Este libro llega en un buen momento para ayudarnos en la reflexión de esta crisis sanitaria, así como para encontrar pistas que nos sirvan para navegar en este mundo incierto. En Terra Incognita se identifican cuáles son las oportunidades y amenazas que enfrentaremos en los siguientes cien años, al tiempo que se intenta vislumbrar posibles alternativas. En el prefacio, los autores explican que la pandemia por la COVID-19 les permitió resaltar el propósito del libro, y es que esta ilustra los retos que enfrentamos al vivir en un mundo globalizado.1
Para dar un panorama de los desafíos, Goldin y Muggah revisan una variedad de temas que tienen el uso de mapas como centro de atención del libro. Actualmente no solo contamos con mucha información y con la tecnología para procesar y georreferenciar esos datos, lo que hace pertinente el uso de mapas para analizar lo que sucede en el mundo. En la parte introductoria del libro, Goldin y Muggah se preguntan si los mapas nos facilitan la navegación hacia el futuro; su respuesta es prometedora, ya que explican que los mapas ayudan a entender de qué forma los problemas están conectados y concentrados en el tiempo y espacio, y agregan que al entender esto, empezamos a pensar en soluciones.
En este libro se analizan temas críticos como la globalización, el clima, la urbanización, la tecnología, la desigualdad, la geopolítica, la violencia, la demografía, la migración, la alimentación, la salud, la educación y la cultura. Para despertar el interés en su lectura, nos concentramos en tres capítulos que atañen más a un perfil geográfico mundial prioritario: la globalización, el clima y la urbanización. Al avanzar por sus páginas, el lector tendrá elementos para ir conectando los puntos y entender dónde se ubican los mayores desafíos de la humanidad, lo que hace que la lectura sea amena y enriquecedora.
En el capítulo de la globalización se explica la intensificación del comercio en las últimas décadas, especialmente entre Europa, Norteamérica y Asia, lo que puede constatarse a través de diversos mapas. Sin duda el posicionamiento de China ha sido uno de los grandes cambios que hay que distinguir, mientras que, en 1970, la economía china representaba el 0.6 % del comercio global, actualmente representa el 13 % (Goldin y Muggah, 2020, p. 27). La reducción de los costos en el transporte y los avances tecnológicos en las comunicaciones han acortado las distancias, por lo que ahora es factible hacer transacciones con economías no solamente con las que se encuentran en una misma región. Este intercambio no se acota a las mercancías, también incluye un mayor movimiento de personas, de ideas, etc. La globalización ha permitido un incremento rápido en los ingresos de los países, pero también ha aumentado los niveles de desigualdad. Otro de los desafíos que se derivan del proceso de globalización es la fragilidad que se genera debido a la mayor interdependencia de los países. Un ejemplo que refuerza este planteamiento de Goldin y Muggah es el caso del carguero Ever Given, que encalló en el canal de Suez en marzo de 2021 y durante varios días mantuvo bloqueada una de las principales arterias comerciales a nivel global. Este atasco mostró que una alteración en las cadenas de suministro globales puede afectar el comercio internacional y causar grandes pérdidas económicas a las empresas.
En el capítulo sobre el clima se retoma lo que muchos científicos han advertido: estamos a punto de pasar a un no retorno, donde se enfrentarán cambios irreversibles para el planeta. En este capítulo se muestran dos mapas de la temperatura global en 1900 y 2018, donde se hace evidente que en este periodo la Tierra se ha calentado de manera significativa. Esto va en el mismo sentido de lo que ha señalado el Panel Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés) que advierte que nos encontramos en una situación de emergencia donde se requieren medidas drásticas para mitigar el calentamiento del planeta, de otra forma enfrentaremos enormes costos por la inacción. Un ejemplo de esas medidas sería la eliminación de los subsidios a los combustibles fósiles.
Otro capítulo altamente recomendable es el de la urbanización, crucial para entender los enormes retos que enfrentarán las ciudades en el mediano y largo plazos. Una de las transiciones más importantes que ocurre en el mundo es la acelerada concentración de la población en las ciudades. Uno de los mapas presenta la urbanización del mundo donde se aprecia que, si bien las ciudades abarcan 3 % de la superficie del planeta, concentran más del 55 % de la población mundial (Goldin y Muggah, 2020, p. 96). Se estima que para 2050 gran parte de la población vivirá en las ciudades. Si conectamos esto con el cambio climático encontraremos que otro desafío consiste en la invención de ciudades resilientes y sostenibles. Como señalan los autores, las ciudades son mucho más que un clúster denso de personas y edificios, y es que en las ciudades se estructuran un sinfín de interacciones, donde las personas viven, realizan intercambios y trabajan. En el libro se menciona que la producción de algunas ciudades puede compararse con la de ciertos países; es el caso de las zonas metropolitanas de Tokio y Nueva York, que tienen un producto interno bruto (PIB) nominal equivalente al de Corea del Sur y de Rusia, respectivamente. Esta influencia económica que están ganando las ciudades hace que busquen un mayor poder político y autonomía, lo que también representa un enorme desafío para los gobiernos.
En las conclusiones, los autores resaltan que una de las mayores amenazas que enfrentamos es la visión de corto plazo que tienen los gobiernos, donde no hay espacio para la gestión de los riesgos sistémicos, lo que impide tomar acciones para minimizar los efectos asociados a estos riesgos. Otro reto importante consiste en buscar mecanismos que faciliten la colaboración de los países en la resolución de los grandes problemas globales, entendiendo que se requiere una mayor cooperación. Por último, los autores explican que ante la complejidad y la velocidad de los cambios que ocurren en el mundo requerimos de instrumentos que nos permitan estar un paso adelante. Al tener mayor claridad de los retos por enfrentar, estaremos en mejores condiciones para navegar en este mundo incierto.