Femenino de 48 años, con aumento de volumen en hemicuello derecho de manera progresiva en los últimos seis meses, se palpa masa sólida, no dolorosa, con dimensiones aproximadas de 20 × 15 milímetros, refiriendo sólo periodos de agitación y taquicardias de manera aislada. Se realizó tomografía contrastada de cuello en la que se observó tumoración de carácter hipervascular, localizada a nivel de la bifurcación de la carótida derecha con compromiso del cuerpo carotídeo externo en tercio proximal, clasificado como Shamblin tipo II (tumor adherente que rodea parcialmente los vasos carotídeos y sus tributarias) dentro de la clasificación para tumores del cuerpo carotídeo (Figura 1).
Se realiza de manera prequirúrgica embolización selectiva del tumor. Bajo sedación anestesiológica se efectúa procedimiento con punción en arteria femoral derecha, se coloca introductor Radifocus® Introductor II (5Fr), se procede al avance del catéter angiográfico Optitorque™ Simmons Siderwinder I (4Fr) y guía hidrofílica Therumo® Guide Wire M Standard 0.035” hacia carótida externa derecha. Con la inyección de medio de contraste iodado no-iónico se identifica importante refuerzo tisular del tumor glómico (Figura 2), se aprecian vasos de neoformación dependiente de la arteria faríngea ascendente (Figura 3). Con técnica coaxial se avanza microcatéter Progreat® catéter/guía (2.7 Fr/2.8 Fr) a la arteria faríngea ascendente, corroborando la dependencia vascular del tumor con la inyección de medio de contrataste, se procede a realizar la embolización selectiva empleando microesferas de hidrogel alcohol polivinílico Bead Block® de 500 a 700 µm para posteriormente documentar una adecuada oclusión de los vasos nutricios tumorales con angiografía de control (Figura 4). Veinticuatro horas después se lleva a cabo la cirugía, logrando la resección total del tumor con reducción significativa del sangrado y tiempo quirúrgico, con una evolución satisfactoria.
Los tumores glómicos o paragangliomas son neoplasias de lento crecimiento procedentes del tejido quimiorreceptor, forman parte del sistema neuroendocrino extraadrenal. Estos tumores se clasifican en adrenales (90%, que son feocromocitomas) y extraadrenales (10%), de los cuales 85% son intraabdominales, 12% torácicos y 3-5% en cabeza y cuello. Estos últimos representan menos de 0.5% del total de las neoplasias de cabeza y cuello, pueden localizarse en 60% los casos en cuerpo carotídeo y el resto a nivel del foramen yugular a lo largo del nervio vago y en oído medio.1,2 El tratamiento de elección para este tipo de tumores es la resección quirúrgica tomando en cuenta que pueden llegar a ser malignos de 3 a 13% de los casos y que no existe un mecanismo de tamizaje confiable para su seguimiento.3
La embolización previa al acto quirúrgico tiene una tasa de éxito de 80% (valorada con la reducción del volumen tumoral), teniendo como principales objetivos la disminución del tamaño tumoral y el sangrado quirúrgico, facilitando la técnica de resección con un tiempo quirúrgico más corto. Se deben tener en cuenta también las complicaciones derivadas de este tratamiento de apoyo como las complicaciones menores o esperadas, las cuales hablan del éxito del tratamiento: fiebre, dolor por isquemia y otalgia así como de las complicaciones mayores e indeseadas: trombosis de la arteria carótida interna y la embolización cerebral.1,4