INTRODUCCIÓN
Una pandemia es un fenómeno que amenaza la salud mental de pacientes infectados, su familia y el personal médico. En el gremio sanitario pueden desarrollarse funciones paradójicas, cargadas de fatiga y deshumanización. Previo al inicio de la pandemia la salud mental del personal médico asistencial era ya una crisis de salud pública, estimándose que el 50% ya confrontaba fatiga emocional1-4.
El personal de salud en formación (médicos internos de pregrado y médicos residentes) suele afrontar situaciones críticas a la salud mental: alimentación deficiente, horarios excesivos de trabajo, hostigamiento, violencia, acoso, humillación, degradación, discriminación por género, pobre apoyo social y maltrato por parte del personal de salud de la institución5-7.
La pandemia actual puede aumentar los elementos estresores del personal de salud becario. Procurar su salud mental ante situaciones de emergencia es también una estrategia para hacer más eficiente el combate contra la enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19)8-10.
La salud mental tiene manifestaciones en la funcionalidad del individuo en la sociedad. La Organización Panamericana de la Salud la define de la siguiente manera: «estado de bienestar en el cual se es consciente de las propias capacidades, capaz de afrontar las tensiones cotidianas, de trabajar de forma fructífera y competente para hacer una contribución a la sociedad» 11-16.
Actualmente existe una encuesta de autoevaluación del nivel de riesgo a la salud mental durante la pandemia por COVID-19 en la población mexicana y el personal médico, realizada por la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el Instituto Nacional de Psiquiatría Dr. Ramón de la Fuente Muñiz y la Secretaría de Salud Federal. Esta evalúa datos sociodemográficos y de aislamiento, identificadores de estrés, depresión, suicidio y consumo de sustancias14.
Dicho instrumento se diseñó con el propósito de reducir la brecha existente entre el momento de tener riesgo a la salud física y mental, y el momento de realizar una intervención basada en la evidencia que interrumpa este, dirigido específicamente a la promoción de la salud durante el tiempo de pandemia actual14.
Esta herramienta de tamizaje está sustentada en el programa de acción para superar las brechas en salud mental. Su propósito es que la población sea capaz de autoevaluar su salud mental; y su premisa principal consiste en que los individuos sean capaces de asumir su responsabilidad sobre ella14,16.
El personal médico en formación ha estado expuesto a niveles importantes de estrés durante la pandemia de COVID-19. Las razones incluyen el presenciar de primera mano el sufrimiento humano, el riesgo inherente a la salud, la urgencia de tomar decisiones vitales para los pacientes, las cargas asistenciales aumentadas, la carencia de recursos y el distanciamiento de la familia. El personal de salud en formación es particularmente vulnerable. Establecer protocolos de tamizaje, diagnóstico y tratamiento para el cuidado de la salud mental en los implicados en la respuesta a la contingencia no solo es de vital importancia, sino un acto de justicia social17.
MATERIAL Y MÉTODOS
Se realizó un estudio descriptivo y transversal en el personal de salud en formación de un hospital de segundo nivel del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Querétaro, México, durante el mes de junio del 2020.
El tamaño de muestra se calculó con la fórmula para población infinita, con un nivel de confianza al 95%, con un margen de error 0.05, el muestreo fue no probabilístico por conveniencia. Los participantes firmaron carta de consentimiento informado, la cual se encuentra en poder del autor de correspondencia. Se estudiaron variables sociodemográficas; nivel de riesgo para violencia, suicidio, consumo de sustancias, estrés agudo, ansiedad generalizada, distanciamiento y enojo, ansiedad de salud, evitación y tristeza.
Se utilizó el Instrumento Oficial para la Detección de Riesgos a la Salud Mental por COVID-19 de la Secretaría de Salud, la Facultad de Psicología de la UNAM y el Instituto Nacional de Psiquiatría Dr. Ramón de la Fuente Muñiz; el cual consta de 42 preguntas que exploran nivel de riesgo a la salud mental en el transcurso del último mes14.
Esta herramienta ha demostrado tener validez por parámetros de evaluación psicométrica de constructo mediante una estrategia de modelamiento de ecuación estructural, en la cual se pudo identificar que los dominios que incluye la encuesta tienen la conformación esperada como se planteó de manera tecnológica.
