SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.2 número5¿Puede ser considerada la pedagogía crítica como una teoría general de la educación?Guía de fuentes de información iberoamericana para la investigación educativa índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

Links relacionados

  • No hay artículos similaresSimilares en SciELO

Compartir


Revista iberoamericana de educación superior

versión On-line ISSN 2007-2872

Rev. iberoam. educ. super vol.2 no.5 Ciudad de México sep. 2011

 

Contornos

 

La preparación para la culminación de estudios de Contabilidad y Finanzas de la SUM, Cabaiguán, Cuba

 

A preparação para o encerramento dos estudos em Contabilidade e Finanças da SUM,  Cabaiguán, Cuba

 

Preparation for Finalizing Studies in Accounting and Finances in the SUM, Cabaiguán, Cuba

 

Tamara Jiménez-Padilla*, Beatriz Díaz-Rodríguez** y Omaira-Silvia Catalá-Concepción***

 

* Licenciada en Educación con especialidad en Español-Literatura, obtenido en el Instituto Superior Pedagógico Capitán Silverio Blanco Núñez; Máster en Ciencias de la Educación, por la Universidad José Martí, Sancti Spíritus, Cuba. Jefa del Departamento de Humanidades de la Filial Universitaria Municipal de Cabaiguán, Cuba. Temas de investigación: enseñanza del español en secundaria básica, diagnóstico de la enseñanza media, el pensamiento pedagógico de José Martí, formación de valores, metodología para la formación humanística. tamarajimenez@suss.co.cu

** Licenciatura en Contabilidad y Finanzas obtenido en el Centro Universitario José Martí. Profesora tiempo parcial en la carrera Contabilidad y Finanzas de la Filial Universitaria Municipal de Cabaiguán. Temas de investigación: continuidad y culminación de estudios, contabilidad y finanzas en la universalización, análisis económico y financiero de la universidad.economia@eetcab.co.cu

*** Licenciada en Educación con especialidad en Educación laboral, por el Instituto Superior Pedagógico Félix Varela, Santa Clara, Cuba. Máster en Ciencias, por el Instituto Superior Pedagógico Capitán Silverio Blanco Núñez. Jefa del Departamento de Ciencias Básicas y profesora de la carrera de Contabilidad y Finanzas de la Filial Universitaria Municipal de Cabaiguán. Temas de investigación: continuidad y culminación de estudios, el pensamiento pedagógico de José Martí, tecnologías de la información y la comunicación aplicadas a la educación.omairasilvia@suss.co.cu

 

Recibido: 10/11/10.
Aprobado: 10/5/11.

 

Resumen

El trabajo consiste en la aplicación de acciones dirigidas a la organización, desarrollo y evaluación del proceso de preparación de los estudiantes de la carrera Contabilidad y Finanzas de la Sede Universitaria Municipal de Cabaiguán (SUM), perteneciente a la Universidad de Sancti Spíritus, Cuba, para los ejercicios de culminación de estudio, logrando con ellas involucrar a todos los factores implicados (profesor, tutor y guía) en la formación del profesional en esta tarea, por medio de los diferentes espacios en los que se prepara al estudiantado desde que inicia su carrera, y no como un proceso terminal; de ahí el carácter sistémico, continuo y sistemático de estas acciones en función de una única línea de trabajo.

Palabras clave: acciones, organización, desarrollo, evaluación, proceso, preparación, culminación de estudios.

 

Resumo

O trabalho consiste na aplicação de ações dirigidas à organização, desenvolvimento e avaliação do processo de preparação dos estudantes da carreira Contabilidade e Finanças da Sede Universitária Municipal de Cabaiguán (SUM), pertencente à Universidade de Sancti Spíritus, Cuba, para os exercícios de fim de estudos, alcançando com elas envolver a todos os fatores implicados (professor, tutor e guia) na formação do profissional nesta tarefa, por meio dos diferentes espaços nos que se prepara aos estudantes desde que iniciam as suas carreiras, e não como um processo terminal; daí o caráter sistêmico, contínuo e sistemático destas ações em função de uma única linha de trabalho.

Palavras chave: ações, organização, desenvolvimento, avaliação, processo, preparação, fim de estudos.

