La multifuncionalidad del paisaje sugiere que la agricultura puede ofrecer numerosos productos y servicios ambientales, algunos de los cuales benefician al público sin compensar al productor. Algunos productos no tangibles, incluyen funciones ecológicas de mantenimiento de la biodiversidad, ciclos de nutrientes y captura de carbono, así como funciones culturales de recreación, de patrimonio cultural y de calidad visual (Lovell et al., 2010). Por tanto, desde este enfoque, la productividad general de un sistema agrícola puede ser mejorado mediante la combinación de múltiples funciones en el paisaje, en contraposición a un enfoque limitado por las funciones de producción (Lovell y Johnston, 2008; Jordan y Warner, 2010).
En este sentido, el turismo rural representa el uso multifuncional del espacio (paisaje) y el agroecoturismo puede ser considerado como “la modalidad turística en áreas rurales donde se desarrollan actividades productivas primarias (agropecuarias) con otras de tipo secundarias (artesanales, productos alimenticios, etc.) y terciarias (turismo), así como actividades de conservación de la biodiversidad, a fin de impulsar la cultura y desarrollo local sustentable” (Mikery-Gutiérrez et al., 2013). Sin embargo, identificar el potencial agroecoturístico requiere del análisis de los recursos endógenos del territorio, aunado a la perspectiva local sobre ello. Por lo anterior, el objetivo de esta investigación fue determinar el potencial agroecoturístico de Tepexilotla en función de los recursos endógenos; capital ambiental, sociocultural, productivo y la perspectiva de los residentes respecto a la integración del agroecoturismo a la comunidad.
Se analizó la localidad de Tepexilotla, municipio de Chocamán, perteneciente a la región de las altas montañas del estado de Veracruz, México. La localidad forma parte de la Microrregión de Atención Prioritaria del Colpos, Campus Córdoba, y de trabajo de LPI4, Agronegocios, Agroecoturismo y Arquitectura del paisaje. Tepexilotla se localiza en las coordenadas 18° 58´ latitud norte y 97° 05’ latitud oeste, a una altitud de 1 480 msnm. La investigación se llevó a cabo de febrero de 2012 a abril de 2013. Se realizó consulta de fuentes secundarias sobre el contexto de la comunidad, el municipio y la región. Además, de entrevistas a servidores públicos del Ayuntamiento Municipal de Chocamán e investigadores(as) en el área. Se realizaron entrevistas semiestructuradas a informantes clave de la localidad y recorridos de campo con entrevistas con residentes oportunistas, encontrados al azar. Finalmente se desarrolló un taller de cartografía participativa con un grupo focal de residentes para identificar los elementos predominantes del capital ambiental, sociocultural y productivo a nivel espacial en la comunidad.
Se realizaron entrevistas semiestructuradas a informantes clave sobre el interés hacia el desarrollo del agroecoturismo, la disponibilidad, e intenciones de involucramiento de los pobladores, el comportamiento de los visitantes, recursos naturales que aprecian los residentes y el trabajo previo de la localidad en el ámbito turístico. Se realizaron recorridos por los sitios que los pobladores identificaron con atractivo turístico y se georreferenciaron. Se acompañaron de una referencia fotográfica y descripción de la ruta o sitio. Finalmente se identificaron a nivel espacial los sitios y rutas que el grupo de residentes consideró de interés turístico. Se utilizaron imágenes satelitales de Google Earth® a escala municipal y local impresas en tamaño doble carta y a color, así como la visualización directa de la comunidad en los talleres de Cartografía Participativa. Todos los elementos identificados a nivel espacial se digitalizaron en el software QuantumGIS®.
Respecto al capital ambiental, se encontró que la hidrografía comprende corrientes de agua permanente de los ríos Metlac, Texalapa y Tliapia. Los dos primeros delimitan el área que ocupa la localidad de Tepexilotla, la cual que representa 155.39 ha. Los ecosistemas representativos son el bosque mesófilo de montaña y bosque de pino encino, éste último distribuido hacia una de las vertientes del Pico de Orizaba, Veracruz. El clima es templado húmedo con una temperatura media de 19 ºC y precipitación media anual de 2 100 mm. La vegetación predominante es la perteneciente al ecosistema bosque mesófilo de montaña, localizándose relictos conservados hacia las partes más altas de la comunidad. El estrato arbóreo superior se encuentra compuesto principalmente por especies de Clethra mexicana, Liquidambar styraciflua, Platanus mexicana, Ulmus mexicana, Meliosma alba, Ostrya virginiana, Carpinus caroliniana, Croton draco y Podocarpus matudae, así como por árboles de menor talla como: Alnus acuminata, Alnus jorullensis, Juglans regia, Olea europea, Chamaedorea oreophila y Persea schiedeana.
