INTRODUCCIÓN
Neospora caninum es un parásito protozoo intracelular obligado, perteneciente al phylum Apicomplexa, familia Sarcocystidae, morfológicamente similar a Toxoplasma gondii, y está relacionado taxonómicamente a otros protozoos formadores de quistes como Hammondia heydorni e Isospora bigemina. Mediante microscopía electrónica se reconocen organelas características de ese phylum como por ejemplo, micronemas, roptrias y gránulos densos1. Neospora caninum es uno de los parásitos más importantes que causan abortos bovinos alrededor del mundo, pero a pesar del impacto económico que ocasiona se conoce poco sobre este parásito2.
La transmisión de N. caninum se realiza mediante dos importantes formas, la transmisión vertical que puede ocurrir a través del ciclo exógeno y endógeno, y la transmisión horizontal, la cual solo ocurre por medio del ciclo exógeno, donde el bovino debe ingerir alimento o agua contaminados con ooquistes esporulados del parásito, que excreta el perro, principal portador definitivo de N. caninum3. Varios estudios demuestran que la infección puede transmitirse verticalmente de la madre al ternero, siendo esta vía epidemiológicamente muy importante, lo cual explicaría el comportamiento enzoótico de la enfermedad en los hatos ganaderos4.
Diversos estudios sobre neosporosis bovina en Colombia, han demostrado la presencia del parásito en los hatos lecheros, relacionando éste, posiblemente con la presencia de abortos, causando grandes pérdidas económicas en las explotaciones de bovinos productores de leche, así como aumento de los costos indirectos asociados al diagnóstico veterinario, repetición de la inseminación, pérdidas de producción láctea y los costos de reemplazo por descarte de vacas5,6. Los abortos frecuentes se convierten en el principal problema de las ganaderías lecheras presentándose de forma esporádica, endémica o epidémica con origen infeccioso o no infeccioso, por lo que resulta difícil determinar el agente causal7. Dentro de estos agentes se encuentra Neospora caninum, un protozoo intracelular obligado que ha estado relacionado con la presencia de abortos, tanto en países desarrollados como países latinoamericanos incluyendo México, Brasil, Chile, Paraguay y Argentina8.
Dentro de los problemas que se pueden presentar en un hato lechero infectado con N. caninum están muerte fetal temprana con repetición de celo, incremento del intervalo entre partos, concepción o infertilidad, aborto en el tercio medio de la gestación, muerte perinatal o neonatal o incremento en el deshecho de vacas. Las vacas infectadas tienen más probabilidad de ser descartadas por bajo desempeño reproductivo9.
El departamento de Boyacá posee varios municipios con una importante producción láctea, en los cuales se presentan numerosos abortos, motivo por el cual, se hace necesario determinar la prevalencia de anticuerpos contra este protozoo en un municipio de gran importancia lechera, con el fin de identificar las variables reproductivas que se encuentran relacionadas con la presencia de N. caninum.
MATERIAL Y MÉTODOS
Área de estudio
El estudio se llevó a cabo en el municipio de Sotaquirá, que está situado en el Departamento de Boyacá, Provincia del Centro, en las coordenadas 5º 46’ 52” N, 73º 15’ O del meridiano de Greenwich y 0o 49’ 25” de Longitud con relación al meridiano de Bogotá. Limita por el este con el municipio de Tuta, por el norte con el municipio de Paipa, por el oeste con el municipio de Gambita y por el sur con el municipio de Combita. Su extensión total es de 288.65 km2, el área urbana abarca 0.1 km2, el área rural consta de 288.55 km2. Presenta temperatura anual promedio de 14 °C, con 2,860 msnm. La explotación ganadera ocupa el 37 % del área agropecuaria del municipio, equivalente a 10,582 ha aproximadamente, de las cuales 7,150 contienen pastos mejorados y 3,432 ha cultivadas con pastos naturales, concluyendo que el 67.5 % de la actividad se desarrolla a través de una explotación intensiva y el 32.5 % extensiva; para el 2014 se contaba con una población de 13,464 cabezas bovinas10.