 

Abstract

The work consists of actions targeted at the organization, development and assessment of the training process for students of the professional career: Accounting and Finance at the Municipal University of Cabaiguán (SUM), that belongs to the de Sancti Spíritus University in Cuba, for the culmination exercises. It was thus achieved to involve all factors implied (professors, form master, and guide) in the training of professionals in this field, by means of the different spaces the students are trained in since the beginning of their studies and not as a terminal process; hence the systemic, continuous and systematic features of said actions in a unique line of work.

Key words: actions, organization, development, assessment, process, and culmination of studies.

 

Introducción

En todo modelo pedagógico el problema de la evaluación del aprendizaje constituye uno de los asuntos más polémicos.

En la educación superior cubana, la evaluación se asume como un eslabón, una parte del proceso de formación, caracterizada por un tipo especial de actividad cognoscitiva del estudiante; este concepto ha venido transitando desde un enfoque acumulativo-cuantitativo, propio de etapas anteriores de desarrollo, a uno cualitativo-integrador, centrado en el desempeño del estudiante (Horruitiner, 2006).

La evaluación del aprendizaje en la educación superior, según Horruitiner (2006), tiene un carácter continuo, cualitativo e integrador y debe estar basada fundamentalmente en el desempeño del estudiante durante el proceso de aprendizaje. Se debe desarrollar de manera dinámica, donde el profesor no sólo evalúe, sino que se propicie la participación de los estudiantes mediante la asociación grupal y la autoevaluación, logrando un ambiente comunicativo en este proceso. Puede incluir aspectos teóricos y prácticos, vinculados a ejercicios integradores, así como contenidos de carácter académico, laboral e investigativo.

La evaluación del aprendizaje se estructura de forma frecuente, parcial, final y de culminación de los estudios, en correspondencia con el grado de sistematización de los objetivos por lograr para los estudiantes en cada momento del proceso. Estas formas de conjunto caracterizan a la evaluación como un sistema. Ello ha sido consecuencia del trabajo metodológico-didáctico de los claustros durante todos estos años de perfeccionamiento, con lo cual se ha venido fortaleciendo una cultura de trabajo en esa dirección y se han ido creando las bases para las transformaciones necesarias. Pero este enfoque aún no se asume en todas las carreras con la amplitud y profundidad requerida, por lo que se debe continuar insistiendo en estos aspectos, transformándolos hasta lograr que la evaluación transcurra como un elemento consustancial al desarrollo del proceso, vinculada al desempeño profesional.

Según el autor antes mencionado, el problema está en comprender el verdadero papel de la evaluación en el proceso de formación, la función de ésta no es sólo comprobar la efectividad del proceso, sino que además persigue reorientar el trabajo total o parcial para alcanzar realmente los objetivos trazados al iniciar el proceso; por medio de un sistema de evaluación bien concebido y aplicado se puede conocer la efectividad del proceso de formación, pero cuando esto no es claro, la evaluación se convierte en un juicio final.

La evaluación cumple también funciones educativas e instructivas. Si este sistema está bien concebido, favorece el estudio sistemático, crea hábitos correctos de estudio y constituye la formación integral del estudiante.

Los ejercicios evaluativos integradores constituyen una forma superior de evaluación del estudiante, permiten conocer con mayor precisión su dominio de los modos de actuación profesional y los preparan mucho mejor para su ejercicio de culminación de estudios y para su futura actividad profesional.

Esta temática de evaluación en el proceso de universalización adquiere matices que necesitan ser analizados, sobre todo en lo que respecta a los ejercicios de culminación de estudios. La preparación dirigida a este fin no puede verse como un proceso final, último, requiere programar, organizar un sistema que conlleve a una preparación integral, considerando los modos de actuación.

La universidad, como institución educativa, se encuentra condicionada históricamente, es decir, responde a las exigencias e imperativos de una época determinada. La universidad, a partir de los procesos básicos que se desarrollan en ella, ha de estar dirigida al perfeccionamiento social, a buscar soluciones viables a los acuciantes problemas nacionales, regionales e incluso mundiales.

La universidad se estará proyectando hacia el futuro y cumpliendo su encargo social en la medida en que no se abstraiga de las contingencias histórico-sociales en las que se desenvuelve y las enfrente de manera crítica y constructiva, potencie la investigación científica, cree nuevos conocimientos, diseñe y ponga en práctica los programas que redunden en la mejora de las condiciones sociales, y estime siempre que su función es contribuir a la felicidad del hombre.

