INTRODUCCIÓN
Los geoparques se definen como territorios con límites bien definidos y una superficie apropiada para permitir el desarrollo socioeconómico; a partir de la importancia científica, histórica, rareza y belleza de sitios geológicos. El atractivo de estos lugares incluye aspectos de carácter ecológico, arqueológico, histórico, cultural y paisajístico. Asimismo y de manera específica, estos lugares se enfocan en el desarrollo de tres actividades sustantivas: la conservación, la educación y el geoturismo. Un territorio sujeto a esta perspectiva posee un objetivo de desarrollo múltiple, en donde la protección al geopatrimonio y al medio ambiente, la legislación, las ac tividades educativas, científicas y el esparcimiento encuentran un eje rector común. El nombramiento de geoparque lo otorga la Organización de las Naciones Unidas para la E ducación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), y es una condición que involucra aspectos relacionados con la geodiversidad y la geo-conservación (Eder, 1999: 353; UNESCO, 2008: 49-53).
El concepto de geodiversidad fue introducido por el geógrafo Gray (2004: 3), de acuerdo con la propuesta teórica de Brilha (2005: 17), quien integró las cuatro esferas básicas que conforman al planeta: geoesfera, biosfera, hidrosfera y atmósfera. Sin embargo, la noción que involucra este término es compleja y para todo caso, incluye la variable Kantiana de tiempo y espacio. La construcción del significado científico de geodiversidad recurre a la noción misma de la estructura y funcionamiento del planeta como ente integrante del cosmos y del sistema solar, en donde a éste se le puede definir como una anomalía de orden geofísico y geoquímico, que en el transcurso de la historia cósmica y geológica ha permitido el desarrollo de la vida, tal cual se supone y conoce (Mateo, 2002: 27). Dicho concepto define que las condiciones básicas de desarrollo geográfico de una región están determinadas por regularidades y ciclos temporales de acción que inciden en los contrastes que se generan en la geología, la geo-morfología, los procesos de orden endógeno, climático y meteorológico, estableciendo un continuo proceso de evolución y una dinámica distintiva del entorno. Estos cambios forman parten del concepto geodiversidad y son competencia de la geoconservación (Figura 1).
Actualmente existen diversas acepciones al término "geodiversidad", y uno de los más aceptables es el referido por la Royal Society for Nature Conservation del Reino Unido (Brilha, 2005). El concepto se define como "la variedad de ambientes, fenómenos y procesos geológicos que dan origen a paisajes, rocas minerales, suelos, fósiles y depósitos, que constituyen el sustrato de la vida en la Tierra". De este concepto se derivan y replantean diferentes concepciones y puntos de vista (Tabla 1). La geodiversidad y el patrimonio permiten valorar y comprender al grupo de pro cesos involucrados en el origen del relieve, que modelan la superficie del planeta, según se estipula en la Declaración de la Memoria de la Tierra (Muñoz, 1988: 85; Dias y col., 2003: 132). Entre tanto y desde la perspectiva mercantil, Brilha (2013), refiere que: "El valor económico se encuentra conformado por el conjunto de recursos minerales y energéticos"; toda vez que lo funcional a los servicios in situ, es decir, a todos aquellos que proveen alguna mejora-servicio al hombre, así como al sustrato de sistemas físicos y ecológicos.
Autor | Considerandos |
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Cortés y col. (2000: 48) | Proponen criterios de geoconservación por medio de la elaboración de catálogos e inventarios de sitios de interés geológico. |
Dingwall (2000: 15-19) | Expone criterios legales y de homologación para la aplicación y seguimiento de políticas de conservación y administración territorial. |
Nieto (2001: 7-10) | Integra los conceptos de biodiversidad y geodiversidad para generar un nuevo constructo a partir de las deficiencias bibliográficas existentes a principios del nuevo siglo. |
Zouros (2004: 27) | Establece criterios para el desarrollo de actividades geoturísticas normadas bajo criterios de homogeneidad en Europa. |
Bruschi (2007: 7) | Propone un método de clasificación y valoración cualitativa de la geodiversidad versus la subjetividad y a favor de la gestión. |
Bruschi y Cendrero (2007: 239) | Arguyen la capacidad para valorar y clasificar la intangibilidad de los geositios y proponen criterios de análisis para la protección y manejo territorial. |
Fernàndez (2007: 77) | Propone una metodología para la evaluación de la geodiversidad en territorios de América del Sur a partir de inventarios. |
Bruschi y col. (2011: 131) | Establecen una metodología paramétrica para valorar sitios de interés geológico y de valor patrimonial. |
Burek (2012: 45) | Analiza los principios de valoración de la geodiversidad y geoconservación en el Reino Unido y determina la importancia de la interpretación y análisis territorial para el desarrollo local. |
Corvea y col. (2014: 1-16) | Analizan y adaptan metodologías de geoconservación para el territorio cubano; analizan la base teórica de la geología y establecen interrelaciones con áreas de protección. |
Salazar y col. (2014: 307) | Establecen principios rectores de la geoconservación, empleando criterios geomorfológicos para la gestión y protección patrimonial. |
La aplicación de los conceptos referidos ha generado en el tiempo presente nuevas con-ceptualizaciones, metodologías y procesos de validación de las mismas; en este sentido, se destacan los aportes de autores como Vegas y col. (2012: 2); García y Carcavilla (2013: 7); García y col. (2013: 157); Vegas y col. (2013a: 1-10); Vegas y col. (2013b: 158-167), quienes han concentrado métodos y/o guías para la elaboración de inventarios o recuentos de elementos patrimoniales; los cuales, y con aporte de otros autores, han resultado en inventarios de propiedad, de conocimiento del usufructo natural y del propio recurso, como se observa en estudios de caso expuestos en la Tabla 2.
