Introducción
La colecistitis aguda y otras patologías que requieren drenaje biliar como parte de su tratamiento, históricamente eran tratadas de forma indiscriminada mediante cirugía convencional, sin embargo en algunos pacientes la realización de cirugía implica un aumento considerable en la morbimortalidad secundario a sus características individuales (pacientes oncológicos, pacientes en estado crítico, pacientes inmunosuprimidos o pacientes críticamente enfermos en el contexto de colangitis severa). Técnicas menos invasivas como la CPRE o el drenaje biliar percutáneo han probado ser de utilidad en estos pacientes, y en fechas recientes se ha descrito una nueva técnica prometedora que podría incluso disminuir las complicaciones o ser de utilidad en pacientes con alteraciones anatómicas, esta técnica es la colecistograstrostomía guiada por ultrasonido endoscópico.
Caso clínico
Presentamos el caso de un hombre de 48 años de edad quien con diagnostico de carcinoma hepatocelular EC IV Barcelona C en hígado no cirrótico con infiltración a vesícula biliar quien recibió tratamiento con Lenvatinib sin respuesta. Dos meses después se presentó a urgencias por colecistitis aguda secundaria a progresión de su patología de base, debido a infiltración tumoral e inestabilidad hemodinámica se decidió realizar colecistogastrostomía guiada por ultrasonido endoscópico (Hot-Axios™, Boston Scientific), tras lo cual mostró una respuesta clínica inmediata. (Se presenta el video del procedimiento endoscópico).
Discusión
En nuestra experiencia, podemos corroborar lo reportado en la literatura médica reciente. El éxito clínico y terapéutico de la prótesis fue del 100%, sin ninguna complicación derivada del procedimiento.
Conclusiones
La colecistogastrostomía guiada por ultrasonido endoscópico es una técnica factible, eficaz y segura para pacientes con necesidad de drenaje biliar que no son candidatos a cirugía. Existen estudios comparativos entre drenaje guiado por USE y drenaje percutáneo, demostrando que el USE es un procedimiento que no incrementa el riesgo de complicaciones (infección, sangrado) incluso en población cirrótica. El drenaje por USE debe de ser considerado como una herramienta más en nuestro arsenal terapéutico especialmente en poblaciones de alto riesgo quirúrgico.