Las preguntas que evalúan el nivel de riesgo (32 reactivos) de evitación y tristeza, estrés agudo, distanciamiento y enojo, ansiedad de salud y ansiedad generalizada se puntúan del 0 al 10. Para cada parámetro se hace una sumatoria aritmética y según el resultado se clasifica: sin riesgo, riesgo mínimo, riesgo bajo y riesgo alto. Las preguntas que evalúan violencia, consumo de sustancias y suicidio (10 reactivos) se puntúan con Sí/No. Para cada parámetro se considera: con riesgo y sin riesgo14.
El estudio se realizó sin presiones de tiempo y especificando que no habría implicaciones educativas o laborales entre el sujeto de estudio y el instituto. El consentimiento informado se asegura en anonimato. Este estudio se registró y fue aceptado ante el sistema de registro electrónico de la coordinación de investigación en salud del IMSS.
RESULTADOS
Se encuestaron 220 individuos, con un promedio de edad de 25.6 ± 3.61. El 52.7% fueron mujeres, el 65.9% fueron médicos internos de pregrado. El 90.9% era soltero. El 53.2% pertencecía a familia nuclear. En cuanto a su procedencia, el 25.9% de los encuestados eran originarios de Querétaro (Tabla 1).
n = 220 | |||||
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IC 95% | |||||
Característica | Frecuencia | Porcentaje | Inferior | Superior | |
Sexo | Femenino | 104 | 47.3 | 40.7 | 53.9 |
Masculino | 116 | 52.7 | 46.1 | 59.3 | |
Estado civil | Soltero | 200 | 90.9 | 87.1 | 94.7 |
Casado | 14 | 6.4 | 3.2 | 9.6 | |
Unión libre | 6 | 2.7 | 0.6 | 4.8 | |
Categoría | Médico interno de pregrado | 145 | 65.9 | 59.6 | 72.2 |
Médico residente | 75 | 34.1 | 27.8 | 40.4 | |
Entidad de procedencia | Querétaro | 57 | 25.9 | 20.1 | 31.7 |
Foráneo | 163 | 74.1 | 68.3 | 79.9 | |
Integrantes del círculo familiar | Familia nuclear | 117 | 53.2 | 46.6 | 59.8 |
Terceros | 54 | 24.5 | 18.8 | 30.2 | |
Solo | 49 | 22.3 | 16.8 | 27.8 |
IC 95%: intervalo de confianza al 95%.
La frecuencia global de riesgo para violencia se reportó en un 43.2%, para suicidio en un 15%, y para consumo de sustancias en un 35.9%. Para otros rubos fue como sigue: estrés agudo 48.2%, ansiedad generalizada 45%, distanciamiento y enojo 44.1%, ansiedad de salud 40.5%, y evitación y tristeza 35.5% (Tablas 2 y 3).
n = 220 | ||||||||
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Dimensión de riesgo | Con riesgo | IC 95% | Sin riesgo | IC 95% | ||||
F | % | Inferior | Superior | F | % | Inferior | Superior | |
Violencia | 95 | 43.2 | 36.7 | 49.7 | 125 | 56.8 | 50.3 | 63.3 |
Suicidio | 33 | 15.0 | 10.3 | 19.7 | 187 | 85.0 | 80.3 | 89.7 |
Consumo de sustancias | 79 | 35.9 | 29.6 | 42.2 | 141 | 64.1 | 57.8 | 70.4 |
IC 95%: intervalo de confianza del 95%; F: frecuencia.
n = 220 | ||||||||||
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Dimensión de riesgo | Sin riesgo | Riesgo mínimo | Riesgo bajo | Riesgo medio | Riesgo alto | |||||
F | % | F | % | F | % | F | % | F | % | |
Estrés agudo | 114 | 51.8 | 56 | 25.5 | 33 | 15.0 | 15 | 6.8 | 2 | 0.9 |
Ansiedad generalizada | 121 | 55.0 | 36 | 16.4 | 29 | 13.2 | 21 | 9.5 | 13 | 5.9 |
Distanciamiento y enojo | 123 | 55.9 | 61 | 27.7 | 23 | 10.5 | 11 | 5.0 | 2 | 0.9 |
Ansiedad de salud | 131 | 59.5 | 46 | 20.9 | 22 | 10.0 | 14 | 6.4 | 7 | 3.2 |
Evitación y tristeza | 142 | 64.5 | 53 | 24.1 | 20 | 9.1 | 4 | 1.8 | 1 | 0.5 |
F: frecuencia.
DISCUSIÓN
Este estudio se realizó en un hospital híbrido (atención médica propia del segundo nivel y atención de pacientes con diagnóstico de COVID-19) del IMSS, donde el personal de salud en entrenamiento realiza rotaciones por los servicios de urgencias, primer contacto, medicina interna, cirugía, pediatría, ginecología y obstetricia.