Regiones estudiadas | Problema de interés | Referencia |
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Geoparques españoles: Maestrazgo, Sobrarbe, Cabo de Gata-Níjar, Sierras Subbéticas, Costa Vasca | Se arguyen problemas de concienciación en torno al geoturismo y proponen criterios y consideraciones para aprovechar el territorio patrimonial de España, tanto para los visitantes, así como para la conservación de los espacios con interés geológico. | Carcavilla y col. (2011) |
Región de Alicante, España | Desarrollo de metodología didáctica para el estudio de Ciencias de la Tierra, a través de 13 fases de trabajo para estudiantes de nivel medio. | Crespo y col. (2011) |
Estudio de carácter teórico: Alto Tajo, España; Lesbos, Grecia y Vulkaneifel, Alemania | Establece la importancia de la geoconservación como una ciencia emergente en el campo de las Ciencias de la Tierra, estableciendo valores de relevancia social, promoción de la educación y desarrollo sustentable en el marco de los geoparques. | Henriquez y col. (2011) |
Parque nacional de los Lagos de Plitvice, Croacia | Se plantea el desarrollo económico y ambiental, a través de actividades turísticas, empleando los atributos naturales del paisaje como factor para la generación de una industria geoturística en una región marginada. | Travis (2011) |
Área Natural Protegida: Parque natural de las Lagunas de Ruidera. Castilla-La Mancha, España | Conflictos ocasionados por la disponibilidad del agua para la agricultura de riego y las actividades turísticas y ecológicas; así como entre una sobrecarga en las actividades turísticas y la conservación del espacio natural. | Vázquez (2011) |
Covalagua y Las Tuerces, Palencia, España | Se propone y desarrolla una metodología que involucra variables para la recolección, clasificación y uso de información geográfica, geológica y geomorfológica; asimismo, establecen bases normativas y legales para el manejo de áreas naturales, la planificación geoturística y la geoconservación. El caso de estudio reiere a una región kárstica, en donde se aplica la metodología, destacándose las fases de inventario conformadas por la clasiicación, descripción y cartografía geomorfológica. | Martín y col. (2012) |
Lago Santos Morcillo, Sistema de lagos de Ruidera, España | Se realizan estudios de geofísica somera (tomografía eléctrica), deformaciones estratigráficas y de sedimentología relacionados con los depósitos basales cenozoicos del lago y el desarrollo de procesos de agrietamiento y subsidencia. El resultado de la investigación es un modelo que permita disminuir la vulnerabilidad y orientar actividades en el territorio. | Navarro y col. (2012) |
Región costera de Lócrida, Grecia | Se analiza la correlación entre la ocupación humana del territorio, el desarrollo de la sociedad y el paisaje natural, a través del tiempo histórico, considerando como base la caracterización geomorfológica, geológica y sismotectónica de la región griega. La base del estudio se centra en estudios de los sistemas de drenaje fluvial, depósitos de debris y sedimentología. | González y col. (2013) |
Los 42 espacios que constituyen la Red de Reservas de la Biósfera estatal, España | Análisis de las actuaciones realizadas para conservación de la Geodiversidad, que incluyen realización de inventarios, divulgación, didáctica y geoturismo. | Monge y Martinez (2013) |
Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, España | Se muestran 11 itinerarios de los sitios en los que se pueden apreciar paisajes formados por fenómenos geológicos, explicando las fuerzas que participaron. | Robador y col. (2013) |
Territorio español continental | Se destaca el valor patrimonial de los depósitos de volcanoclásticos (tobas) de España, destacando criterios de importancia mineralógica, hidroquímica, geoquímica, sedimentológica y ambiental. La información de los campos tobáceos se relaciona con procesos de origen, clima, condiciones ambientales y edad. | Carcavilla y col. (2014) |
Geoparque Villuercas-Ibores-Jara, Extremadura, España | Se propone utilizar 6 categorías para clasificar los 44 geositios del geoparque, en lugar de las 14 categorías actuales, para facilitar la comprensión por parte del turismo no especializado. | Pulido y col. (2014) |
Herencia geomorfológica y su conservación, España | Se analiza los esfuerzos que se han realizado en España para conservar la herencia geomorfológica, preservando también las áreas naturales. | Salazar y col. (2014) |
