Introducción
En el año 2019, en Wuhan, China se originó una nueva enfermedad llamada COVID-19 asociada al virus SARS-CoV-2, causante del síndrome respiratorio agudo grave, caracterizado por contagio directo desarrollando neumonías graves y por su rápida propagación en el mundo se considera pandemia por la Organización Mundial de la Salud (OMS) el 11 de marzo del 2020 1. Según el informe de situación de la OMS del 4 de octubre de 2021, en el mundo se habían reportado 219,446,675 casos confirmados y 4,547,782 muertes.
En México, hasta el 27 de octubre del 2021, se habían notificado 4,014,005 casos confirmados y 300,746 muertes 2, de estos casos 283,122 fueron casos confirmados en personal de la salud incluyendo enfermeras, médicos, dentistas, químicos u otros trabajadores de la salud. La media de edad en los casos fue 37 años y el grupo de edad más afectado fue de 30-34 años, con una mayor prevalencia en el sexo femenino del 62.7 % 3. De los casos totales acumulados en el personal de salud en México de acuerdo a la profesión, para el 25 de octubre del 2021 el 38.9 % correspondió a personal de enfermería, 32 % a otros trabajadores de salud, 25.3 % al personal médico, 2 % químicos y 1.8 % dentistas 3. Reportando 4,517 defunciones confirmadas en el personal de salud, el estado de Nuevo León, México ocupó el séptimo lugar con cerca de 200 defunciones a nivel nacional, donde el 19 % de las defunciones registradas correspondió a personal de enfermería 3.
La alta prevalencia de la enfermedad, el número de casos y muertes en el mundo a causa de una enfermedad relativamente nueva puede llegar a influir de manera negativa en la salud mental del personal de salud. En la actualidad las ciencias de la salud es una de las áreas donde los trabajadores tienen más probabilidades de presentar agotamiento emocional, especialmente el personal de enfermería siendo más vulnerables a desarrollar lo que se conoce como Síndrome de Burnout (SB) 4,5. Lo anterior usualmente se debe a la sobrecarga laboral, largas jornadas de trabajo, riesgo de exposición a enfermedades, factores organizacionales, entre otros, pero estos lograron impactar en gran medida durante una pandemia como lo fue la provocada por la COVID-19, como tal, enfermeras y enfermeros fueron uno de los pilares más importantes de las organizaciones de atención médica durante esta pandemia y cualquier falla tendría consecuencias irreversibles dado su papel fundamental en la atención al paciente en primera línea. Por lo tanto, se debe prestar mucha atención a los factores que pueden provocar un efecto negativo en el desempeño laboral del personal de enfermería que atiende pacientes diagnosticados con COVID-19 6-10.
El SB es una respuesta al estrés laboral crónico que se caracteriza por presentar actitudes y sentimientos negativos en el contexto laboral incluyendo el rol profesional, se considera factor de riesgo laboral por que afecta la calidad de vida, salud mental y puede poner en riesgo la vida del personal de salud, cuyos rasgos principales son el agotamiento emocional, la despersonalización y la disminución del desempeño personal 11. En el año 2000, la OMS reconoció el SB como riesgo laboral por producir comportamientos disfuncionales, mala salud física y mental, estrés, ansiedad, depresión, terminando con situaciones de ausentismo laboral, entre otros problemas 12,13.
Algunos estudios han detectado que alrededor del 76 % de los profesionales de la salud han presentado un alto nivel de agotamiento emocional, despersonalización y una baja tasa de realización personal 13. Además, se han observado asociaciones estadísticamente significativas entre el agotamiento emocional y la edad. De este modo, a medida que la edad aumenta, el puntaje de agotamiento emocional disminuye 14. Sin embargo, en México se ha encontrado que el 62.2 % del personal de salud tanto médicos como enfermero (a)s tienen agotamiento emocional, y despersonalización en 57.8 % y en realización personal un 40 % 15.
A diferencia de otras profesiones, el SB es más notorio en el personal de enfermería porque están más expuestos a factores estresantes como el contacto directo constante con los pacientes, lo que puede conducir al desarrollo de problemas de SB; como la debilidad, el insomnio, los problemas intestinales, los dolores de cabeza, la hostilidad, la irritabilidad y la depresión contribuyendo a la reducción de la calidad de la atención 16,17.