Animales y tamaño de la muestra
Se calculó el tamaño de muestra para los bovinos mediante la ecuación descrita por Pourhoseingholi et al11, donde: N= 13,464 bovinos, Za =1.96 a un nivel de confianza del 95%, e= 5%, margen de error admitido, P= 50%, prevalencia esperada, esto debido a que, en Sotaquirá no se conocen estudios relacionados de seroprevalencia de N. caninum en bovinos. El tamaño de muestra calculada fue de 374 animales, sin embargo se recolectaron aleatoriamente 1,000 muestras procedentes de 67 hatos ubicados en Sotaquirá, realizando un muestreo mínimo de animales por explotaciones de bovinos productores de leche.
Mediante la aplicación de una encuesta al momento de recolección de las muestras, se tomaron datos de raza, edad y estado reproductivo de los animales. Así mismo, se obtuvieron de los registros de las fincas los datos de variables reproductivas, como gestante, no gestante, abortos, distocias, inseminación artificial, muerte embrionaria, repetición de celos y monta natural, con el fin de identificar las variables relacionadas con la presentación de N. caninum.
En cuanto a la edad, se dividieron en tres grupos de la siguiente manera: animales 2-3 años, 3-4 años y >4 años.
Las muestras se obtuvieron a partir de venopunción coccígea utilizando tubos Vacutainer, que por ser un sistema cerrado presta mayor garantía en cuanto asepsia y preservación de las muestras. El tubo que contenía la sangre sin anticoagulante se centrifugó a 1,500 rpm durante 10 min para separar el suero. Luego con una pipeta Pasteur se separó el suero y se transfirió a un tubo de almacenamiento para la realización de las pruebas12.
Las muestras se procesaron bajo la técnica de ELISA indirecta en el Laboratorio de parasitología de la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia, utilizando el kit comercial para Neospora caninum Ingezim R.12.NC.K1 (Ingenasa S.A) y se siguió el protocolo del fabricante. Este kit comercial refiere una sensibilidad 99.4 % y especificidad del 100 %.
El estudio fue descriptivo de corte transversal, el diseño del muestreo fue aleatorio simple, observando la frecuencia con que se presentaron anticuerpos contra el protozoo. Para el análisis del estudio, se utilizó el paquete estadístico SPSS 18.
RESULTADOS
Después de haber analizado las muestras de suero bovino se encontró una seropositividad del 45 % (450/1000) de anticuerpos contra de N. caninum (Figura 1).
Se realizó la prueba de Ji cuadrada de asociación-independencia para determinar si existía relación entre la presencia de anticuerpos contra N. caninum y las diferentes variables reproductivas (Cuadro 1). No se encontró relación significativa entre N. canimun y la presencia de aborto en las hembras (P=0.856) (Figura 2).
Se encontró una relación significativa entre N. caninum y la presentación de distocias (P=0.039), así mismo, se encontró diferencia para los intervalos de edad establecidos (P=0.005) (Figura 3).
No se encontró relación significativa entre la presencia de anticuerpos contra N. caninum e inseminación artificial (P=0.171). En animales en los que se usa inseminación artificial la presencia de anticuerpos fue del 42.9 %, mientras en los animales que no usaron inseminación artificial fue del 47.4 %. De igual forma, no se encontró relación significativa entre N. caninum y muerte embrionaria (P=0.124).
Para la variable raza, la prueba indicó que si hay por lo menos un valor observado que es diferente al esperado (P=0.001). Se presentó un 14.8 % de bovinos raza Holstein con presencia de anticuerpos contra Neospora caninum y un 12.2 % de bovinos raza Ayrshare, con un menor número de casos de las razas Normando (10 %) y Jersey (8 %) (Figura 4).
No se encontró asociación significativa entre las hembras que presentaron anticuerpos contra a Neospora caninum y repetición de celo (P=0.087), presentación de terneros débiles al nacer (P=0.856), ni monta directa con toro (P=0.094).
DISCUSIÓN
Existen numerosos reportes sobre infecciones por Neospora caninum en la especie bovina, en la mayoría de los casos utilizando medios de diagnóstico serológicos, en los cuales se reporta una prevalencia a nivel mundial que oscila desde 2.5 al 80.0 % 4,6,13-16. A pesar de esto, en Colombia son escasos los reportes acerca de la presencia del parásito en ganadería de leche y su relación con variables reproductivas en los hatos.