Geoparque de Sobrarbe, España | Los autores plantean nuevos criterios para la divulgación del patrimonio geológico y geomorfológico, empleando un sistema descriptivo de geositios y procesos evolutivos en la región de los Pirineos. Debido a la demanda social de información sobre el patrimonio fronterizo, las guías renovadas se presentan en castellano y francés. | Fernández y col. (2015) |
Geoparques nacionales de China | Realizan una clasificación de los geoparques nacionales de China estableciendo una relación entre su distribución espacial y los aspectos estructurales geológicos de las diferentes zonas tectónicas. | Fuming y col. (2015) |
Macizo Stavelot-Venn, Bélgica y Alemania | Proponen la creación de un proyecto holístico con apoyo regional, nacional e internacional, para la creación de un geoparque transfronterizo, que permite conservar y aprovechar los excelentes bienes patrimoniales naturales y geológicos del macizo: paisajes, actividades mineras, ecosistemas, aguas minerales y piedras de construcción. | Gormaere y col. (2015) |
Cascadas de la Cuenca de Malawi Sabah, Malasia, Isla de Borneo | Realizan una descripción de como la geología, la geomorfología y el clima influyeron en las actuales características de altura, anchura, forma y volumen de cada una de las 28 cascadas de al menos 5 m estudiadas, para apoyar en promover su explotación turística. | Tongkul (2015) |
La conceptualización y metodología para evaluar la geodiversidad resulta compleja y aún cuestionable en el tiempo presente. Entre las principales variables empleadas para obtener elementos de calificación paramétrica, cualitativa y cartográfica, se encuentran aspectos de orden litológico, estratigráfico, geomorfológico, hidrológico, paleontológico y pedológico; los cuales, en conjunto, definirán geomorfositios y geositios.
Estudios fundamentales establecen que el planeta posee regularidades de composición y estructura, de diferenciación espacial o territorial, de ritmo y desarrollo, de funcionamiento, circulación de energía y sustancias y de integridad (Mateo, 1984: 146-189; Salinas, 1989: 157-171; Mateo, 2002: 29-38; Mateo y col., 2012: 249). Los trabajos citados definen algunos de los distintivos que otorgan al planeta características únicas de diferenciación, tales como la presencia y dinámica del campo magnético, la heterogeneidad del campo gravi-tacional; la formación del elipsoide cardioidal (contracción polar del hemisferio septentrional), el retraso de la velocidad de rotación y el consecuente freno del flujo, la conformación de esferas integradas (atmósfera, hidrósfera, biosfera, litósfera), la diferenciación en el peso neto de las aguas oceánicas y los continentes; la distribución espacial y la forma acuñada de tierra firme.
Algunos autores (Mateo, 1984: 146-189; Salinas, 1989: 157-171; Mateo, 2002: 29-38; Mateo y col., 2012: 249), coinciden en cierta manera en la conformación de arcos insulares, en procesos de desmembración de la corteza, en la correlación entre la batimetría y la altimetría; y en la consecuente actividad tectónica y volcánica, resultado de la interacción dinámica del planeta. De manera particular, Mateo (1984; 2002), establece que el planeta se circunscribe a una serie de leyes generales que permiten la diferenciación territorial y dinámica del mismo. En la Tabla 3 se encuentra una síntesis de las características generales de lo que éste autor define como "envoltura geográfica" y las leyes naturales que la definen.
En el ámbito descrito, resulta imposible eludir la comprensión de los ritmos periódicos y/o cíclicos que intervienen en la conformación de la superficie terrestre, en la forma de manifestación de ella y en los procesos que antecedieron a los que ocurren en el tiempo presente. Entre las particularidades territoriales se encuentran: el intercambio continuo de materia (sustancias), energía e información; el dominio de las energías endógena, gravitatoria y solar; los procesos de absorción, transformación, acumulación y liberación de energía (cíclicos, complejos y atemporales); la lógica secuencial y orden en el desarrollo de procesos marcados por la homeostasis, la entropía y la contradicción "hegeliana". Por su parte, en el renglón de los paisajes, la geodiversidad y los contrastes que este genera, resulta importante definir que el conjunto de regularidades, estructuras, leyes y funcionamiento han permanecido presentes a lo largo de la historia del planeta de manera integrada, aunque la energía que los transforma ha actuado con diferentes ritmos e intensidades a lo largo del tiempo geológico e histórico; y todo ello en un ámbito holístico, que de forma puntual imprime en el paisaje particularidades que destacan la geodiversidad en primer término, la biodiversidad y en consecuencia las formas de uso y utilización del suelo (Figura 2).