Estos datos se explican porque en las áreas de atención a pacientes con COVID-19, el personal de enfermería realiza el primer contacto con las personas sospechosas de la enfermedad, enfrentándose a la incertidumbre de no saber si la persona es positiva, manifestar tensión emocional, sobrecarga de trabajo, agotamiento físico que puede ser causado por el empeoramiento de la gravedad del paciente, el cuidado de compañeros con riesgo de gravedad y muerte, falta de equipos de protección personal, materiales y recursos profesionales 18. Sumado a esto, existían temores relacionados con la falta de conocimiento sobre el desarrollo clínico y tratamiento de las personas infectadas y la alta posibilidad de contagiar a sus propias familias, amigos y compañeros de trabajo 19.
Por lo tanto, es importante abordar el estudio del SB como un problema social debido a que se trabajó con un alto nivel de exposición a esta enfermedad existiendo diferencias entre poblaciones y pocos estudios en países de ingresos medios como lo es México, esto por largas jornadas de trabajo utilizando equipo de protección personal y un alto nivel de exigencia, aumentando el riesgo de tener personal de enfermería agotados emocionalmente siendo el peor escenario para enfrentar la pandemia 15,20. Este estudio contribuirá a la profesión de enfermería para el desarrollo e incorporación de posibles indicadores que apoyen a la detección temprana del SB y los problemas reales que enfrentan enfermería en el ejercicio profesional, así como la creación de nuevas estrategias y métodos de trabajo que ayuden a disminuir el riesgo de desarrollar SB con la finalidad de mejorar la salud mental del personal de enfermería y, por ende, mejor el cuidado proporcionado a los pacientes. De acuerdo con lo anterior el objetivo del presente estudio fue determinar la asociación del SB con las características sociodemográficas y laborales en los profesionales de enfermería que brindan atención a pacientes con COVID-19.
Metodología
El presente estudio fue de tipo descriptivo transversal buscando la asociación entre el SB y las características sociodemográficas y laborales en los profesionales de enfermería que brindan atención a pacientes con COVID-19. La población de interés estuvo conformada por una muestra de 73 profesionales de enfermería que brindaron atención a pacientes con COVID-19 en el municipio de Sabinas Hidalgo, México de un hospital general de segundo nivel de atención entre los meses de julio a diciembre del año 2021. El muestreo fue no probabilístico tipo censal, se obtuvo una tasa de no respuesta del 8.6 %
Los criterios de inclusión incluyeron profesionales de enfermería que brindaron atención a pacientes con COVID-19 y que tuvieran más de 6 meses de antigüedad laboral, se excluyeron profesionales de enfermería que por motivos personales decidieron no participar en el estudio y/o que hayan dejado incompleta la cédula de recolección de datos.
Se aplicó una cédula de datos sociodemográficos que incluyó la edad, sexo, estado civil y características laborales como el grado de estudio, antigüedad laboral, turno laboral y, el cuestionario Maslach Burnout Inventory (MBI) pretende medir la frecuencia y la intensidad con la que se sufre el burnout, está constituido por 22 ítems con respuesta tipo Likert sobre los sentimientos y actitudes del profesional en su trabajo. Consta de 3 subescalas: a) subescala agotamiento o cansancio emocional, valora la vivencia de estar exhausto emocionalmente por las demandas del trabajo, consta de 9 preguntas (1, 2, 3, 6, 8, 13, 14,16, 20) con puntuación máxima 54 y una mínima de 0, y cuanto mayor es la puntuación en esta subescala mayor es el agotamiento emocional y el nivel de burnout. b) Subescala despersonalización, valora el grado en que cada uno reconoce actitudes frialdad y distanciamiento, está formada por 5 ítems (5, 10, 11, 15, 22) con puntuación máxima de 30 y una mínima de 0, cuanto mayor es la puntuación en esta subescala mayor es la despersonalización y el nivel de burnout. c) Subescala realización personal, evalúa los sentimientos de realización personal en el trabajo, se compone de 8 ítems (4, 7, 9, 12, 17, 18, 19, 21), puntuación máxima 48 y una mínima de 0, y cuanto mayor es la puntuación de esta subescala mayor es la realización personal, en este caso la puntuación es inversa al grado de burnout, esto quiere decir que a menor puntuación más afectado se encuentra el sujeto. Donde altas puntuaciones en las dos primeras subescalas y bajas en la tercera definen el SB. Las tres subescalas tienen una consistencia interna determinada por una medición de Alfa de Cronbach de 0.65 en población mexicana 21, el reportado en este estudio fue de 0.71 considerado aceptable 22.