La universidad es una institución social que tiene la función de preservar, transmitir y desarrollar la cultura de una sociedad; entendida la cultura como conjunto de ideas y realizaciones de la humanidad, que contempla tanto lo material como lo espiritual, así como los procedimientos para crear, aplicar y transmitir estas ideas en el proceso de la práctica histórico-social (Álvarez de Zayas, 1995).

En las universidades cubanas no sólo se prepara al individuo en el orden teórico y práctico para desempeñarse en determinada profesión, sino que se ofrece una formación que abarca de manera integral el desarrollo de la personalidad de los estudiantes. Cuando se habla de formación integral, se entiende que comprende las dimensiones espiritual (ser), cognitiva (saber), socioafectiva (sentir), técnico-profesional (saber hacer) y comunicativa (saber expresarse). Ésta ha buscado una integración entre el saber, el hacer y el ser, atendiendo así al desarrollo pluridimensional de la personalidad. Junto con los conocimientos propios de determinada especialidad y el saber operar con ellos en la praxis, se ha prestado atención a la formación humanístico-cultural que permita a los educandos el cultivo de su espiritualidad, su desarrollo como seres humanos y su preparación moral.

La universalización, por tanto, está caracterizada por el sistemático proceso de transformaciones de la educación superior, dirigido a la ampliación de posibilidades y oportunidades de acceso a la universidad y a la multiplicación de los conocimientos, con lo cual se contribuye a la formación de una cultura general integral de la población y a un incremento paulatino de los niveles de equidad y de justicia social. La idea es crear una universidad al alcance de todos, sin diferencias de ningún tipo. Universalizar el conocimiento significa crear facilidades sin límites para el estudio de todos los individuos, durante toda la vida, proporcionándole el disfrute personal y la utilización culta del tiempo libre.

¿Por qué el proceso de universalización tiene matices diferentes? Precisamente porque este proceso de la educación superior cubana tiene una importante consecuencia: la potencialización del desarrollo territorial a partir de la creación de las sedes universitarias municipales (SUM) en todos los municipios del país. Esto no sólo significa una ampliación de posibilidades para estudiar una carrera universitaria, sino que además logra el objeto social de toda institución de ese carácter, es decir, generar los conocimientos en las diferentes ramas de la ciencia, asegurar la continua superación y contribuir al desarrollo económico-social del territorio, entre otros. De forma general, ha constituido un espacio importante de realización personal y colectiva, potencia el carácter bidireccional y dialógico del vínculo universidad-territorio, transformándolo en fuente y destino sistemáticos del conocimiento, gracias a la integración de los actores locales (organizaciones políticas). Por tanto, este proceso es parte consustancial de la batalla de ideas que se libra en el país, en su decisión de alcanzar una cultura general integral y de encontrar soluciones concretas para lograr mayor equidad y justicia social (Colectivo de autores, 2006).

Una de estas transformaciones sociales que se comenzó a desarrollar en el país es la batalla por la universalización de los conocimientos, que se reanudó como una fuerza incontenible de acción estratégica con la creación de las SUM en todo el territorio nacional, lo que ha originado nuevas oportunidades y posibilidades a jóvenes procedentes de diferentes programas de la Revolución, incluyendo aquellos que ya habían desistido de convertirse en profesionales y lograr adquirir una cultura general integral que equilibrase su estilo de vida.

Por medio del proceso de la universalización, han sido varias las carreras que se han puesto al servicio de la juventud cubana, debido a la necesidad social que demanda el país. La carrera de Contabilidad y Finanzas es una de ellas, que se oferta con un amplio perfil profesional y garantiza al futuro egresado una fuente de ingreso laboral seguro. Los que estudian esta carrera van adquiriendo conocimientos y habilidades por medio de las diferentes asignaturas que los preparan teóricamente para hacer frente al trabajo social comunitario, brindándoles modos de actuación para la realización de acciones de detección, investigación e intervención social en las comunidades; esto implica el trabajo con grupos étnicos, géneros, territorios, generaciones, la urbanización y el turismo. De ellos se espera una rigurosa formación que les permita una interpretación científica de la realidad y una preparación para coordinar, inducir o sugerir las iniciativas, proyectos o programas de desarrollo, que produzcan cambios oportunos en el ámbito psicosocial y socioeconómico de las comunidades. Por ello, el proceso de universalización no es más que la creación de sedes universitarias en cada municipio del país, brindando la posibilidad de estudiar en el propio territorio, con mayores oportunidades para los que laboran; este tipo de curso es una posibilidad más para el pueblo cubano.