Algunos geoparques en el mundo han surgido debido a la importancia de las zonas de extracción de minerales pétreos y metálicos. Sin embargo, la explotación minera puede causar un daño ambiental, que en algunos casos es irreparable, por lo que las acciones de restauración que se proponen suelen ser insuficientes o inadecuadas, lo que limitaría sus posibilidades de obtener la denominación como geoparque por parte de la UNESCO. El daño generado por la actividad minera comienza desde la etapa de preparación de un sitio para la extracción de materiales me tálicos o rocosos, continúan durante las fases de operación y permanecen aun cuando la actividad ha sido abandonada. En este último punto, las inversiones y propuestas no alcanzan (o existen) para contrarrestar los efectos negativos y restaurar condiciones de orden social, económico y ambiental. El abandono de una zona minera por lo general implica la gestación de procesos de movilidad de población, pugnas por la ocupación y manejo del territorio, abatimiento de recursos económicos (Uribe, 1992: 119-135; Uribe, 2009; Salas, 2010: 564), así como deterioro de la homeostasis ambiental y pérdida general de las condiciones de hemerobia.
Un caso particular de interés en México, que podría formar el eje articulador de una deno minación de geoparque, es una mina aurífera que dejó de ser productiva a principios del siglo pasado (siglo XX), conocida con el nombre de Dos Estrellas, y que pertenece a un sistema de explotación de materiales metálicos en el distrito minero de "Tlalpujahua-El Oro" (DMTO), localizado en Michoacán y el Estado de México (Figura 3). En este sitio, grupos de población civil, artistas, voluntarios e investigadores han reunido esfuerzos por mantener vivo un museo de sitio y de manera simultánea sostener actividades, como foros de discusión, orientadas a la conservación y mantenimiento de un jardín botánico. Estos eventos tienen el fin de preservar el patrimonio generado en torno a la antigua mina, así como disminuir y/o eliminar vicisitudes de orden social, económico y político presentes, para lograr el desarrollo local.
El objetivo de este trabajo fue evaluar el potecial que tiene el patrimonio del distrito minero Tlalpujahua- El Oro, para conformar un geoparque reconocido por la UNESCO, teniendo como su principal eje articulador la mina Dos Estrellas.
MATERIALES Y MÉTODOS
Localización del sitio de estudio
El presente estudio abarcó el análisis de una superficie de 410 km2 del distrito minero Tlalpujahua - El Oro, ubicado en el Estado de México y Michoacán. La mina Dos Estrellas representa un 1 % del total de la superficie estudiada y es considerada un importante factor para la deno minación como geoparque, al ser parte del patrimonio Geológico nacional (Geoheritage), por la relevancia histórica en el desarrollo de esta actividad económica.
Fase 1. Evaluación del patrimonio (geositios y geomorfositios)
Se realizó un inventario guiado por el concepto de lo que es representativo y por el valor que posee, de todo aquello que se considera importante conservar. Los principales sitios con interés geológico y geomorfológico considerados en el estudio, son: el sistema de estrías de la Falla Pas tores, el Cañón del Mogote, el lecho del río Tlalpujahua, el Cerro Somera (Conjunto de lavas andesíticas y El balcón), la Cascada América, el Pico del Águila y la mina Dos Estrellas (Figura 3). La evaluación se realizó utilizando una matriz de comparación desarrollada para este estudio, basada en los criterios de Brilha (2013), que permite analizar los tipos de patrimonio, su clasificación geológica o geomorfológica y sus prin cipales características (Tabla 4). Se utilizó una escala del 1 al 10 para evaluar la importancia de los atributos distintivos de cada sitio de interés.
Fase 2. Evaluación del patrimonio biótico
El patrimonio de carácter biológico se clasificó en dos ámbitos básicos: el natural y el inducido. El valor de éste se ha clasificado de acuerdo con las especies presentes, las consideraciones biológicas de las mismas, el endemismo y el estado general que guardan con respecto a preci siones de dosel, sotobosque, salud y parámetros específicos de lo que se encuentra in situ; como es el caso de la relación geográfica determinada por variables como la altitud, la latitud, el cli ma y el relieve.
Fase 3. Evaluación del patrimonio histórico, antrópico y cultural
La evaluación de los contextos culturales e históricos resulta compleja desde cualquier pers pectiva teórica e incluso ideológica, lo cual resulta complicado para asignarle un orden para métrico. Es por ello que en esta fase de estudio se respondió a preguntas básicas como: ¿con qué se cuenta?, ¿desde cuándo?, ¿en dónde? y ¿qué valor tiene desde el constructo social local y regional?, entre otras; obteniéndose información de referencias bibliográficas (Uribe, 1992: 119-135; Corona y Uribe, 2009: 101; Salas, 2010: 564), de los listados de infraestructura y de ser vicios, así como del juicio de expertos locales como la familias Bernal (poseedores del comodato de la mina Dos Estrellas); y finalmente, de la información publicada en las páginas electrónicas de Tlalpujahua (2016) y El Oro (2016).