La presencia de anticuerpos encontrada en esta investigación fue del 45 %, cercana a la encontrada en la provincia de Sugamuxi en Boyacá, de 57.7 %17. Este resultado es superior al encontrado por Motta et al18 quienes realizaron un estudio en el departamento del Caquetá, en hatos bovinos y bubalinos, obteniendo una prevalencia de 12.5 % y 45.4 % respectivamente. La prevalencia del presente estudio sigue siendo mayor a las obtenidas en Córdoba6 cuya prevalencia fue de 10.2 %; de 34.6 %5, y baja respecto al estudio realizado por Peña et al19, en el Valle del Cesar, donde se encontró una seroprevalencia del 68 %.
Trabajos realizados acerca de la presencia de anticuerpos contra a N. caninum mediante diagnóstico serológico en otros países, reportan datos como es el caso de Venezuela con 20.6 %20, Ecuador con 19.5 %21, México con prevalencias entre 30 y 44 %4,22, siendo esta última cercana a la obtenida en este estudio.
A pesar de que la neosporosis está relacionada estrechamente con fallas reproductivas, los resultados encontrados no mostraron una asociación entre N. caninum y aborto; sin embargo, el 19 % de las hembras bovinas fueron positivas a anticuerpos contra N. caninum donde según los registros habían presentado aborto en algún momento del año; las hembras infectadas con neospora tienen aproximadamente 1.03 veces más probabilidad de sufrir aborto que las hembras sin la presencia de anticuerpos. Lo anterior, indica que este parásito puede infectar los bovinos pero no ser la causa directa del aborto, teniendo en cuenta que existen otros agentes etiológicos que también producen abortos4.
Se encontró que el 23 % de las hembras no presentaron anticuerpos contra el parásito pero registraron abortos, lo cual sugiere que dichos animales no estarían libres de la infección con N. caninum, ya que vacas negativas han abortado fetos infectados con el parásito, detectados mediante PCR23; también puede ser el resultado de animales no expuestos al parásito o animales expuestos al parásito en un tiempo pasado, pero sin anticuerpos. Sin embargo, no se puede establecer una clara relación entre la infección y el aborto únicamente con una prueba serológica, ya que ésta solo puede revelar la exposición al agente sin diferenciar infecciones viejas o recientes24.
No obstante, sí se encontró una asociación entre animales positivos y la presentación de distocia en un 16.6 % de las hembras bovinas de Sotaquirá, resultado consistente con un estudio realizado en Canadá, donde se diagnosticó distocia en un 22.5 %. Este diagnóstico fue hecho a partir de historia clínica y lesiones tales como congestión y edema de cuello y cabeza, manchas de meconio en el cuerpo, contusiones y fracturas o costillas magulladas en terneros25.
Un estudio comparativo de la seroprevalencia de N. caninum realizado entre cuatro países: Suecia, Alemania, España y Países Bajos, encontró una prevalencia del parásito en ganado de leche del 16, 49, 63 y 76 % respectivamente26; estos estudios demostraron que la mayor prevalencia del parásito se registra en ganado de leche, existiendo diferencias regionales en la distribución del N. caninum según variables climáticas, manejo de los sistemas de producción y cantidad de perros presentes en los hatos, siendo solo algunas de las distintas posibilidades de transmisión de la enfermedad27.
Al analizar los datos referentes a la edad en animales positivos a N. caninum se puede evidenciar que en todos los grupos etarios analizados hay presencia del parásito; sin embargo, la edad con mayor número de animales infectados corresponde a las hembras de 3-4 años con un 29.8 %, sin dejar de ser importante la prevalencia encontrada en el grupo >4 años, esto debido a que el riesgo de ser seropositivo incrementa con la edad según Bartels et al26, indicando la alta probabilidad de transmisión horizontal. Lo anterior puede deberse a la exposición postnatal de los bovinos con fuentes contaminadas por ooquistes esporulados del parásito20. Al respecto, algunas investigaciones indican que la edad no parece comportarse como un factor de riesgo asociado a la neosporosis28,29,30, en cuyo caso se sugiere que las infecciones son predominantemente transmitidas por vía transplacentaria, pudiendo aumentar de esta manera la proporción de animales infectados dentro de los hatos31.