Así, la culminación de estudios en la universalización constituye un proceso nuevo (que inició en 2002), sin experiencias anteriores, por lo que se necesita pensar cómo organizarlo sin que se pierda el fin: formar un profesional competente.

Teniendo en cuenta estas premisas, los directivos de la Facultad de Contabilidad y Finanzas de la sede central (la universidad a la que se adscribe la sede), orientan el proceso de culminación en el año 2009 y explican lo que éste incluye; frente a ello, se preguntan: ¿cómo hacerlo?, ¿cómo lograr que sea un proceso sistémico, sistemático?, no a través de una sola asignatura ni de un solo docente y que no sea sólo al final, cuando llegan al último año. En este sentido, la carrera como estrategia había organizado horarios de consulta para el año académico en que se graduaría el posterior curso escolar, es decir, el ciclo 2007-2008, cuando se encontraban en el quinto año de la carrera, enfatizando la parte técnica. Cuando llega el momento de presentarse a los ejercicios establecidos, los resultados no fueron los esperados, lo que demostró que el intento tardío de prepararlos no fue exitoso, por lo que se requería pensar en una preparación sistemática desde que inician. La práctica pedagógica demuestra que no basta con la preparación aislada de cada asignatura o materia, se requiere o necesita integrar los conocimientos, y esa tarea no sólo la logra el profesor, sino el colectivo de carrera que tiene la misión de formarlos integralmente. Este claustro lo conforman, además, tutores formativos y guías de grupo que tienen la tarea de asesorar a los estudiantes desde el punto de vista integral, por lo que también les corresponde a ellos la implicación en esta ardua tarea, que constituye la formación integradora de los educandos.

Precisamente a partir de tal polémica se determina como problema científico: ¿cómo organizar, desarrollar y evaluar el proceso de preparación de los estudiantes de la carrera de Contabilidad y Finanzas de la Sede Universitaria de Cabaiguán, para los ejercicios de culminación de estudios?

En este sentido se determina como objetivo general: aplicar acciones dirigidas a la organización, desarrollo y evaluación del proceso de preparación de los estudiantes de la carrera de Contabilidad y Finanzas de la Sede Universitaria Municipal de Cabaiguán, para los ejercicios de culminación de estudios.

Para la realización de este trabajo se emplearon métodos en el nivel empírico y en el teórico:

 

Nivel empírico

La observación: permitió constatar en la práctica los problemas existentes en cuanto a la preparación para los ejercicios de culminación de estudio, debido a los diferentes factores implicados desde los disímiles espacios que conforman el proceso de enseñanza-aprendizaje, o sea, cómo se ven implicados, qué trabajo desarrollan dirigido a este fin, y qué lógica se sigue en la preparación de ese futuro profesional.

La encuesta: posibilitó constatar cómo se organiza e instrumenta el trabajo dirigido a la preparación para los ejercicios de culminación de estudios, qué elementos se tienen en cuenta, si se parte de las necesidades del diagnóstico confirmado, qué contemplan esas actividades desarrolladas, la importancia que poseen, si se cohesionan o se planifican de forma aislada (en general, se buscó la manera en que se concibe el trabajo y se ejecuta). Además, sirvió para constatar los resultados alcanzados después de la instrumentación de las acciones (nivel de satisfacción y aceptación, de aprendizaje integrador, motivación ante la forma de llevar a cabo esta preparación, entre otros aspectos).

Análisis de documentos: dirigido a profundizar en la literatura especializada sobre la temática en que se trabaja, con el fin de fundamentar la propuesta de acciones.

Nivel teórico

Análisis-síntesis: se realizó un análisis de los problemas existentes en cuanto a la organización y desarrollo del trabajo para los ejercicios de culminación de estudios, a partir de las regularidades que se evidencian con la aplicación de los instrumentos y, posteriormente, se seleccionaron y sintetizaron las que mayor connotación, relevancia e importancia tuvieron para  la proyección del trabajo.

Inducción-deducción: con la finalidad de establecer generalizaciones en relación con los resultados científicos de la investigación, a partir del análisis particular de los criterios de disímiles autores y de la teoría científica. Además, para determinar los elementos que particularizan a la muestra y el trabajo específico que desarrollan los factores implicados en lo concerniente a este trabajo.

Histórico-lógico: puesto que es imprescindible partir de los antecedentes de la enseñanza universitaria del proceso de universalización, hasta llegar al proceso evaluativo y dentro de este a la culminación de estudios.