Se evaluaron cuatro ejes básicos desde la perspectiva cultural: el contexto social, enmarcado en las formas de comunicación, organización, ideología; el uso y manejo del territorio, caracterizado por las formas de transmisión de las jefaturas familiares y sociales, las costumbres y prácticas desarrolladas en el territorio; los elementos materiales empleados en la manufactura de productos; y el contexto artístico, conformado por todas las manifestaciones de expresión humana. En la Tabla 5 se muestra el concentrado de variables de esta fase de trabajo.
Fase 4. Evaluación de la capacidad de gestión
La conformación y éxito de un geoparque depende en gran medida de los procesos inherentes de gestión, los cuales involucran variables de índole diversa. En este estudio se analizaron los diferentes aspectos que convergen en el proceso de organización y solución de problemas específicos, tales como la administración, organización, planeación, diseño y desarrollo de obras de infraestructura. Así como, el control de problemas y situaciones asociadas con el uso y manejo del territorio: políticas de conservación, inseguridad, oferta de servicios, manejo de áreas naturales protegidas o territorios resguardados por alguna razón de carácter ambiental, condiciones de deterioro (erosión, incendios, contaminación), manejo de recursos (forestal, edáfico, fluvial), educación y formación de cuadros científicos, entre otros.
Fase 5. Aptitud del territorio
Se analizó la capacidad de recepción de actividades y de gestión territorial, basada en los criterios de ordenamiento territorial y de las políticas nacionales en torno a la generación de unidades de gestión ambiental. Los criterios empleados se fundamentaron en la diagnosis, prognosis y sindéresis; así como la condición legal y orientación que prevalece en el territorio.
Fase 6 y 7. Fundamentación de la propuesta para la creación de un geoparque
La fundamentación y entrega de propuesta formal para la conformación del geoparque se basó en los requerimientos y orden establecidos en la Red Natura 2000 (UNESCO; 2008: 120-134). La propuesta define los tipos de geo-sitios, según la superficie ocupada, la presencia de elementos de carácter geológico y geo-morfológico, el dominio (territorio-espacio) y aspectos relacionados con la tipología, la fragilidad y las políticas establecidas para el manejo y evaluación del geoparque propuesto.
RESULTADOS
Los resultados de la evaluación de los atributos de la región sugieren que es factible obtener la declaración de geoparque en la zona estudiada, si se logra la participación directa y entusiasta, en forma coordinada, de los diferentes órdenes de gobierno, la sociedad y los diferentes actores que se involucran en el territorio. Las fortalezas y debilidades de la mina Dos Estrellas (Figura 4), muestran atributos importantes relacionados con el patrimonio natural del sitio en cuestión, así como los valores intrínsecos y de uso; es por ello, que a continuación se describen los principales resultados.
Patrimonio geológico y geomorfológico
La paragénesis de los minerales de la mina Dos Estrellas ha formado un modelo de yacimiento mineral, que permitió el desarrollo y auge de la minería en México, a tal grado de posicionarse como la primera en importancia en el territorio nacional, compartiendo créditos con otros distritos mineros, como el de Guanajuato y el de Real del Monte en Pachuca; y poseer una de las menas más puras (Chávez y col., 2010: 21-34; Cisneros y col., 2012: 198-203).
La mena de oro de la mina Dos Estrellas fue formada a través de procesos de metalogénesis local, que exhibe el complejo desarrollo regional de un ambiente tectónico y estructural, que se liga a los campos auríferos de diferentes estados y regiones, como Sinaloa, Durango, Guerrero, Zacatecas, Angangueo, Michoacán y Tejupilco en el Estado de México; y de manera particular, con el distrito minero de Guanajuato. Asimismo, delimita la estructura del arco insular que explica la formación episódica del Sistema Volcánico Transversal y del Terreno Guerrero; así como de los procesos de metamorfismo del basamento y la actividad hidrotermal relacionada con las etapas eruptivas de calderas de explosión relacionadas con campos ignimbríticos (Camprubí y Albison, 2006: 27-81; Escobar y col., 2015: 36-45). De acuerdo con estos autores, la rareza mineral de la zona tiende a ser "anómala" y es reflejo de procesos disyuntivos, distensivos, eruptivos e hidrotermales, caracterizados por fases de transporte de fluidos y materiales, transporte de soluciones acuosas, depositación a través de precipitación química y concentración de metales que datan de un proceso que duró alrededor de 27 millones de años. De acuerdo con ello, la paragénesis del mineral se relaciona con la etapa de Oro-Plata; y la Tardía, se relaciona con minerales como la boulanyerita, bornita, argentita, aguilarita, crookesita y fischesserita, entre otros. Por otra parte, el material litológico que sepulta los yacimientos y estratos rocosos denominado ignimbrita, posee un origen volcánico, relacionado con matrices microlíticas fluidales, vítreas y pumíticas, que le otorgan a la roca características de dureza y resistencia, aptas para la construcción. En los espejos de falla se aprecia la presencia de estrías, que evidencian el movimiento cortical, con magnitudes y direcciones de desplazamiento diferentes; exhibiendo metamorfismo generado por la fricción de los minerales (Pantoja, 1994: 168-181; Chávez y col., 2010: 21-34; Cisneros y col., 2012: 198-203).
