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Introducción. La inmigración en la cultura canadiense: principios y antecedentes históricos1
La inmigración ha jugado un papel fundamental para la construcción de una sociedad multicultural en Canadá; de hecho, hasta ahora ha sido un destino muy atractivo para los inmigrantes provenientes de diversos países por su alto nivel de vida y por la multiplicidad de programas para migrar en forma permanente o temporal. La tradición de la política migratoria canadiense ha sido muy abierta gracias al consenso de sus ciudadanos de que la migración es positiva para su economía y sociedad, que es el principal motor de crecimiento de su población y que representa un activo para su desarrollo económico (EIC, s. f.). Según Statistics Canada, hoy el 82.2 por ciento del crecimiento poblacional proviene del arribo de un gran número de inmigrantes y de residentes no permanentes.
En 2019, el 22 por ciento de la población eran inmigrantes (Statistics Canada, 2019a). Pero, cabe decir que ese mismo año, el 17 por ciento de la población tenía más de sesenta y cinco años, la tasa de nacimiento era de 1.55 hijos por mujer y la expectativa de vida mucho más larga (Statistics Canada, 2019b). De ahí la importancia de su política migratoria abierta a recibir jóvenes trabajadores, de preferencia altamente capacitados.
La política migratoria se basa en varios principios:
La soberanía nacional establece que su política migratoria debe estar orientada hacia los intereses de seguridad y salud nacionales.
La cuestión demográfica ha sido determinante para la admisión de migrantes, pues sus tasas de natalidad han estado por debajo del nivel de reemplazo y hay un creciente envejecimiento de la población, lo cual propicia que la migración sea un reemplazo idóneo.
El desarrollo económico es determinante, ya que la migración constituye una herramienta esencial para el crecimiento de su economía.
La dimensión humanitaria siempre ha estado presente en su política migratoria.
Por estas razones los canadienses, a lo largo de su historia, han creado imanes para atraer la inmigración, los cuales a continuación describo muy brevemente.
A principios del siglo XX, se formuló una legislación tendenciosa, encaminada a crear una política migratoria exclusiva, selectiva y discriminatoria para formar un “Canadá blanco” (Hawkins, 1972). Y aunque ya había un Chinatown muy vigoroso y varios microestablecimientos de migrantes procedentes de India y Japón en Vancouver -el puerto de ingreso más importante de migrantes procedentes del Pacífico-, en 1908 se estableció un programa para terminar con la inmigración asiática, una actitud definitivamente racista. Esta situación duró algunos años, hasta 1947, cuando la legislación que repudiaba la exclusión china concluyó.
En 1950, se creó el Department of Citizenship and Immigration Canada (CIC), para ejecutar la política migratoria y, posteriormente, se aprobó la Immigration Act de 1952, la cual estableció la estructura legal para institucionalizar y administrar la inmigración.
El Manpower and Immigration Department fue la instancia responsable de administrar la inmigración entre 1966 y 1994, y durante este periodo se introdujo un sistema de selección conocido como el Canadian Point System,2 con el cual se asignó un puntaje de uno a cien a ciertas características individuales deseables para aceptar inmigrantes: la edad, la educación, la ocupación, la experiencia laboral calificada, el conocimiento de los idiomas oficiales -inglés y francés-, entre otras. Esto redundó en grandes beneficios para la sociedad y economía canadienses, ya que hoy cerca de la mitad de los inmigrantes llega con licenciatura, mientras que sólo el 27 por ciento de los inmigrantes que arriban a Estados Unidos la tienen. Los niños inmigrantes a Canadá registran el mismo nivel educativo que los nativos, mientras que la brecha es enorme en lo que concierne a la migración hacia Estados Unidos. Las variables determinantes para ingresar como inmigrante en el sistema de puntos son: oferta de empleo, inversión relacionada con la creación de empleos, la presencia de parientes cercanos, entre otras. De esta manera, los puntos asignados a los candidatos a migrar, basados en las aptitudes señaladas, son acordes con los intereses de cada administración.
Poco a poco, el control y la administración migratoria fue adoptando una jurisdicción compartida entre el gobierno federal y las provincias canadienses, a excepción de Quebec que, a partir del Acuerdo Coullen-Couture, mantiene su autonomía al respecto. Las reglas y regulaciones federales que contiene la Immigration Act de 1976 otorgaron más poder a las provincias y establecieron el término de “clases prohibidas”. Durante los años ochenta, un nuevo tipo de inmigrantes fue añadido a esa ley: el de business class (categoría de negocios).
La ley de 1976, basada en las recomendaciones del Green Paper on Immigration and Population, conllevó al establecimiento de mecanismos y regulaciones, como la introducción de niveles anuales de aceptación de inmigrantes. En este periodo, la tas a de fertilidad cayó por debajo de la tasa de reemplazo de 2.2. Hoy el índice de migrantes per cápita en Canadá es 2.5 veces más alto que el de Estados Unidos y cuatro veces mayor que el de la Unión Europea.
La composición de la población de los inmigrantes en Canadá ha ido cambiando y ha conducido hacia una sociedad mucho más plural, de ahí su preocupación por institucionalizarla. La Canadian Multiculturalism Act, aprobada en 1988, es una respuesta a esta preocupación y estipula los buenos deseos y actitudes que se establecen en Canadá con las personas originarias de múltiples países y culturas. El multiculturalismo canadiense constituye un marco político y legal que orienta las políticas de inmigración y de administración de la diversidad cultural. Es en buena parte gracias a éste que, en la actualidad, se suele percibir a este país como un lugar hospitalario y acogedor para los inmigrantes, así como uno en el que las diversas culturas conviven de manera armoniosa. Es también debido a este marco político que se tiende a olvidar que, antes de los años sesenta, la política migratoria canadiense era abiertamente discriminatoria y racista, y se aplicaba de manera discrecional.
El multiculturalismo ha pasado por varias etapas: en los años setenta, adoptó un lenguaje predominantemente inclusivo; a finales de los ochenta se empezó a enunciar como una ventaja competitiva en un mercado globalizado y, a finales de los noventa y en la década de los dos mil, se incorporaría la dimensión de la seguridad nacional (Gilbert, 2007).
Los ataques terroristas de 2001 tuvieron una influencia significativa en Canadá. El presidente estadounidense George Bush presionó al gobierno canadiense para que modificara el énfasis en sus leyes migratorias enmarcadas en el multiculturalismo. De ahí que la política fronteriza de Canadá pasó de un paradigma en el que prevalecía el comercio a otro en lo que lo más importante era preservar la seguridad (Gilbert, 2007). Desde entonces fue muy común que los musulmanes se convirtieran en chivos expiatorios y víctimas de perfil racial y religioso, al igual que ha sucedido en Estados Unidos. Se establecieron iniciativas tendientes a detener y deportar a inmigrantes sospechosos de cualquier amenaza a la seguridad; se restringieron los requisitos para inmigrar y se introdujo una tarjeta de identificación para inmigrantes (maple leaf card).