Modelación: fue necesario modelar el plan de acciones por desarrollar en el proceso de preparación para la culminación de estudios, buscando las relaciones existentes entre las necesidades que poseen los estudiantes, las posibilidades y potencialidades con que se cuenta para el diseño de la propuesta, según el modelo pedagógico y el personal implicado en esta labor.

Sistémico: ya que el plan de acciones que se propone, requiere de la concepción en forma de sistema, para lograr que la preparación sea vista como un proceso gradual, sistemático, implicando a los diferentes factores (profesores, tutores y guías) en este proceso.

 

Desarrollo

Hoy las necesidades educativas se presentan como una problemática social, debido a la falta de cohesión entre las diferentes influencias que recibe la persona y más aquella que se aleja del contexto laboral e institucional y que no recibe, por tanto, una dirección acertada que lo pertreche sobre todo del conocimiento elemental.

En las instituciones educacionales es donde se establecen las relaciones directas y organizadas entre los participantes del proceso de educación; ellas tienen el encargo social de centralizar y dividir las influencias educativas intencionales que caracterizan sus funciones de carácter profesional y especializado, dentro de la formación de la personalidad. Constituyen comunidades educativas encargadas de impartir la educación sistemática, donde las influencias educativas asumen un carácter ordenado, encaminadas a la preparación del sujeto para el cumplimiento de sus funciones sociales (Blanco, 2003).

La educación es un proceso prolongado. Es constante, sistemático y tiende a la formación y el perfeccionamiento de las cualidades positivas de la personalidad, lo cual es imposible de alcanzar si no se establece como principio ineludible, el carácter ordenado y sistemático de todas las influencias (Savin, 1981).

Cuando se ejercen numerosas influencias educativas, no vinculadas por una dirección educativa común, no se logra el objetivo que se persigue. En ese sentido, se plantea que el éxito de la educación es la actividad única de todas las organizaciones y personas, encaminado hacia un fin (Makarenko, 1979). La falta de esta unidad quebranta el trabajo educativo de las distintas personas y organizaciones (Boldiriev, 1982).

La escuela, y en este sentido la universidad, desempeña un papel para la coordinación de los esfuerzos educativos que deben realizar los diferentes factores sociales; esta actividad debe estar dirigida a que todos los factores trabajen para lograr una conducta social coherente entre el pensar, el sentir y el hacer, aspectos esenciales en la formación del educando. La educación exige la dirección de la actividad, es un proceso organizado y dirigido conscientemente. En este actuar, el tutor y el guía del grupo, ejes integradores importantes, creados con este proceso de formación, tienen como función básica colaborar en aras de la formación integral de estos jóvenes, por lo que su atención, dirección y formación en lo que respecta al desarrollo de habilidades profesionales y comunicativas es fundamental para lograr el profesional al que se aspira.

Por ello, la temática de evaluación en el proceso de universalización adquiere matices que necesitan ser analizados, sobre todo en lo que respecta a los ejercicios de culminación de estudios. La preparación dirigida a este fin no puede verse como un proceso final, último, requiere programar, organizar un sistema que conlleve a prepararlos integralmente, teniendo en cuenta los modos de actuación.

En el Reglamento Docente Metodológico se norma todo el trabajo relacionado con la culminación de estudios, desde el punto de vista estructural. En este sentido se expresa que es un acto académico en el cual el alumno debe demostrar el cumplimiento de los objetivos fundamentales de su Plan de Estudios y satisfacer las competencias profesionales básicas que debe haber desarrollado el futuro egresado, según el perfil del profesional de la carrera que cursa (Ministerio de Educación Superior, Resolución 210, 2007).

El estudiante, en correspondencia con lo fijado por la Comisión Nacional de la Carrera en el Plan de Estudios, puede culminar éstos con un examen estatal o con un trabajo de diploma, atendiendo a su índice académico e integralidad.

Lo concerniente a la culminación de estudios y sus formas está normado en el Reglamento de Trabajo Docente Metodológico de la Educación Superior, documento que ha constituido la bibliografía básica para la elaboración de este artículo. En la educación superior están establecidos los diferentes tipos de evaluación: evaluación frecuente, prueba parcial, examen final, trabajo de curso, y ejercicios de culminación de estudios como cierre en la formación del profesional.