El estudio fue autorizado por la dirección y el departamento de Enseñanza y Calidad del Hospital seleccionado y los Comités de Ética en Investigación y de Investigación con oficio F-HGSH-INV-005-21, además, el estudio se apegó a lo dispuesto en el reglamento de la Ley General de Salud en Materia de Investigación para la Salud en su Título Segundo Capítulo I, III y V 23. Para la recolección de datos, se invitó a participar al personal a través de una encuesta digital elaborada en Microsoft Forms, previa aceptación voluntaria de participación y lectura del consentimiento informado, respetando el anonimato, se otorgó el link directo a la encuesta para ser contestado fuera de su horario laboral para evitar rechazo en el momento de la aplicación, con una duración aproximada de 30 minutos.
Los datos se analizaron con el Statistical Package for the Social Sciences (SPSS) versión 25. Se utilizó estadística descriptiva e inferencial con prueba Chi cuadrado de Pearson con el fin de examinar la asociación entre las variables de estudio.
Resultados
El 74 % de los participantes correspondió al sexo femenino, las edades comprendidas fueron entre 20 y 36 años, la media de edad fue 26.0 años (Mdn = 25, DE = 4.86). El 53.4 % eran solteros, respecto a las características laborales la mayoría laboraba en turno nocturno (37 %) y el último grado de estudios fue licenciatura (68.5 %), el intervalo de años de antigüedad laboral fue de 6 meses a 3 años con una media de 1.56 años (Mdn = 1.5, DE = 0.71), (Tabla 1).
Tabla 1 Características sociodemográficas y laborales, 2022. (n = 73)
Características sociodemográficas | f | % |
Sexo | ||
Femenino | 54 | 74 |
Masculino | 19 | 26 |
Estado civil | ||
Casado | 22 | 30.1 |
Unión libre | 10 | 13.7 |
Soltero | 39 | 53.4 |
Divorciado | 2 | 2.7 |
Características laborales | ||
Turno laboral | ||
Matutino | 23 | 31.5 |
Vespertino | 14 | 19.2 |
Nocturno | 27 | 37.0 |
Especial | 9 | 12.3 |
Último grado de estudios | ||
Técnico | 21 | 28.8 |
Licenciatura | 50 | 68.5 |
Maestría | 1 | 1.4 |
Doctorado | 1 | 1.4 |
Fuente: Elaboración propia.
El 53.4 % de la muestra de estudio presentó valores altos de agotamiento, el 24.7 % en despersonalización, y el 6.8 % presentó valores bajos de realización personal, (Tabla 2).
Tabla 2 Aspectos del síndrome de burnout (Agotamiento, Despersonalización y Realización personal), 2022. (n = 73)
Aspectos | Bajo | Medio | Alto | |||
f | % | f | % | f | % | |
Agotamiento | 18 | 24.7 | 16 | 21.9 | 39 | 53.4 |
Despersonalización | 35 | 47.9 | 20 | 27.4 | 18 | 24.7 |
Realización personal | 5 | 6.8 | 11 | 15.1 | 57 | 78.1 |
Fuente: Elaboración propia
De acuerdo con la despersonalización, aquellos que se encontraban divorciados y casados presentaron valores más altos, estas diferencias fueron estadísticamente significativas (X2= 11.116, p=0.034). El turno vespertino presentó valores más bajos en realización personal que el resto de los turnos laborales (X2 = 13.425, p=0.037). Las variables sociodemográficas (sexo y edad) y escolaridad no se asociaron estadísticamente significativas con el agotamiento, despersonalización y realización personal (p>0.05).
El 61.6 % de la muestra presentó indicios del SB que van desde un grado bajo hasta un grado alto. Se encontró una prevalencia del 4.1% del SB en grado alto, un 15.1 % en grado moderado, 42.5 % en grado bajo y 38.4 % sin indicios. Las prevalencias con mayor indicio de SB de acuerdo con las características sociodemográficas fueron el sexo masculino con 68.4 %, el estado civil casado (72.7 %) y divorciado (100 %), respecto a las características laborales, el turno con prevalencia más alta fue el vespertino (71.4 %) seguido del nocturno (66.7 %), sin embargo, no se encontró asociación estadísticamente significativa en ninguna de las variables sociodemográficas y laborales con el SB (p>0.05), (Tabla 3).