En 2015, el gobierno liberal del primer ministro Justin Trudeau3 reformuló el CIC renombrándolo Department of Immigration, Refugees and Citizenship Canada (IRCC), lo cual puso en marcha la express entry (EE). Ésta es un sistema que se utiliza para ayudar a seleccionar a los inmigrantes calificados que tienen más probabilidades de integrarse plenamente en la sociedad canadiense. El modelo está basado en que el primer inmigrante de este tipo que solicita ingreso lo obtiene (first come first serve). De esta manera, se elige entre muchos a los mejores y más brillantes candidatos (best and brightest). Esto ha reducido los tiempos de procesamiento a menos de seis meses. Como consecuencia, las autoridades discriminan a individuos que no reúnen estas características deseadas por la sociedad canadiense (O’Doherty y Katem, 2019). Es importante destacar que los residentes extranjeros en Canadá están particularmente bien preparados académicamente en las áreas de ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM, por sus siglas en ingles).4 Los extranjeros que muestran interés en emigrar son clasificados de acuerdo con un comprehensive ranking system (CRS), que debe cumplir las necesidades laborales del país y con todos los requisitos o características del sistema de puntos señalados; este puntaje determina su rango en el grupo de EE. Se les emite una invitation to apply (ITA). Los candidatos seleccionados reciben una ITA con la cual solicitan su ingreso para, posteriormente, obtener la residencia permanente. Se dispone de sesenta días para presentar su solicitud y el proceso lleva un máximo de seis meses; supuestamente evita retrasos y hace posible una mejor coordinación de los volúmenes de solicitudes con el plan anual de los niveles de inmigración. A partir de que se pusieron en marcha las invitaciones ITA para solicitar ingreso como inmigrante a Canadá, han venido aumentando significativamente. Supuestamente el incremento de estas invitaciones se debe a los recortes de las calificaciones obtenidas por los solicitantes a través del CRS; es decir, han disminuido los requerimientos, como parte de la reforma que ha impuesto Trudeau.
Admisión de inmigrantes o residentes permanentes
La inmigración a Canadá puede ser permanente o temporal. El IRCC maneja las solicitudes de ambos tipos de migrantes e investiga, con el apoyo de las siguientes instituciones, si el candidato puede plantear riesgos para su seguridad y salud: Public Safety Canada, Canada Border Services Agency, Royal Canadian Mounted Police, Canadian Security Intelligence Service y Department of Justice and Health.
Los inmigrantes o residentes permanentes son personas que han sido admitidas para residir de forma permanente y que tienen el derecho a trabajar y estudiar en Canadá. El gobierno federal consulta cada año con los gobiernos de las provincias y los territorios los planes de admisión de residentes permanentes, con el fin de respetar los objetivos de la inmigración tal como se establece en la IRPA. La admisión de residentes permanentes o inmigrantes se realiza bajo el sistema de puntos y acorde con las necesidades laborales del país mediante las siguientes categorías:
Clase económica o inmigrantes independientes. Se admiten con el objeto de contribuir al desarrollo económico. Son los trabajadores calificados, empresarios, inversionistas, personas autoempleadas y otros inmigrantes que solicitan admisión por propia iniciativa. También incluyen parientes apoyados.
Clase familiar. Tiene el objetivo de reunificar a los familiares de residentes permanentes e incluye a los familiares inmediatos -hijos dependientes, padres y abuelos, esposos o comprometidas- que deseen inmigrar a Canadá. Para solicitar su entrada, el ciudadano canadiense o residente permanente de diecinueve años o más tiene el derecho a apoyar esta solicitud.
Refugiados. Son los extranjeros que deben comprobar que sus causas de inmigración coinciden con temores fundados de persecución por raza, religión, nacionalidad, pertenencia a un grupo social determinado o asociaciones políticas.
Desde la década de los setenta, los canadienses admiten aproximadamente a doscientos cincuenta mil inmigrantes al año, y durante los últimos quince años esta cifra ha venido aumentando. Como se puede observar en la Gráfica 1, se admitieron a 341 180 inmigrantes en 2019, casi el 1 por ciento de su población, cifra inédita. A partir del siglo XXI, la proporción de la población extranjera ha ido creciendo con respecto a la nativa. El 22 por ciento de una población de 37 742 154 en 2019 eran nacidos en el extranjero; la gran mayoría de ellos vive en las principales áreas metropolitanas tales como Toronto, Vancouver y Montreal. Statistics Canada estima que los migrantes podrán llegar a representar el 30 por ciento de la población hacia 2036. Para darnos cuenta de su dimensión, el 61.8 por ciento de los inmigrantes admitidos nacieron en Asia -incluyendo el Medio Oriente-. Específicamente, los inmigrantes procedentes de India, Filipinas y China representaron el 42 por ciento de las admisiones en 2019. Filipinas, que tenía el primer lugar en 2015 con el 18.7 por ciento de los inmigrantes aceptados, pasó al 8.2 por ciento en 2019; en cambio, India pasó del 12.2 por ciento en 2010 al 25.1 por ciento en 2019 y ocupó el primer lugar, es decir, duplicó su población en nueve años; China, Siria, Nigeria, Estados Unidos, Pakistán e Irán figuran también con cantidades importantes. Francia e Inglaterra siguen siendo las principales fuentes europeas (véase el Cuadro 1). Por primera vez África participó con un 13.4 por ciento de inmigrantes, mientras que de Europa fue el 11.6 por ciento y de América, el 12.6 por ciento.
Fuente: Government of Canada, 2017a.
