Sr Editor:
Respecto al artículo “Percepción de los académicos del rol docente del médico”1, creemos que es una exploración valiosa que nos permite conocer, en su contexto, la falta de valoración de la actividad docente. Al igual que los autores se coincide en la necesidad de implementar estrategias educativas que permitan el desenvolvimiento académico apropiado con miras al reconocimiento docente.
Por tal motivo, se propone la implementación de una estrategia metodológica en forma de investigación que resalte la misión de encaminar a los docentes a desarrollar nuevos conocimientos. Montoya3 define la docencia en forma de investigación como el proceso de producción de nuevos conocimientos, quiere decir que la función informativa debe ser realizada por el propio estudiante en forma de búsqueda personal, siendo orientada y dirigida por el docente.
Dicho método requiere docentes dotados de los instrumentos y actitud del investigador, al mismo tiempo el docente se vuelve también investigador enseñando a buscar nuevas estrategias de aprendizaje. Pues, no puede ser docente investigador quien no sabe indagar y no posee los métodos ni la virtud de observación y reflexión que es necesaria para una buena docencia en forma de investigación2.
Para que este plan docente tenga éxito es conveniente un docente dedicado a su labor académica y a una constante planificación de trabajos y comunicación de experiencias entre sus compañeros3. Para desarrollar, como observan los autores, una formación crítica y reflexiva, relacionada a la calidad de la docencia impartida1.
Por lo tanto, se apoya la propuesta de fortalecer la mentoría de los académicos, con estímulos que fortalezcan al docente para que pueda convertirse en un modelo de reflexión para los estudiantes1. Así que es fundamental reforzar la importancia de la investigación en el ejercicio de la docencia universitaria, acción que permitirá cambiar nuestra comunidad educativa y sobre todo la percepción de los académicos sobre el rol docente.