Introducción
La convivencia, socialización y comunicación han evolucionado por el uso de las Tecnología de la Información (Buelga y Chóliz, 2013), su uso, variedad y accesibilidad ha propiciado un nuevo tipo de violencia a través de la internet (Rice, Petering., Rhoades, Winetrobe, Goldbach, Plant y Kordic, 2015), el ciberacoso, fenómeno que se entiende como la utilización de medios tecnológicos para intimidar y maltratar (Patchin y Hinduja, 2015; Giumetti y Kowalski, 2016), con la repetición de conductas agresivas, la elaboración de contenidos en redes sociales de forma permanente, con la intención de dañar y molestar a la víctima (Gálvez-Nieto, Vera-Bachman, Cerda y Díaz, 2016; Garaigordobil y Martínez-Valderrey, 2016).
El ciberacoso se realiza de forma directa o indirecta mediante insultos, violación de la intimidad, persecución, hostigamiento, suplantación de la identidad, manipulación de contenido, piratería denigración y la exclusión (Buelga, Postigo, Martínez-Ferrer, Cava, Ortega-Barón, 2020; Kowalski, Limber y Agatson, 2010; Kowalski, Giumetti, Schroeder y Lattanner, 2014 ); en la víctima genera sentimientos de no poder escapar de la situación (Durán y Martínez-Pecino, 2015),vulnerabilidad e indefensión por el anonimato del agresor (Lucas-Molina, Pérez-Albéniz y Giménez-Dasí, 2016) y un desequilibrio de poder entre los implicados (Monelos, Mendiri, y García-Fuentes, 2015); la falta de control sobre la situación propicia un efecto devastador en la víctima, sumándosele la amplia audiencia de las redes sociales (Ortega-Barón, Buelga y Cava, 2016) y un conjunto de observadores que no generan empatía con la víctima (Garaigordobil, 2020).
Respecto a los factores individuales, el autoconcepto es una variable relevante del ajuste psicosocial y de la salud mental (García, Musitu y Veiga, 2006). En la adolescencia tardía tiene una consolidación de la personalidad en sus dimensiones académicas, sociales, emocionales, físicas y familiares articulada a los proyectos de vida que empiezan a gestarse en la juventud; un joven bien ajustado con un buen autoconcepto no se implica en conductas agresivas en la red social (Cañas, Estévez, Marzo y Piqueras, 2019; Castro, Vargas, Mora y Agulló-Tomás, 2019), tampoco en un papel pasivo y de cibervíctima. A su vez el autoconcepto se acompaña de una autoestima global con autoaprecio y valía positiva, con valoración de las cualidades y recursos personales y de los demás. A su vez, la satisfacción con la vida (Iranzo, Ortega-Barón, Carrascosa y Clemente, 2019; Cañas et al., 2019; Povedano, Estévez, Martínez y Monreal, 2012) y la autoestima global (Povedano et al., 2012) son recursos que le permite alejarse de las conductas de ciberacoso en la utilización de medios tecnológicos.
Otra variable individual que interviene en el fenómeno del ciberbullying es la depresión, entendida como un estado de ánimo con tristeza, autopercepción negativa, sin disfrute de la vida y problemas de sueño y concentración; los ciberacosadores presentan mayores puntajes en depresión que los jóvenes no implicados en estas prácticas (Cañas et al., 2019; Redondo, Luzardo-Briceño, García-Lizarazo e Inglés, 2017; Povedano et al., 2012).
Respecto a los factores sociales, los adolescentes implicados en el rol de ciberacosadores se encuentran implicados en actitudes de transgresión a la autoridad, comportamientos delictivos (Ortega-Barón, Buelga, Cava y Torralba, 2017; Ortega-Barón, Buelga, Carrascosa y Cava, 2016; Buelga, Iranzo, Cava y Torralba, 2015), comportamientos antisociales, impulsividad y agresión en la escuela (Álvarez-García, Núñez, García y Barreiro-Collazo, 2018); la transgresión a las figuras de autoridad en los jóvenes promueve la desinhibición facilitando las conductas violentas en los espacios virtuales (Romero, Martínez, Musitu, León, Villarreal y Callejas, 2019; Udris, 2014), de ahí que en un contexto global, flexible y con incertidumbre, las dinámicas disruptivas favorecen las prácticas de riesgo de los adolescentes (Navarro y Pastor, 2018), acompañado de menores recursos personales y conductas prosociales (Gómez, Romera y Ortega, 2017).