Gráfica 1 Inmigrantes o residentes permanentes admitidos en Canadá, 1994-2019 (miles de personas)
Cuadro 1 Inmigrantes o residentes permanentes admitidos en Canadá, según principales países de origen, 2010-2019
| 2010 | 2015 | 2018 | 2019 | |||||
|---|---|---|---|---|---|---|---|---|
| País | Número | % | Número | % | Número | % | Número | % |
| India | 34 226 | 12.2 | 39 340 | 14.5 | 69 980 | 21.8 | 85 585 | 25.1 |
| China | 30 381 | 10.8 | 19 460 | 7.2 | 29 710 | 9.3 | 30 260 | 8.9 |
| Filipinas | 38 614 | 13.8 | 50 845 | 18.7 | 35 050 | 10.9 | 27 815 | 8.2 |
| Nigeria | 3 907 | 1.4 | 4 090 | 1.5 | 10 920 | 3.4 | 12 595 | 3.7 |
| Estados Unidos | 8 142 | 2.9 | 7 655 | 2.8 | 10 905 | 3.4 | 10 800 | 3.2 |
| Pakistán | 6 812 | 2.4 | 11 295 | 4.2 | 9 490 | 3.0 | 10 790 | 3.2 |
| Siria | 1 040 | 0.4 | 9 850 | 3.6 | 12 045 | 3.8 | 10 120 | 3.0 |
| Eritrea | 931 | 0.3 | 2 210 | 0.8 | 5 695 | 1.8 | 7 025 | 2.1 |
| Corea del Sur | 5 537 | 2.0 | 4 105 | 1.5 | 4 800 | 1.5 | 6 110 | 1.8 |
| Irán | 7 478 | 2.7 | 11 640 | 4.3 | 5 510 | 1.7 | 6 055 | 1.8 |
| Reino Unido | 8 719 | 3.1 | 5 360 | 2.0 | 5 660 | 1.8 | 5 635 | 1.7 |
| Francia | 4 648 | 1.7 | 5 850 | 2.2 | 6 175 | 1.9 | 4 960 | 1.5 |
| Jamaica | 2 321 | 0.8 | 3 415 | 1.3 | 3 875 | 1.2 | 3 970 | 1.2 |
| México | 3 862 | 1.4 | 3 220 | 1.2 | 3 310 | 1.0 | 3 460 | 1.0 |
| Suma | 156 618 | 55.8 | 178 335 | 65.6 | 213 125 | 66.4 | 225 180 | 66.0 |
| Otros países | 124 112 | 44.2 | 93 500 | 34.4 | 107 930 | 33.6 | 116 000 | 34.0 |
| Total | 280 730 | 100.0 | 271 835 | 100.0 | 321 055 | 100.0 | 341 180 | 100.0 |
Fuente: Government of Canada, 2017a.
En el mismo cuadro podemos ver cómo México participó con tan sólo el 1 por ciento de las visas de inmigrantes con 3 460 mexicanos en 2019, una cifra muy baja. Su aportación ha ido disminuyendo paulatinamente durante esta década, proporcionalmente con respecto a otros países. Posiblemente la razón principal es que a través del mecanismo EE, el mexicano obtuvo menos calificaciones que los asiáticos. En cambio, en Estados Unidos fueron admitidos 155 600 mexicanos en 2019 de un total de 1 030 990 inmigrantes, el 15 por ciento del total (USDHS, 2019).
Con respecto a las categorías por las cuales los inmigrantes fueron aceptados, de un total de 321 055 inmigrantes admitidos en 2018, el 58 por ciento fueron aceptados bajo la clase económica, el 27 por ciento en la familiar y el 14 por ciento en la clase humanitaria (véase la Gráfica 2). Asimismo, podemos observar en este cuadro cómo la participación de la categoría de inmigrantes económicos ha ido aumentando desde 1990, pues su cantidad se ha duplicado en treinta años, mientras que la categoría familiar y la de refugiados han aumentado muy ligeramente. Las categorías de inmigrantes presentan grandes subcategorías, como se puede observar en el Cuadro 4. La categoría económica ha venido creciendo año con año de 155 994 en 2016 a 186 352 admisiones anuales en 2018, y está proyectado que se incremente a 195 800 al terminar 2020. Destacan tanto la subcategoría de federal economic skilled como la de provincial nominnee.
Fuente: Government of Canada, 2019b.
Gráfica 2 Inmigrantes o residentes permanentes admitidos por categoría, 1990-2018
Dentro de la categoría familiar, todas las subcategorías han aumentado, lo que refleja las intenciones del primer ministro Trudeau de dar mayor importancia a la reunificación familiar y facilitar el ingreso a los parientes inmediatos, no sólo esposas e hijos, sino padres y abuelos, con el fin de incentivar una mayor integración. Su administración aumentó el límite de la admisión de padres y abuelos de inmigrantes de cinco mil a diez mil, por lo que las solicitudes están siendo muy demandadas. Y, por lo que se refiere a la categoría de refugiados, han venido descendiendo a partir de 2017, dado que en ese año muchos sirios fueron admitidos.
A diferencia de la política canadiense, la estadounidense ha dado una alta prioridad a las admisiones por razones de reunificación familiar y no económicas y/o laborales, como lo hacen los canadienses. No obstante, el presidente estadounidense Donald J. Trump declaró en innumerables ocasiones que era deseable disminuir la proporción de admisiones a familias y dar un mayor peso a las admisiones por motivos económicos, al estilo de la política migratoria canadiense; asimismo, redujo drásticamente la admisión de refugiados. El U.S. Department of State rechazó treinta y siete mil solicitudes de refugio en 2018, provenientes de países mayoritariamente musulmanes, que recibieron un 80 por ciento menos de visas que en 2016 (Cohen y Hansler, 2019).
Acorde con el Provincial Nominee Program (PNP), las provincias solicitan sus necesidades de mano de obra importada y requerida para sus mercados laborales. El PNP, alineado con el sistema federal, ha ido aumentando su participación durante los últimos años. Los candidatos con una nominación provincial reciben seiscientos puntos adicionales para su puntaje del CRS y, como resultado, su invitación a solicitar la residencia permanente se hace en forma más acelerada (Smith y Turner, 2019). Así tenemos que, en 2016, el 30 por ciento de los inmigrantes económicos ingresaron por medio de este programa; en 2018, el 33 por ciento, y se espera que para fines de 2020 represente el 34 por ciento (véase el Cuadro 2).
Cuadro 2 Número de admisiones de inmigrantes por categoría, 2016-2018
| Categoría de inmigrantes | 2016 | 2018 | Estimado a 2020 |
|---|---|---|---|
| Económica | |||
| Trabajador calificado (nivel federal) (Federal economic skilled) | 59 999 | 75 606 | 91 800 |
| Cuidadores (nivel federal) (Federal economic caregivers) | 18 467 | 17 821 | 10 200 |
| Negocios (nivel federal) (Federal economic business) | 867 | 757 | 750 |
| Nominado (nivel provincial) (Provincial nominee) | 46 170 | 62 427 | 67 800 |
| Trabajadores calificados e Inmigrantes categoría Negocios, Quebec | 30 491 | 28 332 | 25 250 |
| Total | 155 994 | 186 352 | 195 800 |
| Familia | |||
| Esposas(os), parejas e hijos | 60 588 | 66 704 | 70 000 |
| Padres y abuelos | 17 041 | 18 026 | 21 000 |
| Otros familiares | 375 | 449 | |
| Total | 78 004 | 85 179 | 91 000 |
| Refugiados y personas protegidas | |||
| Personas protegidas en Canadá y dependientes en el extranjero | 12 116 | 17 682 | 18 000 |
| Refugiados apoyados por el gobierno | 23 523 | 8 156 | 10 700 |
| Blended Visa Office-Referred Refugees | |||
| Refugiados | 4 434 | 1 157 | 1 000 |
| Refugiados con patrocinio privado | 18 362 | 18 763 | 20 000 |
| Total | 58 435 | 45 758 | 49 700 |
| Causas humanitarias y otros | 3 913 | 3 746 | 4 500 |
| Total | 296 346 | 321 035 | 341 000 |
Fuente: Government of Canada, 2019a.