En el reglamento antes mencionado, se hace referencia a las exigencias que lleva este proceso de culminación de estudios, pero no basta con conocerlo sólo desde el punto de vista organizativo, se requiere ir más allá, buscar cómo lograr que el mismo sea visto como proceso y no como un acto final. Para ello es necesario dotar a los estudiantes de capacidades intelectuales que les permitan vencer los desafíos de la sociedad en que viven y alcanzar un desarrollo sostenible, y ello sólo es posible con una sólida preparación desde los primeros años de la carrera que cursan.

Uno de los retos mayores de la universalización en su nueva etapa es lograr la permanencia y la culminación de estudios de los alumnos, que en su gran mayoría estudian y trabajan, puesto que este proceso fue creado fundamentalmente para trabajadores (llamado curso para trabajadores o curso por encuentro). En sus inicios contempló a personas que no estaban vinculadas al trabajo, se logró incorporar al estudio a un grupo de jóvenes que por disímiles causas se encontraban desvinculados de estos dos contextos (estudio y trabajo), y se les fue incorporando con el apoyo de diferentes organizaciones al trabajo.

Es importante señalar que en el tránsito de los estudiantes por el plan de estudios se tienen en cuenta desde el inicio de la carrera hasta su culminación, dos elementos esenciales:

• El dominio de la lengua materna.

• El desarrollo de la capacidad de autoaprendizaje.

El primero, para asegurar una adecuada comunicación de los estudiantes, tanto oral como escrita, al cursar cada una de las tareas docentes previstas. El segundo, porque el diseño del modelo prevé que el estudiante sea capaz de estudiar con independencia y creatividad, lo que supone un elevado desarrollo de la capacidad de gestionar sus propios conocimientos, pero con una guía acertada.

Existen dos formas de culminar estudios en la educación superior: examen estatal (oral y/o escrito) y trabajo de diploma (tesis). La realización del examen estatal se basa en un programa elaborado por la Comisión Nacional de Carrera, en correspondencia con los objetivos del modelo del profesional. El procedimiento para su realización depende de las características y requerimientos de la carrera de que se trate, donde el alumno demuestre los objetivos generales de la carrera a partir de ejercicios relacionados con los modos de actuación de la profesión, comprobados por medio de la solución de un problema profesional que evidencie el dominio por parte del estudiante de los modos de actuación de esa profesión. Igualmente deberán ser evaluados otros aspectos, tales como la precisión en el manejo de un lenguaje correcto, la forma adecuada de la exposición, la independencia en el razonamiento, y la seguridad para argumentar y defender sus puntos de vista.

El trabajo de diploma consiste en la solución de un problema de la profesión con independencia y creatividad, utilizando la metodología de la investigación, demostrando además dominio de los objetivos generales de la carrera, donde el estudiante también demostrará las habilidades comunicativas adquiridas.

Hasta aquí se ha hecho referencia a lo que está instituido en cuanto a la culminación de estudios, o sea, en qué consiste y cómo se desarrolla. Sin embargo, no existe constancia en la literatura revisada de cómo proceder ante este proceso tan importante y definitorio para el estudiantado, de ahí que se proponen acciones instrumentadas por la carrera Contabilidad y Finanzas, como experiencia pedagógica de la dirección de ésta, en aras de buscar líneas de trabajo comunes, donde se involucran a todos los factores implicados en esta tarea (profesor-tutor-guía).

Los primeros estudiantes vinculados a este proceso de universalización, fueron los que pertenecían a una fuente de ingreso llamada Curso de Superación Integral para Jóvenes; se le llamó de esta manera porque ingresaron al curso jóvenes que por decisión propia no desearon continuar sus estudios, a pesar de tenerlos garantizados; después de culminar esta enseñanza, solicitaban su carrera e ingresaban a la universidad (SUM). Posteriormente se amplían las posibilidades de ingreso al proceso de universalización y se incorporan todos los que tuviesen el nivel medio vencido, procedentes de disímiles fuentes de ingreso, relacionadas con las entidades donde laboraban (en el caso específico de Contabilidad, la mayoría está insertado en áreas de este perfil); la forma de docencia que se implementa es el encuentro, puesto que esta universidad del territorio funciona o sesiona una vez por semana, para no afectar a los trabajadores; no existe límite de edad. De manera general, éstas son algunas de las características de los estudiantes que ingresan a este proceso de universalización.