En la contextualización del ciberacoso, el estudio se planteó como objetivos:
1) Examinar en qué medida se relaciona el ciberacoso con las variables individuales (autoconcepto, autoestima, satisfacción con la vida y sintomatología depresiva) y las variables sociales (la actitud positiva hacia la autoridad institucional y hacia la transgresión de las normas sociales).
2) Analizar las posibles divergencias entre los grupos (ocasionales, severo y sin ciberacoso) y las variables individuales y sociales.
3) Puntualizar el valor predictivo de las variables individuales y sociales respecto del ciberacoso.
Desarrollo
Método
Participantes
La muestra estuvo conformada por 662 jóvenes universitarios de segundo semestre, representativa de las tres divisiones del Centro Universitario de la Costa: 282 hombres (42.5%) y 380 mujeres (57.5%), el rango de edad comprendió entre los 18 y 25 años, con la media total de 19.41 años (DT= 2.43). El estudio es de alcance explicativo y con un diseño transversal.
Procedimiento
A los jóvenes se aplicaron instrumentos y se les informaron los objetivos del estudio con participación voluntaria y anónima. Se respetó los principios fundamentales incluidos en la Declaración Helsinki referentes a los valores éticos en la investigación con seres humanos, consentimiento informado, derecho a la información, protección de datos personales, garantías de confidencialidad, no discriminación, gratuidad y posibilidad de abandonar el estudio en cualquiera de sus fases.
Instrumentos de evaluación
En la Tabla 1 “Instrumentos de medición” se sintetizan las escalas utilizadas en el presente estudio.
Escala | Autores | Mide | Alfa de Cronbach |
---|---|---|---|
1. Agresiones a través del Teléfono móvil y de Internet CYB-AG | Buelga y Pons (2012) | El índice general de ciberacoso en internet. | .85 |
2. Depresión -CESD- | Radloff, (1977) | La sintomatología asociada a la depresión. | .72 |
3. Autoconcepto Forma 5 -AF-5- | García y Musitu (1999) | Autoconcepto académico, social, emocional, familiar y físico. | .86 |
4. Autoestima Global | Rosenberg,M. (1979) | La autoestima en los sentimientos de autoaprecio y valía personal. | .90 |
5. Satisfacción con la vida | Diener, Emmons, Larsen y Griffin (1985) | El índice general de satisfacción con la vida. | .74 |
6. Actitudes hacia la Autoridad Institucional en Adolescentes AAI-A | Cava, Estévez, Buelga y Musitu (2013) | Las actitudes de los adolescentes hacia las figuras de autoridad e instituciones de autoridad formal, así como hacia las normas sociales. | .67 |
Resultados
El análisis de los datos se realizó en el paquete estadístico SPSS versión 22, analizándose primero las correlaciones de Pearson para determinar la relación entre ciberacoso con todas las variables estudiadas. Se utilizaron las puntuaciones de la escala de ciberacoso a través de internet para clasificar a los jóvenes, conformando tres grupos: no ciberacosadores, ciberacosadores ocasional y ciberacosadores severo; los jóvenes que puntúan una desviación típica arriba de la media se ubican en el grupo de ciberacosadores severos; los que puntúan 1 (nunca) se sitúan en el grupo de no ciberacosadores y los que obtienen los puntajes restantes se asignan al grupo de ciberacosadores ocasional, de acuerdo a los criterios de Marini, Dane, Bosacki y YLC-CURA (2006). Se calculó el MANOVA y ANOVA a partir de los grupos de contraste, para analizar las variables individuales y las variables sociales. Para examinar el valor predictivo de las variables referidas respecto del ciberacoso se realizó el análisis de regresión lineal.