Por lo que respecta al destino a donde llegan los inmigrantes, la mayoría arriba a las provincias de Ontario, Columbia Británica, Alberta y Quebec. Ontario ha sido el sitio que han escogido los nuevos inmigrantes para residir principalmente, ya que aumentaron de 111 955 en 2017 a 153 340 en 2019, un incremento muy significativo. Y, aunque Ontario permanece la provincia más popular entre los migrantes (el 39 por ciento), es mucho menor que en 2001, cuando el 55 por ciento de los inmigrantes llegaba ahí. Asimismo, es probable que lleguen en primera instancia a Ontario y luego migren a otras provincias. Toronto es la ciudad que continúa dando la bienvenida a la mayoría de los migrantes por un amplio margen, alrededor del 35 por ciento. Asimismo, Vancouver, Montreal, Calgary y Edmonton comprenden las cinco ciudades más demandadas (El-Assal, 2020).
El último censo disponible nos muestra que en 2016, los inmigrantes constituían el 46 por ciento del total de la población de Toronto, el 23 por ciento de la de Montreal y el 41 por ciento de la de Vancouver. Es un hecho que muchas ciudades o grandes metrópolis de Canadá tienen una gran población de extranjeros, tan importante como las estadounidenses. Toronto y Vancouver encabezan esta situación más incluso que Miami, Los Ángeles y San Francisco. Con el fin de descentralizar estas ciudades imanes para inmigrantes, Trudeau ha propuesto introducir un Municipal Nominee Program que permita a las comunidades locales patrocinar directamente a los inmigrantes. De la misma manera, el primer ministro ha establecido el programa The Atlantic Immigration Pilot, con el objeto de atraer más inmigrantes a las provincias cercanas al Océano Atlántico (El-Assal, 2019).
Por otra parte, el gobierno de Trudeau también ha facilitado la naturalización. En 2017 se aprobó la Bill C-6, la cual elimina los cambios a la Citizenship Act que introdujo el Partido Conservador en 2014, que dificultaban a los inmigrantes solicitar la ciudadanía canadiense. Al volver a su estado anterior, facilita a los residentes permanentes convertirse en ciudadanos más rápidamente, ya que se redujo el tiempo requerido para poder solicitarla a tres en cinco años,5 y otorga un bono de un máximo de un año a las personas que estuvieron viviendo en Canadá antes de obtener la residencia permanente.6 Asimismo, Trudeau ha prometido mejorar la efectividad del ministerio, con el fin de procesar todas las solicitudes de ciudadanía en un periodo máximo de doce meses.
Admisión de no inmigrantes
La ley de inmigración requiere que todos los visitantes, trabajadores temporales y estudiantes admitidos bajo la categoría de no inmigrantes que deseen trabajar o estudiar temporalmente en Canadá deban obtener una autorización previa en su país de origen.
a) Visitantes. Con la IRPA, todos los extranjeros que provengan de ciento cuarenta y siete países deben solicitar una visa de visitante o residente temporal para ingresar, a menos que provengan de países exentos, como es hoy el caso de México o se beneficien de otras excepciones, como los diplomáticos. En 2016, entró en vigor la electronic travel authorization (ETA), que constituye el nuevo requisito de ingreso para los extranjeros que se encuentran exentos de visa. Ello permite a las autoridades canadienses identificar mejor a las personas que tengan antecedentes criminales o que han violado la ley de inmigración, para tomar decisiones más informadas para la admisibilidad.
b) Trabajadores temporales. La Ley de Inmigración, el Manual de Inmigración, así como el Memorándum de Operaciones contienen las disposiciones que regulan la política de admisión de trabajadores temporales, además de los requisitos para su estancia en Canadá. El ingreso de trabajadores temporales que requieren un permiso de trabajo es administrado conjuntamente por las instituciones IRCC y Employment and Social Development Canada (ESDC). En términos generales, los trabajadores temporales se desempeñan principalmente en la comercialización, hotelería y servicios alimenticios, ya sea como asalariados o autoempleados. Acorde con Statistics Canada, las principales provincias a donde llegan los trabajadores temporales son: Ontario, un 34 por ciento; Columbia Británica, un 24 por ciento; Alberta, un 20 por ciento; Quebec, un 12 por ciento. Mientras que los inmigrantes que llegan a Ontario son el 45 por ciento; Columbia Británica, el 15 por ciento; Alberta, el 13 por ciento; y Quebec, el 12 por ciento.
Cabe destacar que, en 2014, se reformó el programa de admisión de trabajadores temporales al dividirse en dos programas distintos: Temporary Foreign Workers Program (TFWP) e International Mobility Program (IMP).
• Temporary Foreign Workers Program (TFWP)
Con el TFWP ingresan trabajadores extranjeros por petición de los empresarios. Después de que la oficina de Labour Market Impact Assessment (LMIA) evalúa y aprueba la pertinencia de admisión del extranjero, es la Employment and Social Development Canada (ESD) la que emite el permiso de trabajo. Las autoridades canadienses deben asegurarse de que los empleadores hayan considerado, antes de su contratación, a ciudadanos canadienses o residentes legales. El trabajador tiene que solicitar permisos de trabajo al IRCC, con la aprobación de la LMIA y por ESD.
Poco a poco, el gobierno canadiense ha ido aceptando un mayor número de tra bajadores temporales. En el Cuadro 3 observamos que el TFWP está dirigido tanto a trabajadores de alta como de baja capacitación, según sean las demandas de los empleadores. Mientras que las ocupaciones bajo la categoría de live-in caregiver (cuidadores que viven en la casa donde trabajan) han descendido significativamente en los últimos diez años: de 32 780 contrataciones en 2008, el año pico, pasaron a sólo 4 115 en 2019, los trabajadores agrícolas aumentaron cuatro veces durante el mismo periodo (de 5 270 a 21 675 contrataciones). En la Gráfica 3 observamos, como bajó este programa, México ha sido beneficiado, ya que ha ocupado el primer lugar entre los países exportadores de trabajadores agrícolas con 30 985 visas otorgadas en 2019 (el 32 por ciento del total), mientras que en 2010 Filipinas ocupaba el primer lugar y hoy ha reducido significativamente su participación. Es decir, los mexicanos han más que duplicado su participación en un periodo de trece años (2005-2018). Suponemos que la mayoría son trabajadores agrícolas contratados bajo el Programa de Trabajadores Agrícolas Temporales de México (PTATM). En términos generales, los trabajadores temporales de baja capacitación no son tratados de igual forma que los de alta capacitación, a quienes se fomenta su eventual integración a la sociedad canadiense (Cárdenas y Tigau, 2017).
