Introducción
En el ganado lechero las patologías uterinas posparto alargan el periodo del parto al primer servicio, disminuyen la tasa de gestación en el primer servicio, alargan el periodo del parto a la primera ovulación, están asociadas con pérdidas embrionarias y aumentan el porcentaje de vacas eliminadas del hato1-3. Dentro de las patologías uterinas posparto están la retención de las membranas fetales, metritis puerperal, metritis, endometritis y endometritis subclínica. Esta última afecta entre 20 y 40 % de las vacas, reduce la tasa de gestación en el primer servicio y aumenta el porcentaje de pérdidas embrionarias y fetales4-6.
La endometritis subclínica se define como la inflamación del endometrio sin signos externos de enfermedad4. Así, al ser una condición que pasa desapercibida, las vacas afectadas terminan su periodo voluntario de espera y se integran a los programas de inseminación. Debido a la dificultad para establecer un diagnóstico de la endometritis subclínica con base en algún indicador externo, el diagnóstico se fundamenta en la presencia de polimorfo nucleares (PMN) en muestras de células endometriales obtenidas mediante lavados uterinos o por medio de la recolección de células con un cepillo endocervical de uso humano (técnica de Cytobrush)6-8.
La variación de la prevalencia de endometritis subclínica está asociada con las características de los hatos, con los días posparto en que se hace el diagnóstico y con el punto de corte de la proporción de PMN de las muestras. La prevalencia en todos los estudios fluctúa entre 20 y 40 % e influye negativamente en la tasa de gestación, particularmente en el primer servicio7,9,10. En México se desconoce la prevalencia de endometritis subclínica, su efecto en la tasa de gestación y sus factores de riesgo. Dada la similitud en los sistemas de producción intensiva de leche en bovinos a nivel global, se podría asumir que en México la prevalencia de endometritis subclínica y su efecto en la fertilidad serían similares a lo publicado en otros países, lo cual es probable; sin embargo, la prevalencia de enfermedades reproductivas es diferente entre países y regiones, por tanto es deseable generar referencias nacionales que permitan tener datos objetivos de los problemas que enfrentan los productores de leche, y que sirvan para dirigir la investigación científica que se hace en las universidades en instituciones especializadas. Por tanto, el objetivo del presente estudio fue determinar la prevalencia de endometritis subclínica en vacas lecheras en manejo intensivo y su efecto en la tasa de gestación. Se hipotetizó que la endometritis subclínica afecta a una proporción significativa de las vacas lecheras de hatos de la región central de México y provoca menor tasa de gestación en el primer servicio.
Material y métodos
Manejo de los hatos
El estudio se realizó en el Complejo Lechero de Tizayuca, Hgo., localizado en el altiplano central de México. El clima de la región es templado subhúmedo, con una temperatura anual promedio de 15.5 °C y una precipitación pluvial media anual de 861 mm. Se utilizaron vacas de 16 establos de manejo similar. Los animales estuvieron en estabulación en corrales con cubículos de libre acceso, la alimentación consistió en una ración totalmente mezclada, balanceada de acuerdo con las recomendaciones del NRC11. La producción de leche promedio por vaca fue entre 8,000 y 9,000 kg por lactación.
La revisión reproductiva para el diagnóstico y tratamiento de las patologías del puerperio se realizó en los primeros 10 días posparto, y se aplicaron los tratamientos farmacológicos específicos para cada caso. Las vacas se diagnosticaron sanas (vacas limpias) cuando por vía transrectal se apreciaba que el útero estaba involucionado y no se observaron secreciones vaginales anormales. El periodo voluntario de espera fue de 50 días. Las vacas se identificaron en estro mediante la observación de la aceptación de la monta y se inseminaron por un mismo técnico bajo el programa am-pm/pm-am. El semen fue de toros de fertilidad probada, seleccionados de acuerdo con los programas de mejoramiento genético de cada hato.