Correlaciones
En la Tabla 2 se presentan las correlaciones entre las variables del estudio, las medias y las desviaciones típicas. Se obtuvieron correlaciones significativas entre ciberacoso y el resto de las variables, menos con el autoconcepto social y emocional. El ciberacoso correlaciona de manera negativa con autoconcepto académico (r= -.175, p<.01), autoconcepto familiar (r= -.190, p<.01), autoconcepto físico (r= -.087, p<.05), satisfacción con la vida (r= -.115, p<.01), autoestima global (r= -.191, p<.01) y actitud positiva hacia la autoridad institucional (r= -.169, p<.01); a su vez correlaciona positivamente con sintomatología depresiva (r=.113, p< .01) y actitud positiva hacia la transgresión de normas sociales (r=.253, p< .01).
1 | 2 | 3 | 4 | 5 | 6 | 7 | 8 | 9 | 10 | 11 | |
1. Ciberacoso | 1 | ||||||||||
2. S. D. | .113** | 1 | |||||||||
3. A. A. | -.175** | -.329** | 1 | ||||||||
4. A. S. | -.061 | -.368** | .367** | 1 | |||||||
5. A. E. | -.005 | -.456** | .265** | .403** | 1 | ||||||
6. A. F. | -.190** | -.492** | .372** | .274** | .297** | 1 | |||||
7. A. Fi. | -.087* | -.380** | .455** | .489** | .387** | .385** | 1 | ||||
8. A. G. | -.191** | -.535** | .461** | .450** | .534** | .454** | .497** | 1 | |||
9. S. V. | -.115** | -.504** | .336** | .345** | .317** | .465** | .398** | .369** | 1 | ||
10. A. P. A. | -.169** | -.258** | .301** | .242** | .082** | .285** | .168** | 1.69** | .289** | 1 | |
11. A. P. T. | .253** | .011 | -.175** | -.044 | .026 | -.116** | .053 | .21 | -.071 | -.178** | 1 |
*p<0,05; **p<0,01.
S. D. = Sintomatología depresiva, A.A.= Autoconcepto académica, A. S.= Autoconcepto social, A. E.= Autoconcepto emocional, A. F.= Autoconcepto familiar, A. Fi.= Autoconcepto físico, A. G.= Autoestima global, S. V.= Satisfacción con la vida, A. P. A. = Actitud positiva hacia la autoridad, y A. P. T.= Actitud positiva hacia la transgresión.
Manova y Anova de los grupos de ciberacoso y las variables individuales y sociales
Posteriormente, se procedió al análisis de varianza, el cual reveló diferencias estadísticamente significativas entre los grupos de ciberacoso con las variables individuales y sociales (˄ = .884, F (20,1306) = 4.15, p< .001, n2 = .060).
El Anova mostró diferencias significativas en sintomatología depresiva (F, (2,661) = 5.23, P<.001, n2= .016), autoconcepto académico (F, (2,661) = 10.61, P<.001, n2= .031), autoconcepto familiar (F, (2,661) = 10.40, P<.001, n2= .031), satisfacción con la vida (F, (2,661) = 4.29, P<.01, n2= .013), autoestima global (F, (2,661)= 6.60, P<.001, n2= .020), actitud positiva hacia la autoridad institucional (F, (2,661) = 10.60, P<.001, n2= .031) y actitud positiva hacia la transgresión de normas sociales (F, (2,661) = 20.00, P<.001, n2= .057).
Así, como se constata en la Tabla 3, las pruebas Bonferroni indicaron que los jóvenes no ciberacosadores obtuvieron las puntuaciones estadísticamente más elevadas en autoconcepto académico, autoconcepto familiar y actitud positiva hacia la autoridad institucional, diferenciándose de los jóvenes con ocasional y severo ciberacoso. En el ámbito de satisfacción con la vida y autoestima global los no ciberacosadores lograron mayor puntaje que los severos y ocasionales, aclarando que estos últimos no presentan diferencias entre sí. Además, los jóvenes con severo ciberacoso mostraron una mayor sintomatología depresiva y actitud positiva hacia la transgresión de normas sociales respecto a los jóvenes del grupo de no ciberacoso y ocasional; A su vez el grupo de no ciberacoso no se diferencia en sintomatología depresiva con el grupo de ciberacoso ocasional. En las variables autoconcepto social, emocional y físico no hay diferencias entre los grupos.