Cuadro 3 Extranjeros con permiso del Temporary Foreign Workers Program (TFWP), 2000-2019
| Cuidadores que viven en casa (Live-in caregivers) | Trabajadores agrícolas | Otros trabajadores temporales extranjeros con LMIA | ||||
|---|---|---|---|---|---|---|
| Año | Total | Live-In Caregiver Program | Ocupaciones de cuidadores | Total | Flujo de trabajadores agrícolas | |
| 2000 | 6 090 | 5 255 | 820 | 205 | 0 | 16 160 |
| 2001 | 7 965 | 6 865 | 1 085 | 280 | 0 | 17 885 |
| 2002 | 10 435 | 8 865 | 1 545 | 340 | 0 | 18 445 |
| 2003 | 12 815 | 11 060 | 1 745 | 615 | 0 | 20 555 |
| 2004 | 15 225 | 13 580 | 1 630 | 430 | 0 | 21 505 |
| 2005 | 18 025 | 16 220 | 1 810 | 955 | 0 | 24 350 |
| 2006 | 22 005 | 19 550 | 2 450 | 2 030 | 0 | 29 920 |
| 2007 | 27 820 | 25 155 | 2 655 | 3 635 | 0 | 46 800 |
| 2008 | 32 780 | 29 900 | 2 865 | 5 270 | 0 | 72 485 |
| 2009 | 31 830 | 29 375 | 2 435 | 5 910 | 0 | 74 765 |
| 2010 | 29 750 | 26 340 | 3 405 | 5 575 | 0 | 56 755 |
| 2011 | 21 975 | 19 580 | 2 380 | 7 065 | 4 590 | 52 505 |
| 2012 | 19 015 | 16 865 | 2150 | 6 465 | 6 255 | 61 055 |
| 2013 | 16 415 | 14 725 | 1 685 | 8 290 | 7 900 | 79 225 |
| 2014 | 16 430 | 14 955 | 1 460 | 9 070 | 8 515 | 68 260 |
| 2015 | 13 955 | 12 910 | 1 030 | 8 405 | 7 870 | 37 385 |
| 2016 | 9 015 | 7 625 | 1 380 | 15 160 | 9 495 | 24 185 |
| 2017 | 4 785 | 2 655 | 2 105 | 11 930 | 11 695 | 24 975 |
| 2018 | 3 755 | 680 | 3 070 | 16 625 | 16 040 | 30 270 |
| 2019 | 4 115 | 180 | 3 925 | 21 675 | 20 145 | 42 345 |
Fuente: Government of Canada, 2017b.
Fuente: Government of Canada, 2017b.
Gráfica 3 Extranjeros con permiso del Temporary Foreign Workers Program (tfwp) por país de origen, 2005-2019
• International Mobility Program (IMP)
El objetivo de este programa es proporcionar ventajas competitivas y beneficios recíprocos a los canadienses, en lugar de satisfacer las necesidades laborales de ciertos empresarios. A diferencia del TFWP, este programa no requiere de la aprobación del LMIA. El International Mobility Program (IMP) recluta un número mucho mayor de trabajadores que el TFWP: 372 905 trabajadores fueron admitidos en 2018, comparados con 84 465 trabajadores bajo el TFWP (véanse los Cuadros 3 y 4). Vemos en el Cuadro 4 cómo en este programa, bajo el rubro de acuerdos, se encuentra el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN, en inglés North American Free Trade Agreement, NAFTA), con casi 20 645 permisos o visas Trade NAFTA (TN) otorgadas a trabajadores altamente capacitados y/o profesionistas -estadounidenses o mexicanos- que ingresaron en 2018, quienes aumentaron al doble en dieciocho años (10 470 en 2000). En muchos casos, los obstáculos que impiden una mayor movilidad laboral por la vía legal implican la falta de armonización de profesiones a nivel regional. Es urgente enfrentar este problema.
Cuadro 4 Extranjeros con permiso para trabajar bajo el International Mobility Program (IMP), 2000-2018
| Programa | 2000 | 2005 | 2010 | 2015 | 2016 | 2017 | 2018 |
|---|---|---|---|---|---|---|---|
| No comercial | 0 | 0 | 290 | 875 | 1 025 | 1 065 | 990 |
| Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) | 10 470 | 11 395 | 18 320 | 22 855 | 21 550 | 20 950 | 20 645 |
| Otros tratados de libre comercio | 195 | 430 | 960 | 1 055 | 1 040 | 905 | 990 |
| Tratado General de Comercio en Servicios Profesionales (General Agreement on Trade in Serv. -GATS- Prof.) | 170 | 245 | 230 | 115 | 105 | 85 | 70 |
| Tratados internacionales de Canadá | 10 840 | 12 095 | 19 820 | 24 910 | 23 725 | 23 090 | 23 240 |
| Tratados internacionales con provincias o territorios | 0 | 0 | 295 | 505 | 345 | 235 | 155 |
| Tratados de Canadá con provincias o territorios | 0 | 0 | 5 675 | 10 920 | 11 360 | 11 400 | 10 915 |
| Otros tratados | 2 210 | 1 615 | 1 285 | 100 | 30 | 5 | 5 |
| Acuerdos | 13 060 | 13 705 | 27 105 | 36 450 | 35 490 | 34 745 | 34 330 |
| Beneficios significativos en general | 2 930 | 2 280 | 2 530 | 8 065 | 4 495 | 4 730 | 5 840 |
| Empresarios/autoempleados | 545 | 655 | 345 | 445 | 430 | 570 | 835 |
| Transferencias intraempresas | 5 055 | 6 355 | 12 220 | 17 665 | 18 300 | 18 500 | 21 070 |
| Reparaciones de emergencia | 40 | 50 | 45 | 135 | 105 | 85 | 105 |
| Beneficios significativos | 8 570 | 9 345 | 15 160 | 26 315 | 23 350 | 23 900 | 27 870 |
| Experiencia internacional sobre Canada (International Experience Canada, IEC) | 9 545 | 23 395 | 51 935 | 42 600 | 37 185 | 30 830 | 17 290 |
| Profesores en intercambio, conferencistas visitantes | 665 | 1 055 | 1 455 | 1 535 | 1 1520 | 1 545 | 1 590 |
| Empleo recíproco / otros | 2 095 | 1 870 | 2 185 | 3 250 | 3 975 | 4 530 | 5 180 |
| Empleo recíproco | 12 305 | 26 335 | 55 590 | 47 365 | 42 685 | 36 910 | 24 170 |
| Programas de investigación, docencia o capacitación | 0 | 0 | 0 | 310 | 375 | 400 | 320 |
| Esposas(os) de trabajadores calificados | 855 | 9 755 | 19 115 | 26 730 | 28 565 | 30 270 | 33 325 |
| Esposas(os) de estudiantes | 1 535 | 3 370 | 4 570 | 9 265 | 12 860 | 14 825 | 17 555 |
| Empleo de posgraduados | 1 470 | 5 380 | 30 265 | 78 660 | 99 020 | 109 775 | 138 245 |
| Becarios posdoctorales y premiados | 3 290 | 4 445 | 4 915 | 4 925 | 4 925 | 5 275 | 5 550 |
| Becarios y residentes médicos | 0 | 0 | 45 | 2 160 | 2 330 | 2 300 | 2 500 |
| Competitividad y políticas públicas | 7 165 | 22 970 | 58 925 | 121 740 | 147 700 | 162 465 | 197 180 |
| Trabajo de caridad o religioso | 750 | 1 205 | 1 355 | 2 035 | 2 270 | 2 470 | 2 695 |
| Empleos de interés para Canadá | 28 815 | 59 850 | 131 025 | 197 795 | 216 395 | 226 145 | 252 230 |
| Otros beneficiarios del Programa IMP | 2 250 | 25 | 35 | 80 | 65 | 50 | 75 |
| TOTAL | 44 145 | 73 158 | 158 875 | 251 025 | 288 330 | 321 755 | 372 905 |
Fuente: Government of Canada, 2017b.
