cuenta las condiciones de inseguridad actuales que prevalecen en las entidades a donde pertenecen. El fenómeno de manipulación de cifras (a nivel local, estatal o federal) pudiera ser una posibilidad en estos tres casos el que pudiera ayudar a explicar estos resultados. Sin embargo, no hay por el momento, información o evidencia que sustente tal aseveración.
La información contenida en este artículo puede ser útil no solo para aquellos interesados en el tema del turismo y el desarrollo humano, sino también para otros que se interesen en otros temas relacionados, como son bienestar, desigualdad, organización social, representación y poder. En la medida en que se avance en el entendimiento del desarrollo humano y todas sus dimensiones, se podrán generar mejores estrategias a fin de mejorar la calidad de vida de las personas. Otros estudios que pueden hacerse a partir de la información contenida en este artículo pueden relacionarse con la construcción de una metodología mejorada para analizar la relación del turismo y el desarrollo humano, la evaluación de la utilidad del IDH para reflejar las condiciones reales de una comunidad, el estudio de otro grupo de destinos turísticos diferente al propuesto en esta oportunidad, la integración de nuevas variables al análisis, entre muchos otros.
No hay duda que este tema es altamente relevante para México, especialmente en estos momentos donde la incertidumbre social y económica prevalece en todo el mundo. Aportando mayores elementos de juicio que abonen a comprender mejor el tema del desarrollo humano, se podrán tomar mejores decisiones en los años por venir. La expectativa de este autor, y de muchos otros con pensamientos similares, es que los hallazgos de estudios como este, por modestos que sean, puedan contribuir a construir estrategias coherentes que ayuden a mejorar las condiciones de vida de las personas que viven en estas localidades.