No Ciberacosador | Ciberacosadores ocasionales | Severo Ciberacosador | F | ||||
---|---|---|---|---|---|---|---|
M | (DT) | M | (DT) | M | (DT) | ||
Variables Individuales | |||||||
Sintomatología Depresiva | 2.01b | .51 | 2.09b | .50 | 2.24a | .51 | 5.23*** |
Autoconcepto académico | 3.52a | .66 | 3.39b | .60 | 3.11c | .67 | 10.61*** |
Autoconcepto Social | 3.69 | .74 | 3.64 | .75 | 3.60 | .78 | .52 |
Autoconcepto Emocional | 3.47 | .73 | 3.44 | .78 | 3.53 | .72 | .41 |
Autoconcepto Familiar | 4.37a | .63 | 4.22b | .68 | 3.94c | .80 | 10.40*** |
Autoconcepto Físico | 3.05 | .82 | 3.08 | .80 | 2.89 | .84 | 1.27 |
Autoestima Global | 3.23 a | .52 | 3.13 b | .56 | 2.97 b | .59 | 6.60*** |
Satisfacción con la vida | 3.42 a | .54 | 3.31 b | .57 | 3.22 b | .59 | 4.29* |
Variables Sociales | |||||||
Actitud positiva hacia la autoridad institucional | 2.77a | .46 | 2.67b | .45 | 2.48c | .49 | 10.60*** |
Actitud positiva hacia la transgresión de normas sociales | 1.32c | .47 | 1.46b | .50 | 1.77a | .62 | 20.00*** |
Nota: M=Media; DT=Desviación Típica; F= F de Fisher-Snedecor; F Prueba de Bonferroni. a>b>c
*p<0,05; **p<0,01; ***p<0,001.
Valor predictivo de las variables individuales y sociales en el ciberacosador
Por último, los resultados del análisis de regresión confirmaron el valor predictivo de las variables individuales y sociales del ciberacosador; como se verifica en la Tabla 4, por un lado, las variables individuales explican el 6.3% y las variables sociales el 7.7% del ciberacoso, subrayando que las variables sociales poseen un valor predictivo más alto que las variables individuales.
Variables Predictoras | R2corregida | F | β | P |
Variables Individuales | .063 | 6.59 | ||
Sintomatología Depresiva | .006 | .912 | ||
Autoconcepto académico | -.106 | .019 | ||
Autoconcepto Social | .024 | .608 | ||
Autoconcepto Emocional | .141 | .003 | ||
Autoconcepto Familiar | -.131 | .005 | ||
Autoconcepto Físico | .036 | .457 | ||
Autoestima Global | -.197 | .000 | ||
Satisfacción con la vida | .020 | .684 | ||
Variables Sociales | .077 | 28.94 | ||
Actitud positiva hacia la autoridad institucional | -.128 | .001 | ||
Actitud hacia la transgresión de normas sociales | .231 | .000 |
Nota: R2Correlación múltiple cuadrada; F=F de Fisher- Snedecor; β=Beta; p=α=0,05.
Se constata que la autoestima global (ß= -.197; p=< .001), autoconcepto académico (ß= -.106; p=< .019), autoconcepto emocional (ß= .141; p=< .003), autoconcepto familiar (ß= -.135; p=< .005) y autoconcepto académico (ß= -.106; p=< .019), son variables explicativas estadísticamente significativas; a su vez los factores sintomatología depresiva, satisfacción con la vida, autoconcepto social y autoconcepto físico no son significativas en la dimensión predictiva del ciberacoso.
En cuanto a las variables sociales, se constata que la actitud positiva hacia la transgresión de normas sociales (ß= .231; p=< .001) y la actitud positiva hacia la autoridad institucional (ß=- .128; p=< .001), son variables estadísticamente significativas en la explicación del ciberacoso.
Conclusiones
En el presente trabajo de investigación se planteó el objetivo de analizar las relaciones entre, variables individuales y sociales, y el ciberacoso; los hallazgos permiten confirmar que el ciberacoso se relaciona significativamente con las variables individuales y sociales estudiadas.