En la categoría de Canadian Interest, las subcategorías que más han crecido son las de Competitiveness and Public Policy, que aumentaron ocho veces al pasar de 28 815 en el 2000 a 252 230 en el 2018, y la de Post-Graduate Employment la cual creció sustantivamente al pasar de 1 470 admisiones en el 2000 a 138 245 en el 2018, sobre todo durante este año, debido principalmente a los cambios implementados por Trudeau que incentivan la contratación de extranjeros que estudian en Canadá.
Durante este periodo de dieciocho años, el IMP tuvo un crecimiento importantísimo al pasar de 43 145 en 2000 a 372 905 visas emitidas en 2018. Es interesante destacar que 46 520 migrantes temporales de ambos programas se convirtieron en residentes permanentes en 2018 bajo el Economic Class Program. En la Gráfica 4 podemos observar cómo personas provenientes de India, Estados Unidos, Francia y China, en orden de importancia, son los extranjeros que más utilizan este programa. Si bien entre 2006 y 2019 la participación de los extranjeros provenientes de India creció dieciocho veces, los de China y México crecieron cuatro veces. En el caso de México, su aumento en números absolutos pasó de 1 263 a 4 860 contrataciones. En general, entre el 10 y el 25 por ciento de los trabajadores temporales que ingresan a Canadá se convierten en algún momento en residentes permanentes; sin embargo, la proporción de trabajadores poco calificados o agrícolas que obtienen el estatus permanente es mucho menor ( Van Haren y Masferrer, 2019).
Fuente: Government of Canada, 2017b.
Gráfica 4 Extranjeros con permiso para trabajar bajo el International Mobility Program (IMP) por país de origen, 2006-2019
c) Estudiantes. Son visitantes temporales, su admisión ha crecido exponencialmente durante los últimos veintitrés años en un 500 por ciento: de 83 577 en 1995 a 572 415 en 2018. Los estudiantes provenientes de México se duplicaron al pasar de 3 601 en el 2005 a 6 920 en 2017, y su número descendió a 5 724 en 2018 lo cual, si bien se puede apreciar que su participación se duplicó en trece años -el 1.5 por ciento del total-, no es importante, si los comparamos con los estudiantes que provienen de India -el 30 por ciento del total- y China -el 25 por ciento del total- (véase la Gráfica 5). En Estados Unidos, entre 2019 y 2020, de un total de cerca de un millón de estudiantes internacionales, tan sólo 15 229 (el 1.5 por ciento) provenían de México, mientras que los chinos participaron con el 37 por ciento y los indios con el 20 por ciento (Duffin, 2019). Así, no sólo Canadá se ha convertido en otro polo de atracción importante para trabajadores extranjeros, sino también para estudiantes.
Fuente: Government of Canada, Canadian Bureau for International Education, 2018.
Gráfica 5 Estudiantes internacionales en canadá, 2010-2018
El gobierno de Justin Trudeau ha planteado las siguientes reformas novedosas que parecen atraer a los educandos para convertirse posteriormente en residentes legales: ha disminuido el periodo de residencia física de los estudiantes de cuatro a tres años para poder solicitar la ciudadanía canadiense; ha considerado la mitad del tiempo dedicado por ellos a estudiar y trabajar como parte del lapso de residencia física requerida, con el fin de solicitar la ciudadanía, medida que había sido revocada anteriormente por el gobierno conservador de Harper. Ésta es un área en la que México debería insistir para fomentar un mayor intercambio estudiantil, que a la fecha es muy pobre.
Por lo que se refiere a los migrantes indocumentados, Trudeau estableció el sistema Entry/Exit Initiative, que tiene como propósito detectar a los overstayers, personas que prolongan su estancia sin la visa adecuada, terroristas, criminales… y a los snow birds, aquellos extranjeros que salen del país y continúan recibiendo beneficios de programas sociales. A pesar de ello, hay migrantes indocumentados, aunque no se sabe a ciencia cierta cuántos son. Varios especialistas han estimado que hay entre sesenta mil y doscientos mil indocumentados, quienes predominantemente viven y trabajan en Toronto, pero supuestamente alegan no poder obtener el estatus legal bajo los modelos de admisión existentes. Aquellos empleadores canadienses que toman el riesgo de contratar a indocumentados, ya que se benefician de esta mano de obra barata, pueden llegar a pagar multas sumamente cuantiosas, entre diez mil y cincuenta mil dólares canadienses, y/o encarcelamiento entre seis meses y dos años. En comparación, las sanciones aplicadas en Estados Unidos son mucho menos onerosas y, por ello, hoy hay aproximadamente once millones de indocumentados: las multas se encuentran entre trescientos setenta y cinco dólares y tres mil doscientos dólares por la primera ofensa; entre tres mil doscientos y seis mil quinientos dólares por la segunda y entre cuatro mil trescientos y once mil dólares por las subsiguientes y/o seis meses de prisión (Tran, 2018). Con el proceso altamente restriccionista que observamos durante la administración de Trump, constantemente amenazando con deportaciones masivas, aunado a la terrible pandemia de Covid 19, es posible que algunos mexicanos opten por emigrar a Canadá, que tiene una frontera mucho más porosa, siempre y cuando tengan una conexión allá.
