María Elena Medina-Mora Doctora en Psicología por la UNAM en afiliación con el Alcohol Research Group de Berkeley donde realizó su tesis doctoral. Es Directora del Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente Muñiz, Miembro de la Junta de Gobierno de la UNAM y de El Colegio Nacional. Ha trabajado en investigación transcultural desde 1976. En su trayectoria como investigadora ha publicado más de 210 artículos en revistas indexadas los cuales han recibido más de 2000 citas, ha publicado además 187 capítulos de libros y 10 libros. Sus campos de interés son la epidemiología, la metodología y los factores sociales relacionados con las adicciones y la salud mental. Es miembro del Comité de Expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) desde 1986 y actualmente coordina el grupo internacional de trabajo sobre estudios de campo de formación rumbo a la versión 11 de la CIE.
La Academia Nacional de Medicina, para celebrar los 150 años de su fundación, decidió realizar una serie de publicaciones sobre el análisis y propuestas de grandes problemas de salud.
Es meritorio mencionar el importante apoyo que se obtuvo por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT) para esta misión.
La obra titulada "La Depresión y Otros Trastornos Psiquiátricos", editado por las doctoras María Elena Medina-Mora, Elsa Josefina Sartí Gutiérrez y Tania Real Quintanar, es un testimonio de la importancia que representan los trastornos psiquiátricos dentro del ámbito de la medicina en general.
El libro concentra diversos temas que exponen especialistas acerca de los problemas de salud mental y cómo afectan a nivel nacional e internacional el bienestar físico de la persona al igual que algunas enfermedades mentales tales como el trastorno depresivo mayor.
La obra reúne a 36 profesionales de la salud y consta de cinco secciones, donde se abordan el diagnóstico, la enfermedad mental en el ciclo vital, las poblaciones especiales y la salud mental, los diferentes modelos de intervención, la farmacoterapia y la intervención psicoterapéutica, así como las políticas públicas para la atención de los trastornos psiquiátricos.
Como bien menciona la doctora Medina-Mora, los trastornos mentales representan el 25% de años de vida asociados con discapacidad (AVD) en los hombres y 23% en mujeres.
Las enfermedades mentales con mayor prevalencia son indudablemente la depresión y los trastornos de ansiedad, sin embargo no siempre son diagnosticados a tiempo.
Sabemos que la depresión puede asociarse frecuentemente a otras enfermedades, como el cáncer, las enfermedades cardiacas, la obesidad, la diabetes y otras más.
En este libro se abordan atinadamente las problemáticas de la comorbilidad en medicina, lo cual es la regla y no la excepción. El diagnóstico temprano y el tratamiento oportuno siempre son lo más aconsejable para un paciente enfermo, para obtener un adecuado proceso de recuperación y adherencia al tratamiento.
La obra contempla un capítulo sobre el consumo de sustancias y las comorbilidades, tanto físicas como mentales, señalando la importancia de un abordaje terapéutico integral.
Igualmente, se describen los determinantes sociales de la salud en general y la salud mental, y en particular que son un binomio cada vez más importante para la prevención.
Contamos con mayor evidencia de que los primeros años de vida son determinantes para la génesis de las enfermedades mentales, que suelen presentarse en cualquier etapa de la vida.
El libro también aborda las bases neurobiológicas de la depresión, así como los recursos farmacológicos hoy en día disponibles y efectivos para su tratamiento. Asimismo se hace hincapié en cómo evitar las recaídas y recurrencias y proporciona, a su vez, las estrategias que deben emplearse para los pacientes con resistencia farmacológica.
Además, el manejo psicoterapéutico del paciente y de la familia son considerados como recursos necesarios que deben ser empleados con cualquier paciente con un trastorno del afecto.
La rehabilitación integral debe ser considerada sobre todo en los pacientes crónicos de difícil recuperación, como en el caso de quienes padecen esquizofrenia.
En cuanto a las políticas públicas, que aún dejan mucho que desear, se espera alcanzar una cobertura universal de la atención de las enfermedades mentales en los tres niveles de atención.
La infraestructura para la atención de la depresión y los trastornos psiquiátricos debe de contemplarse en el primer y segundo nivel de atención y dejar el tercer nivel sólo para los pacientes graves.
Además, en el libro se menciona, atinadamente, que la mayoría de los pacientes deben ser atendidos a nivel ambulatorio y con calidad.
En los últimos capítulos del libro se incluyen los aspectos legales y éticos de la Psiquiatría, así como un abordaje del problema del suicidio.
Por último, deseo mencionar que esta obra abarca en forma amena y fácil de entender, un panorama completo de los trastornos mentales y señala al diagnóstico, el tratamiento y la investigación, como las herramientas necesarias para una atención óptima.
Para concluir, deseo felicitar a la Academia Nacional de Medicina y a sus autores por este enorme esfuerzo.