No se encontró una asociación significativa ente las hembras positivas a N. caninum y la presentación de muerte embrionaria; esto se debe posiblemente a que las causas de aborto bovino y muertes embrionarias son difíciles de determinar por diversas razones, ya que cualquier perturbación puede provocar aborto y alteración en la fisiología normal de la gestación, por lo tanto, otras causas como agentes infecciosos, toxinas, desequilibrio hormonal, vacunación, nutrición deficiente, alteraciones cromosómicas y factores físicos, pueden producir aborto y muerte embrionaria24.
La prevalencia en cuanto a la raza bovina depende del país, región y tipo de prueba serológica utilizada, llegándose a determinar en algunos rebaños de vacas lecheras sobre el 87 % de seropositividad32. Durante la investigación se evidenció una mayor presentación del parásito en hembras de raza Holstein, con 14.8 %. Los resultados coinciden parcialmente con los obtenidos por investigadores brasileños, quienes encontraron que hembras bovinas Holstein tienen 2.13 veces más oportunidad de ser seropositivas a N. caninum que las de razas cebú o mestizas16,33.
En condiciones de repetición de celo no se encontró una relación significativa en hembras positivas a N. caninum, esto coincide con un trabajo realizado en Brasil34. Diferente de otro estudio en el que se demostró que las vacas seropositivas requieren un mayor número de inseminaciones por concepción que las vacas seronegativas35.
Durante el estudio no se encontró relación entre terneros que nacieron débiles y hembras seropositivas al parásito. Sin embargo, se conoce que tenernos infectados con N. caninum pueden nacer con signos neurológicos, peso bajo e incapaces de levantarse. El examen neurológico puede revelar ataxia, disminución del reflejo patelar y pérdida de la propiocepción36.
En cuanto al método de reproducción por monta natural o inseminación artificial, no se encontró una relación significativa entre estos y la presentación del parásito; sin embargo, DNA de N. caninum se ha encontrado en el esperma de los toros expuestos de forma natural, y aunque teóricamente es posible, la transmisión venérea a través del esperma contaminado se considera poco probable1.
Entre las posibles causas que contribuyen a la prevalencia del 45 %, se puede destacar que en la mayoría de las explotaciones bovinas donde se muestrearon los animales, los protocolos sanitarios pueden llegar a ser insuficientes, pues sólo se vacuna contra las enfermedades consideradas de notificación obligatoria a nivel nacional (brucelosis bovina y fiebre aftosa); tampoco hay establecidos planes de desparasitación constantes, que permitan mantener el control de parásitos internos y externos. La alimentación es por pastoreo, lo que hace posible que existan ooquistes esporulados depositados en el pasto hace mucho tiempo por otros animales infectados.
Otro factor determinante para que se encontrara esta presencia de anticuerpos contra N. caninum en el municipio de Sotaquirá, tiene que ver con la presencia de caninos en la mayoría de las fincas, donde es normal que estos deambulen por los potreros donde pastan las vacas, e incluso es muy común que estos estén presentes a la hora del ordeño, resaltando que estos animales son la fuente primaria de infección de los bovinos, representando un factor de riesgo muy importante dado que los caninos expulsan los ooquistes del parásito en sus heces, facilitando la transmisión horizontal de la neosporosis37.
CONCLUSIONES E IMPLICACIONES
La seropositividad de anticuerpos contra Neospora caninum encontrada en vacas lecheras del municipio de Sotaquirá, Boyacá (45 %), fue elevada si se tiene en cuenta los datos de seroprevalencia que reporta la literatura en otras regiones del país. Las variables asociadas con la seropositividad fueron la presencia de distocia en el parto, el intervalo de edad (3-4 años) y la raza de los bovinos (Holstein), mientras que las variables de presencia de aborto, inseminación artificial, muerte embrionaria, repetición de celo, presentación de terneros débiles al nacer y monta directa con toro, no presentaron relación con la seropositividad de los bovinos.