Tabla 3 Asociación del síndrome de burnout y las características sociodemográficas y laborales de la muestra de estudio, 2022. (n = 73)
Características sociodemográficas y laborales | n | Síndrome de Burnout | X2 (p) | ||||||||||||||
Sin indicios | Indicios bajos | Indicios medios | Indicios altos | Con indicios (Total) | |||||||||||||
f | % | f | % | f | % | f | % | f | % | ||||||||
Sexo | Femenino | 54 | 22 | 40.7 | 21 | 38.9 | 8 | 14.8 | 3 | 5.6 | 32 | 59.3 | 1.99 (.965) | ||||
Masculino | 19 | 6 | 31.6 | 10 | 52.6 | 3 | 15.8 | 0 | 0 | 13 | 68.4 | ||||||
Estado civil | Casado | 22 | 6 | 27.6 | 11 | 50.0 | 4 | 18.2 | 1 | 4.5 | 16 | 72.7 | 15.51 (.078) | ||||
Unión libre | 10 | 5 | 50.0 | 3 | 30.0 | 2 | 20.0 | 0 | 0 | 5 | 50 | ||||||
Soltero | 39 | 17 | 43.6 | 17 | 43.6 | 3 | 7.7 | 2 | 5.1 | 22 | 56.4 | ||||||
Divorciado | 2 | 0 | 0 | 0 | 0 | 2 | 100 | 0 | 0 | 2 | 100 | ||||||
Turno | Matutino | 23 | 11 | 47.8 | 8 | 34.8 | 4 | 17.4 | 0 | 0 | 12 | 52.2 | 5.384 (.558) | ||||
Vespertino | 14 | 4 | 28.6 | 6 | 42.9 | 3 | 21.4 | 1 | 7.1 | 10 | 71.4 | ||||||
Nocturno | 27 | 9 | 33.3 | 14 | 51.9 | 3 | 11.1 | 1 | 3.7 | 18 | 66.7 | ||||||
E Especial | 9 | 4 | 44.4 | 3 | 33.3 | 1 | 11.1 | 1 | 11.1 | 5 | 55.5 | ||||||
Escolaridad | Técnico | 21 | 7 | 33.3 | 13 | 61.9 | 1 | 4.8 | 0 | 0 | 14 | 66.7 | 13.07 (.169) | ||||
Licenciatura | 50 | 21 | 42.0 | 17 | 34.0 | 9 | 18.0 | 3 | 6.0 | 29 | 58 | ||||||
Maestría | 1 | 0 | 0 | 1 | 100 | 0 | 0 | 0 | 0 | 1 | 100 | ||||||
Doctorado | 1 | 0 | 0 | 0 | 0 | 1 | 100 | 0 | 0 | 1 | 100 |
Fuente: Elaboración propia
Discusión
En base al objetivo de determinar la asociación del SB con las características sociodemográficas y laborales en los profesionales de enfermería que brindan atención a pacientes con COVID-19, se obtuvo que la mayor proporción de participantes fueron de sexo femenino, cifra similar en la mayoría de los estudios donde se han reportado entre el 54 y 86 % 24,26-28,31-35 así mismo el estado civil predominante fueron solteros/as, similar a otros estudios donde reportan cifras entre 52 y 78 % 35,36. Esto quizá es debido a que la profesión de enfermería ha estado ligada históricamente desde su nacimiento al género femenino y aún prevalece en mayor cantidad en los profesionales 29, en cuanto al estado civil las similitudes podrían estar ligadas a las características sociodemográficas y personales de los profesionales que participaron en el estudio puesto que la media de edad fue de 26 años así como en los estudios relacionados entre 24 y 36 años 24,26-28,31-37, considerada una edad en la que, en algunos países aún las personas continúan solteros.
Respecto al turno laboral, el turno con mayor participación en el estudio fueron el nocturno y matutino con casi un tercio de la muestra cada uno; los resultados reportados por otros estudios respecto a la prevalencia del profesional de enfermería en los turnos de trabajo fueron variantes 31-37. Posiblemente influyeron factores relacionados con el proceso de muestreo y selección de la muestra, así como de las características propias de cada institución de salud en la distribución del recurso humano en cada turno.
De acuerdo a la escolaridad la mayor cantidad de participantes contaban con grado de estudio de licenciatura, otros estudios reportaron una mayor prevalencia en técnicos en enfermería 35 y especialistas en unidades de cuidados intensivos 32,37. Estas diferencias pueden atribuirse a los criterios de inclusión de cada uno de los estudios, así como también al área de COVID en donde se aplicó el instrumento de medición: urgencias, hospitalización y unidad de cuidados intensivos. Los resultados del presente estudio reportaron una antigüedad laboral de 1.56 años, otro estudio reportó una cifra similar 28, debido a que ambos estudios se realizaron en profesionales de enfermería de recién ingreso para atender la pandemia por COVID-19.