Conviene precisar que a raíz de los resultados del primer curso de graduación (año 2009), si bien alentadores en lo que respecta a los que culminaron con trabajo de diploma, el resultado de los insertados o evaluados por medio de un examen estatal no fue el esperado, ya que demostraron limitaciones en lo referente a la integración de los contenidos. Por ello, se organizó el proceso de otra manera con los 175 estudiantes que conformaban la matrícula de la carrera, y se lograron resultados positivos; aún no son los idóneos, ya que el fruto o el verdadero resultado se espera con los estudiantes que han sido preparados desde que inician. Ésta es una forma de ilustrar algunos de los resultados alcanzados a partir de la instrumentación práctica, pero se requiere de varios cursos para la constatación de lo esperado con los alumnos que hoy cursan el tercer año, ya que con ellos comenzó la preparación desde el inicio y con mayor sistematicidad.

 

Resultados

La aplicación de las acciones ha permitido, en primer lugar, organizar el proceso desde el curso 2007-2008, ya que antes no existía una planeación dirigida a este fin (desde los cursos 2003-2004 a 2006-2007), de manera que éste no debe verse como un acto final, sino permanente, continuo, desde el primer año de la carrera, a partir de líneas directrices predeterminadas por todos los factores implicados (profesor-tutor-guía) y por medio de los diferentes espacios que se desarrollan en el proceso docente-educativo. Teniendo en cuenta la implementación de estas acciones, se constatan algunos resultados, tales como un mayor nivel de aceptación de los estudiantes en lo que respecta a la manera de prepararlos; mayor motivación e interés por la preparación recibida desde los diferentes espacios de formación; conocimiento integrado de los contenidos, evidenciado por medio de la aplicación de ejercicios integradores; mejor organización, desarrollo y evaluación de este proceso, en el que se trabaja de forma sistemática en tal sentido, no sólo en los años terminales sino desde que inician, por todos los factores implicados en la formación, desde el encuentro (clase), la actividad tutoral y la grupal por parte del guía, la práctica laboral, hasta el trabajo que desarrollan los líderes científicos con los estudiantes. La instrumentación, además, de una preparación especializada en quinto y sexto años, y el desarrollo de talleres de tesis para los que culminan con trabajo de diploma, los cuales son desarrollados por un docente seleccionado para esa actividad, por sus resultados en la esfera investigativa. El mayor resultado ha sido la cohesión lograda para desarrollar esta labor, se conoce cómo actuar, hacia dónde dirigir la atención, desde la preparación o trabajo de mesa que desarrollan las asignaturas técnicas hasta la función de las diferentes disciplinas, alejada esta planeación de la improvisación y las acciones aisladas. Además, es un proceso que se evalúa de forma sistemática — no cuando el alumno llega al sexto año de la carrera, cuando ya no hay solución—, a partir de técnicas como la autoevalución, heteroevaluación y coevaluación por parte del alumnado, y de esta manera se rediseña el trabajo, en aras de buscar soluciones rápidas, socializadas como colectivo que dirige, desarrolla y evalúa el proceso de preparación. La recopilación de los ejercicios aplicados también le aporta a este accionar un carácter práctico, ya que se hace evidente cómo se ha operado desde el punto de vista técnico.

Considerando el análisis anterior, es preciso señalar que a partir del curso 2007-2008 se comienza a organizar el proceso de preparación para la culminación de estudios, cuando el primer grupo de estudiantes a graduar cursaban el quinto año de la carrera, por lo que los resultados en este curso, año en que se graduaban, fueron desalentadores, pues la preparación que recibieron fue tardía. Los resultados fueron los siguientes: de ocho estudiantes solo aprobaron cuatro (50%); en este caso los aprobados coincidieron con los que culminaron con trabajo de diploma; en el curso 2009-2010, de once estudiantes aprobaron ocho, lo que representa el 72.72 %; de ellos cuatro presentaron trabajo de diploma y cuatro examen estatal. Debe considerarse que estos últimos ya habían recibido la preparación en tres cursos (véase anexo).

Las acciones se concibieron en tres etapas: una de diagnóstico y organización del trabajo a desarrollar, donde se analizó cómo llevar a cabo la preparación, quiénes la desarrollarían y en qué forma se procedería, desde el colectivo de la carrera hasta las asignaturas y disciplinas, y qué le correspondía a cada quien. Se seleccionó el personal que trabajaría según los perfiles elegidos por los estudiantes (contabilidad-auditoría-administración, contabilidad-costo-administración y finanzas-administración). Se determinaron los contenidos por trabajar, según programa nacional, así como los líderes científicos que se ocuparían de asesorar a los estudiantes con trayectoria investigativa, que son los que culminan con trabajo de diploma; se precisó qué actividades desarrollarían tutores y guías, y de manera general se organizó la planeación para las acciones posteriores.