Diseño del estudio
El manejo de los animales durante el experimento fue aprobado por el Consejo Académico del Posgrado en Ciencias de la Producción y de la Salud Animal de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Entre los días 35 y 45 posparto se seleccionaron 237 vacas de diferente número de parto, las cuales estaban clínicamente sanas, su útero estaba totalmente involucionado y no mostraron secreciones vaginales anormales visibles después de palparlas por vía transrectal. Se obtuvieron muestras para citologías uterinas mediante la técnica de Cytobrush; el Cytobrush es un cepillo endocervical de uso humano, el cual se introdujo hasta la curvatura mayor del cuerno uterino mediante la técnica descrita por Plöntzke et al8 y modificada por Madoz et al6. Después de retirarlo, se hizo un frotis en un portaobjetos, el cual se fijó en inmersión en alcohol durante 60 min. Las laminillas se tiñeron mediante la técnica Diff Quick. Se contaron, mediante microscopía 200 células endometriales y se obtuvo la proporción de PMN.
El punto de corte del porcentaje de PMN que correspondió con una disminución de la eficiencia reproductiva fue obtenido mediante el análisis de la curva ROC12, para lo cual se utilizó el paquete estadístico y de gráficos SigmaPlot 1013. La curva ROC (relative operating characteristics) es la representación de la razón de verdaderos positivos (VPR) frente a la razón de falsos positivos (FPR), según se varía el umbral de discriminación (valor a partir del cual decidimos que un caso es un positivo). Se graficó la sensibilidad y la especificidad para cada porcentaje de PMN posible en una curva ROC con la mediana de 128 días de IPC (días de vaca vacía) en un grupo de 100 vacas, y se determinó como umbral para clasificar a una vaca con endometritis subclínica cuando se encontraron ≥ 6 % de PMN (área bajo la curva = 0.56; error estándar= 0.06; IC del 95 %=0.44-0.68; P= 0.03)6,7.
Análisis estadístico
El efecto de la endometritis subclínica en la tasa de gestación al primer servicio y en la tasa acumulada de gestaciones en el día 120 posparto, así como los factores de riesgo como el número de partos (primíparas y multíparas) y el tipo de puerperio [normal o patológico (vacas que padecieron cualquiera de las siguientes condiciones: retención placentaria, metritis o secreción purulenta por vagina)] se analizaron mediante regresión logística. Los días del parto al primer servicio se compararon por análisis de varianza14.
Resultados
La curva ROC identificó como punto de corte a ≥6 % PMN (Figura 1). Utilizando el punto de corte obtenido con la curva ROC, la prevalencia de endometritis subclínica fue de 43 % (103/237). Los días del parto al primer servicio fueron similares (P>0.05) entre las vacas con endometritis subclínica (65.7 ± 1.9) y en las vacas normales (63.9 ± 1.6). Las vacas con endometritis subclínica tuvieron menor tasa de gestación al primer servicio y menor tasa de gestación acumulada en el día 120 posparto en comparación con las vacas normales (Cuadro 1). Las vacas con antecedentes de puerperio patológico tuvieron mayor probabilidad de padecer endometritis subclínica (60 vs 36 %; puerperio patológico y normal, respectivamente; razón de probabilidad 2.69; P<0.05). El número de partos y el hato no influyeron en la prevalencia de endometritis subclínica (P>0.10).
Discusión
Este trabajo representa el primer estudio sobre la prevalencia de endometritis subclínica en ganado lechero en México. En concordancia con la hipótesis de trabajo planteada, 43 % de las vacas diagnosticadas sanas después de su manejo clínico posparto, tuvieron endometritis subclínica, con una disminución en la eficiencia reproductiva. Dicho parámetro está dentro de los rangos publicados en otros estudios5-7,15. Un dato interesante del presente trabajo es que el tipo de animales muestreados fueron todas las vacas independientemente de su tipo de puerperio; así, se incluyeron vacas que padecieron retención placentaria, metritis y endometritis, mismas que se agruparon en el análisis como vacas con puerperio patológico. Es relevante, también, el tiempo posparto en que se realizó el diagnóstico; en el presente estudio se realizó entre los días 35 y 45 posparto, tiempo en que regularmente ya se completó la involución uterina y la vaca ya eliminó los procesos infecciosos, ya sea basada en sus propios mecanismos de defensa o favorecida por el tratamiento antimicrobiano. Cabe señalar que la prevalencia de endometritis subclínica tiende a ser menor entre más lejos esté la vaca del parto16, por tanto este dato indica que en los hatos estudiados, el problema de la endometritis subclínica tiene una prevalencia alta, ya que aproximadamente la mitad de las vacas (43 %) tuvo un proceso inflamatorio en el endometrio muy cerca del final del periodo voluntario de espera (50 días).