Los datos indican que los jóvenes no implicados en el fenómeno de ciberacoso, en comparación con los ocasionales y severos, presentan mejor ajuste en las variables individuales y sociales. En concordancia con Cañas y col. (2019) y Castro y col. (2019), los datos han confirmado que los jóvenes no ciberacosadores tienen una identidad más fortalecida en los ámbitos académicos ya que se integra al trabajo académico de la universidad y se vincula positivamente con los profesores recibiendo un reconocimiento en el ámbito académico.
A la par, se articula al autoconcepto familiar con el reconocimiento de los padres, con la confianza y aceptación que nutre los sentimientos de ser amado y querido por el núcleo primario, fortaleciendo su autoestima global (Povedano et al., 2012) con cualidades positivas, autorespeto y reconocimiento de las personas que lo rodea. Los fortalecimientos de la identidad junto con la autoestima se articulan a la satisfacción con la vida o al bienestar subjetivo que siente el joven al estar contento con lo que le rodea su vida y los aspectos relacionales, pues convive con sus compañeros, amigos y familiares (Iranzo et al., 2019; Cañas et al., 2019; Povedano et al., 2012).
También los resultados indican que la actitud positiva hacia la autoridad institucional es otra variable en la cual destacan el grupo de no ciberacosadores en comparación a los ocasionales y severos; se entiende que desde una perspectiva psicosocial, la fortaleza de las variable individuales se integra a la introyección de las normas y el respeto a las figuras de autoridad, los jóvenes no implicados en el ciberacoso interactúan con un buen ajuste debido a la asimilación de los límites de respeto, a las reglas y normas del mundo y respetando las figuras de autoridad y a los preceptos establecidos para lograr el éxito en la vida, estos datos son coherentes con Ortega-Barón et al., (2017) y Castro et al.,. (2019).
De hecho, los datos confirman que los jóvenes ciberacosadores severos muestran peor ajuste en la variable individuales y sociales que los grupos de ciberacosadores ocasionales y no ciberacosadores. Los severos ciberacosadores interactúan en las redes con comportamientos con amenazas, insultos, mentiras, fomentando miedo, contando secretos, enviando y alterando fotos o videos, pero es su fachada agresiva, en su ser vivencian sintomatología depresiva (Cañas et al., 2019; Redondo et al., 2017; Povedano et al., 2012), con un fastidio subjetivo cargado de tristeza, falta de ánimos, concentración y malestar.
Los severos ciberacosadores son jóvenes que poseen menores recursos psicológicos que los no implicados en el ciberacoso, en las áreas del autoconcepto académico, familiar, autoestima global y satisfacción con la vida, elementos internalizantes que limitan su bienestar subjetivo en su identidad, y que a la hora de interactuar en los elementos internalizantes repercuten en las conductas transgresoras de las normas sociales y figuras de autoridad (Ortega-Barón et al., 2017; Ortega-Barón et al., 2016; Buelga et al., 2015), al saltarse la ley, las reglas, desobedecer a profesores, policías y a la autoridad parental, lo que lo posibilita a involucrarse en conductas disruptivas (Navarro y Pastor, 2018) y antisociales (Álvarez-García et al., 2018), a partir de una desinhibición internalizante que también propicia la violencia en el mundo virtual (Romero et al., 2019; Udris, 2014).
En suma, los datos muestran a las variables sociales con más peso que las variables individuales, pero ambas predicen el ciberacoso; hallazgos que corroboran la importancia de las actitudes positivas hacia la autoridad, el autoconcepto académico, autoconcepto familiar, la autoestima global y la satisfacción con la vida como variables protectoras que se deben tomar en cuenta en los programas de educación para la paz.
Finalmente, este estudio tiene un diseño transversal y correlacional que proporciona observaciones sugerentes y relevantes sobre las variables individuales y sociales que intervienen en el fenómeno del ciberacoso en jóvenes universitarios. Sin embargo, los resultados expuestos deben interpretarse con cautela, un estudio longitudinal con medidas en distintos tiempos ayudaría a la clarificación de las relaciones causales. Pese a estas limitaciones, este trabajo aporta datos novedosos sobre la relación del autoconcepto, autoestima, satisfacción con la vida, sintomatología depresiva y la actitud hacia la autoridad institucional respecto del ciberacoso, que pueden orientar los programas de tutorías y educación para la paz a nivel superior.