Con respecto a las subescalas del SB (agotamiento, despersonalización y realización personal) en el presente estudio se encontró un agotamiento alto en poco más de la muestra, otros estudios encontraron prevalencias mayores con cifras de 58 a 72.4 % (24,28,35,37 y otras prevalencias menores de 9 a 43 % 27,30,31,32. Esto se debe posiblemente a las exigencias laborales, la creciente carga laboral provocando aumento en labores pendientes e incapacidad o dificultad para realizarlas adecuadamente, así como también a que los estudios que reportaron prevalencias altas se efectuaron en profesionales de enfermería que ejercían su función en áreas críticas como urgencias y unidad de cuidados intensivos donde probablemente las exigencias laborales sean mayores.
El personal de enfermería mostró una despersonalización alta en poco más de una cuarta parte, resultados similares fueron evidenciados en otros estudios donde reportaron cifras de 25 a 38 % 24,27,31,34. Otros estudios reportaron cifras mayores de 50 a 77 % 28,30,35,37. Lo anterior, debido a que al presentarse un agotamiento emocional impacte generando una respuesta negativa, insensible o excesivamente apática frente a las actividades laborales o los mismos pacientes bajo su responsabilidad 20,30.
Respecto a la realización personal alta se presentaron altos porcentajes en casi cuatro cuartos del personal de enfermería, la mayoría de los estudios encontraron prevalencias bajas desde 10 a 50 % 27,28,30,31,34,37. Lo cual indica que la población estudiada evidenció un sentido de autoeficacia, sintiendo apoyo social y de oportunidades en la institución para desarrollarse profesionalmente, de modo que llegan a tener una opinión positiva de ellos mismos 15,32.
La mayor prevalencia de indicios de SB fue en el sexo masculino similar a lo encontrado en otras investigaciones en donde el hombre presentó mayor riesgo de desarrollar ansiedad (20, 30), respecto al sexo no presentó diferencias estadísticas significativas. Es indudable que los estudios demuestran que cuando el trabajo aumenta y exceden la capacidad adaptativa puede producir un desgaste emocional, psicológico y físico, y esto aumenta el riesgo de presentar agotamiento emocional y si adicionamos los factores de riesgo como la heterogeneidad en la mortalidad causada por la COVID-19, donde existen diferencias significativas en función del género, teniendo los hombres un mayor riesgo en comparación con las mujeres y de esta manera presentar una incidencia de SB en el sexo masculino 19,31,32.
No se encontró asociación entre el estado civil y los indicios de SB, otros autores han indicado que los solteros podrían tener mayor probabilidad de presentar niveles más altos de SB y los casados niveles más bajos, sin embargo, los resultados no han sido congruentes 33,38. Quizá las personas casadas tengan una tendencia a ser personas más maduras y estables, con apoyo mutuo entre la pareja, la implicación con la familia podría generar mayor capacidad para afrontar problemas personales y conflictos emocionales 33-37.
Así mismo, en el estudio se encontró que el turno vespertino presento mayor indicio de SB, sin embargo, la literatura señala que el trabajo en el turno nocturno o la rotación constante entre turnos facilita la presencia de este problema 36. El agotamiento y la despersonalización han sido mayores entre el personal que trabajaba de noche 39,40. Probablemente las diferencias se deban a las áreas geográficas donde se realizaron los estudios dado que fueron en distintos países y estados 24,41-43. Las diferencias en cuanto al agotamiento pudieran deberse a las características de la institución donde labora la muestra de estudio, así como a las características en los horarios laborales, áreas de atención (urgencias, hospitalización y cuidados intensivos) y carga de pacientes por enfermera 36,44,45.
Conclusiones
El SB se encontró presente en los profesionales de enfermería que brindaron atención a los pacientes con COVID-19, aunque no se encontró una asociación con las variables sociodemográficas y laborales, el SB presentó una mayor frecuencia en aquellos profesionales de sexo masculino, profesionales divorciados y que laboraron en el turno vespertino, esta situación sigue representando un problema importante que puede llegar a generar un impacto negativo en la atención a estos pacientes. Se concluye que el personal de enfermería contaba con un agotamiento, despersonalización y realización personal alta.
Además, el personal de enfermería mostro niveles intermedios de SB. Por lo que es necesario se realicen intervenciones efectivas para disminuir esta problemática, como por ejemplo el aumento en su resiliencia a fin de aliviar el agotamiento de las enfermeras y enfermeros y los factores estresantes en el lugar de trabajo, sin dejar de lado el desarrollo de las habilidades de inteligencia emocional utilizándola como una herramienta que podrían funcionar para disminuir el SB. Es importante el involucramiento de la administración organizacional, pues debe garantizar un lugar de trabajo saludable, adoptar una actitud positiva y una relación armoniosa con los trabajadores de primera línea en la mitigación de la pandemia por la COVID-19.