En el presente estudio no se determinaron los agentes infecciosos involucrados en el proceso; sin embargo, en otros trabajos el aislamiento de los agentes infecciosos involucrados ha arrojado resultados variables y no siempre se han aislado bacterias6, pero la bacteria aislada con mayor frecuencia es Trueperella pyogenes17,18.
Se observó mayor probabilidad de padecer endometritis subclínica en las vacas con antecedentes de puerperio patológico; esta observación es congruente, ya que los procesos inflamatorios en el endometrio dejan secuelas; además, cuando hay daño en el endometrio hay mayor producción de citoquinas y, en consecuencia, mayor migración de PMN19. Viendo a la endometritis subclínica desde una perspectiva práctica, la estrategia para disminuir su prevalencia consiste en disminuir la incidencia de patologías del puerperio y, aunque la etiología de estas patologías es multifactorial, una constante que determina en gran medida la evolución de las vacas durante el puerperio son los cambios metabólicos ocasionados por la pérdida de condición corporal posparto. Las vacas más susceptibles a las patologías uterinas posparto son las que pierden mayor condición corporal después del parto9,20,21.
Cabe señalar que la endometritis subclínica no es una patología exclusiva del ganado lechero, sino también se ha diagnosticado en bovinos en sistemas de producción de carne22,23. Ricci et al23 encontraron en vacas Piamontesas 31 % de prevalencia y un efecto negativo en el intervalo parto a la concepción. En ganado encastado Cebú-Holstein en pastoreo también se observan prevalencias de 26 a 30 % y afectación de la fertilidad24,25.
En el presente estudio tanto la tasa de gestación en el primer servicio como la tasa de gestación acumulada en el día 120 posparto, fueron menores en las vacas con endometritis subclínica. Este dato es congruente con la mayoría de los estudios; aunque en algunos trabajos no encontraron efecto en la fertilidad6,8,26, en la mayoría de estudios sí se han observado consecuencias negativas en la tasa de gestación en el primer servicio y un aumento del periodo del parto a la concepción7,14,17. Se han propuesto diversos mecanismos por los cuales la endometritis subclínica afecta la tasa de gestación. Sheldon et al3, mencionan que el proceso inflamatorio del endometrio altera el transporte espermático y del embrión, y el proceso de implantación. Asimismo, las endotoxinas y prostaglandinas liberadas durante el proceso inflamatorio afectarían el desarrollo temprano del embrión27-29; observaron también que las vacas con endometritis subclínica tienen menores concentraciones de estradiol en los folículos ováricos, lo cual presumen afectaría la competencia del ovocito. Un dato interesante es el incremento de muerte embrionaria o fetal en vacas a las cuales se les diagnosticó endometritis subclínica en el día 46 posparto; en estas vacas además de mostrar menor tasa de gestación en el primer servicio, tuvieron alta incidencia de pérdidas de gestaciones (9.6 vs 43.9 %; vacas normales y con endometritis subclínica, respectivamente) entre los días 32 y 60 después de la inseminación5. Así, cualquiera de estos factores o la combinación de ellos pudo determinar la baja tasa de gestación en el primer servicio observada en el presente estudio. La diferencia observada en la tasa de gestación acumulada en día 120 pudo ser consecuencia de persistencia de la endometritis subclínica, ya que en algunas vacas persiste el proceso inflamatorio5; además, existen efectos residuales de las patologías uterinas posparto en el aparato reproductor que afectan la probabilidad de gestación en los servicios subsiguientes30.
Conclusiones e implicaciones
Se concluye que la prevalencia de endometritis subclínica en vacas lecheras de la región central de México es del 43 % entre los días 35 y 45 posparto, lo cual disminuyó 11.4 % la tasa de gestación en el primer servicio y 13.7 % la tasa acumulada de gestaciones en el día 120 posparto. Este es el primer estudio en el cual se determina la prevalencia de endometritis subclínica en México y su efecto en la tasa de gestación. El crecimiento de los hatos lecheros observado en los últimos 25 años ha dificultado el examen clínico reproductivo posparto y la administración oportuna de tratamientos. De acuerdo con los resultados del presente estudio, es probable que una causa importante de la baja fertilidad observada en las vacas lecheras tenga su origen en la salud uterina. Por tanto, es necesario realizar estudios para desarrollar técnicas de diagnóstico de endometritis subclínica más sencillas y evaluar tratamientos para mitigar su impacto en la eficiencia reproductiva.