Señor editor: Desde la perspectiva de Un mundo, una salud, un ejemplo exitoso de control de enfermedades en México es el de la rabia humana ocasionada por mordedura de perro, que disminuyó de 62 casos (en 1990) a cero casos (en 2016)1 gracias a la implementación de la semana nacional de vacunación antirrábica. Sin embargo, pocos estudios se han referido a la tenencia responsable de perros, lo cual sería determinante para conocer los hábitos de manejo de los propietarios y así poder diseñar estrategias de educación y políticas públicas orientadas al control de la población canina. Lo anterior ayudaría a prevenir accidentes derivados de la tenencia de perros, así como la transmisión de enfermedades zoonóticas a la población.
Para conocer las características de la tenencia de perros, aplicamos 756 cuestionarios a personas mayores de edad que tuvieran un perro, quienes participaron voluntariamente durante su estancia en dos parques de la Ciudad de México (CDMX): Hundido y de los Venados, ambos en la delegación Benito Juárez. Los cuestionarios fueron analizados de manera descriptiva mediante frecuencias.
Encontramos que sólo 30.82% de los perros portaba placa de identificación. En cuanto al uso de correa, 19% no la utiliza durante el traslado de los canes hacia los parques, situación que incrementa a 37.6% una vez que éstos llegan a su destino. Lo anterior ocurre a pesar que la Ley de Protección a los Animales en el Distrito Federal establece la obligatoriedad de portación de placa de identificación para reconocer al perro y a su propietario, y el uso de correa.
Estas conductas incrementan el riesgo de agresiones,2 como lo ejemplifica 18.8% de los animales agredidos en ambos sitios. Se debe tomar en cuenta que los perros viven en un entorno social compartido con las personas y pueden reaccionar con conductas agresivas ante situaciones potencialmente estresantes, lo que representa un peligro para el entorno y es causa frecuente de abandono en la vía pública.3
En 2016, en México se reportaron 112 791 personas lesionadas por mordida de perro y específicamente 13 911 casos en la CDMX.1 En 2015, el Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades (Cenaprece) logró esterilizar gratuitamente a 655 000 animales de compañía, lo que contrasta con lo encontrado en este estudio: 54.3% de los perros no cuenta con ningún proceso quirúrgico que evite su reproducción.4 Esta situación abre la posibilidad de implementar estrategias de esterilización menos invasivas que favorecen su aceptación por parte de los propietarios.5
Si bien el presente estudio conlleva limitaciones para su interpretación, es necesario utilizarlo como punto de partida para trabajos más robustos, que permitan obtener información sobre los hábitos de manejo que los propietarios tienen hacia sus animales de compañía en diferentes contextos y, con ello, diseñar estrategias de intervención específicas.
Los autores agradecen la colaboración en el trabajo de campo de la MVZ Ana Lilia Rojo Beltrán.