En conjunto, se observa que las áreas de oportunidad del sitio (mina Dos Estrellas), se encuentran en la explotación turístico-científica de la historia geológica y geomorfológica de la región, a través del establecimiento de geo-rutas (por definir). Ello puede lograrse mediante la organización de un centro de visitantes que permita coordinar el rescate del patrimonio geológico-minero y el desarrollo, organización y manejo de recursos didácticos, museo-gráficos y de difusión. Este tipo de actividades usualmente requieren de la conformación de asociaciones pro-geoparque, así como de la organización de actividades lúdicas y firma de convenios, entre otras.
Aspectos culturales y educativos
En la región se han asentado y desarrollado grupos pertenecientes a las culturas azteca, tarasca y mazahuas, de los cuales, estos últimos ocupan la región hasta el tiempo presente (Uribe, 1992; 2009). En el ámbito histórico, destacan: el hecho de que la localidad fue cuna de los hermanos independistas López-Rayón, y la región cuenta con un museo al respecto; el proceso de edificación de orden religioso establecido desde el año 1600, con iglesias y conventos que pueden ser visitados; la construcción y uso actual de la Presa Brockman, la gestación y desarrollo de la mina Dos estrellas, y el rompimiento de la presa de jales en 1937, tragedia conocida como la "inundación de Lama" (Núñez, 2015: 95-119), y que en la zona se tienen aún vestigios de ese evento histórico, como la cúpula de la iglesia que sobresale en el sitio donde quedó enterrada.
Con referencia a las actividades culturales y artísticas, la mayor manifestación religiosa en contrada es la celebración del "Misterio pascual de Cristo"; en el rubro de artesanía, destaca la orfebrería en plata, la cerámica y el arte pictórico. En cuanto a música y festivales, se encuentran el festival de jazz, el Carnaval Mazahua y la Feria de las esferas, que reúne un promedio de 300 000 personas al año (Tlalpujahua, 2016).
Aspectos económicos, servicios y hemerobia
La minería ha sido una actividad económica importante en la región desde los inicios de la colonia, pero se considera que el auge minero se consolida aproximadamente en el año 1733, después de 200 años de extracción, detonada por la influencia minera de origen inglés, concesionada por el entonces gobierno reformista (Cánovas, 1960: 5-97; Uzeta, 1964: 1-26). En el tiempo presente, la región se distingue por la elaboración de esferas, artículos de decoración, útiles escolares y muebles.
Desde la perspectiva ambiental-hemeróbica y de geoconservación, las características de diag nosis muestran una alta capacidad de sitio para albergar actividades de geoturismo, tales como el senderismo, la exploración de sitios de interés industrial y geológico-geomorfológico, entre otras, aunque se requiere de adecuaciones importantes en cuanto a la calidad de los servicios prestados; asimismo, se aprecia que la prognosis representa condiciones de vulnerabilidad baja, y alta capacidad de corrección de impactos, si se considera una profunda y profesional organización territorial y de las actividades relacionadas con la recreación y la gestión del mismo, por parte de los involucrados en la toma de decisiones y manejo del espacio geográfico.
Protección y aspectos legales
En el DMTO se ha establecido un Comité con el propósito de obtener la denominación de geoparque, y a través de sus trabajos iniciales, se ha observado que la mina Dos Estrellas, y en general, los dos municipios de Tlalpujahua-El Oro, carecen de aspectos relacionados con la protección del patrimonio, en cualquier tipo de versión; es por ello que la vulnerabilidad del patrimonio tiende a ser alta, asimismo la desorganización social, de gobierno y de las instancias interesadas en la promulgación de un decreto de geoparque. Por otra parte, la ocupación del territorio y los aspectos de orden legal, respecto a la mina, resultan ser un obstáculo más para lograr la gestión asertiva, debido a que sobre el territorio en el cual se asienta, existen discrepancias sobre la tenencia de la tierra, el uso del suelo y derecho de aprovechamiento de los recursos; todo ello generado desde diversas perspectivas que involucran a diferentes sectores de la sociedad de dos municipios pertenecientes a entidades estatales diferentes; es decir, se genera un conflicto de intereses complejo.