El estrato arbustivo cuenta con especies como: Acacia angustissima, Leucaena macrophylla, Equisetum arvense, Yucca elephantipes y Citrus medica. Mientras que el estrato herbáceo se caracteriza por bromelias, orquídeas, helechos, líquenes, musgo, pteridofitas y fanerógamas, como Antrophyum lineatum, Nephelea mexicana, Osmunda regalis, Dryopteris Wallichiana, Pitcairnia heterophylla, Vriesea duvaliana, Tillandsia spp., Coelia macrostachya, Elleanthus cynarocephalus, Epidendrum longipetalum y Epidendrum raniferum. Esta zona representa áreas perturbadas o sitios con estrato arbóreo pobre o muy espaciado, en las que predominan las pteridofitas de los géneros Pityrogramma, Pteridium, Sticherus y Thelypteris. Con relación al Bosque de Pino-encino, se caracteriza por las especies Quercus xalapensis, Quercus germana Pinus montezumae, Pinus pseudostrobus, Abelia floribunda, Bouvardia multiflora, Digitaria leucites, Festuca amplissima y Tillandsia lampropoda. En general, este tipo de vegetación debido a su asociación con el bosque mesófilo de montaña, comparte algunas de las especies en los estratos medios y bajos, e incluso otras del dosel superior, como ocurre con Carpinus caroliniana, Liquidambar macrophylla y Clethra mexicana, entre otras.
La fauna se caracteriza por el tigrillo, gato montés, tepezcuintle, conejo, zorrillo, ardilla, tlacuache, ratón tlacuache, onzilla, mapache, tuza, liebre y armadillo, así como de lagartijas, tlaconetes, murciélagos y las culebras lagartijera, petatilla, falsa coralillo y de agua. Las aves características son la primavera, jilguero, gavilán, pepe, pico de canoa y codorniz, además del chupamirto, cenzontle, paloma, pichón, carpintero, tecolote, lechuza, clarín, tordo, garza, sonaja, aguililla, zopilote, chivicoyo y chachalaca. Dada la diversidad de relieves, vegetación, fauna y actividades que se desarrollan en la localidad, le confiere paisajes que son altamente valorados por los residentes y determinan que el capital ambiental sea considerado, desde esta perspectiva, con el potencial más alto para atraer turistas y la principal motivación de los visitantes para acudir a este sitio. Esto se fundamenta en estudios de otros autores(as) (Iațu et al., 2010; Iatu y Bulai, 2011), donde los territorios montañosos, cuerpos de agua, zonas verdes o protegidas, constituyen atractivos primordiales para trasladarse desde las grandes ciudades, motivando a su vez el desarrollo de actividades turísticas en áreas rurales.
Como capital social, Tepexilotla cuenta con 135 habitantes en grado de marginación y rezago social alto, no tiene una población predominantemente indígena (INEGI, 2011). De estos habitantes, se ha conformado un grupo con siete representantes de familia que conforman el núcleo responsable para ofertar servicios turísticos y algunos productos a los visitantes, que acuden principalmente en días de asueto. Ellos se han denominado como grupo agroecoturístico “Cuevas del Rey Man” y por lo general, varios miembros de la familia suelen participar en la oferta de productos, principalmente en Semana Santa, cuando el número de visitantes oscila entre las 200 y 400 personas (Vázquez, 2012 Com. Pers.). Además, los miembros más jóvenes de la familia se consideran con mayor capacidad para ser guías de senderos. Desde la perspectiva de los residentes, Tepexilotla posee cualidades para el desarrollo del turismo como una actividad complementaria a sus actividades productivas, además, de que involucra a los distintos miembros de la familia.
La tenencia de la tierra es de tipo propiedad privada, y orientada principalmente a actividades agrícolas y pecuarias. La población se ha concentrado en dos áreas que comprende el acceso principal desde Tetla y el área donde termina el camino principal de terracería que se denomina Carrizal. Como capital cultural, destaca que el área ocupada por la localidad comprende una zona arqueológica en donde existen vestigios prehispánicos de las culturas Olmeca, Mexica y Nonoalca (proveniente del Altiplano mexicano). En el cerro denominado Chocamán viejo, ubicado en esta área, se conservan vestigios de las construcciones del imperio del Rey Man, el cual gobernó esta región hasta la llegada de los españoles (Plan Municipal de Desarrollo de Chocamán 2008-2010). De acuerdo al proceso histórico del municipio, los primeros pobladores llegaron a la región durante el periodo preclásico, de origen Totonaco, con influencia de otras culturas como la Olmeca y la Teotihuacana. Se conservan costumbres gastronómicas y las principales festividades son las dedicadas a eventos religiosos como el viacrucis en semana santa y torneos deportivos.