Papel que juegan los migrantes mexicanos y efectos de la política de Trudeau
Programa de Trabajadores Agrícolas Temporales Mexicanos (PTATM)
El PTATM dio inicio en 1966 y para éste se contrató principalmente a caribeños. No fue sino hasta 1974 cuando se extendió la contratación a los trabajadores mexicanos bajo un Memorándum de Entendimiento Bilateral. El objetivo de dicho programa es facilitar el desplazamiento de trabajadores agrícolas temporales mexicanos a las provincias que determine el gobierno canadiense, con el fin de satisfacer las necesidades del mercado de trabajo agrícola. Las instituciones participantes que llevan a cabo la contratación de trabajadores en ambos países son:
En México: la Dirección General de Empleo de la Secretaría de Trabajo y Previsión Social recluta y selecciona al trabajador. Las secretarías de Gobernación y la de Relaciones Exteriores analizan la documentación migratoria del trabajador y se cercioran de que se hayan respetado los acuerdos del Memorándum. La Secretaría de Salud determina si clínicamente son aptos para el trabajo. Por lo general, se selecciona al que tenga experiencia en trabajo agrícola.
En Canadá, las organizaciones privadas denominadas Farms y Ferme en Quebec reciben las peticiones de los granjeros canadienses que no hayan encontrado trabajadores locales. Estas organizaciones cobran al empleador una cuota, para arreglar su transporte entre el lugar de origen y el de destino. La mayoría de los empleadores recuperan una parte de los costos con las deducciones que les hacen a los trabajadores de sus salarios mensuales.
El PTATM opera de la siguiente forma: se firma un contrato de trabajo entre trabajador y empleador, con testigos de ambas partes y con un aval, quien garantiza derechos y obligaciones para el trabajador tanto de orden económico como laboral, de salud, comportamiento y protección. Este contrato es revisado por las asociaciones de granjeros y autoridades mexicanas, y se vigila su cumplimiento en los consulados mexicanos en Canadá, con el fin de corregir las anomalías por parte tanto del trabajador como del empleador. Las condiciones de trabajo que se establecen en dicho acuerdo son que la jornada normal no deberá exceder de ocho horas diarias ni de cuarenta horas semanales; el salario debe ser pagado semanalmente en el lugar de trabajo; el alojamiento y alimentación deberán ser adecuados y gratuitos; el transporte de ida y vuelta será pagado por el empleador; se les otorga seguro de gastos médicos, atención hospitalaria y beneficios si hay fallecimiento. Se les hace un contrato mínimo y se establece un máximo de ocho meses de estancia, y reciben un salario promedio de 13.6 dólares canadienses por hora (STPS, 2020).
Durante los últimos años, la gran mayoría de los trabajadores agrícolas mexicanos han sido empleados en nueve provincias canadienses que participan en el programa: Ontario -el 44.3 por ciento-, Columbia Británica -el 23.2 por ciento- y Quebec -el 22.5 por ciento- (Cruz et al., 2019). Además, llegan a la Isla Príncipe Eduardo, Manitoba, Nueva Brunswick, Nueva Escocia, Alberta y Saskatchewan, lo que demuestra el éxito alcanzado durante los años que tiene de vida. La mano de obra mexicana ocupa un lugar preponderante en los cultivos de verduras (especialmente jitomate, pepino y pimiento); frutas (fundamentalmente manzana, durazno y fresa); tabaco, así como en las empacadoras de productos agrícolas y en el cultivo de flores. Casi tres cuartas partes de los trabajadores admitidos han sido nominales, es decir, solicitados por los granjeros canadienses por nombre. El buen desempeño y excelente disposición al trabajo de los connacionales han determinado que los granjeros los prefieran como empleados. La mayoría de los mexicanos provienen de los estados de México -el 13.9 por ciento-, Tlaxcala -el 7.8 por ciento-, Veracruz -el 7.4 por ciento-, Michoacán -el 6.8 por ciento-, Puebla -el 6.5 por ciento- (Cruz et al., 2019). La preferencia a que aludíamos de los empleadores por mexicanos, además a causa de su adaptabilidad, ha hecho que este programa vaya en aumento y que disminuya proporcionalmente la presencia en el mismo de los caribeños. Los trabajadores mexicanos son, por lo general, hombres jóvenes de entre veinticinco y cuarenta y cinco años. Los empresarios canadienses prefieren que sean casados, ya que así se aseguran de que regresen a su lugar de origen al fin de su contratación.
La dimensión del programa ha ido en aumento, al pasar de tan sólo 203 trabajadores agrícolas en 1974 a 672 en 1984; a casi 5 000 en 1994 y se duplicó en 2004 a 9 287; asimismo se duplicó a 21 499 en 2015 y creció a 26 407 en 2019, como puede observarse en la Gráfica 6 (STPS, 2020). Si comparamos esto con los trabajadores agrícolas mexicanos a quienes se otorga la visa H2 A en Estados Unidos anualmente para trabajar en este sector, sólo representa el 20 por ciento de éstos, ya que para 2019 se otorgaron 204 801 visas y el 92 por ciento de éstas fue recibido por mexicanos (USDS, 2019), lo que constituye una franca dependencia de los trabajadores agrícolas mexicanos, amén de los miles de indocumentados que se ocupan también en este sector.
Fuentes: Government of Canada, 2012; s. f.; Government of Canada, Canadian Bureau for International Education, 2018; STPS, s. f.
Gráfica 6 Población mexicana en canadá, 2008-2019
El programa temporal de trabajadores agrícolas es considerado por muchos un modelo exitoso. Sin embargo, las restricciones en la movilidad de los trabajadores dentro de Canadá, así como el abuso y poder que adquieren los empresarios sobre ellos, a veces haciéndolos trabajar más allá de lo permitido sin ser remunerados debidamente, permanecen como problemas que se deben resolver.
Mecanismo de movilidad laboral México-Canadá
Fue coordinado por los gobiernos federales de ambos países con las administraciones de Felipe Calderón y Stephen Harper, en el marco de la Alianza México-Canadá, con el objeto de impulsar en forma ordenada, legal y segura el flujo de trabajadores temporales no agrícolas mexicanos. En principio, la STPS, a través del Servicio Nacional de Empleo, ha sido encargada de reclutar y preseleccionar candidatos de acuerdo con las habilidades que requieren los empleadores canadienses. Desde la implantación de este mecanismo en septiembre de 2009, han sido contratados muy pocos trabajadores mexicanos de baja capacitación para laborar en las industrias de alimentos, lácteos y agrícolas, principalmente. De acuerdo con la Subsecretaría de Empleo y Productividad Laboral de la STPS, tan sólo 1 236 mexicanos trabajaron entre 2009-2017 en el sector secundario y terciario del mercado laboral canadiense, una cifra ridícula. Es indispensable ampliarlo de inmediato, dándole un mayor incentivo y, por supuesto, dándole mayor difusión.