Una segunda etapa de desarrollo, en la que se llevó a la práctica lo planeado a través de los diferentes espacios o actividades desarrolladas en la carrera; esta implementación constituye una forma de organizar el proceso, como línea de trabajo de la carrera, dirigida por tanto a preparar mejor al estudiante, quien recibirá varias influencias, pero bajo actividades elegidas por el colectivo de la carrera. Esto ayuda a la formación del futuro profesional, quien va a retroalimentar conocimientos, integrarlos y acogerse a normas predeterminadas por los especialistas que laboran en la carrera. Por último, la tercera etapa contempla la evaluación y control de lo implementado por medio de controles a clases, actividades tutorales, acciones desarrolladas por el guía, talleres de tesis, asesoramiento por parte de los líderes científicos y por medio de la aplicación de ejercicios, primero dirigidos a cada asignatura técnica de la especialidad y posteriormente con carácter integrador. También se establece el intercambio periódico con los estudiantes para constatar el nivel de satisfacción y motivación, las inquietudes y sugerencias con el proceso de preparación, y se evalúa de forma sistemática el proceso desde el colectivo de carrera, de forma mensual.

 

Acciones implementadas

Objetivo general: organizar, desarrollar y evaluar el proceso de preparación de los estudiantes de la carrera para los ejercicios de culminación de estudios, mediante la cohesión del trabajo por parte de los diferentes factores implicados.

Cuadro 1

 

Metodología para fijar y evaluar los objetivos y las acciones

A partir de la necesidad de  preparar de forma sistemática a los estudiantes para los ejercicios de culminación de estudios, se diseñan e implementan acciones. Esto requiere:

1. Constatación de las necesidades para desarrollar el trabajo.

2. Selección adecuada del personal que participará en la preparación.

3. Planificación de las acciones y espacios donde deben desarrollarse.

4. Las acciones deben satisfacer las necesidades y expectativas de los estudiantes.

5. Proyección de acciones a desarrollar dentro y fuera de las actividades docentes, de manera que abarquen la mayor cantidad de acciones organizativas.

6. Planificación del sistema de preparación del personal y la forma en que se procederá respecto a la preparación del estudiantado.

7. Análisis del cumplimiento de los objetivos trazados por etapas por medio del colectivo de carrera.

 

Conclusiones

1. La preparación para la culminación de estudios como uno de los tipos de formas de evaluación tiene que ser entendido y analizado como un proceso sistemático que requiere de una lógica en su organización, instrumentación y evaluación para poder ser comprendido como proceso.

2. Las acciones implementadas han posibilitado una organización en la dirección y ejecución de este proceso, logrando involucrar a todos los factores, de manera que el estudiante reciba, desde diferentes influencias, una misma preparación dirigida a un fin determinado, mediante líneas directrices predeterminadas.

 

Referencias

Álvarez de Sayas, Carlos (1995), La Universidad como institución social, Santiago de Cuba, Centro de Estudios de Educación Superior "Manuel F. Gran".         [ Links ]

Blanco Pérez, Antonio (2003), Filosofía de la Educación. Selección de lecturas, Editorial Pueblo y Educación.         [ Links ]

Boldiriev, N. I. (1982), Metodología de la organización del trabajo educativo, Ciudad de La Habana, Editorial Pueblo y Educación.         [ Links ]

Colectivo de autores (2006), La nueva universidad cubana y su contribución a la universalización del conocimiento, La Habana, Editorial Félix Varela.         [ Links ]

Horruitinier Silva, Pedro (2006), La universidad cubana: el modelo de formación, La Habana, Editorial Félix Varela.         [ Links ]

Makarenko, A. S. (1979), Metodología para la organización del proceso educativo, La Habana, Ministerio de Educación, Cuba.         [ Links ]

Ministerio de Educación Superior (2007), Reglamento Docente y Metodológico. Resolución Ministerial No.210, República de Cuba.         [ Links ]

Savin, N. V. (1981), Pedagogía, La Habana, Editorial Pueblo y Educación.         [ Links ]

Creative Commons License Todo el contenido de esta revista, excepto dónde está identificado, está bajo una Licencia Creative Commons