La distribución por sexo y edad fue similar a lo reportado en una publicación que estudió rasgos depresivos en una población de 70 médicos internos de pregrado en un hospital de segundo nivel en Mexicali. Se hace énfasis en la necesidad de buscar datos sociodemográficos, además del diagnóstico de patologías mentales en los médicos becarios. En el presente estudio se describen lugar de procedencia, estado civil, el círculo familiar de los sujetos de estudio y variables como riesgo de suicidio, violencia y consumo de sustancias5.
En el distanciamiento y enojo se evalúa la dificultad para conciliar el sueño, mientras que en el estrés agudo se considera el miedo de adquirir la enfermedad por COVID-19; su prevalencia es mayor a la reportada por otros autores, como en la India, cuyos rangos se encuentran entre el 12.5 y 37.8% respectivamente1.
Cabe señalar que la falta de unificación de criterios para la utilización de instrumentos de medición por parte de los diferentes autores como son cuestionarios y escalas de medición impide comparar los resultados entre los estudios que abordan el nivel de riesgo a la salud mental. De igual forma, la terminología utilizada difiere y hay heterogeneidad en los resultados entre publicaciones5,6.
En un estudio, previo a la aparición de la pandemia de COVID-19, en médicos residentes del Perú se reporta que el cansancio emocional, vivir solo y tener baja realización personal incrementan los niveles de síntomas depresivos. A su vez se menciona que lo reportado en la literatura no puede ser generalizable a diferentes realidades hospitalarias. Los planes de investigación e intervención deben ser realizados en cada centro basado en la severidad del nivel de riesgo encontrado6.
El internado de pregrado y la residencia médica son una transición académica y asistencial en donde se tienen escenarios estresores. Cuando a esto se suma el reto de afrontar un fenómeno social y cíclico como lo es una pandemia, es posible que los métodos de afrontamiento de estrés sean insuficientes4-6.
El presente estudio tiene como limitante el haber empleado un instrumento de tamizaje y no una prueba diagnóstica; por ello se canalizó a los participantes en quienes se reportó un grado alto de nivel de riesgo a la salud mental para su complementación diagnóstica y terapéutica al servicio de psiquiatría, mismo que fue conformado en el instituto para la atención del personal médico asistencial durante la pandemia. Además, a todos los encuestados se les facilitó infografía con medidas de autocuidado de salud mental.
Por lo anterior es importante que se continúe con estudios sobre el nivel de conocimiento, actitudes y factores de riesgo a la salud mental del personal de salud en formación. El miedo y la ansiedad relacionada con la pandemia pueden influir en el devenir de esta especie de emergencias sanitarias5,8.
Los aspectos psicológicos y sociales de esta pandemia deben ser coordinados como prioridad nacional e internacional, sobre todo en grupos vulnerables. Actualmente el abordaje de la salud mental durante la pandemia por COVID-19 es descoordinado, existiendo una plétora de información3.
La debilidad del presente estudio fue no haber realizado el tamizaje de niveles de riesgo a la salud mental en diferentes momentos de la estancia hospitalaria como, por ejemplo, al inicio, a media rotación y al final de su servicio. La fortaleza de la investigación es que, a la par del tamizaje de riesgos a la salud mental, se canalizó a un servicio asistencial apropiado según la estratificación de riesgo para su complementación diagnóstica y terapéutica.
CONCLUSIONES
Se presentó una prevalencia importante de alto nivel de riesgo a la salud mental para condiciones de alta letalidad, a saber: violencia, suicidio y consumo de sustancias. La frecuencia global de condicionantes patológicas se encontró con grado de riesgo en cerca de la mitad de los encuestados. Es preciso establecer a futuro protocolos de tamizaje y seguimiento de patologías de salud mental en personal de salud en formación durante situaciones de emergencia como la que se vive actualmente.
FINANCIAMIENTO
La presente investigación no ha recibido ninguna beca específica de agencias de los sectores públicos, comercial o sin ánimo de lucro.
RESPONSABILIDADES ÉTICAS
Protección de personas y animales. Los autores declaran que para esta investigación no se han realizado experimentos en seres humanos ni en animales.
Confidencialidad de los datos. Los autores declaran que han seguido los protocolos de su centro de trabajo sobre la publicación de datos de pacientes.
Derecho a la privacidad y consentimiento informado. Los autores han obtenido el consentimiento informado de los pacientes y/o sujetos referidos en el artículo. Este documento obra en poder del autor de correspondencia.