La pesca tiene un destacado papel en la nutrición de las personas y en la generación de empleos. Es una de las actividades más antiguas de la humanidad y en su práctica, el medio natural desempeña un papel fundamental. Las tecnologías que el ser humano ha inventado para desarrollarla y el descubrimiento de técnicas conservantes (secado, salado y congelado) han incrementado su producción y su orientación comercial. Reflexionar sobre su importancia implica reconocer que una inadecuada administración de los recursos hidrobiológicos pone en peligro la participación de la pesca al bienestar nutricional y socioeconómico de una población mundial en continuo crecimiento (FAO, 2020a).
Los organismos internacionales, encabezados por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), son conscientes del papel de la pesca en la sostenibilidad del planeta. De tal forma que el 5 de diciembre de 2017, la ONU anunció el “Decenio de las Ciencias Oceánicas para el Desarrollo Sostenible de 2021 a 2030” con el fin de crear un marco común capaz de garantizar la participación de las ciencias, con los esfuerzos de los países, a alcanzar los objetivos de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible (Lindoso, 2021). En este impulso colectivo, las ciencias sociales han de hacer valer sus aportes en el ámbito marino. Asimismo, la Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 2022 “Año Internacional de la Pesca y la Acuicultura Artesanales” (FAO, 2020b). Este acontecimiento es un destacado reconocimiento a los millones de pequeños pescadores, acuicultores y trabajadores haliéuticos, que proporcionan alimentos sanos y nutritivos a miles de millones de personas y favorecen a lograr el Hambre Cero.
Ante este panorama, el Instituto de Geografía de la Universidad Nacional Autónoma (UNAM) de México y la Cátedra de Antropología de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí (ULEAM, Ecuador) promovieron del 13 al 15 de octubre dos eventos científicos al unísono: el “II Foro Internacional Virtual con las comunidades pesqueras artesanales unidas en red para la defensa del patrimonio biocultural” y el “II Coloquio sobre la actividad pesquera en México”.1 En ellos se consideraron la diversidad sociocultural y económica de las comunidades pesqueras creando espacios de comunicación y retroalimentación. Por dicho motivo, ambos encuentros compartieron un mismo interés: “La pesca a pequeña escala retos locales para soluciones globales”.
Se hace necesario recordar que la ULEAM coordinó en noviembre de 2020 el primer “Foro Internacional Virtual con las Comunidades Pesqueras Artesanales Unidas en Red para la Defensa del Patrimonio Biocultural”. En aquella ocasión, la consigna elegida fue: “De Comunidades Pesqueras a Destinos Turísticos” (IAES, 2020). El foro, desde su creación, tiene un formato en línea. Mientras, el “I Coloquio sobre la actividad pesquera en México”, realizado en la UNAM, se dedicó a la pesca comercial ribereña y se interesó por sus oportunidades y conflictividades (Nava Martínez, 2017).2
En las ediciones de 2021, la organización contó con el respaldo de la Red Latinoamericana por la Defensa del Patrimonio Biocultural y de la Red Internacional Pluridisciplinar de Investigaciones en Comunidades Pesqueras, otorgando una amplia proyección internacional junto al resto de instituciones participantes. El Programa de Apoyo a Proyectos de Investigación e Innovación Tecnológica (PAPIIT) “Organización territorial de la actividad pesquera comercial ribereña en las áreas naturales protegidas del Estado de Yucatán, México” (clave IN300619) facilitó la intervención de académicos y de actores del sector pesquero comercial ribereño mexicano: pescadores, cooperativistas, representantes institucionales y del sector exportador.
A cargo de la organización estuvieron José Manuel Crespo Guerrero, Fernando Represa Pérez, Araceli Jiménez Pelcastre, Mabel Font Aranda, Manuel González Herrera, Delfín Quezada Rodríguez, Gustavo Moura, Tania González, Isabel Elena Muñiz Galvis, Iván Vinicio Jácome Negrete y Natalia Guerrero Peña. Un grupo académico y técnico procedente de diferentes países e instituciones que ofreció un enfoque amplio, social y humanista sobre la actividad pesquera en un contexto global e interdependiente.
El doble encuentro se estructuró en ocho sesiones en horario de mañana (de 9 a 12 del mediodía) y de tarde (de 5 de la tarde a 8 de la noche) [hora de la Ciudad de México GTM -6] y fue seguido ampliamente por los canales que el Instituto de Geografía de la UNAM dispuso en las redes sociales: Facebook @IGeografiaUNAM y YouTube. Ambos eventos se acercaron a los retos económicos de la actividad pesquera, a los desafíos organizativos que enfrenta, a los impactos socioambientales del sector, a la complementariedad de la pesca con otras actividades económicas y al patrimonio marinero (Figura 1), por citar los más representativos. Asimismo, se fomentaron espacios de comunicación entre el sector público y privado, incluyendo a profesionales, estudiantado y organizaciones sociales, conectando a las universidades comprometidas con el desarrollo humano sostenible y los retos que enfrenta la sociedad y el mundo.
En definitiva, el foro y el coloquio se dirigieron a un público amplio con interés en el sector pesquero y comprometido con su patrimonio. Pronto iniciarán las gestiones para organizar las próximas ediciones, lo que significará no solo la consolidación de este espacio transdisciplinario, sino también una contribución al “Año Internacional de la Pesca y la Acuicultura Artesanales” (AIPAA, 2022).