Accesibilidad
En el DMTO existe una viabilidad adecuada para visitar a los dos pueblos (Tlalpujahua y El Oro), ambos con denominación de Pueblos mágicos, lo que ayudaría en el desarrollo de la in fraestructura del geoparque. El acceso a la mina se logra por dos vías principales: a través de una carretera federal Atlacomulco-El Oro-Tlalpujahua y la autopista Atlacomulco-Morelia-Guadalajara, las cuales, se encuentran en general en buenas condiciones para el tránsito. De manera local, para ingresar a la mina, hay un camino de terracería que resulta angosto en algunos sectores, pero de calidad relativamente buena en periodo de estiaje.
Fundamentación de la propuesta del geoparque
Las características físicoquímicas de los minerales explotados en la mina, relacionados de manera regional con las morfoestructuras, como los arcos volcánicos, la formación de menas a lo largo de dichos sistemas y los productos ignimbríticos, por las calderas volcánicas en la región, otorgan al sitio condiciones particulares y excepcionales, que cumplen con los requisitos establecidos para considerar un geomorfositio y el consecuente geoparque. Resulta importante señalar que, si bien la propuesta surge de la mina Dos Estrellas, el territorio posee otros sitios de interés geológico y geomorfológico, como se ha referido; y cumple de manera cabal con aspectos de orden social, cultural y económico, que le otorgan particular interés como patrimonio (Figura 5). Se destaca en la mina, la presencia del primer museo tecnológico de sitio, el cual, por sí mismo, ya es considerado como patrimonio industrial.
En este orden de ideas, cabe resaltar la importancia de los valores intrínsecos (Tabla 6), como es la representatividad de la mina Dos Estrellas, al ser la única en el país -hasta este momento- que posee una vasta historia que encierra condiciones de opulencia, desarrollo económico, desarrollo tecnológico, marginación y pobreza, cultura y educación; todo ello entretejido en un territorio que posee una pequeña extensión. El carácter local del patrimonio se sustenta en primera instancia en la producción aurífera de alta calidad, y de manera particular, en la arquitectura del sitio, las instalaciones y el proceso de conservación de las mismas. Se añade a este principio, el grado de conocimiento local y regional en temas geológicos, ambientales, de erosión, arte y religión; asimismo, resalta la capacidad de observación y la naturalidad del paisaje del entorno, relacionado con condiciones de hemerobia media.
En el ámbito intrínseco y uso (Tabla 6), la mina oferta cursos, conferencias y exposiciones ar tísticas y tecnológicas, que fomentan de manera local y regional el desarrollo de contenidos y usos didácticos; de hecho, en diferentes recorridos por la zona, se ha podido observar la continua visita de grupos escolares y de turistas, que no tienen que pagar por acceder a las instalaciones y exposiciones.
Por último, y para fortalecer la propuesta, el territorio municipal ofrece oportunidades de desarrollo, que, desde el punto de vista estético y de servicios, podría apuntalar el andamiaje de la propuesta, considerando las mejoras y la inversión necesaria.
DISCUSIÓN
En el año 2000, fue creado en el Departamento de Ciencias de la Tierra, el programa de Geo-parques de la UNESCO; las nacientes ideas de cuatro países europeos, que forjaron los primeros espacios dedicados a la geoconservación, han proliferado de tal manera, que hasta el penúltimo mes del año 2015 se habían reconocido de manera formal 130 geoparques, y más de 350 esperan el dictamen correspondiente para elevar la condición y recibir el reconocimiento internacional (Carcavilla y col., 2014). Sin duda alguna, los beneficios obtenidos en 20 años de investigación y gestión territorial han devenido en el desarrollo de políticas sociales de conservación sustentable del territorio en diferentes países del mundo.
Existen algunas escuelas emergentes, en torno a los geoparques, que han propuesto metodologías para la evaluación de las características y el potencial del territorio para declararlo patrimonio, entre ellas se destacan la Portuguesa, liderada por Brilha (2002; 2005; 2013); la Chilena, dirigida por Martínez (2007); la Española, representada por Carcavilla y García (2010), Carcavilla y col. (2011; 2012) y García y col. (2013); la China, por Fuming y col. (2015); y la Mexicana, desarrollada e implementada en el International Institute for Geo-Information Science and Earth Observation (ITC) de Holanda y el pretérito Instituto Nacional de Ecología (ahora INECC); y lo desarrollado por el Instituto de Geografía de la Universidad Nacional Autónoma de México, entre otras. En diferente medida, el común denominador de las investigaciones realizadas refiere al relieve como factor patrimonial, sin embargo, la mayor parte de ellas carece de criterios específicos para la valoración geomorfológica, y adolecen de una fundamentación teórica del lugar que ocupan los geoparques en las ciencias; es por ello que esta investigación desarrolló la premisa de ubicación científica de las propuestas de gestión y desarrollo del territorio.