La principal actividad económica proviene del cultivo de café, frijol, chile y maíz. Además, de limonaria en parches del bosque o del cafetal, la cual se comercializa como follaje para arreglos florales. Algunos pobladores crían borregos y vacas. El jefe de la familia suele migrar en temporadas, para trabajar en la industria y complementar sus ingresos. Las mujeres se dedican al hogar y participan en el corte de café y la venta de algunos frutos (aguacate, calabaza y chile). Algunos hogares crían gallinas, cerdos y borregos en el solar, así como hortalizas para consumo familiar. También se está incursionando en el cultivo de la trucha. Esto le confiere diversidad de paisajes a la comunidad para ser desarrollados como productos agroecoturísticos, tal como se ha realizado en otros espacios agropecuarios (Veeck et al., 2006; Barbieri et al., 2008).
A través del estudio endógeno se identificaron 26 atractivos con potencial turístico, distribuidos entre diferentes elementos turísticos y categorías (Cuadro 1). Desde la perspectiva de los residentes, los ríos Metlác y Texalapa, la vegetación, los cerros, la tranquilidad y contemplación del paisaje fueron considerados los recursos de mayor atractivo para los visitantes y las cuevas, los sitios arqueológicos y la gastronomía fueron considerados como elementos que podrían atraer también la visita. Por tanto, la perspectiva de los residentes sobre la recepción de visitantes es positiva y esto es un elemento primordial para el desarrollo del turismo en la localidad, ya que no todas las comunidades aceptan fácilmente personas foráneas en su territorio (Yagüe, 2002).
Elemento | Categoría | Nombre del atractivo | Tipo |
Senderismo | Sitios naturales y manifestaciones culturales históricas | Cerro Chocamán viejo, Chocamán viejo-Piedra del león, Chocamán viejo-Cueva del asalto, Piedra del conejo y La pirámide | Montaña, lugares históricos, ruinas y sitios arqueológicos |
Sitios naturales | Cueva de los murciélagos y Sendero de los charales | Observación de flora y fauna | |
Contemplación del paisaje | Sitios naturales | Campo de la ribera del río Metlác, Ribera del río Texalapa, Cascada del río Texalapa, Cerro de Chocamán viejo y Cerro de los tepejilotes | Observación de flora y fauna |
Gastronomía | Folklore | Platillos y productos con cultivos propios, Café criollo molido | Comidas y bebidas típicas |
Prácticas deportivas | Acontecimientos programados | Torneo de futbol, pesca de trucha, escalada de cerros, cabalgata y espeleoturismo | Deportivo Fenómenos espeleológicos |
Estancias | Alojamiento | Área de acampado campo y área de acampado ribera del río | Camping |
Productos y servicios varios | Realizaciones técnicas y científicas | Venta de orquídeas y bromelias cultivadas, Venta de peces de ornato y trucha | Explotaciones ornamental y piscícola |
Aunque un grupo de residentes identificó potencial agroecoturístico de la localidad como elemento clave para el desarrollo de la comunidad, lo cual coincide con otros estudios (Evans y Ilbery, 1989), que se requiere más información sobre las necesidades y preferencias de los visitantes que arriban a la localidad. Esto, para la generación de estrategias de mercado que posicione un producto turístico exitoso, de gran aceptación y sustentable (Oppermann, 1996; McGehee, 2007).
Por lo anterior, Tepexilotla posee cualidades ambientales, socioculturales y productivas que junto a la percepción que tienen los residentes de su entorno, hace compatible el desarrollo de actividades y servicios agroecoturísticos.
Conclusiones
Con base en los recursos endógenos de la comunidad de Tepexilotla su potencial agroecoturístico es alto. Sin embargo, se debe considerar la perspectiva y preferencia del visitante sobre las cualidades de dichos recursos endógenos y el proveer servicios y rutas agroecoturísticas de importancia desde la perspectiva de los residentes y preferencia de los visitantes. Esto permite un análisis integrado de las diferentes dimensiones y elementos que integran los recursos endógenos y exógenos asociados a identificar el potencial agroecoturismo de una localidad rural como Tepexilotla.