Refugiados mexicanos en Canadá
El mexicano aprovechó el laxo sistema de refugio canadiense como una estrategia para migrar y conseguir empleo. Los mexicanos aventurados a solicitar refugio provenían principalmente de la Ciudad de México y Puebla, así como de Guadalajara y Monterrey. Las ciudades canadienses en donde se concentraron la mayor parte de ellos fueron Toronto y Montreal. Los argumentos que los mexicanos anteponían para ser aceptados iban desde agresiones por homosexualidad hasta amenazas de muerte por el crimen organizado, violencia generada por el narcotráfico y por supuesto inseguridad, entre otras. Asimismo, argumentaban que no calificarían bajo los estándares establecidos en su sistema de puntos para ingresar como inmigrantes, por lo que era muy difícil obtener una visa como trabajadores temporales no agrícolas. A pesar de que de antemano sabían que tenían pocas posibilidades de ser aceptados como refugiados, no perdían la esperanza o buscaban alguna otra alternativa para permanecer. Mientras tanto, mantenían el estatus de solicitante de refugio sin perder los beneficios obtenidos y aprovechaban para trabajar.7 Los rechazados incluso apelaron la decisión emitida por un juez, dado que sabían que el tiempo para dar resolución a su caso les daría un margen para poder permanecer por lo menos un año más. Conforme fue aumentando la migración de refugiados mexicanos se creó una gran red de gestores que vendían caros sus servicios, funcionando como enganchadores (muchos de ellos abogados de origen mexicano). Para demostrar su magnitud, en 2008 se registró un total de 36 856 solicitudes, año cuando México registro un inédito numero de 9 490 solicitudes de refugio, las cuales bajaron en 2009 a partir de la imposición de una visa para ingresar a su territorio (véase la Gráfica 6).
Es importante destacar que, en 2013, el gobierno de Harper designó a México como un país de origen seguro, por lo que automáticamente se eliminó a nuestro país de calificar como peligroso para ser aceptados en calidad de refugiados. Y, precisamente, el incremento extraordinario de peticiones de refugio mexicanas que resultaron ser falsas causó la instauración unilateral y sorpresiva por parte del gobierno canadiense de la imposición de visas a los viajeros provenientes de México a partir de julio del 2009, su socio comercial, la cual causó muchas molestias, irritabilidad y disgustos, y se tensionó la relación con México. La imposición de la visa tuvo repercusiones económicas, como fue la caída drástica del turismo mexicano hacia su país.8 Ello explica la razón por la cual en 2009, se estableció un programa piloto bilateral de trabajadores no agrícolas denominado Mecanismo de Movilidad Laboral, que ya señalé.
En 2013, los mexicanos que solicitaban refugio eran sólo 128, un descenso significativo, pero las peticiones han venido creciendo hasta 3 300 en 2018, como se puede observar en la misma gráfica. Este incremento puede deberse a la política antiinmigrante estadounidense, agudizada durante la administración de Trump que ha atemorizado a muchos migrantes en potencia y algunos han escogido esta opción. Cabe destacar que Canadá considera a Estados Unidos como un safe third country,9 lo que imposibilita a los mexicanos solicitar asilo desde Estados Unidos. Sin embargo, pueden reclamar el estatus de refugiado si se encuentran en Canadá, razón por la cual decenas de miles de solicitantes de asilo han estado cruzando subrepticiamente a Canadá a través de puntos de entrada no oficiales. Éste es el caso de muchos hondureños y haitianos, que migran principalmente a Quebec dado que su lengua es el francés: una vez que se les terminó el temporary protected status por decreto de Donald Trump, 54 739 solicitantes de asilo han cruzado las fronteras en forma irregular y han solicitado refugio (Austen, 2020).
Es importante destacar que una de las promesas electorales de Trudeau fue que Canadá eliminaría el requisito de visa para mexicanos al 1º de diciembre de 2016 y lo cumplió. Esta medida ha tenido como resultado un crecimiento constante de turistas mexicanos a Canadá, ya que para 2019 se calcula que ingresaron aproximadamente 325 000 turistas mexicanos (Statistics Canada, 2019c).
Consideraciones finales
En una sociedad canadiense crecientemente multicultural y diversa étnicamente y, a pesar de los grandes esfuerzos que han realizado múltiples administraciones anteriores por mejorar la integración e inclusión de sus inmigrantes a su sociedad, las excelentes propuestas que ha hecho el primer ministro Justin Trudeau han marcado un cambio de actitud sobre la migración, radicalmente opuestas a las de su antecesor Stephen Harper. Hemos visto cómo la atracción y aceptación de inmigrantes ha crecido sustancialmente, sobre todo provenientes de China e India, la admisión de trabajadores temporales y estudiantes que aumentaron de manera extraordinaria, también provenientes de los mismos países. Esta política de una mayor apertura para la recepción de inmigrantes constituye el pilar de la agenda migratoria de Trudeau.
Como pudimos notar en este artículo, los mexicanos han jugado un papel crecientemente importante en la economía canadiense, más que nada los trabajadores temporales agrícolas, ya que tienen un nicho fuerte en el sector primario. Su participación como inmigrantes, estudiantes y refugiados ha sido muy limitada, si la comparamos con el flujo de mexicanos a Estados Unidos en todas estas categorías y, más aún, si la comparamos con el flujo de asiáticos que inundan anualmente sus mercados laborales; pero podemos afirmar que han venido aumentando paulatinamente, como se puede observar en la Gráfica 6.
El gobierno de México podría llegar a renegociar eventualmente el acuerdo bilateral sobre trabajadores temporales agrícolas. El objetivo principal sería que el trabajador no debería de estar obligado con un solo empleador y se le debe permitir que vaya acompañado de sus familiares, así como regular las condiciones de vulnerabilidad que en ocasiones se presentan. Asimismo, se podría negociar que, después de un tiempo (por ejemplo cinco años) de ser contratado cotidianamente, pueda tener la posibilidad de solicitar la residencia permanente. Es necesario crear mecanismos independientes y eficientes de carácter bilateral para garantizar la protección de los derechos laborales de los trabajadores y, en caso de abuso, castigar al empleador de manera eficiente en respuesta a la denuncia. De la misma manera, el gobierno mexicano debe incentivar, ampliar y difundir en forma mucho más dinámica el Mecanismo de Movilidad Laboral para trabajadores no agrícolas.
Los canadienses han estado orgullosos de tener una política abierta hacia la migración, conscientes de que es positiva para su sociedad y economía. Sin embargo, a medida que la economía canadiense se aproxima a una recesión derivada de la terrible pandemia de Covid 19, y miles de ciudadanos e inmigrantes ya se encuentran desempleados, la política migratoria de Trudeau tendrá que modificarse. Los ambiciosos proyectos de Trudeau de recibir hasta trescientos sesenta mil inmigrantes para el 2022, quizá serán trastocados. Así, es posible que ocasione cambios radicales y que el primer ministro Trudeau establezca nuevas pausas y reglas a sus políticas de admisión hacia los inmigrantes, trabajadores temporales, estudiantes y refugiados. Por ahora, las fronteras se encuentran cerradas para extranjeros no residentes, nuevos inmigrantes y estudiantes, con excepción de trabajadores temporales agrícolas.