En México, el interés por el patrimonio ha crecido de tal manera, que durante el verano de 2017 se espera la declaración patrimonial de la UNESCO de los dos primeros geoparques nacionales: el "Museo de la Erosión" en la Mixteca Alta (Yanhuitlán, Oaxaca) y las secuencias de los basaltos columnares de San Miguel Regla y depósitos de obsidiana de la Sierra de las Navajas en Huasca Hidalgo. Se destacan avances significativos en la conformación de geoparques en la morfología kárstica del Sótano de las Golondrinas en San Luis Potosí; los bloques de montaña adyacentes al Golfo de California y el Océano Pacífico en el sur de la Península de Baja California Sur. Se suman a la lista las dunas parabólicas y la denudada morfología volcánica en la Reserva de la Biosfera de El Pinacate y Gran desierto de Altar en Sonora; la geomorfología y evolución tectovolcánica de la Caldera de la Primavera en Jalisco; el Cañón del Sumidero en Chiapas y el DMTO en Michoacán y el Estado de México, basado en una antigua mina que posee el primer museo tecnológico de su especie. Para este caso, se destaca que la metodología propuesta y los resultados encontrados, se conciben con base en los antecedentes geológicos y geomorfológicos referidos, y con la orientación holística que integra aspectos de carácter social, cultural y económico. En este último ámbito, la originalidad del mismo, se encuentra en la intencionalidad de ofrecer a los decisores del territorio una visión amplia de los recursos que poseen en las municipalidades estudiadas (Tabla 6).
En la Tabla 7 se observan las condiciones generales (atributos), que fundamentan la propuesta de creación del geoparque. De acuerdo con estos resultados, se considera que los valores más importantes que tiene la zona de estudiose encuentran caracterizados por:
- Abundancia regional: reconocida en el sistema minero regional, con la infraestructura y arquitectura específica de la actividad y para la satisfacción de necesidades de operación.
- Grado de conocimiento científico: la región se emplaza en sistemas disyuntivos escalonados en un régimen tectónico regional de fosas "en-echellon", en donde se observan espejos de falla normales estriados.
- Capacidad de referencia como lugar: el sitio es conocido en el ámbito nacional, posee buena accesibilidad a través de una carretera federal y la autopista que conecta a las ciudades de Morelia y Atlacomulco, opera todo el año y se encuentra próxima al poblado de Tlalpujahua, Michoacán.
- Elementos de interés geomorfológico: se desatacan los espejos de falla, así como afloramientos de materiales metamorfizados por el desplazamiento disyuntivo. Se encuentran evidencias de procesos asociados con riesgos de orden antrópico.
- Elementos de interés geológico: se advierten afloramientos de pizarras; es posible observar las características litológicas en el acceso principal a la mina.
- Asociación con elementos culturales: el museo tecnológico es único en su especie; además se imparten cursos de pintura. Dentro del museo existe una galería y en la pared principal de acceso a la mina se encuentra un mural. En este sitio se puede leer "La cultura como el sol, son gratis"; ello implica la postura de los administradores de la misma, de que la población y público en general se interesen y aprendan sin tener que pagar.
CONCLUSIONES
El corredor que comprende a la ex-zona minera de Tlalpujahua-El Oro posee propiedades de carácter geomorfológico y geológico de relevancia histórica, como es el caso de la mina Dos Estrellas. Se reconoce que el valor histórico de la región, la riqueza cultural y la capacidad que el sitio tiene para el desarrollo de actividades turísticas, recreativas y deportivas, son atributos que consiguen fundamentar la propuesta formal para la creación de un geo-parque en la mina; no obstante a ello, esta se deberá fortalecer en las ámbitos de la administración territorial y de la gestión, ello debido, a que ambas variables pueden ser transformadas de amenazas, en áreas de oportunidad, que impulsen en la región el crecimiento social y económico, a partir de los recursos geo-morfológicos y geológicos, en donde la geo-conservación se sostiene como eje integrador y rector de la propuesta. El siguiente paso es el consentimiento social y administrativo para la formalización de viabilidad, en su caso, la licitación correspondiente, que permita en prospectiva, la conformación de un área con potencial sustentable para el desarrollo ambiental, social y económico, viable y tangible. Lograr la denominación de geoparque también impulsará el crecimiento de las poblaciones aledañas, las cuales, ya cuentan con la denominación de "Pueblos mágicos", incrementando la actividad turística de toda la región. En el aspecto científico-académico, se incrementará la calidad de las actividades de carácter educativo que actualmente se desarrollan en la mina, y que incluyen investigación y difusión de temas relacionados con geología, geo-morfología, mineralogía y otros afines a ciencias de la tierra, relacionados con la geoconservación. Esto permitirá a la región desplegar áreas de interés y crecimiento, que hasta ahora han sido inexploradas, tales como, la definición de los criterios locales y metodológicos para valorar los geositios, los geomorfosi-tios y el valor patrimonial de los mismos. También propiciará elaborar catálogos, inventarios y rutas para la exploración y despliegue del co-nocimiento científico y educativo general, fortaleciendo los procesos de gestión, ligados a políticas de conservación y administración territorial, en un marco legal que favorezca a toda la población.